Un azabache se movía tranquilamente por unos pasillos muy poco iluminados con una charola y unos vasos que llevaban unos líquidos con olor a alcohol emanando de ellos, se entró a una de las tantas habitaciones del lugar y en ella se acercó a una mesita en donde deposito la charola con las bebidas, con paso lento se acercó a una cama que se encontraba en el centro del cuarto, con su mirada fija y sin brillo contemplo la figura de un hombre que ya hacia acostado en el lecho con su cuerpo semidesnudo el cual lo invitaba a acostarse junto a el.
El chico con una mueca asqueada se acostó al lado del mayor, el cual comenzó a correrle mano sin ningún tipo de pudor, lo acostó en la cama y sin piedad lo penetro. El pobre chico mantenía sus ojos cerrados acordándose el como había llegado a eso; el muchacho se llama Uchiha Sasuke, piel clara casi blanca, de bellos cabellos azabaches y ojos profundos como la noche, edad 17 años y hace más o menos un año que su vida se volvió una miseria al perder a sus padres, pudo mantenerse económicamente por un tiempo gracias a la herencia que le dejaron, pero al acabársele el dinero intentó conseguir empleo y en el intento –según el- fue engañado por un hombre de largos cabellos negros y ojos pardos, el cual abusó de el y lo regaló a uno de sus tantos negocios clandestinos. Fue sacado de sus pensamientos por su abusador.
- ¿Por qué no gimes para mi pequeño?- preguntó con descaro el mayor.
- ¡Vete al demonio viejo hentai! –soltó con notable desagrado e indiferencia.
- Bien, tú lo buscaste –comenzó a penetrarlo con mayor brutalidad.
Finalmente el hombre acabó en el interior del chico, al cual dejó tirado en la cama y se fue al terminar de vestirse, no sin antes dejar el dinero en la mesa, el joven se quedó quieto mirando al techo con la mirada perdida, hasta que se dispuso a levantarse pero un chico al entrar por la puerta lo sorprendió.
- Ah! D-disculpa no fue mi intención entrar así pero es que… -se sonrojó levemente- me perdí, ¿sabes donde esta el baño?
- Em, está al final del pasillo, pero si deseas puedes ocupar el de esta pieza –respondió saliendo de su asombro al ver tal ángel en el umbral de su puerta.
- ¿Enserio? –vio al moreno asentir- ¡muchas gracias! –entró velozmente al baño.
El Uchiha se levantó de su cama, se puso unos pantalones negros y una polera sin mangas blanca y se sentó con un poco de dificultad, al poco rato salio el rubio del baño y lo contemplo por un momento hasta que finalmente habló.
- ¿Te sientes bien? –le toco la frente al moreno comprobando si es que no tenia fiebre- Chico estas muy pálido.
- No es nada –se movió sintiendo una punzada en su trasero logrando sacarle una mueca de molestia que no paso desapercibida por el otro joven.
- Ya se lo que tienes…-le sonrió tiernamente- deberías descansar un poco… Quizás cuantas veces te habrán forzado hoy –se volteo- me voy.
- E-espera dobe ¿cómo te llamas? –una venita se asomó por la nuca del muchacho.
- No me llames dobe, mi nombre es uzumaki Naruto, teme –salio del cuarto rápidamente, dejando al Uchiha inquieto.
- ¿Qué habrá sido eso? –se cuetionó el moreno.