2º capitulo
Oh!! El espacio enorme y blanco, la ingravidez… el sentirte que flotas como el viento y de repente despertar sintiéndote con la cabeza enormemente pesada. Intentar con más ahínco poder mantener los ojos abiertos a pesar de la luz que te cala a la vista manteniéndote parpadeando involuntariamente, pero con gran esfuerzo insistes pues el deseo de saber que es todo aquello es más fuerte que tu propio dolor. Por fin, tu vista logra mantenerse estable sobre un punto indefinido que luego se reconoce como azul, un enorme campo azul que parece no tiene fin pero que a medida que lo recorres llegas a encontrarle uno.
-Una… cortina
-Ah!! Si, así es cariño… esa es una cortina. Pero deja que le de la noticia a tu hermana de que ya estás consciente y veras que gusto va a darle!!!
El entusiasmo de la persona de blanco que me acaba de afirmar que aquello por lo que me esforcé en divisar era una cortina casi me sorprende. Eh!... un momento, YO casi SORPRENDIDO. Eso si que me altera. Yo sorprendiéndome por algo después de tanto tiempo es… casi… humano.
-SUBARU!!!!!
-Ohw aaah ah ah -dolor
-Eh disculpa Hokuto, pero tu hermano aún está delicado le puedes causar…
-Ops, si perdón pero es que él, yo… -puedo ver las lágrima de Hokuto caer por sus blancas mejillas al separarse del abrazo mientras me observa como si fuera lo único que existiera.
-QUEEEEEEEEEEE!!!
-Por Dios muchacho no te alteres puedes volver a ponerte delicado. Tranquilo. –me dice la mujer presionando mi hombro y observando la máquina que registra los latidos de mi corazón que se incrementan un poco.
-No lo creo mi hermanito es muy fuerte, incluso creo que ya es hora de que le quiten todos esos aparatos tan incómodos, no crees Naoko san?. Incluso acabas de ver el tremendo grito que hecho, eso quiere decir que anda perfectamente de sus pulmones y garganta.
-Te vuelvo a repetir como tantas veces Hokuto-chan, tú no eres la doctora… por Dios niña, pero en todo caso el doctor no tarda en llegar. –te reprende pero tú la ignoras completamente.
–Que bueno es escuchar tu voz de nuevo, -sus ojos esmeraldas cristalizados por las lágrimas se centran en los míos. -pero no crees que hubiera sido mejor que la primera palabra que dijeras después de tanto tiempo debió ser: ¡Hokuto-chan querida y hermosa hermanita que felicidad verte!. Ne Subaru!! –sonríe sin dejar de llorar. –Bueno esas son muchas palabras jajajaja.
Pero no puede ser, cómo… cómo es que puedo verte?, cómo es que estás aquí… Viva. Acaso estoy soñando? Será una mala jugada, un malboroshi de…
-Buenos días. –Se escucha de pronto una fuerte voz de un hombre anciano que entra con un portafolio y algunos utensilios médicos. –que gusto verle Subaru kun.
Subaruku kun…
“ Hace tanto tiempo que nadie me llamaba así que me parece tan extraño. Incluso quiero sonreír… sí… esto debe ser un sueño”.
-Pero anda, niño, responde algo al doctor, va a pensar que eres un maleducado –me dice frotándose la nariz con un pañuelo. Y un leve coscorrón se cierra sobre mi cabeza.
-Eh, Hokuto, recuerda el estado delicado del joven. –la enfermera la reprende.
-Claro, pero sólo quiero que el sensei Ichise pueda ver su mejoramiento.
-En todo caso el simple hecho de que ya esté consciente nos dice mucho. Ahora por favor salga un momento para poder checarlo. –ordena el médico.
-Eto… doushite (por qué)?-duda un momento pero la enfermera te saca empujándote por los hombros. –no se tarde tanto porque tengo muchas cosas que platicar con él. Ne Subaruuu. –su voz se escucha más lejana cuando sale pero aún se le oye dar una que otra recomendación al sensei que sólo resopla resignado.
-Ja, todo un caso su hermanita, que por cierto ahora que puedo verle despierto son idénticos, como dos gotas –me dice observándome a los ojos. –Son muy…-pensó un poco- lindos los dos. –dice logrando que mi cara se sonroje al igual que la de él al verme. –pero no se moleste jajaja. La verdad no supe que calificativo darles ya que usted es un jovencito pero a la vez sus rasgos son tan finos como los de su gemela. Supongo que ya debe de estar acostumbrado. –Me dice pero yo solo sé una cosa después de esto, QUIERO YA SALIR DE AQUÍ.
-Podré salir pronto? –me escucho decirle con la voz algo ronca.
-Eso espero, creo que quizás en menos de un mes.
-Qué! Un mes… eso… eso es mucho tiempo.
