Una situación incomoda
El grito se escucho por todo el castillo pacto de sangre, así que todos fueron corriendo hacia el cuarto del Maou, sobre todo ciertas sirvientas y la exmaou, que se encontraban cerca.
Mientras tanto en el cuarto de Yuuri, este estaba totalmente asustado al oír gritar a Wolfram, no sabía que decir, solo la expresión de terror de este al ver que levantaba una pequeña porción de la sabana con su mano, observando detenidamente algo, en eso se quiso acerca lentamente hacia Wolfram.
- ¿Qué pasa Wolfram?........ Te encuentras bien- justo en el momento que se acerco para ver lo que le pasaba, recibió un fuerte empujón, dando directo al frió suelo de la habitación.
- No te acerques…………. No te atrevas acerca a mi entendiste- Wolfram estaba totalmente en shock por lo que acababa de ver – pero que es esto………. a mi no me puede estar pasando esto- era lo único que pasaba por su mente.
En ese instante aparecieron entrando en la habitación las sirvientas y Cheri-sama, todas observaron al maou tirado en el suelo. Cheri se acerco despacio hacia su hija, quien seguí con la cara en shock.
- Wolfram………….. ¿qué tienes?........ Calmate por favor……. ¿Quita esa cara tan fea de tu rostro no ves que estropeas una linda cara?- fue lo único que se le ocurrió decir ya que en verdad estaba odiando ver esa linda cara estropearse.
Al no escuchar nada Wolfram, Cheri-sama se acerco a él, notando como tenía una mano elevando una parte del la sabana y observaba que tenía una pequeña mancha roja entre sus ropas. Por lo que solo se escucho en el cuarto un chasquido de dedos.
- Rápido….traigan a Anissina y a Gisela…….- observando que el maou se encontraba todavía en el suelo – saquen a Yuuri heika, además no dejen a nadie más entrar entendido – fue el único mandato que les dio a las sirvientas la exmaou.
Las sirvientas levantaron rápidamente al maou y lo empezaron a arrastrar afuera de la habitación, en ese mismo instante iban llegando Conrad, Günter y Gwendal, quienes en ese momento recibieron en sus brazos a su majestad al ser aventado por una de las sirvientas. Viendo como una se dirigía a toda velocidad hacía otra parte del castillo, mientras que la otra se paro enfrente de la puerta prohibiendo el paso a los demás.
- ¿Qué fue lo que pasó?- pregunto acercándose poco a poco a la sirvienta y en tono preocupado Conrad.
- Disculpe pero es algo que todavía no podemos decirles…….. hasta que Cheri-sama nos diga si podemos- Las sirvientas si observaron todo lo que pasaba, como siempre eran entrometidas, pero en ese aspecto no querían hacer ningún comentario, hasta que en ese instante llegó la otra de las sirvientas con la inventora y Gisela.
Mientras tanto dentro del cuarto se encontraban Wolfram y Cheri, Wolfram todavía sin moverse un milímetro (no aguanta nada y las mujeres sufrimos cada mes XD), hasta que se escucho abrir una puerta.
Enseguida se acercaron y vieron lo que todas las demás ya habían visto, una mancha de sangre en la bata de nuestra joven.
- No puede ser………… en ver dad mi invento funciona al 100%- expreso muy emocionada la inventora – solo que lastima que se destruyera……. ¡esto me motiva a construir otro!-
En ese instante la que estaba en total shock se volteo a ver a la inventora, solo por que no tenía su espada no podía matarla, pero si la tuviera lo haría, así que se levantó muy a su pesar y le agarro por la ropa, tratando de levantarla – Como te atreves a decir eso……………. ¡¿Por tu culpa estoy así?!........ ME VOY A MORIR- empezaban a asomarse unas pequeñas gotas de lagrimas por sus ojos.
Gisela se acerco a ella para apartarla de Anissina, las sienta y empieza a calmarla, Cheri se coloca a un lado – Mi Wolf, esto es normal, no te vas a morir, es algo que toda mujer pasa, no tienes que preocuparte por eso-.
- ¡¿NORMAL?!......... A ESTO LE LLAMAS NORMAL, POR DIOS MADRE, MIRAME, YO NO SOY ESTO, SOY UN HOMBRE, H-O-M-B-R-E- decía muy alterado.
- No te preocupes, esto no va a durar mucho, solo faltan unos días para que vuelvas a ser hombre- decía Anissina, un poco decepcionada porque su invento durará tan poco.
