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El orgullo Uchiha por neko Sasukeray

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Notas del capitulo: Bien este es el primer fanfic que publico aqui... jeje soy neko Sasukeray y me encanta el Uchihacest... y no tiene lemon (Buuuu... es que aun no creo estar lista para uno jeje... aun que los leo a montones XD) Vale por ultimo dire que este Sasuke es un niño precoz... justo como me gusta a mi jeje... espero lo disfruten.

Unas pequeñas huellas se marcaban en la blanca nieve al ritmo que sus pasos lo conducían por aquellas calles solitarias, olvidadas a causa del clima, muchos puestos no habían abierto y tal parecía que nadie quería salir a enfrentarse con aquel viento helado que congelaba las gotas de lluvia. Sin embargo para el había sido una mañana como cualquier otra, se había levantado temprano para dirigirse a su escuela de ninjas, y como siempre había caminado por las inmensas calles de Konoha. Prácticamente había hecho lo mismo que el día anterior. Miro el suelo mientras seguía caminando lentamente, observaba atento como se marcaban sus pies en el blanco manto del suelo, pronto sus pensamientos fueron interrumpidos abruptamente por un suave sonido que venia detrás de unos arbustos, curioso se acerco cuidadosamente hacia lo que parecían ser unas risitas, se agacho rápidamente y gateo con agilidad hasta donde se encontraba aquel montón de hojas. Metió sus manos entre las pequeñas ramas y como si se tratase de una cortina las abrió rápido pero silenciosamente. Sus ojos se abrieron sorprendidos acompañando a su gesto de asombro, no podía creer lo que veía, al otro lado de aquel montón de hojas se encontraba una pequeña pareja recostada en el pasto a la vez que se besaban y acariciaban. La sorpresa no es que fuesen unos novios los que provocan aquel ruido sino las personas que formaban a la pareja, Kakashi e Iruka, ambos instructores en la academia ninja, eran los dos enamorados que disfrutaban el uno del otro sin darse cuenta de que alguien los estaba espiando. Es decir Sasuke había visto infinidad de veces a su mama y su papa cuando se besaban, pero dos hombres haciendo lo mismo era algo realmente increíble, aun que sabía en el fondo que el ya había imaginado una escena como esa con el como protagonista. Siguió mirando por unos segundos, hasta que la pareja se aburrió de no estar en un lugar mas privado y se marcho. El menor de los Uchiha se levanto aun pensando en lo que había visto, muchas dudas estaban en su cabeza, pero el sabia que siempre podía preguntar a los demás, así que sin perder tiempo comenzó a caminar de vuelta hacia su casa como había hecho antes de detenerse a husmear. Llego prontamente a la casa del tan prestigiado clan Uchiha, donde su madre un tanto preocupada lo esperaba con impaciencia en la puerta. Cuando Sasuke saludo no recibió una grata bienvenida, mas bien fue un regaño, de esos que dan las mamas que se preocupan demasiado, diciendo frases como “¿Por qué llegaste tarde? O ¿Dónde andabas?” Y claro no podía faltar el típico “No quiero que esto se repita” la señora Uchiha caminaba de un lado al otro dentro de la cocina mientras le preparaba la cena a su hijo menor.

-Mama… - llamo el pequeño azabache al mismo tiempo que su atenta madre le servia un plato y lo colocaba en la mesa de madera

-¿Mande?-pregunto al menor al instante en que tomaba asiento frente a su hijo, prestándole confianza para que siguiera con la platica. Mas su pequeño hijo no parecía muy seguro de lo que estaba apunto de cuestionar, dudo un par de segundos intentando encontrar la manera correcta de decirle a su madre que pensaba sobre lo que había visto de camino a casa.

-tu… tu…- dijo bajito agachando su mirada encontrando muy atractiva la vista que daba su plato con arroz, por que a pesar de tener mucha confianza a su familia estaba seguro de que no podía decir simplemente que había visto a dos hombres besándose como ella hiciese con su papá. -¿Tu que piensas del amor entre iguales?- dijo finalmente, después de mucho meditar.

La señora Uchiha no entendió muy bien lo que quería preguntar su hijo, pero creyó conveniente decirle lo que años de experiencia le hacían entender lo que para ella era el amor.

