- Ese idiota... - Murmur.
Akira estaba sentado en una mesa del fondo en el Bar Still, Kengo y Aya an no llegaban, an era algo temprano. Kou
haba estado hace un rato, pero se haba ido para ms tarde volver. As que estaba slo con Master.
- Quin? - Pregunt Master.
- Nada, nada, estaba hablando slo.
- No podr verte pero noto cierta distraccin.
- No es nada, Master.
Es simplemente que no puedo dejar de pensar en l. Noche tras noche viene a casa desde hace ya un mes. Por qu ayer no? Estar bien? No es que me guste que venga... Pero debe avisarme si un da no lo har. Es un idiota.
- Akira-kun, te sirvo algo? Akira-kun?
- Eh?
- Demasiado distrado. Te pregunt si queras tomar algo.
- Ah. No, gracias, Master.
- No me quiero entrometer, pero si tienes algn problema, sabes que puedes contrmelo a m, Akira-kun.
- S, gracias, Master.
Akira solt un largo suspiro.
- Shi-Shirogane... l... volvi.
- Shirogane? Y entonces por qu ests t as? Pelearon?
- No. Es que, bueno, volvi hace un mes. Cada noche viene. Pero, ayer...
- Ayer no vino y crees que le pas algo.
- S... Joder, adems estoy molesto porque ha mentido de nuevo. Prometi que vendra da tras da.
- Tal vez tuvo algn inconveniente. Tal vez no fue su intencin mentirte.
- Lo s...
Minti. Minti cuando dijo que vendra, minti cuando dijo que no mentira, minti cuando dijo que me amaba. Y yo ca, dejando que me tocara, que me besara.
- Ests llorando?
- No! Master, claro que no. - Exclam y luego no se contuvo. Grandes lgrimas rodaban por sus mejillas. Estaba furioso y las lgrimas eran de coraje. Por qu? Shirogane slo quera su cuerpo?
- Akira-kun, confa en m.
- Yo... Shirogane... MeacostconShirogane! - Grit en una sla palabra.
- No te entend.
- Tuve sexo con Shirogane! Cada noche este ltimo mes.
Master se qued algo confundido. Trag saliva. Siempre tena un consejo. Pero sto era demasiado. No saba que decir.
Mientras, en la cabeza de Akira retumbaban sus propias palabras. "Sexo, sexo, sexo" Slo haba sido sexo? Sexo vaco? Sexo por calentura? No. Al menos no para l. En verdad necesitaba desahogarse, contrselo a alguien.
- Ayer no vino a casa. Y ni siquiera me avis. Y me haba prometido venir siempre.
- Disculpame si soy grosero, pero no crees que estas exagerando? Slo es una noche y ya sacas conclusiones ilgicas y algo estpidas. No significa que te haya abandonado. No saba que fueras tan sensible.
- No soy sensible! Las lgrimas eran slo de rabia! Odio que me mientan!
- Eso que ests sintiendo Akira-kun, es amor. Por eso te molesta tanto.
- No estoy... enamorado de Shirogane...
- S. O ests diciendo que... el sexo, fue solo sexo?
- No. …l me forz.
- Eres tan dbil que pudo forzarte por todo el mes? Eso es demasiado.
- Bueno, no lo hizo. …sto es tan vergonzoso.
Un aire helado le recorri la espalda. Gir en la cama y ah estaba Shirogane, observndolo con esos hermosos ojos azules que haran a cualquiera perderse en ellos. Se acerc a l y lo tom de la mejilla para besarlo. Bruscamente, Akira se volte. Despus de las primera noche nunca le haba negado un beso.
- Q-qu pasa, Akira-kun?
- Que qu pasa? -Grit levantndose de la cama- Dijiste que no volveras a mentirme!
- Todo esto por una noche?
- No es la noche en s! Estuve angustiado, no pude dormir bien! Cre que te haba pasado algo! O que me habas abandonado y solo te habas estado divirtiendo a mi costa!
- Pero yo... yo cre que no te importara. Siempre me dices que no quieres hacerlo, que no necesito venir siempre.
- Pero t sabes que...! - Se cort al instante dndose cuenta de que dira algo peligroso.
- Yo se qu? Que si quieres? Anda, dilo!
Akira se sonroj y baj la mirada.
- Justo en el clavo no?
- Por qu haces esto? Ests molesto?
- Claro que s. Cmo pudiste pensar eso de m. Dije que te amaba. Slo fue una noche, no es para hacer un drama. Eres tan egosta. Crees que yo no necesito que de vez en cuando me digas al menos que me quieres? Saber que te
preocupo? Yo siempre te trato tan bien y t slo...
- Te amo. Shirogane, te amo. - Interrumpi Akira.
- Akira-kun... yo...
- Shh...
