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Todo por quien amo por Terry

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Notas del capitulo:

Bueno solo quiero decir que gracias por la espera y que ojala les guste

te extraño lobita

El japonés se encontraba en la Oficina del hermano de Lenalee, ya que este la había mandado a llamar, solo a él.



- ¿Qué quieres? -pregunto cortante y frio.



-Hay que genio tienes Kanda-kun-dice con una trompita-Bueno te tengo una nueva misión



-¿A donde tengo que ir?-pregunta con algo de interés sonriéndole con malicia, por primera vez...se sentía ansioso, ni el mismo sabia porque.



-Bien, veamos... según los rastreadores...mmhh tienes que ir a Alemania-dice Komui con una sonrisita tonta.



-Bien, partiré en seguida-dijo sin si quiera dejar que el chino pudiera terminar de hablar, ya que se estaba dirigiendo en dirección a la puerta.



-Oi, oi, con calma... ni siquiera te he dicho bien las coordenadas-dice todo sorprendido mientras que le entrega el archivo.



-Oh, es cierto...-dijo para luego tomar el informe aún con aquella sádica sonrisa en su rostro, se estaba emocionando por nada, pensó en esos momentos.



El chino suspiro y al fin lo dejó marchar.



-Ten cuidado Kanda-kun-dice el hombre antes de perderlo de vista, en el pasillo Allen caminaba ya más recuperado.



-Nos vemos, Moyashi...-dijo con aquella sonrisa para robarle un beso rápidamente y alejarse a paso rápido también del albino.



Allen se queda petrificado ante el beso... desde ese día que habían estado juntos no había habido un contacto de ese tipo.



-¿A dónde vas?-pregunta caminando detrás de él.



-Tengo misión...-dijo viéndole de reojo por sobre el hombro- nos veremos en quien sabe cuánto tiempo más...-susurro para luego irse del lugar.



Allen suspira ante esa respuesta...era extraño ver a Kanda tan emocionado...arto de estar encerrado el menor sale de la orden, al fin después de demasiado tiempo siendo prisionero y enfermo...



-Tykki... ¿no le esperarás conmigo?-dijo la menor con un leve puchero observando al Conde Mikk.



- No puedo, tengo trabajo...-dijo para luego revolverle los cabellos a la menor- dale mis saludos al chaval -dijo con una sonrisa para luego desaparecer del lugar.



Allen caminaba divertido mirando escaparates y comprándose unos pastelillos, no se imaginaba que tendría un encuentro.



-¡Oh allí esta!-dijo con una enorme sonrisa al verle y espero que saliera de la tienda de pasteles para tirársele encima-¡Allen-kun!-dijo con alegría.



-¡Wa! ah... Road... que susto me has pegado...-dice el ojiplateado mirando a la chica-Ah... gracias por todo-dice con una sonrisa.



-No tienes nada que agradecer, mientras tú y Tykki sean felices, yo también lo seré...-dijo soltando una leve risita llena de emoción.



Se pone todo rojo ante esas palabras.



-Eso es lo que quiero... pero... aun así... aun no es posible...-dice con algo de tristeza.



-Oh mi Allen-kun-dije esbozando una sonrisa llena de malicia y con una mirada de lo más perversa- Claro que hay una salida...-susurro viéndole a los ojos.



-¿Qué estás diciendo? ¿En verdad la hay?-inquiere el chico mirando a la menor mientras se sienta en una banca.



-¡Por supuesto!-sonriendo ampliamente con malicia total- la única manera de salir de todo este lio...es...-le mira fijamente aun sonriendo- matando al Conde



-Ya lo había pensado, pero... el punto aquí es... ¿Cómo matarlo?-pregunta mientras le da un pastelillo a la chica.



-Gracias-dice sonriente-Pues...quizás con un poco de veneno, suena fácil...aunque uno nunca sabe-dijo un tanto pensativa.



-Mmhh es verdad...pero el punto es...-de repente la observa-¿Estás diciendo que tú lo pondrías?



-Por supuesto, después de todo, soy la mayor de los Noah, ¿verdad? -observándole de reojo al mismo tiempo que come un poco del pastelillo.



…ste sonríe ante las palabras de la chica y come más animadamente.



-Nunca creí que oiría eso...pensé que todos los Noah aparte del catorceavo estaban siempre sujetos al Conde.



-Una cosa es estar sujetos...-sonrió con malicia- y otra muy diferente es querer ver felices a las personas que quiero -dice viéndole de reojo aún con aquella sonrisa.



Soltó un suspiro y le revolvió el cabello.



-Dime una cosa... ¿en verdad no te importa atentar contra él?-inquiere mirándola de frente con una sonrisa.



-No, no me importa en absoluto-dice con una enorme sonrisa viéndole a los ojos- por cierto, Tykki te mando saludos...-le guiña un ojo soltando una leve risita.



-¿Así que me manda saludos? Ah... es una lástima que no esté aquí en estos momentos-suspira poniéndose rojo ante las palabras-Mientras... tal vez podamos divertirnos un rato... ¿Qué te parece?