-Pienso que si dos personas se aman, realmente, nada debe importar… por que el amor siempre es bueno y nunca podría ser algo repulsivo- al terminar de dar su opinión dio una sonrisa para que su pequeño no tuviera mas dudas sobre lo que su madre decía.

-Ya veo…-murmuro, y comenzó a comer como siempre en silencio, mas extrañamente la imagen de su hermano mayor apareció en su mente con la intensidad con que se clava un cuchillo. A veces se preguntaba si era una persona extraña o loca o tal vez incluso inmoral al imaginar momentos, como el que había tenido aquella pareja de la tarde, con su hermano.

Habrá pasado un par de horas antes de que el orgullo del clan Uchiha hiciera acto de presencia en la casa, entro por la puerta y coloco sus cosas en un sillón cuidando de que no se regaran, entonces entro a la cocina buscado algo que calmara el hambre que traía desde la tarde. Pronto su mamá acudió a atenderlo preocupada de que Itachi se cansara, le sirvió un plato de comida caliente a diferencia de lo que su hijo había comenzado a preparar, simplemente cereal con leche, por que Itachi era un excelente ninja, el mejor de los Uchiha, pero sobre la casa no sabia nada, desde pequeño se le había enseñado a entrenar para la batalla y concentrase solamente en esta. En cambio su hermano menor era un chico sumamente preocupado por saber que hacer en casa, como cocinar, lavar la ropa y limpiar, no que no le importase el entrenamiento, mas todo lo contrario quería ser tan bueno como su hermano y hasta entonces héroe y amor platónico, pero por algo que aun no entendía simplemente no lograba ni ser la mitad de bueno que Itachi, entonces había decidido que las batallas eran importantes mas también lo era el hogar, por lo que había aprendido hacer muchas cosas observando a su mamá, y cuando el orgullo Uchiha llegaba agotado, aunque victorioso, de alguna misión Sasuke corría a la cocina a prepararle comida. Caminaba por los pasillos de la casa cargando una charola con lo que había hecho, entraba al cuarto de su querido hermano y lo dejaba sobre la mesita. Aunque nunca lo expresase Itachi comía gustoso los platillos de su hermano y una vez que acababa daba las gracias y llevaba su mano hasta la frente del menor y suavemente con sus dedos lo empujaba de la cabeza, haciendo que el menor retrocediera unos pasos, como indicando que saliera pero a la vez aquel mensaje que captaba era una pequeña muestra de cariño, así que sin decir nada abría la puerta del cuarto y salía cargando de nueva a cuenta la charola, y aun que hubiese parecido que aquel momento era demasiado frío como para ser el de dos hermanos que conviven mucho tiempo juntos, en realidad al menor de los Uchiha le agradaba todo lo que había pasado aquellos instantes, le gustaba que Itachi lo empujara de esa manera, le gustaba mirar en silencio como su hermano mayor llevaba hasta su boca todo lo que el hubiese cocinado, le gustaba bañarse e incluso dormir junto al mayor, todo lo que hiciera al lado de Itachi era agradable. Y muy en el fondo sabia que el orgullo de la familia también disfrutaba de su presencia, aun que nunca lo dijera.

Una vez que la mamá Uchiha hubo terminado de servirle la comida a su hijo mayor, y este la hubiese terminado, se retiro a prisa ya que ella y su esposo saldrían a tratar asuntos familiares muy urgentes, mas no podían llevar consigo a sus hijos, por asuntos privados. Por lo que Itachi cuidaría, durante todo lo que quedaba de la tarde, la noche y talvez parte del siguiente día, a su hermano, algo que a decir verdad le agradaba de sobre manera. El y el menor se quedarían solos, sin ningún otro adulto.

“Solos”

La palabra resonó en el interior de los pensamientos del adolescente pelinegro que muy entretenido miraba un libro, mas realmente no ponía mucha atención a lo que leía, el solo hecho de pensar en su pequeño hermano le produjo un escalofrío que recorrió todo su cuerpo y fue mas intenso en la parte baja de su abdomen. Sacudió su cabeza ligeramente intentando alejar todos aquellos pensamientos y sensaciones que lo atacaron, pero esto no era nada nuevo, desde que recordaba siempre había pensado en Sasuke como algo más que su hermano, por lo que se auto regaño mentalmente, si alguno de los otros adultos que trataban con el se enterase de todas las no muy buenas intenciones que tenia para con el menor de los Uchiha su reputación caería muy bajo.