- Y DE QUE ME SIRVE SABER ESO…………. SI ME ESTA PASANDO………..- no sabía como decir lo que le estaba pasando – esto- dijo la final en un susurro.
- Déjamelo todo a mí- dijo con una sonrisa Cheri –siempre quise tener una hija para hablar sobre estas cosas….. Además nos tienes a todas nosotras que somos mujeres y con mucho gusto te explicaremos………… ¡Primero empezare yo! – estaba tan emocionada.
- ¡YO NO QUIERO SABER NADA DE ESO! – Fue un grito totalmente desesperado – yo solo quiero ser normal-.
- Bueno como te iba diciendo – ignorando totalmente las palabras de su hijo – esto es algo que a cada mujer pasa en determinado momento, eso significa que te has convertido en toda una señorita y eres totalmente fértil……… ¡ya vas a poder tener hijos! kyyyaaaaa – decía una emocionada Cheri.
- ¡HAHAUE! …….. y esto se me va a quitar rápido verdad……. Es solo de que Gisela me atienda y ya- decía con muchas esperanzas como si de una cortada se tratara.
- Jajajajajajaja………. Lo siento querido, pera esta condición de la mujer dura unos días, no te preocupes pasara pronto, solo sentirás unas molestia por un tiempo y pasara- decía con mucha clama.
- De cuantos días estamos hablando- ya estaba demasiado cabizbajo por lo que observaba. …l no quería pasar por estas cosas, por que le pasaba esto, no sabía que pensar solo quería desaparecer en esos instantes.
- Eso te lo explicara Gisela………. A por cierto aquí te traje la ropa que es de hoy, así que arreglate, por que tenemos muchos preparativos por hacer- totalmente con una sonrisa se fue junto con Anisina dejándola con Gisela.
- Su excelencia – se digno por fin hablar – yo pienso hablarle sobre como cuidarse en estos días, primeramente, debe de saber que esto durara de 4 a 5 días…….
- ¿Quuuuuueeeee?...... tantos días………. Me voy a morir, definitivamente me voy a morir – lo único que Wolfram hacía en estos momentos era solo quejarse de lo que le pasaba.
- Primeramente, se va a tener que dar un baño, las sirvientas se encargaran de lo demás, cuando termine deberá usar esto – y le enseña una toalla sanitaria – ayudara para su sangrado en los siguientes días……….. esto se lo debe de poner en su ropa interior – le enseña una ropa interior – se coloca en el área del bikini-.
- Por favor…….. no me obligues a usar eso, no es necesario, es solo sangre tiene que parar en un día o incluso en segundos, no necesito usar eso – decía con muchas esperanzas.
- Lamentablemente no es así, este sangrado será por estos días y fluirá en tiempo irregular, no es una herida que cierra y cicatriza………… solo se tiene que poner esto y tiene que hacer su vida normal, no pasa nada- trataba de consolarlo – otra cosa que se me olvidaba decirle es que esta toalla sanitaria se la tiene que cambiar regularmente durante el día, entendido- a lo que la rubia solo asintió.
Así Wolfram se levanto de la cama dirigiéndose al baño, se empezó a desvestir. Al ver su ropa con una mancha de sangre, no sabía que sentir o pensar, si rabia tristeza, enojo; solo sabía que tenia una mezcla de todas la emociones que le hacían sentir mal. Se empezó a bañar y cuando terminó siguió las indicaciones de Gisela. Así salio del baño a la habitación y encontró que las sirvientas ya habían recogido todo y en una silla, se encontraba sentada Gisela, así que camino hacia ella.
- Excelencia………. Debería de caminar con más naturalidad – le comentó al ver como sus piernas estaban un poco abiertas y totalmente tieso sin tener ninguna coordinación.
- Como quieres que camine normal, si tengo algo en mi entre pierna…… esto no es nada fácil- se estaba empezando a desesperar.
- Si comprendo pero calmase por favor………… solo tiene que caminar normal, ya verá que se acostumbrara a esa sensación, pero es mejor que primero practique aquí caminando de un lado a otro, por favor- muy amablemente se lo pidió aunque Wolfram hizo varios gestos de disgusto.
Wolfram empezó a caminar por toda la habitación, le costo mucho trabajo, hasta que se acostumbró, aunque todavía caminaba un poco extraño, pero no era tan notorio como antes.
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Cuando Yuuri fue arrojado del su propia habitación, no sabía de todo lo que paso, solo sintió que callo a los brazos de alguien, así observo que estaban Conrad, Gwendal y Güenter, con una cara totalmente desencajada, solo sabía que alguien hizo una pregunta y que la sirvienta respondió con un no pueden pasar, después llegar a Anissina y entrar a la habitación, hasta que escucho.
