Ese era una día especialmente caluroso en Konoha, motivo, una ola de calor, había llegado al país del fuego, nadie sabia donde meterse para resguardarse del tremendo sol y de la tremenda calor que hacia.
Naruto estaba sentado en su cama, se acababa de duchar con agua helada intentando refrescarse, lo había echo, pero el tremendo calor no hacia las cosas fáciles para refrescarse, se vistió, con uno de sus pantalones piratas naranjas, y una camiseta corta blanca con un dibujo negro en el medio, se puso sus sandalias ninja y salió de su casa de camino al entrenamiento.
Si aunque pareciera una locura, Kakashi les había propuesto tanto a el como a los demás integrantes del equipo siete, ir hacer un entrenamiento esa mañana, ya que desde que tanto el como Sasuke se habían echo AMBU, Sakura se había echo ninja medico, y Sai que se había ido a vivir a Tsuna junto a su novio Gaara, precisamente no habían estado tiempo juntos, y según Kakashi era hora de recuperar tiempos perdidos.
Estaba acercándose al puente a los lejos veía a varios de sus antiguos compañeros, se seco una gota de sudor que el caía por la frente, tenia calor mucho calor, y por encima un entrenamiento definitivamente su sensei no estaba bien del cerebro, diviso a su amiga Sakura y a Sasuke que aunque pareciera mentira, Naruto y Sasuke hacia tiempo que no se hablaban, y allí también estaba Sai impasible al calor y a todos a su alrededor dibujando.
Naruto se acerco con una sonrisa zorruna, y les saludo Sakura sonrió al verle Sasuke no hizo ni caso en un principio y Sai solo le miro unos segundos, le saludo y volvió a su dibujo, Sakura entonces se acerco a Naruto y empezó a hablar con el.
Mientras que Sasuke estaba muy entretenido mirando a la nada, pero entonces fue cuando miro a Naruto y no puso evitar alucinar ante tremenda visión delante de el, hay estaba Naruto, con esos ojazos azules, con esa sonrisa de felicidad, con ese pelo rubio que contrataba perfectamente con su piel tostada, al parecer igual que siempre, pero no, tenia un cuerpo de infarto, unas facciones mas maduras, su pelo cayendo libre, marcando su cara, y las gotas de sudor que recorrían su cuerpo, en fin una visión espectacular.
Sasuke se le quedo mirando largo rato, y Naruto lo noto, mientras que hablaba con Sakura había sentido como si le inspeccionaran, y le miraran de arriba abajo y supo quien era, Sasuke un Sasuke, que madre de dios como estaba, unos ojazos negros como la noche, es pelo que aun seguía llevando de la misma manera que años atrás, facciones un poco o mas maduras que antes, y ese cuerpazo atlético y fuerte que muchas chicas deseaban y también chicos, Naruto empezó a sentir mas calor de lo debido de golpe.
- Naruto ¿Estas bien?- Pregunto la peli rosa, mirando de reojo a Sai con una mirada de complicidad y una sonrisa.
- Si lo mismo digo Uchiha bastardo ¿Estas bien?- Pregunto sonriendo también.
- Eh... Si.- Respondieron los dos a la vez no muy seguros.
- Bue...- Pero la respuesta de Sakura quedo en el aire cuando apareció Kakashi, a la vez que Naruto y Sasuke apartaban las miradas del otro con rapidez.
- ¡¡¡HOLA!!! ¿Que tal estáis?- Pregunto sonriente desde arriba de la barandilla.
- Si, muy bien, veo Kakashi que nos as cambiado tu famosa costumbre de llegar tarde.- Le dijo la peli rosa de mala leche.
- Bueno... Je... Veréis.- Kakashi intento buscar una excusa pero hacia tanto tiempo que no lo hacia que no sabia que decirles.
- No te esfuerces Kakashi, que tus excusas ya no cuelan.- Hablo por primera vez el Uchiha.
- Bueno ¿Qué tal si nos ponemos a entrenar?- Pregunto el peli plata.
- Kakashi sensei.- Llamo el rubio y este le presto atención.- No se si te as dado cuenta, pero hace mucha calor para entrenar ¿Sabes?- Le pregunto abanicándose con una mano.
- Bueno... Si... Pero ahí que mantenerse en forma.- Le dijo mirando a su antiguo alumno.
- Ya Kakashi, pero se han suspendido las misiones, simplemente por que ni los ninjas peligrosos, quieren atacar.- Le dijo Sai mirándole y era cierto los enemigos numero uno de todas las aldea, no querían pelear por que hacia mucho calor para pelear.
- Da igual a entrenar.- Les dijo mientras que se cruzaba de brazos.