Agradeció el momento en que el ruido de la puerta abriéndose lo distrajo de la batalla moral que ocurría en su mente, giro su cabeza para darse cuenta de que sus padres salían apresurados y con una señal de mano decían adiós. Mas poco le duro el gusto pues justamente cuando se disponía a volver o mas bien a intentar realizar su lectura una pequeña mano le jalo la manga de la playera llamándolo insistentemente.

-¿Qué pasa? Sasuke- dijo mirando al menor

-Ita-chan necesito que me ayudes a hacer mi tarea…- pidió enseñando un cuaderno que traía en su otra mano.

-Matemáticas…-murmuro un tanto fastidiado al ver la portada del libro, y es que a pesar de que no se le complicaba mucho era algo que realmente detestaba hacer, e incluso a veces se preguntaba quien habría inventado esa materia… por que sinceramente en todas su misiones que había tenido como ninja nunca las había utilizado. Pero viendo que Sasuke realmente quería que lo ayudara tomo el cuaderno entre sus manos y comenzó a hojearlo, paso una hoja tras otra checando todo lo que había escrito en ella y le pareció extraño que el menor hubiese pedido ayuda siendo que no había errores en sus ejercicios pasados, mas no objeto nada. -Bueno veamos…- dijo analizando lo que en ese instante comenzaba a leer, Sasuke por su parte tomo asiento en el sillón junto a su hermano, y aunque lo que debiese hacer en ese momento era ver el cuaderno, su mirada se detuvo en el rostro del mayor. Sus ojos parecían muy entretenidos con la persona que se encontraba a un lado, y pronto, sin darse cuenta de cómo paso, observo los labios de Itachi. Con demasiado cuidado siguió muy de cerca el movimiento que realizaban los afilados y rojos labios de su hermano mayor al hablar, claro que no podía oír nada, ya que solo estaba concentrado en mirar. Y en un murmuro bobo respondía inútilmente.

-¿Entendiste…?-pregunto Itachi viendo al menor, aun que le pareció extraño que Sasuke estuviese mirándolo a el en lugar del libro, por lo que volvió a preguntar mas al no haber respuestas cerro el cuaderno haciendo que el ruido atrajera de nueva a cuente a su hermano al mundo.

-¿Ehh?-susurro el menor al mismo tiempo que sus ojos se abrían despertándolo de sus pensamientos.

-veo que no estabas poniendo atención…-indico el de pelo largo

-Lo siento Ita-chan…-respondió agachando la mirada al suelo. Entonces Itachi se levanto del asiento, dejando el libro sobre la mesa del centro, y comenzó a caminar hacia la cocina sin decir una sola palabra, si había algo que a Sasuke le molestara de su hermano mayor era, sin duda, que no dijera nada… que todo el tiempo se mantuviera en silencio, cuando a el le encantaba oírlo hablar.

-Ya he dicho que lo siento…-dijo bajito en forma de puchero, pues había creído que el mayor se había molestado y por eso se retiraba.

-no estoy enojado- respondió bajito mientras se dirigía hacia la cocina, entonces el menor de los Uchiha se levanto del sillón y comenzó a seguir a su hermano, quien seguramente buscaría algo que comer, por que aun que la mama de Sasuke dijera que la razón por la que Itachi comía tanto era por que estaba en crecimiento y además gastaba mucha energía, el menor sabia perfectamente que solo era una excusa, ya que su hermano era el mayor goloso que conocía y casi siempre lo veía comiendo lo que sea que se encontrara en su casa.

Sasuke no estaba equivocado en su última suposición, ya que ahora se encontraban dentro de la cocina, el sentado en la mesa y su hermano husmeando en el refrigerador. El menor recargo sus brazos en la mesa y luego su cabeza sobres sus brazos, suspiro mientras observaba como su hermano sacaba una caja de lo que parecía ser pan y la abría, luego se dirigió junto a su hermano menor para comer, estuvo en silencio durante unos minutos mirando a un punto fijo.

-Bueno… ¿me dirás por que estabas o estas tan distraído?- pregunto Itachi, pues desde que llego había notado algo extraño en su hermano, mas ya que este nunca decía nada a menos que se le preguntara, decidió esperar a que estuvieran solos, así talvez el menor hablaría con mas confianza.