-Está bien-dice sonriendo ampliamente para luego abrazarle con fuerza- ¿y qué haremos, a donde vamos?-pregunto toda emocionada observando a todos lados.



-Mmhh veamos... ya conozco todo Londres... mmhh ¡ya sé! Hagamos un viaje a otro país, se que tal vez me retaran por esto pero... no me importa, quiero divertirme un poco -dice tomándola de la mano para ir a un lugar oculto.



-Me parece bien-dice pegando un leve saltito entusiasta para luego tomarle de la mano con una sonrisa de oreja a oreja- ¿A qué país nos vamos entonces? –sonriéndole.



-Vayamos a Alemania, siempre he tenido ganas de ir para allá... y en ninguna de mis misiones me han mandado-respondió el peliblanco con una sonrisa al tiempo que abría una puerta del arca.



-Me parece bien, vayamos en seguida entonces...-luego se pone algo pensativa- y ahora que recuerdo, creo que Tykki iba para allá...-ladea un poco la cabeza.



-¿En verdad? Oh tal vez podríamos encontrarlo-dice sin saber que también su compañero exorcista tenía una misión en esa parte del mundo.



-Sí, es lo más probable, aunque no me dijo porque se iba para allá...-dice haciendo puchero al mismo tiempo que se cruza de brazos.



-Ah no importa, seguro a de haber sido algo que le mandara a hacer el Conde-dice tranquilamente mientras la carga en brazos y cruzan la puerta del arca.



Mientras tanto, en otra parte se podía ver al Conde Mikk en el techo de una casa con unos cuantos Akumas a su alrededor.



- Madre mía, ¿por qué tengo que ser yo quien busque una maldita Inocencia?-se queja sentado.



Kanda caminaba tranquilamente siguiendo las indicaciones que el supervisor le había entregado, cubierto hasta la cabeza con una capa de viaje.



-Tsk, donde demonios esta ese maldito lugar-murmura



-Mmmh… así nunca podré encontrar ninguna Inocencia, además que ni exorcistas ha...-se quedo callado al notar al nipón de lejos- ¿Espadachín-kun? -pregunto observándole desde su posición.



El nipón siente que le observaban y gira la mirada, cuando descubre al Noah observándole.



-Noah...-susurra mientras empuña su Mugen.



Una enorme sonrisa maliciosa se apodera de sus labios.



-Esto es genial...-susurro para luego sonreír sádicamente- ¡Vayan! -mando a 5 akumas de nivel dos y a uno de nivel tres hacia el japonés.



-Tú... me las pagaras...-susurra antes de activar su Mugen y de exactos movimientos partirlos en dos-Ven acá cobarde-le reta el exorcista.



-No quiero mancharme las manos aún-dijo sonriéndole desde el techado al mismo tiempo que el akuma de nivel tres se acercaba rápidamente al nipón.



-Tsk-se queja mientras comienza a pelear con ese nivel tres... ignorando por un momento la presencia del Noah-Esto me lo pagaras...



El moreno le observa desde lejos con una sonrisa de oreja a oreja.



-No pensé que nos veríamos tan pronto...-susurro para sí mismo más que para el peli azulado riendo entre dientes con malicia.



Kanda peleaba con habilidad, esquivando y atacando, su único objetivo era ese Noah...no se la dejaría tan fácil con su Moyashi...



-¿Qué sucede?-pregunta un tanto burlón sacando algunas Teases haciendo que vayan en dirección al samurái-¿No puedes contra ese Akuma?-pregunta con malicia viéndole con aquella sádica sonrisa en su rostro.



Una venita salta en su sien al tiempo que activa la segunda invocación de su inocencia, no se dejaría humillar por ese Noah...



-Vaya, veo que lo he hecho enfadar-dijo con una enorme cínica sonrisa en su rostro aunque en su mirada podía notarse un brillo de despreocupación y maldad.



Al fin, después de mucho batallar con ese akuma y las Teases se dirigió de un salto hasta donde estaba el Noah.



-Te partiré en cubitos...



Su sonrisa se ensancho ante las palabras del menor y sin dudarlo hizo que sus Teases se posaran en sus brazos, haciendo que se volverían aquellos rayos para comenzar a pelear con el espadachín.



-Ya lo veremos-dijo sonriéndole.



-No te dejare que te lo quedes...-dijo entre dientes mientras lo atacaba sin piedad, buscando el herirlo.



-¿Qué me lo quede?-pregunto alzando una ceja un poco sacado de onda, ya que no tenía idea a lo que se estaba refiriendo-¿Qué no me quede con qué?-dijo sonriéndole con maldad mientras esquivaba cada uno de los ataques de la espada del japonés.



El nipón no respondió, ya no le diría más... solo lo haría puré, solo lo desaparecería del mapa para así quedarse él con Allen.