- Si... Si nos vemos otro día Kakashi.- Le dijo Sakura a lo lejos, y los demás le seguían.
- Genial no me tienen ningún respeto.- Dijo Kakashi para luego irse dejando una bola de humo.
Naruto miraba de reojo a Sasuke, mientras que en su mente se preguntaba una y otra vez ¿Qué era lo que le pasaba con Sasuke? Y es que desde hacia un rato se sentía con un extraño ¿Sentimiento? No, una extraña atracción, si esa era la palabra atracción, Sakura se paro de golpe y lo otros tres chicos la miraron.
- Bueno, me voy a casa, nos vemos otro día, adiós.- Le dijo despidiéndose de los tres.
- Si yo me voy, que Gaara me espera, adiós.- Y sin más el AMBU se fue dejando a Naruto y a Sasuke solos.
- Pues nos hemos quedado solos dattebayo.- Le dijo el rubio mirando al azabache que estaba en su mundo.
- Si, yo también me tengo que ir, adiós.- No espero respuesta ya que se fue rapidísimo.
- Adiós.- Se despidió al aire, mientras que un alivio crecía en su interior.
::::2 días después::::
Aun seguían con la maldita ola de calor, hacia un calor tremendo y por encima aunque pareciera increíble desde el día del casi entrenamiento, no paraba de pensar en el, se volvía loco pensando en el, y eso le estaba desquiciando.
Maldito dobe, eso se lo había repetido miles de veces en esos dos días, se sentía atraído por el dobe, como podía, pasar eso, vamos el, Sasuke Uchiha, sintiéndose atraído por el, Naruto Uzumaki, eso no podía ser.
Se sentó en el sofá de su salón e imágenes no muy santas se volvían a repetir en su mente, que pasaba, que no podía parar de pensar en el un segundo, y por encima como no iba a estar caliente y atraído por el Uzumaki si su mente no hacia mas que imaginárselo desnudo en poses un tanto... Provocativas.
Suspiro e intento quitarse esas imágenes de su mente, pero aunque lo intentaba luego volvían en sueños, y se repetían una y mil veces, vale se estaba empezando a cabrear, ¿Qué ya no podía ni siquiera controlar su mente?
::::Con Naruto::::
Naruto andaba a paso rápido hacia el despacho de Tsunade, estaba llegando, estaba desesperado, no podía parar de pensar en eso, desde los dos últimos días, entro en el despacho de Tsunade a toda leche, todo el mundo vestido de manga corta y pantalones cortos debido al tremendo calor que hacia.
- ¡¡¡Tsunade!!!- Entro el rubio en el despacho de la Hokage sin ni siquiera llamar y esta alzo una ceja.
- ¿Qué pasa?- Pregunto viendo al rubio agitado en la entrada de su oficina.
- ¿Tienes a alguien que atender?- Pregunto y la rubia negó.- Muy bien te tengo que contar una cosa-ttebayoo.- Dijo cerrando la puerta de la oficina y sentándose frente a la Hokage.
- ¿Qué pasa Naruto?- Pregunto mirando al rubio.
- Me pasa que estoy caliente dattebayo.- Le dijo aun agitado, pasándose su mano derecha por el cuello quitándose el sudor.
- Ya Naruto, en esta aldea todo el mundo esta caliente, es normal es la ola de calor.- Le dijo la Hokage que había entendido lo de caliente de una forma diferente.
- No, digo que estoy caliente.- Le volvió a decir, y la Hokage alzo de nuevo la ceja.- Joder, Caliente, excitado, cachondo...- Iba a seguir pero al rubia le corto.
- Si lo entendido gracias.- Le dijo mientras que se llevaba la mano a las sienes y se las masajeaba.- ¿Y que me cuentas con eso?- Le pregunto sin entender.
- Pues que lo extraño es quien me despierta estas sensaciones.- Le dijo medio sonrojado y la Hokage no supo descifrar si era por el calor, o por vergüenza.
- ¿Y quien se supone que te despiertas esas sensaciones?- Pregunto sonriendo ante la cara que ponía el rubio.
- ... Sasukeuchiha-ttebayo.- Dijo rápido y bajo que a la Hokage le costo entender, pero que entendió.
- ¿Perdón?- Pregunto para chinchar al rubio.
- Eh dicho sasukeuchiha.- Volvió a decir rápido y bajo.
- No te e entendido Naruto.- Dijo riéndose por lo bajo.
- ¡¡¡Sasuke!!!- Grito el rubio y la Hokage se echo a reír.
- Así que el Uchiha te pone caliente.- Dijo para echarse a reír a carcajada limpia.
