PRÓLOGO
El archiduque Rukawa ; un hombre alto, pelo negro y ojos azules, se escondió detrás del arbusto al escuchar chirridos proveniente de un carruaje acercándose. Se quitó el pañuelo del cuello y se lo amarró por la cabeza, escondiendo su cabello; puso una máscara y luego preparó la pistola antes de ponerse en medio de la carretera apuntando al caballo. Disparó cerca del animal y el conductor se detuvo inmediatamente. Bajó el transporte asustado y lo miró nervioso. El pelinegro hizo una señal para que abriera la puerta y obedeció, todos los pasajeros salieron asustados cuando vieron al ojiazul apuntándoles con un arma.
-Que nadie se mueva- ordenó Rukawa con frialdad.-Un movimiento en falso y disparo- amenazó- Ahora, todos en linea y tú, todo que sea de valor recogelo y dámelo-agregó señalando con el arma al conductor.
-Sí, señor- contestó el hombre temblando, entró en el vehículo y salió con una bolsa con algunas objectos, rápidamente pasó por cada viajero y les quitó cualquier objeto de valor que tuvieron y después lo entregó al pelinegro.
-Ahora den la vuelta- exigió el ojiazul accionando el gatillo. Las victimas obedecieron – entren en el coche y sigan con vuestro viaje.- añadió mientras se alejaba de ellos despacio.- Au revoir!- gritó antes de desaparecer entres los arbustos. Llegó a casa y lanzó la bolsa encima de la mesilla- Hoy fue una noche aburrida- suspiró frustrado “ Estoy loco!! a dos meses de casarme con Haruko, la mujer por la que tanto he luchado; por la que he pasado más de dos años peleando con Hanamichi...Uh... Luchar con un hombre por el cual tengo sentimientos confusos y terribles, sentimientos que nunca serían bien visto en esta sociedad; desde luego que estoy loco, intentar llenar ese vacío que siento solo porque has dejado de pelear conmigo... Asaltar y robar a todos los carruajes que pasan a medianoche sin importar a quiénes estoy perjudicando...Aunque les devuelva sus cosas una semana después es un crimen que pagaré caro se me cogen. Pero necesito emociones y ya lo he buscado en muchas cosas sin éxito, al final Sendoh tendrá razón; solo Sakuragi hace que reaccione...Estoy desvariando, le he ganado en el amor; ya no hay motivo para que me haga la vida imposible igual que yo ya no debo intentar sabotearlo.”- Hanamichi Sakuragi- murmuró antes de echarse en la cama.
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-Yohei, me marcho- dijo un joven con el pelo rojo pasión, alto y con los ojos color miel; poniéndose el abrigo.
-No te vayas aún, es muy temprano ni siquiera es medianoche- replicó su amigo agarrándole por el hombro, el pelirrojo se soltó y termino de ponerse bien el abrigo.- Vamos su alteza Sakuragi
-Lo siento amigo, el zorro vendrá dentro de poco y no quiero verle la cara de satisfecho- comentó el duque Sakuragi molesto.- Maldito zorro!! Me arrepiento de haber participado en esa estúpida batalla del amor, estaba perdida desde el principio.- añadió frustrado
-Hanamichi, Rukawa y tu siempre están peleándose; ya verás como dentro de poco tienes una oportunidad de vengarte...-dijo Yohei sonriendo.- he oído por ahí que Sendoh está preparando un picnic campestre y habrá una carrera de caballo...
-Amigo, seguimos hablando otro día..- cortó el pelirrojo con una sonrisa. “ Hace tiempo que ya no hago caso a los desafíos que me lanza ese zorro, parece que nadie ha notado que hace más de seis meses que no nos peleamos”- Mañana tengo que levantarme temprano para un viaje, estaré en mi casa del campo por si te quieres comunicar conmigo.- agregó mientras se despedía moviendo la mano. Salió de la casa y caminó hasta que encontró un carruaje de alquiler.- Por favor, llévame a la mansión Sakura.- pidió antes de entrar en el transporte. “ Estúpido Zorro, prometerse con Haruko cuando ni siquiera le gusta; solo lo hizo para restregarme su victoria. Pobre Haruko será infeliz toda su vida por mi culpa, por culpa del odio sin sentido que siento por ese zorro inútil. Tengo que salvarla de ese estúpi... Se ha detenido el carruaje?!” retiró la cabeza por la ventana y se encontró con un conductor asustado.
-Qué ocurre?- preguntó el ojimiel pensativo- Porque te detienes?- exigió. El conductor bajó del coche y lo miró fijamente. “ Que le ocurre a ese hombre?”
-No te muevas- ordenó una voz viniendo detrás del hombre, Hana bajó del coche y echó una mirada a su alrededor.- Si intentas algo te dispararé- añadió. El dueño de la voz apareció enfrente de él apuntándole con un arma.
-Que es lo que quieres, no llevo nada de valor?!- reclamó el pelirrojo levantando las manos al aire.
-El único que hace preguntas aquí soy yo- replicó Rukawa mientras se ponía delante del ojimiel. “ Menuda Suerte!!! El torpe en persona... Puedo hacerle lo que quiera y irme de rositas, podría incluso...No, detente... Si haces algo así lo estropearás todo” pensó a la vez que se acercaba más a su victima, apretó el arma en su estomago y lo miró fijamente .
-Eh, no te acerques tanto; necesito respirar- pidió Hanamichi devolviendole la mirada.- Apartate- añadió entre dientes. El pelinegro le ignoró, le agarró por el cuello y lo tiró hacia él haciendo que sus labios se rozaran. El pelirrojo abrió la boca sorprendido.“ Es mi oportunidad” pensó antes de introducir su lengua en la boca del ojimiel y empezar a besarle apasionadamente jugando con su lengua. Sakuragi sin querer empezó a corresponder el beso con la misma pasión; se mordisquearon y lamieron los labios suavemente mientras hacían más salvaje el beso...Lentamente separaron sus labios.
-Umm- gimió Rukawa mordiéndose los labios.- Lo sabía eres muy apasionado
-Qué?!-exclamó el pelirrojo molesto.
-Lo digo por tu cabello rojo- Bromeó el pelinegro – Entra en el coche- ordenó empujándolo.
-Si no me matas ahora lo pagarás muy caro- advirtió Hanamichi antes de cerrar la puerta. “La próxima vez vendré preparado , zorro estúpido, acabaré contigo”