-Necesito ver como se va recuperando, en todo caso depende de usted y las ganas que le eche. Aunque por lo que veo si que lo está haciendo bien se ha recuperado aún más pronto que el otro paciente según me informaron. –Me dice pero no entiendo a que se refiere con eso del otro paciente e intento preguntar pero antes de eso me interrumpe.
-Bueno, lo comprendo estar aquí durante 3 meses y medio no es nada fácil. Aunque he visto casos que han durado años.
-Disculpe…
-Si diga?
-Doctor Ichise, se le requiere en el Hospital Campus Clamp, vaya en cuanto pueda. –nos interrumpe un enfermero hablando desde la puerta.
-Oh está bien. Bueno muchacho, daré las indicaciones para que te desconecten el electro y sólo te dejen el suero y según el progreso de recuperación con los medicamentos veremos si te damos de alta incluso antes del mes. –Me dice animadamente dando unas palmadas suaves a mi hombro izquierdo. –Mañana vengo.
-Gracias. –pronuncio levemente mirando al techo unos instantes. “Que es todo esto”
-Oh Subaru!! –Hokuto entra corriendo sin darme tiempo a nada. –has escuchado? pronto muy pronto saldrás de aquí!! Regresaremos a casa y todo volverá a ser como antes.
-Como antes?
-Si querido hermano, como antes.
-Hokuto…
-Si?
-Que me sucedió?
-Eh?
-Por qué estoy aquí? Qué fue lo que me dejo en coma.
-AAAAAAAh es cierto!!! es que tú no lo sabes que baka soy jejeje…
-Hokuto?
-Señorita Hokuto si que es veloz, déme un momento para poder quitar todo esto.
-Adelante Naoko, haz tu trabajo y dime si puedo ayudarte con algo y así adelantaremos y mi pobre Subaru podrá descansar mejor, incluso he estado pensando en que si puedo sacarlo a ver un poco el jardín del hospital… sabes –me dice con emoción. –hay muchas flores de Nadeshico plantadas en los alrededores, incluso te he traído una cada que puedo. –me guiña un ojo hablándome quedamente para no ser escuchada.
-Ah! Con que has sido tu la que ha estado arrancando las flores del jardín, creo que voy a reportarte. –amenaza con el estetoscopio a mi hermana que se pone a manotear asustada. –jajajaja es broma pero no lo hagas de nuevo.
-Tremendo susto me ha sacado Naoko, hoy no voy a invitarte helado.
-Ya te dije que fue broma.
-Tú y tus bromitas je.
-Hokuto, no deberías tutear tan confianzudamente a las personas.
-Subaru, has vuelto!!! –me abraza de nuevo para horror de la enfermera. –extrañaba que me reprendieras por algo que hago.
-No hay problema yo le di permiso además de esa forma no me hace sentir tan vieja.
-Pues yo quisiera verme como tú a los 45
-43 Hokuto chan.
-Ups jejejeje perdón Nao.
Y así de manera trivial su conversación continua y yo no he podido preguntarle nuevamente el porque estoy aquí.
-Hokuto?
-Eh? Que pasa? No ves que estoy a punto de darle la receta para preparar huevos caribeños.
-Puedo esperar niña, además ya he estado aquí por bastante tiempo y tengo que ir a ver si no me necesitan los demás pacientes.
-Que mal, pero vuelve en cuanto puedas aunque pensándolo bien ya que Subaru ha despertado creo que ya no será tan tedioso estar aquí jijijiji. Puedes tardarte de ahora en adelante
-Hay niña! –exclama saliendo con media sonrisa.
-Subaru, me da mucho gusto que estés de nuevo aquí conmigo. Sabes después que sufriste ese accidente pensé que sería el fin. Pero ya veo que en verdad eres muy fuerte. Ja, no me pongas esa cara, no es que te estuviera evadiendo pero no me agrada recordarlo, fue… muy doloroso. –mi mano se acerca hasta su rostro limpiando sus lágrimas que recorren sus mejillas enrojecidas mientras ella la toma y la besa. Yo también quiero llorar al verla viva, aquí junto conmigo esperando que no sea una ilusión solamente. Ya me he acostumbrado a las malas pasadas que nos ha jugado el destino
–Subaru, hermanito, no sabía que hacer quería morir contigo pero ahora… ahora quiero comenzar contigo, todo este tiempo que hemos estado separados he comprendido lo valioso que eres aunque siempre lo he sabido pero ahora lo siento más claro, es una extraña sensación de no quererme apartarme de ti por ningún motivo. Aunque para serte honesta, mientras estuviste “dormido” algunas veces te deje solo para ir a visitar a esa persona. La cual también ha llegado a ser muy importante para mí. Gracias a él…
-comienzas a llorar con más intensidad. –Gracias a su valentía… Tú estás de nuevo aquí… conmigo. Con nosotros.
-Nosotros?
-Si, la abuela tuvo que regresar por asuntos urgentes a la casa hace dos días pero también ha estado aquí la mayor parte del tiempo, ella se preocupa bastante lo sabes. Incluso dijo estar arrepentida de habernos dejado venir a Tokio.