-mmm…-murmuro el pequeño azabache, realmente no sabia como empezar a decir lo que le había querido contar al mayor desde que lo vio entrar. -Veras… hoy cuando venia de regreso de la escuela… Vi algo realmente diferente…- corto un momento analizando sus siguientes palabras. -Dos personas se estaban besando…-agito sus pies que colgaban de la silla

-Eso no es diferente… mama y papa siempre se besan, y es por que se aman…-interrumpió el mayor sin ninguna expresión en sus palabras.

-ya veo nii san… pero mama es mujer…-dijo rápidamente atrayendo de inmediato la atención de su hermano, quien comenzaba hacer suposiciones pero prefería esperar a que su hermano aclarara.

-¿he Ita-chan esta bien… que dos hombres se besen… esta bien?-pregunto finalmente el menor abriendo sus ojos para buscar su respuesta en lo que dijese su hermano, quien realmente estaba sorprendido, intentando comprender todo aquello que acababa de escuchar. Pero por algo extraño que pasaba en su mente solo podía visualizar a su hermano cerca de el, muy cerca, mientras el lo besaba y acariciaba como siempre había ansiado. Sacudió su cabeza intentando regresar a la normalidad, pero fue inútil. Pronto volteo a ver a su hermano una vez mas, quien no dejaba de mirarlo fijamente con sus labios entre abiertos. Itachi intento cortar la distancia que había entre ambos, pero torpemente movió su brazo hacia adelante derramando el jugo que se había servido sobre Sasuke. Ambos se sorprendieron, mas el menor ya que aquella bebida estaba realmente fría. El pequeño azabache soltó un leve quejido al sentir un frío húmedo en su pecho, e instantáneamente volteo a mirar su playera que se encontraba empapada. -Nii san no tienes por que bañarme…-reprocho con su vocecita.

-lo lamento Sasuke…-tomo entre sus manos un trapo que se encontraba cerca he intento secar al menor, cuando apenas lo había tocado sintió como el azabache se alejo de el.

-Esta frío- afirmó

-Entonces creo que debes bañarte…-

-¡OH! pero si ya lo había hecho-se quejo al mismo tiempo que volteaba su mirada y hacia un puchero, estaba molesto por que Itachi lo hubiese mojado.

-Esta bien… creo que podría recompensarte por esto…-dijo el mayor atrayendo inmediatamente la ilusionada mirada de su hermano.

-¿Entonces saldremos?-Sasuke parecía emocionado ante la idea de ir a dar un paseo por lo que Itachi afirmo con un leve movimiento de su cabeza.

-Claro que antes debes bañarte…-observo

-Pero nii san tu provocaste esto… yo creo que tu deberías bañarme- ante estas palabras el moreno no pudo mas que sentir una leve presión en su nariz, como si fuese a sufrir una hemorragia nasal. Ya que su mirada observo con detenimiento el delicado cuerpo del pequeño azabache, la ropa húmeda se adhirió a su pecho y en algunas partes a sus brazos, haciéndolo ver aun mas frágil de lo que ya aparentaba. El mayor tuvo que entre abrir sus labios para contener el aliento junto a sus mas fervientes deseos.

Alzo su mano para llamar a su pequeño hermano a que se acercara, ciegamente el pequeño azabache hizo lo indicado por el mayor, entonces sintió un leve empujón provocado por el dedo medio y anular de su hermano que chocaban contra su frente, había vuelto a caer. Mas esta vez era diferente a las otras, este acto simplemente había sido para que los impulsos del orgullo Uchiha no hicieran otra cosa con su hermano mas que un leve golpe.

-au…-se quejo el menor con un murmuro, sobandose la parte afectada.

Poco tiempo después el menor de los Uchiha se encontraba ya en la bañera, aun que mas que aseándose estaba jugando con el agua, o eso fue lo que supuso su hermano al oír el intenso salpicar del agua y uno que otro grito que se entendía como los jutsu que supuestamente el menor estaba haciendo, pareciendo así que se encontraba en plena batalla con sus amigos imaginarios. Itachi se acerco un poco hasta la puerta corredora del baño, para inspeccionar que su hermano se encontrara bien, un poco de vapor salía por el espacio entre abierto que había dejado el azabache. Volvió a oír agua cayendo por los costados de la bañera.

“Y yo tendré que limpiar todo ese desastre…” pensó al imaginar como era que iba a quedar el cuarto de baño después de que el menor lo abandonara, aun que realmente no le importaba tener que alzar el tiradero de su hermano ya que lo oía tan feliz, lo que le preocupaba era que Sasuke estaba tardando demasiado y se hacia noche para que salieran.