- Tsunade, esto no es motivo de risa dattebayo.- Le dijo enfadado el rubio.
- Ya bueno, pero es que tiene gracia.- Le dijo riéndose.
- Lo que tu digas.- Dijo enfadado cruzándose de brazos y con los mofletes inflados.
- Bueno, ¿Y que quieres que haga yo?- Le pregunto.
- Nada creo.- Le dijo y la rubia le miro sin entender.- Lo que yo quiero saber ¿Es por que me siento atraído por Sasuke-ttebayo?- Le pregunto tirándose de los pelos.
- Bueno, puede ser un delirio.- Le dijo con pose pensativa.
- ¿Eh?- El rubio la miro.
- Puede que por el calor te sientas atraído por Sasuke no se que tu mente delire.- Le dijo pensativa.
- ¿Eso puede pasar-ttebayo?- Pregunto.
- Sinceramente Naruto no lo se, pero después del historial que tiene todo dios en esta aldea, sinceramente no me sorprendería.- Le dijo la Hokage y Naruto se quiso dar de cabezazos.
- Ya no me as ayudado en nada ¿Sabes?- Le dijo mientras se levantaba.
- Y yo que quieres que te diga, te pones caliente pensando en el Uchiha sinceramente lo tuyo es muy raro como para darte una explicación si no lo sabes tu, a mi las únicas cosas que se me ocurren, una, es que deliras, y dos, que estas enamorado del Uchiha y no lo sabias.- Le dijo tranquila enumerando con la mano.
- ¿¡¡¡¡¡QUE!!!!!? ¡¡¡¡¡Yo enamorado de Sasuke ni en broma dattebayo!!!!!- Grito a los cuatros vientos.
- Si tú lo dices, será verdad.- Dijo sonriendo, y el rubio le crispo los nervios.
- Me voy.- Dijo para salir por la puerta de la oficina con un portazo, entonces fue cuando noto que todo el mundo le miraba y al segundo se sonrojo, seguramente todo el mundo había oído lo que había gritado ¡¡Genial!! Lo que le faltaba.
Con rapidez salió de allí, y cogió el camino mas cercano hacia su casa, lo que menos le apetecía era cruzarse con gente, y menos con la calentura que llevaba, el sudor recorría su cuerpo necesitaba una ducha fría, no, fría no, helada.
Estaba cerca de su casa, cuando vio que en la entrada de esta había un azabache de brazos cruzados apoyado de lado contra la puerta, y al segundo lo reconoció, Sasuke, estaba en la entrada de su casa, al parecer esperándole.
- Sasuke.- Le llamo y el azabache le miro.
- Hola dobe.- Le saludo separándose de la puerta y mirando al rubio intensamente.
- ¿Qué haces aquí teme?- Pregunto mirándole también y empezando a sentirse nervioso, mientras que veía el sudor recorrer el cuello del azabache.
- Te venia a ver Usuratonkachi.- Le respondió el azabache.
- ¿Y que quieres-ttebayo?- Pregunto de nuevo pasando de largo al lado del azabache para abrir la puerta de su casa-
- Hablar contigo de una cosa.- Le dijo pasándose la mano por la frente secándose el sudor.
- Eh... Bueno... Pasa entonces.- Le dijo el rubio cuando abrió la puerta y el azabache entro en la casa.
El rubio dejo las llaves en el mueble de la entrada, y se dirigió al salón seguido por Sasuke que se sentó en uno de los sillones individuales cuando el rubio se lo ofreció, este se estaba empezando a poner nervioso, y parecía que de golpe hacia mas calor.
- ¿Quieres algo de beber?- Pregunto el rubio cortes.
- Agua fría si puede ser.- Le dijo y el rubio desapareció un segundo se metió en la cocina, a los pocos segundos venia con dos vasos de agua fríos en cada mano.
- Aquí tienes.- Le dijo dándole el vaso de agua.
- Eh bueno... Veras... Desde... Bueno.- Naruto estaba alucinado era la primera vez que veía tan nervioso a Sasuke.
- ¿Qué?- Le pregunto animándole a que le dijera lo que le pasaba, mientras intentaba secarse el sudor del cuello y de la frente.
- Bueno desde el otro día... En el puente... Eh empezado a sentir... Cosas... Raras.- Le dijo con dificultad bebiendo a continuación, un poco de agua.
- Sentir, cosas, raras ¿Cómo? ¿Qué cosas?- Pregunto el rubio temiendo lo peor.
- Bueno me e empezado a sentir...- El rubio le corto terminando la frase el.
- Atraído por alguien.- Le dijo y el azabache asintió.