Akira puso dos dedos sobre la boca de Shirogane, callndolo. Los quit y lo bes, pasando sus brazos tras el cuello del mayor. Shirogane estaba en shock, la sopresa era enorme, le pareca casi un sueo. Saliendo del trance, correspondi y lo abraz muy fuerte. Estaba tan feliz de haber escuchado a Akira decir eso. Las manos de Akira fueron a los botones de la gabardina del ojiazul, y desesperadamente los abri. La quit y ahora an faltaba quitar la larga camisa. Sac la corbata, se deshizo de los guantes, quit los botones hasta que termin. Sin dejar de besarlo, le desabroch el pantaln, y lo empuj hacia atrs, sentndolo en la cama.
- A-Akira-kun...
- Shirogane, t siempre ests preocupandote por m y porque lo disfrute. Pero hoy no. Hoy te compensar.
Shirogane se qued mirndolo sin entender. Pero lo entendi enseguida cuando Akira se inc frente a l y le baj el pantaln. Luego el boxer, y se los sac completamente. Akira acerc su boca a la ereccin del peliplateado. pero ste lo detuvo.
- Akira-kun, no tienes que hacerlo. Me es suficiente tenerte... no necesito ms.
- Shirogane quiero hacerlo. Te lo mereces...
Diciendo esto, se acerc a la -bastante grande- ereccin. La lami un poco y luego se la introdujo en la boca. Al principio, Shirogane solt un risilla notando la obvia inexperiencia del menor. Luego el ritmo fue subiendo y el shin empez a gemir, coloc su mano en la cabeza del rei y empez a guiarlo. Senta riqusimo dentro de la caliente y hmeda cavidad, era probablemente mil veces mejor de lo que haba deseado, era indescriptible, poda sentir su tmida lengua pasendose por toda su ereccin y las succiones... era el paraso! Haba deseado por tanto tiempo recibir sexo oral de Akira, pero saba que ste se negara si se lo peda. Lo estaba disfrutando y mucho. El final no estaba lejos.
- A-Akira-kun... vo-voy a... -Murmur e intent hacerse hacia atrs, pero Akira continu.- Me vengo... ya.
Akira lo ignor y continu, e incluso aumento el ritmo. Shirogane, incapaz de contenerse ms, estall en su boca.
- L-Lo siento... pero te avis.
La visin que tena Shirogane ahora fue simplemente excitante: Akira mirndolo lascivamente, relamindose, sudando y sonrojado por el calor. Se comenz a desvestir slo, bajo la impaciente mirada del ojiazul, hasta que qued completamente desnudo. Se le trep encima y lo bes, Shirogane lo recibi gustoso, aunque algo sorprendido de lo atrevido que estaba siendo Akira, el cual a horcajadas sobre el mayor, empez a frotar su pene contra el del Shin. La habitacin arda al igual que sus cuerpos. Ambos soltaban gemidos de placer con cada roce, y se fueron ahogando en una apasionada guerra entre sus lenguas, guerra que termin por la falta de oxgeno.
- Shirogane... yo quiero...
- Lo s, Akira-kun... - Dijo como leyndole la mente.
- No te molesta?
- No si eres t, Akira-kun.
Akira se posicion entre las piernas del Shin, y se dispuso a penetrarlo, pero luego record su primera vez y se detuvo.
Comenz a masturbar a Shirogane, para mojar sus dedos de los fludos que cubran su palpitante virilidad.
- Ah... Akira, para o me correr de nuevo.
Akira obedeci y se detuvo. Meti un dedo, estaba mojado, el segundo, tambin se resbal fcil, y luego el tercero. Los movi, los sac y los meti, los dobl, los gir. Estaba estrecho, no demasiado, pero lo estaba. Cuando fue suficiente, los sac y despacio comenz a penetrarlo.
- Ahh... Akira-kun...
Akira se estremeci con el primer contacto que tuvo con su entrada.
- Hzlo de una vez. - Dijo casi como una orden.
De nuevo obedecindo, le clav de una estocada toda su ereccin.
- Ahh!! -Solt Shirogane un grito cargado de dolor.- N-no te muevas...
- No iba a hacerlo. S lo que hago. Aprend del mejor...
Shirogane sinti ganas de abrazarlo y besarlo al escucharlo decir algo tan lindo. En verdad que Akira tan carioso daba algo de miedo.
- Ya... puedes moverte.
Akira comenz con el al principio lento vaivn, que conforme fue tomando ritmo, aument considerablemente la velocidad, entrando y casi saliendo, nunca abandonando por completo el clido interior de Shirogane, el cual estaba sincronizado en los movimiento de cadera con el otro.
- Shirogane... me vengo... ah...
- Ahhh... ta-tambin yo.
Akira se corri dentro, y simultneamente, Shirogane moj sus abdmenes con el blanquecino y espeso lquido. Akira cay rendido sobre su pareja y luego se besaron dulcemente, mientras respiraban con dificultad, jadeando, abandon el interior de Shirogane. …ste, rodo para quedar arriba. Con una mano, sostuvo las del castao sobre su cabeza, y comenz a lamerle el pecho y abdomen, limpiendo todo residuo de su semilla.
- Akira-kun, creo que ahora me toca a m. - Susurr tan sensual como siempre.