-Sasuke debes apurarte…-ordenó tras la puerta con sus brazos cruzados sobre su pecho

-Nii san ayúdame… me atacan…-grito el menor que despreocupadamente seguía jugando.

-no es cierto…-murmuro alegre Itachi, definitivamente no iba a seguir el juego.

-aahhh… ayuda…-bien eso si que comenzaba a preocupar al mayor, mas todavía no se movió de su lugar.

-Nii san…-grito nuevamente e Itachi juro que estaba apunto de llorar. Por lo que sin pensar, inmediatamente, se adentro al baño con su afilado kunai en la mano, dispuesto a matar a quien se hubiese atrevido a tocar a su pequeño hermano. Y antes de que pudiese siquiera inspeccionar el cuarto sintió una gran ola caerle enzima, el agua caliente con la que se estaba aseando el azabache lo dejo completamente empapado y su kunai fue a dar al piso ante la impresión, quien diría que el orgullo del clan Uchiha había perdido frente a un niño, quien en ese momento se encontraba riéndose todo lo que le era posible. Viendo entre el vapor la cara de sorpresa que puso el mayor al sentir el agua caliente caerle sin piedad alguna. -Esto te pasa por tirarme el jugo…-burlo

-¡OH! Sasuke ahora tardaremos mas en salir a la calle…-interrumpió el mayor con media sonrisa de lado intentando que el pequeño se sintiera mal por haberlo mojado, pero eso no paso.

-Bueno si vas a tardar tanto… por que no te bañas conmigo…-sugirió dejando paralizado a su hermano.

¿Es que acaso Sasuke no entendía todos los esfuerzos que tenia que hacer el mayor para tranquilizar sus pecaminosos impulsos?

Es cierto que antes ya se habían bañado juntos, muchas veces, sin embargo este no era el momento preciso para tomar uno de esos tantos baños.

-Nii san…- se quejo, Itachi sintió una sensación un tanto caliente recorrer su entrepierna, aquello estaba empeorando. -Ya métete a la bañera…-ordeno, Sasuke no entendía por que su hermano se rehusaba a tomar un simple baño con el, si siempre que el mayor llegaba de alguna misión o en un día cualquiera se bañaban juntos. Mas al ver que su hermano no se movía de su lugar pensó que este día no se bañaría con el.

-Ita-chan…- llamo en un tono triste agachando su mirada al agua. -¿Estas enojado?- el llamado sintió una opresión dolorosa en su pecho al escuchar el tono de tristeza del menor, pero no podía decirle que no se bañaba con el por que estaba un tanto inquieto en su parte baja, mas ya que su hermano confundió su negación con enojo decidió que se asearía con el mas antes debía enjuagarse con el agua lo mas fría que pudiera como castigo hacia su inquietud. Y así poco tiempo después se acerco a la bañera para entrar. Sasuke vio su intención entre el vapor y se coloco a un lado para que el mayor cupiera.

-¿Feliz?-pregunto con tono normal el mayor entrando en el agua caliente, el menor de los Uchiha asintió con una sonrisa. Por su parte el pelinegro lacio tomo una esponja en su mano y comenzó a tallarse el brazo contrario, su hermanito no dejaba de mirarlo.

-¡Bang!-grito el pequeño azabache lanzando un poco de agua sobre el rostro de su hermano, quería llamar su atención y el otro no se la negó. -Oye Ita-chan no respondiste…-dijo una vez que su hermano lo miraba

-¿Mande?-no comprendía a que se refería.

-¿No recuerdas?- bufó molesto haciendo un puchero. -¿El beso entre hombres es malo?-volvió a preguntar atacando por sorpresa a Itachi quien se había olvidado del tema, nuevamente se puso nervioso mas esta vez logro tranquilizarse.

-¿Bueno tu que crees?-cuestiono para que el azabache intentara responderse por si mismo, claro que Itachi no estaba en contra de la homosexualidad, pero explicar esto a un niño le resultaba difícil por lo que creyó conveniente que el menor pensara un poco por si mismo.

-¡OH! Ita-chan pero yo no he besado a nadie y menos a un hombre…-con esto daba a entender que no podía saber nada si aun no lo había hecho, Itachi entonces empezó a idear como explicarle a su pequeño hermano que no estaba mal.