- ¿Que fue lo que paso adentro?.........- pregunto Gwendal, con su acostumbrada cara de terror, ya que en la noche fue usado por Anissina para uno de sus tantos experimentos.
- Pues en realidad no se lo que paso – dijo Yuuri haciendo su risa nerviosa y rascándose la nuca – solo se que cuando me levante mire a Wolfram a un lado y que cuando despertó grito muy fuerte, hasta a mi me asustó-.
- Ya sabemos que grito pero………….- en esos se escucho un fuerte ruido dentro de la habitación es escuchando un “me voy a morir” muy fuerte.
Todos se sentían mal, querían entrar para saber que era lo que pasaba, así estuvieron más rato en la entrada, porque las mismas sirvientas les impedían el paso, hasta que se escucho la puerta abrirse y ven salir a una rubia y una pelirroja.
- Are……… heika, todavía sigue aquí- dijo muy extrañada la exmaou al verlo - y ustedes también que hacen aquí- lo dijo por sus dos hijos y Günter.
- Cheri-sama, necesitamos saber que fue lo que paso adentro – dijo muy serio Günter – porque fue ese grito-.
- Entonces ustedes han estado aquí todo este tiempo esperando saber lo que paso adentro – vio que todos asintieron con su cabeza y esperaron la respuesta de la maou – jajajajajajajajaja………… seguros que quieren saber.
- Por favor hahaue, dinos lo que paso adentro- decía Conrad con una expresión muy seria en su cara.
En eso interrumpió Anissina – ella esta bien, no tiene nada está muy sana, digamos que lo que le paso a Wolfram es algo normal en su condición de mujer, ……… eso es todo lo que les diremos – rió divertida Anissina al ver que la cara de preocupación se les iba quitando a lo demás.
- Entonces, no tiene nada malo- dio un gran suspiro de alivio el maou – pero si no es nada malo, a que condición se refieren, tenemos derecho a saber – decía como si fuera una orden el que les dijeran.
- Mire Heika, como le dijo Anissina, no podemos decirles eso……. Pero….. oh por dios, ¡Conrad!, ¿por qué no han llevado su majestad a que se cambie de ropa, mira que todavía tenerlo con la pijama, cámbienlo y pónganse a trabajar – Conrad solo miro como se encontraba su majestad, era cierto lo que su madre les decía.
Gwendal aterrizó la idea de que había mucho trabajo y sobre todo por que cierta pelirroja se le quedaba viendo como para pedirle ayuda con otros de sus experimentos, a lo que rápidamente se fue del lugar, Güenter agarro a su majestad de un hombro arrastrándolo para que se cambiara y como siempre Conrad solo los seguía. Así todos se fueron de la puerta de la gran habitación del maou a ocuparse de sus asuntos.
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Al fin de estar buenas unas horas en la habitación, Wolfram se digno a salir, ya que era hora de ir al comedor y en verdad tenía hambre. Era acompañado por Gisela, aunque estuvo todo el rato caminando en la habitación para acostumbrarse a su molestia, todavía por instantes caminaba algo raro, pero era solo por que se acordaba en que situación se encontraba. Tan rápido habían llegado al comedor, que de alguna forma se rehusaba entrar, hasta que Gisela abrió la puerta.
- Vamos excelencia……. Hay que comer algo- le mostró una hermosa sonrisa para animarlo a entrar.
Mientras tanto todos los presentes en el comedor, que era Yuuri, Conrad, Gwendal y Günter, fijaron su vista al oír que se abría la puerta y poco a poco se asomaba una cabellera rubia, quien se acerco al comedor donde se encontraban y tras de ellas se cerró yendo Gisela a sus labores diarios.
- ¡Wolfram! – se apresuro a decir Yuuri – te encuentras bien, porque tu mamá no nos quiso decir nada de lo que pasaban e incluso nos prohibieron la entrada y nos preocupamos mucho, pensábamos que cosas horrible te había pasado, y luego ese feo grito de que te ibas a morir pues casi nos desmayábamos... – y el maou no dejaba de dar su tan acostumbrado monólogo.
- Henachoko, callate……………..ya ves que me encuentro bien, no tienes por que preguntar- decía el rubio con tal de que no le preguntaran que fue lo que paso exactamente – sería vergonzoso que yo Wolfram Von Bielfeld tendría una menstruación siendo un hombre, todavía no me la puedo creer – pensaba para calmar un poco su alteración.