- Y ahora cada vez que pienso en esa persona, me entra más calor de la que ya tengo, por culpa de la maldita ola de calor.- Le explico el azabache de mala leche.
- A mi también me pasa dattebayo.- Le dijo el rubio un poco avergonzado y el azabache le miro.
- ¿Y se puede saber por quien?- Pregunto y el rubio negó sonrojándose.- Ah, yo me voy entonces.- El azabache se levanto del sillón cabreado y se dirigió a la puerta seguido por el rubio que le paro antes de que saliera.
- Espera un segundo.- Y fue entonces cuando los dos se dieron cuenta de la cercanía entre ellos dos, el azabache empezó a sentir mas calor cuando imágenes cruzaron su mente, y el rubio se sonrojo a la vez que empezaba a subir la temperatura de su cuerpo y no solo por el calor.
- ¿Qué quieres?- Pregunto con voz extrañamente ronca el azabache.
- Eh...- El rubio no supo que decir, y fue en ese momento cuando se fijo en las gotas de sudor recorrer el cuerpo del azabache, y el azabache veía como la piel del rubio se perlaba por el sudor y no lo pudo evitar, sentir esa atracción por el rubio y sin pensarlo dos veces le beso, le beso como no había besado a nadie en su vida, el rubio paso sus brazos alrededor del cuello del azabache y este poso sus manos en la cadera del rubio.
La necesidad de oxigeno se hizo presente, por lo que se tuvieron que separar, se miraron y no lo pudieron evitar otro beso empezó mas apasionado que el anterior, el calor crecía, tironearon de la ropa de camino a la habitación del rubio, paraban entre beso y beso, para volverse a besar, quitándose la ropa el uno al otro.
Chocaron con la esquina de la cama, mas bien choco el rubio, que paro el beso y se echo a reír, para luego gemir, ya que el azabache empezó a besar su cuello, paso sus manos por el cuerpo desnudo del rubio, y este las paso por la espalda desnuda del azabache, volvió a los labios del rubio, se besaron de nuevo, el azabache lo guio asta la cama, y cayeron los dos en esta, el rubio paso sus manos por el cuerpo del azabache secando el sudor del cuerpo del azabache y al igual que hacia este con el rubio.
Terminaron el beso, y el azabache siguió besando parte del cuerpo del rubio, parándose a besar de vez en cuando, las caricias, los besos, todo era bueno estando los dos juntos, el azabache entro en el rubio, gemían, se besaban, y el rubio se dio cuenta de que no era un simple delirio por el calor, era algo mas.
::::Al día siguiente::::
Un chico rubio con unos tremendos ojazos azules, miraba la ventana, como entraban los rayos, de sol, todo absolutamente todo, había sido perfecto, no habían parado de besarse y de acariciarse, el calor aun era bastante grande, era normal, aun seguía la ola de calor, pero aun así, le gustaba estar abrazado al azabache.
Sasuke y Naruto estaban de lado y el azabache le abrazaba por detrás, sintió como el azabache se movía, y entonces noto que le besaban el cuello, el rubio se giro y se puso del lado contrario, besando al azabache y este le devolvió el beso al segundo.
- Se que lo que te voy a decir es muy fuerte-tteebayo...- El rubio le miro y entonces hablo.- Estoy enamorado de ti, te amo Sasuke.- Le dijo un poco sonrojado.
- Yo también te amo.- Y ahí llego la sorpresa para el rubio.
El rubio sonrió y beso al azabache y este al segundo se lo devolvió, sonrieron, besos cortos, y mas apasionados, se acariciaban y se reían cuando terminaban los besos, y se daban cuenta ahora, de que habían estado enamorados todo ese tiempo y no se habían dado ni cuenta.
- Estas todo sudado dattebayo.- Dijo el rubio echándose a reír pasando su mano por el cuello del azabache quitando el sudor.
- Y tú, y todo el mundo.- Le respondió el azabache sonriendo de medio lado, besando al rubio.
- Vamos a ducharnos anda.- Dijo el rubio levantándose.
- Esta bien.- Pero antes le paro y le atrajo hacia el, mientras que el rubio se dejaba hacer.
- Te amo.- Le dijo besando al rubio, y este posaba sus manos en la cara del azabache devolviéndole el beso a este.
- Y yo a ti.- Le dijo cuando se separaron sonriendo.
Se volvieron a besar, y el rubio solo pudo pensar en una cosa antes de dejarse llevar, y es que quizá la ola de calor se las había echo pasar mal, pero una cosa era clara, el calor les llevo a descubrir unos sentimientos muy ocultos, un poco extraño pero aun así, Sigo amando a Sasuke.
::Fin::