Pronto los ojos del mayor se abrieron sorprendidos, su pulso se aceleró al ritmo del colapso, la esponja que sostenía en su mano cayó a la bañera alzando una pequeña ola y su rostro fue cubierto por un calor rojizo. Sentía una suave presión sobre su boca, su hermanito lo estaba besando, los dulces y tiernos labios del pequeño azabache se encontraban sobre los suyos, al igual que su pequeño cuerpo se encontraba encima del mayor. Itachi lo miro, Sasuke tenia sus ojos cerrados y un suave rubor en sus pómulos. El moreno se acaloro de sobre manera, entonces perdió el control sobre su cuerpo. Su lengua ansiosa rozo los labios del menor para que los abriera, y así lo hizo, luego el mayor profundizo el contacto, atrajo la torpe lengua de Sasuke para que jugara con la suya al mismo tiempo que tomaba al menor por el cabello y juntaba mas su rostro en un suave tirón. Al principio el pequeño azabache se sintió levemente sorprendido, y por inercia abrió sus grandes ojos negros, pero al mirar las afilada orbes del mayor tan cerca no dudo en continuar. Tras largos segundos ambos se separaron tomando todo el aire que les era posible. Como desearon que aquel momento no finalizara.

-Ita-chan…-llamó el menor a lo que su hermano le presto atención. Sasuke seguía sobre sus piernas. -No es malo…-finalizo haciendo entender al moreno que había comprendido lo que el mismo se preguntara aquella tarde, sonrió.

Itachi respondió sonriendo de igual forma, pero en el fondo sentía que no importaba que a su pequeño hermano le hubiera agradado aquel contacto estaba mal, es decir, Sasuke apenas si tenia nueve años, un niño con esa edad no sabe diferenciar el bien del mal. El mayor se recrimino mentalmente.

“No esta bien…” se grito en pensamiento, precipitado se levanto haciendo a un lado a un Sasuke un tanto confundido, en breves instantes el menor se quedo solo en la bañera. Itachi había salido corriendo con solo una toalla cubriendo su parte baja. Se detuvo antes de dar vuelta hacia el pasillo que conducía a su cuarto, había sido un cobarde al no enfrentar al menor, se quedo parado mientras respiraba hondo para tranquilizarse. Retrocedió sus pasos al baño. Entro lentamente acercándose a la bañera. Cuando abrió sus labios para hablar no salieron palabras, no ante lo que ahora observaba, su pequeño hermano se encontraba sentado con sus rodillas hasta su pecho y sus manos agarrándose mientras cubría sus piernas, sollozaba dolorosamente, gruesas lagrimas rodaban por sus mejillas y caían dentro de la bañera para fundirse con el resto del agua. Sasuke estaba llorando, pero Itachi no sabía por que, así que se agacho para quedar a la altura de su hermanito y poder hablar con el.

-¿Qué pasa Sasuke…?-tartamudeo, temía que el menor se hubiera sentido acosado o incomodo ante el beso.

-Nii san no me quieres…-murmuro con profunda tristeza, el moreno abrió sus afilados ojos, no comprendía.

-¿A que te refieres?-

-Si me quisieras… Nii san no habrías corrido…-dijo cortadamente sintiendo su garganta cerrarse dolorosamente a causa del llanto. ¿Acaso no se suponía que el amor estaba fuera de todo mal? Eso le había dicho su mamá y eso era lo que sentía por su hermano, más allá del simple amor fraternal, pero ahora su amor platónico corría como si aquella caricia se tratara de un terrible pecado. Es por eso que las lagrimas salían se sus orbes carbón como si se tratara de una tormenta incontrolable. Por su parte el mayor no podía dejar de mirar al pequeño azabache absorto ante lo que había dicho.

El pequeño Sasuke lo quería como siempre deseo en lo mas recóndito de su bizarro corazón, aun que tal vez no de la forma que debía, tal vez el menor solo estaba confundido, pero el ya ni siquiera sabía que debía hacer, por que no negaba que su lujuria carnal y su añoranza emocional esperaban impacientes que el menor correspondiera de la misma forma al prohibido amor que le profesaba.

¿Pero solo tenía nueve años? ¿Qué podía saber un niño de nueve años sobre el amor?