- No me digas henachoko – dijo molesto el maou, mientras que observo como Wolfram se iba acercando a su mesa, notando algo extraño en su camina, los demás también lo notaron, pero no quisieron preguntar, ya que conociendo al rubio desde el momento en el que entro no quería decirles lo que en verdad pasó, pero Yuuri, tenía que ser Yuuri - Wolfram…………. ¿Porque estas caminando así?, porque si no te encontrabas bien podías quedarte en la cama-.
Wolfram se molesto al instante, al escuchar eso, ya que no quería que lo notaran, pero como era de imaginarse tenía que salir el torpe de su prometido con sus típicas preguntas - ¡¿POR UNA VEZ EN TU VIDA TE PUEDES QUEDAR CALLADO Y NO PREGUNTAR NADA, CONFORMATE CON QUE ESTOY BIEN!?- le grito a su prometido tan fuerte que aturdió a los demás, vaya que le estaban afectando las hormonas. Así que se sentó y empezó a comer con los demás.
Desde el momento en que llegó Wolfram sus dos hermanos, le mandaban miras discretas, ya que estaban seguros que lago malo le pasaba a su hermano y que este no quería decir, ya que su orgullo era fuerte como para decírselos.
En un instante Wolfram terminó de comer, levantándose y dirigirse a un lugar en el que pudiera estar solo, pero cuando se levanto sintió otra incomodidad, así que se dio la vuelta para marcharse cuando de repente escucho su nombre.
- ¡¿Wolfram?!- menciono Yuuri el nombre de la rubia con mucha sorpresa – tu vestido tiene una mancha roja……….. es sangre…… con razón cuando gritaste en la habitación que te ibas a morir era cierto, Günter llama a Gisela, corre-. Günter salio corriendo por la orden de su majestad.
Wolfram no lo creía se dieron cuenta, él no quería que eso pasara, se quería morir, y solo volteo un poco la cara vio como todas las miradas de ese lugar se encontraban puestas en él, entonces lo único que hizo fue salir corriendo de ahí a todo lo que sus piernas en ese momento le podían dar.
Gwendal y Conrad se levantaron en ese instante, pero la rubia les ganó, corrió tan rápido que les era imposible detenerla. Se quedaron de piedra al ver eso en su vestido, cuando se volvió a escuchar la puerta, vieron que entró Gisela y Günter. La peliverde observo las caras de los ahí presente, imaginándose que fue lo que pasó.
- ¿Qué vieron?- fue lo único que les preguntó.
El primero en hablar fue Yuuri – Gisela….. ayuda a Wolfram….. el…..el …. El estaba sangrando cuando se levanto de su silla y nos dio la espalda – ya no sabía que más explicar.
- Explícanos por favor que es lo que paso en la habitación Gisela- le decía Conrad.
Dio un gran suspiro – está bien, lo que le pasa a Wolfram es normal, siendo una mujer es lógico que tenga un su periodo- dijo demasiado desganada la peliverde.
- Periodo….. ¿qué periodo?- el muy tonto de Yuuri no comprendió lo que Gisela dijo, teniendo las miradas de todo ante tal hecho. Los demás le querían decir pero se pusieron totalmente rojos – oigan por que están tan sonrojados, que no me piensan decir nada- respondió el maou al ver la actitud de sus guardias, así que Gisela le tuvo que explicar más claramente.
- Heika, con periodo me refiero a que Wolfram esta pasando por su menstruación – al escuchar esas palabras Yuuri tardo en procesar esa información- ¿Quuuuuuueeeee?...... como es eso posible, es un hombre, bueno ahora no pero es un hombre, el no debe de pasar por esas cosas- comentaba muy alterado.
- Lo sabemos Heika, pero así están las cosas ahora, tal parece que el invento de Anissina, convirtió en mujer a Wolfram completamente- le dijo la peliverde- si me disculpan me voy- y se despidió como siempre.
Todos no procesaban muy bien la información, ahora comprendían toda la actitud de Wolfram, casi quedaron en Shock y de a ver podido les hubiera dado un paro cardiaco.
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Wolfram se encontraba en su habitación escondida, esperando que lo que paso fuera un sueño de mal gusto – debo despertar, debo despertar esta debe ser una pesadilla, esto jamás va a pasar – pero al abrir sus ojos seguía en el mismo lugar y con la misma sensación de antes; entonces escuchó unos pasos acercarse a su puerta, así que rápidamente le puso candado a su puerta.