- E-Espera! -Grit sintiendo las manos del peliplateado en sus muslos- Djame al menos que respire un poco.
- S, s, no hay prisas... -Dijo metiendole los dedos- Humm, parece que no son necesarias las preparaciones, tu cuerpo est tan ansioso, aqu atrs me necesitas... - Deca tocando su interior mientras intentaba asomarse.
- N-no hagas eso! -Gimi sonrojado- No mires... no mires ah... es molesto... es vergonzoso!
- Est bien, Akira-kun, si no quieres no lo har. -Suspir para luego sacar los dedos- Entrar ya...
- S. Ra-rpido.
Realmente le gustaba Shirogane, besar a Shirogane, estar con Shirogane, aunque le costase admitirlo.
- Haa... estoy dentro... haa.
- Ahh... muvete ya... ahh...
Las embestidas comenzaron, certeras, rpidas, deliciosas. Akira enterr sus dedos en la nuca del ojiazul, sintiendo la placentera invasin. En la lista de prioridades de Shirogane, sin duda que estaba "verle la cara a Akira mientras lo hago mo", por eso le encantaban las posiciones donde estaban de frente, viendo esa preciosa cara sonrojada, con boca y ojos entreabiertos, perlada de sudor. Akira era tan lindo, tan sexy, tan guapo, tan violable, tan... tan Akira! Porque slo el provocaba eso en Shirogane. Lo llevaba al punto en que, si Akira no hubiera cedido, tendra que haberlo raptado y violado. Ok, no, porque no quera que lo odiara, pero algo tena que hacer. Y es que todo de l le gustaba, su cuerpo, su voz, su piel, su cabello, sus ojos, sus labios y sobre todo su forma de ser.
Segua embistindolo, hundindose hasta el fondo de su ser, poseyndolo como solo el saba, tocando donde slo l conoca, mientras Akira, enterraba ms sus dedos, y los enredaba con el sedoso y plateado cabello.
- Shiro-gane... ms... ahhh...
Cada embestida era un nuevo gemido y cada gemido excitaba ms al Shin, si es que era posible. Encajaban perfectamente, recibiendo dentro la presin suficiente para que la friccin los volvise locos.
- Shirogane... ya... ya voy a correrme... - Anunci aunque con la expresin en su rostro era realmente innecesario.
De nuevo sus abdmenes se vieron manchados de blanco, sta vez de Akira, mientras que dentro de ste, la semilla de Shirogane recorra las estrechas paredes. Era el tercer orgasmo de Shirogane y honestamente, el mejor, porque no cambiara por nada la sensacin de poseer a Akira, de ser seme.
El sol le peg en el rostro, anunciando un nuevo da. Se senta pegajoso, lleno de los fludos del da anterior. El calor del abrazo de Shirogane aumentaban esta sensacin. Shi-Shirogane? Se qued?
Algo confundido, Akira lo observ un poco. Estaba profundamente dormido, se vea tan pacfico, tan indefenso. No quiso despertarlo, as que se quedo mirndolo dormir, sin zafarse de su abrazo, acurrucndose ms en el pecho del mayor. Se senta tan bien estar as, que inconcientemente, se volvi a dormir.
- Akira-kun... ests dormido an? - Pregunt estando sentado a la orilla de la cama.
- Ah... no ya me despertaste... - Dijo sentndose en la cama a su lado.
- Lo siento...
- No, est bien. Yo... etto... Por...?
- Que por qu estoy an aqu?
- Pues... s.
- Te molesta, Akira-kun?
- No dije eso. Slo, tengo curiosidad.
- He decidido quedarme SIEMPRE a tu lado, Akira-kun!! -Exclam abrazndose a Akira- No es genial?
- S. -Dijo casi sin pensar- ... ...QUEEE? - Grit teniendo una visin donde el peliplateado no lo soltaba ni un segundo.
- No me digas que no te alegra? -Pregunt con el tono acosador, amable, y suave habitual- Despus de las cosas vergonzosas que me dijiste ayer...
- Cllate! - Claro que le alegraba. Y lo demostraba a su manera.
Shirogane ri amablemente.
- Pero... puedes quedarte? no te pasar nada malo? Y por qu hasta hoy?
- Oh, claro que no me pasar nada, he reunido energa suficiente. Y ms mientras no tenga que pelear. Y es ahora porque por fin te me has confesado abiertamente. Ya no tendr que torturarte yndome.
- Maldito... eso significa que te has estado burlando de m? Y me has hecho decir algo tan vergonzoso! Te matar! - Rugi mirando al peliplatedo con unos ojos que daban miedo, pero el sonrojo que tena le quitaba seriedad.
- Tranquilo, Akira-kun. Era necesario o si no jams te lo hubieras sacado del pecho, no crees?
- No haba necesidad.
- Claro que s... Me has hecho tan feliz. Adems no sientes un peso menos encima? No puedo esperar a que Aya-chan y los dems se enteren.
- Claro que no... bastardoo!!
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