-No es que no te quiera…-dijo tiernamente al instante que tomaba el mentón del menor con delicadeza y lo obligaba a que lo viera a los ojos. -es que…-pensó unos instantes. -Sasuke el amor de pareja y el amor fraternal son cosas distintas…¿Lo sabes verdad?-explico, las lagrimas del azabache dejaron de salir, aun que aun se le podía observar triste.

-Nii san…-dijo bajito mientras con sus manitas tomaba el rostro del moreno entre ellas y lo atraía al suyo, cuando ambos estuvieron demasiado cerca el menor beso tiernamente a su hermano dejándolo completamente sorprendido. -Este es amor de pareja…-finalizo sonriendo sinceramente. Y esa era la verdad, el azabache amaba a su hermano mas allá de los simples lazos fraternales, lo amaba como hombre y persona. Itachi sonrío, su niño comprendía bien de que estaba hablando cuando se refería al amor. Tomo una toalla que se encontraba cerca y con ella envolvió el cuerpo de su hermanito para sacarlo de la bañera. Un agradable calor recorrió el cuerpo del menor y lo cubrió, se sintió feliz de estar en los brazos de Itachi, se sentía protegido y querido, el moreno se levanto despacio con el menor aun en brazos e inicio su camino hacia las recamaras.

-Estas pesadito…-murmuro de forma divertida.

-Pero si tu eres el que se la pasa comiendo…-reprimió avergonzado el menor a la vez que hacia un gesto de berrinche. Sin tardar mucho llegaron a la habitación de Itachi, quien coloco a su hermano en la cama y le entrego ropa para que se vistiera, realizando el mismo acto. Una vez que se encontró listo volteo a mirar al azabache que solo traía puesto una playera de manga larga y sus boxers, en la boca del menor se hallaba un palito de paleta de muestra que estaba comiendo un dulce.

-Creí que querías que saliéramos a comprar dulces…-afirmo el mayor acercándose a la cama para colocarse frente a su hermanito.

-Lo que quiero es que duermas conmigo…-murmuro el azabache juntando sus manitas con su playera entre ellas, estaba un poco sonrojado. Los ojos de Itachi brillaron de emoción por lo que sin pensarlo tomo al menor con su brazo derecho, cargándolo, mientras con el otro abría las cobijas y juntos se metían entre ellas, Sasuke se aferro en un agarre al cuello del menor pasando sus brazos detrás de este y aun que estaba incomodo no le soltó. -Ita-chan…- llamó suavecito y el nombrado lo miro. -¿Me amas?-pregunto un tanto nervioso.

-Por sobre toda mi vida… aun que eso me convierta en una mala persona- contesto sin pensarlo realmente, ambos se miraron y lentamente acercaron nuevamente sus rostros, un tono cereza cubrió sus mejillas y sus labios parecieron en ese instante mas rojos que la misma pasión, se besaron a la vez que entre cerraban sus orbes oscuras, sus manos realizaban caricias fuera de todo morbo, aun que desesperadas estaban cargadas de un intenso calor amoroso.

Los prejuicios, la moral y lo inmoral, la vergüenza, el bien y el mal, la razón, el tiempo, las personas, el mismo espacio desapareció ante aquella caricia que ambos se profesaban prohibidamente. Mas ya nada importaba, solo estaban ellos.

Solo eran dos hermanos que se unían de una manera mas pasional y mucho mas amorosa que cualquier otra pareja en el mundo. Si todo aquel amor que ambos estaban entregando era prohibido por las personas estaban dispuestos a soportar la carga de ser los mas bizarros, renegados y mal vistos de todos los Uchiha.

Por que no se trataba de dar la vida por el orgullo de su clan, si no que se trataba de dar la vida por otro y al mismo tiempo compartirla, o eso fue lo que descubrió Itachi al oír que entre suaves murmullos cortados por dulces besos su pequeño hermanito repetía lo que su madre le hubiese dicho esa misma tarde “El amor jamás podría ser algo malo ni repulsivo… nii san te amo“.

 

FIN

Notas finales: Vale gracias por haber leido... espero les haya gustado tanto como yo cuando lo acabe de escribir...
recuerden que sus comentarios son el salario de los escritores de mentes retorcidas como la mia... así que si dejan alguno me haran inmensamente feliz.
Nos vemos.
-El arte de explotar al maximo el yaoi- (jeje esa es como mi regla de vida XD)

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