Gisela fue a buscar a Cheri e iban juntas hacia la habitación de Wolfram, cuando se acercaron escucharon un ligero “click” en la puerta, así que de inmediato supieron quien se encontraba ahí, se acercaron y empezaron a tocar la puerta, claro que como pensaron que a lo mejor no abriría se llevaron la lleva que abre su cuarto.
Dentro de la habitación, Wolfram no quería ver a nadie lo único era el estar solo – NO QUIERO VER A NADIE, VÁYANSE, LARGO DE AQUÍ – contesto al escuchar que tocaron la puerta.
- Mí querido Wolf…….. Solo queremos hablar contigo – decía en un tono muy suave su mamá.
-¡¿PERO YO NO?! – en ese momento ya se encontraba en su cama abrazando a sus piernas y colocando su cabeza en sus rodillas.
Así que como no le dejaron opción, sacaron la llave y abrieron la entrada, observando la posición en la que se encontraba, así se acercaron poco a poco en donde se encontraban y se sentaron en la orilla de la cama.
- Wolf, no tienes por que sentirte mal por pasara este tipo de cosa – le decía calmadamente Cheri – ya se que era un hombre, pero en la situación en la que te encuentra es normal que pases por esto- Wolf seguía sin moverse.
- Excelencia, es verdad…… esto no es cosa para deprimirse……. Si así fuera, ya se hubieran suicidad todas las mujeres del mundo y claro que para toda mujer la primera vez que se manifiesta no es lo más cómodo del mundo y por algunos síntomas más que se aparecen – le explicaba, en lo que causo que Wolf levantara la cabeza para observarlas.
- Pero ¿sabes que es lo más hermoso de este mundo? – le preguntó Cheri a su hijo – es que si las mujeres no pasáramos por eso, no tendríamos hijos y a lo mejor en este momento tú no estarías aquí y no tendrías todos los recuerdos con tus seres queridos……. Así que no mires esto como la pero pesadilla del mundo-
- Además nos estas sola, nos tienes a nosotras para cualquier cosa que necesites, expresa tus sentimientos e incomodidades respecto a lo que estas pasando, no te lo calles – le dijo la peliverde.
- Gracias por su apoyo……….. me han animado un poco más – comentó Wolf al escuchar las calidas palabras de sus seres queridos.
- ¿Qué bueno?, por que necesitas estar lista para la fiesta que se efectuar pronto……. Solo queda menos de una semana, y para cuando el día de la fiesta llegue ya estarás bien – solo radiaba felicidad Cheri por la gran fiesta – ya empecé todos los preparativos, solo falta que te midamos el vestido, va a ser espectacular -
- ¡HAHAUE! – grito – porque tienes que hacer este tipo de cosas……. YO NO QUIERO, NO QUIERO Y NO VOY A RECIBIR A TUS INVITADES Y MENOS QUE ME PRESENTES EN SOCIEDAD – eso fue su negativa.
- No me hagas decirle a Anissina que haga permanentes los efectos de su invento y seas una mujer de por vida,, a mi me encantaría que así fuera, el tener la niña que siempre he deseado – le amenazó a su hijo.
Wolfram solo tuvo que resignarse ante la atenta mirada de su madre y sobre todo por la amenaza de quedarse así toda su vida. De verdad que no quería eso. -_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-
Pasaron los días y la pesadilla de Wolfram desapareció al fin, ahora tenía que lidiar con el asunto de la fiesta, recibiendo a los invitados que llegaron un desde un día antes, su único consuelo es que quedaba muy poco para volver a la normalidad.
Estaba aburrido de recibir a tantos invitados, en su mayoría eran hombre que se le insinuaban y le decían palabras hermosas, pero le molestaba todo eso, hasta que enfrente de ella apareció una persona muy familiar.
En ese momento se acercaron Yuuri y Conrad para ver como estaba Wolf, pero al igual que ella, se llevaron la gran sorpresa de ver esa persona, a lo cual no sabían que sentir al verla. Esa persona se acerco a Wolfram y le hizo una reverencia tocando su mano y dándole un beso en esta.
-¿Cómo ha estado mi bella dama? – le dijo soltando su mano.
- Tú……… ¿qué haces aquí?- fue lo único que dijo por el asombro de verlo ahí mismo, nunca se lo imagino, cuando escucho unos pasos de una persona que se acerco.
- Te gusto la sorpresa que te hice, mi Wolf – dijo su madre al momento en que volteo a verla.
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