-La abuela! –suspiro recordando su rostro.
-Aunque no lo diga frecuentemente sabes cuanto nos quiere y se preocupa. Eres su adoración me das envidia. –hace un puchero que me hace sonreír.
-Nada de eso.
-Ne Subaru, que tienes la sonrisa más bonita que he visto. Bueno, es que casi es igual a la mía jajajaja.
-Hokuto… qué paso en ese accidente y quien fue esa persona que me salvó. –me pongo serio.
-Fuiste… es decir fueron arrollados por un auto. –Me le quedo mirando sorprendido animándola a continuar. –al parecer fuiste a salvar a un gatito que se quedo atascado en una coladera. Estaba lloviendo y conociéndote seguramente al no poder sacarlo de ahí preferiste cubrirlo con tu cuerpo pero… según los testigos lo mismo pensó esa persona que se lanzó para cubrirlos a ambos y ahora él todavía se encuentra en coma.
“A eso se refería el doctor cuando dijo que me había recuperado antes que él”
-Donde está?
-Al principio estuvo en este mismo piso pero unos días después cuando paso el peligro de que perdiera la vida y quedo en coma, lo trasladaron a un hospital privado el Campus Clamp.
-Pero por qué?
-No lo sé, creo que sus familiares más cercanos… ja aunque ni tan cercanos. –Reprochó cruzándose de brazos- así lo decidieron.
-A que te refieres?
-Esos mentados “familiares cercanos” no se han parado en el hospital en todo este tiempo por lo que bueno… te he estado traicionando con él… jaja… no me mires así cuando ha estado la abuela yo me he ido a visitarlo casi a diario, después de todo es el héroe que salvó a mi querido Subaru.
-Ya veo. Pero me da gusto que lo hagas.
-Y a mi me da gusto verte sonreír continuamente… hermanito!!! –un abrazo delicado y un beso en su mejilla le trajo a la realidad recordando como en un sueño aquellas palabras.
-Que tú, Sumeragi Subaru también tengas esa segunda oportunidad
-Entonces… esta es mi segunda oportunidad.
-Eh? Decías pero claro que esta es una segunda oportunidad tonto.
-Ah si desde luego. –aclaró al escucharla que repetía lo que creía eran solo pensamientos. De pronto a su cabeza vino otro pensamiento que había pasado completamente de largo… el nombre de esa persona.
-Hokuto dime…
-Lo siento jovencitos pero es hora de que nuestro paciente favorito descanse un poco, han sido muchas emociones fuertes por hoy así es que lo mejor es que tu también te vayas a dormir un rato. –interrumpió una enfermera sonriéndonos.
-Pero Mina yo quiero estar con mi hermanito. –dijo consentidamente.
-Ve Hokuto, la verdad no quisiera que tu salud se viera mal por mi culpa.
-Pero que baka eres Sumeragi Subaru, vuelve a decir eso y te traigo el desfibrilador para que te de una buena recarga y no digas disparates… eres lo único que tengo y obviamente no te dejaré en paz ni a sol ni a sombra así es que mi salud no es importante.
-Tonta.
-Bueno bueno a descansar los dos.-Mina los reprendió.
-Ok. Pero vuelvo en unas horas –se acercó a Subaru y le beso en la frente.
-Te quiero mucho Hokuto gracias por darme este regalo de… verte de nuevo. –le susurro al oido.
-Uy que romántico y yo también te quiero. –se despidió llevándose una flor de Nadeshico que adornaba un florero a lado de la cama del chico que se le quedo mirando extrañado.
–Es de la suerte. –y guiñando un ojo se retiro.
………………………………..
Mientras tanto en el Hospital Campus Clamp unos minutos más tarde.
-Buenos días Hokuto, a que te debemos la visita a estas horas, siempre sueles venir más tarde.
-Ahhh Mai, es que no sabes!!!
-Que pasa por qué lloras? –la joven enfermera la tomo de los hombros algo preocupada.
-Mi hermano Mai, mi hermano acaba de despertar y estoy feliz!!! -chilló
-Sugoi! Felicidades por ustedes, esa es la mejor noticia que he escuchado en estos días, ya decía yo que hoy te ves radiante Hokuto.
-Yo Siempre. –afloro un puchero en su cara.
-Jajajaja bueno si, pero entonces me imagino que por eso has venido a darle la noticia tan temprano a tu paciente?
-Por supuesto y para eso he traído esto. –le enseña la flor
-Un nadeshico?
-Aja. Nos vemos –y como un rayo llega hasta la blanca y casi silenciosa habitación a no ser por las máquinas.
-Mira lo que te he traído... –tomo la mano que no tenía suero entre las suyas y contemplando su apacible rostro le regalo una lágrima que fue a parar a su mejilla. -hoy en la mañana la corte para mi hermano y sabes… –ahora muchas lágrimas rodaron. –él se ha despertado…Como me gustaría que pronto tú hicieras lo mismo… Sei.
Continuará
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