Este solamente se dedicaba a esquivar o protegerse de los ataques del exorcista, ya que no estaba peleando en serio, pero cuando sintió que una de las espadas le rozo la mejilla haciéndola sangrar, puso un semblante de lo más serio.



-Omae... (tu)-dijo amenazante para luego de un rayo tirarlo lejos de su vista.



Las heridas recibidas comenzaron a curarse rápidamente, eso no lo detendría, peores dolores había sentido.



-Parece que ahora si estas enserio...



-Pagarás caro por ese corte-dijo aún con su semblante serio y mirada asesina posada sobre la figura de Kanda, para luego volver a lanzarle varios rayos a la vez- ¡Te dejaré igual de herido como lo hice con Parche-kun!-comento con malicia soltando una macabra risa.



-Pues no te será tan fácil-dijo seriamente comenzando con el contra-ataque, mirándolo con seriedad y empuñando su Mugen, liberando la tercera restricción.



Se borra en seguida su sonrisa y luego vuelve a reír.



-jajajajaja  no me vas a intimidar con eso, ¡prepárate, Espadachín-kun!-dijo lanzándose de nuevo al ataque.



Mientras tanto, en otra parte de ese mismo país, Road y Allen caminaban por un pueblo, comprando golosinas y andando como si no fueran enemigos.



-¿Y a dónde iremos ahora?-pregunta llena de emoción agarrándole de un brazo con una enorme sonrisa de oreja a oreja- ne, ne...-dice juguetonamente.



-Mmhh esa es una buena pregunta... mmhh parece que hay un circo por aquí cerca... podríamos ir a ver la presentación-dijo con una sonrisa recordando viejos tiempos.



-Eso me trae recuerdos...-susurro con una leve sonrisa y la mirada posada hacia el frente-¿y dónde podría haber un circo cerca de aquí? -observo todo el lugar.



-Veamos... según esta propaganda... es por ahí-señala con el camino.



-Vayamos entonces-le tomo de la mano y luego por alguna razón se quedo helada unos segundos con el corazón latiendo con fuerza- ¿Qué fue eso?-pregunto en un susurro posando su mirada en el suelo.



-Allen se queda quieto, sintió un sofoco y miró a Road, el Noah de su interior estaba alterado, cuando notó a la lejanía una estela de polvo.



-¡Tykki!-grito repentinamente corriendo a toda velocidad hacia el lugar donde había ocurrido la explosión, obviamente fue junto con el albino.



Allen y Road llegaron justo cuando los otros dos estaban.



-Tykki...-por puro impulso el menor activo a su Crown Clown para ponerse en medio de ambos.



-¡¿Qué mierda estaban haciendo?!-pregunto exaltada acercándose al Conde Mikk el cual tenía bastante heridas en su cuerpo y botaba algo de sangre por la boca, aunque al parecer no era nada grave.



-¡¿Moyashi?!-pregunto Kanda, también se podían ver varias heridas en el cuerpo del nipón.



-Allen...-susurro Tykki observando con sorpresa al menor.



-¡Son unos grandísimos idiotas! ¡Eso es lo que son!-exclama con seriedad y enojo mientras mira a uno y a otro.



El moreno no dijo palabra alguna solamente se dedico a observar primero al albino y luego a Road, quien también le regañaba con la mirada.



-¿Pero qué mierda dices? ¡Si él me ataco primero! -se quejo el japonés viendo a su compañero.



-Yo no te estoy echando la culpa a ti Kanda... pero... pero... ¡¿si te mataban?! ¡Maldita sea Kanda tu sabes lo que siento! y tú Tykki... solo harías mas difícil la posibilidad de estar juntos...



Ambos se quedaron en silencio.



-Tch-fue la única respuesta por parte del espadachín y el moreno solo bajo la mirada un tanto pensativo.



-¿y qué tienen planeado?-pregunto Tykki mirando a Road.



-Moohh  me pregunto si tienes derecho a saberlo después de este jaleo-dice ella con ojos entrecerrados.



Parpadea un par de veces.



-Oi, oi...no seas así conmigo, Road...-viéndole con una enorme gotita cayendo por su sien- ¿chaval? -miro al ojiplateado, esperando que este si le respondiera.



Allen mira al Noah y suspira.



-Pues estoy de acuerdo con Road, además un plan de dos es mucho más fácil de ocultar y llevar a cabo-responde mientras que sonríe a la chiquilla.



Soltó un largo suspiro al mismo tiempo que se rascaba la nuca con algo de fastidio y ponía un cigarrillo entre sus labios; guardó silencio y le dedicó una mirada peligrosa al japonés, el cual le observo desafiante, disimuladamente.



Una venita se formó en la sien del peliblanco activo su inocencia y con ella les dio un golpe en la cabeza a cada uno.



-¡Contrólense ya ustedes dos!-dijo serio.



-¡Pero si no hemos hecho nada!-dijeron al unísono sobándose en donde el menor les había golpeado a ambos.



-Estás paranoico por nada, Moyashi-dijo desviando la mirada frunciendo el ceño.



-Paranoicos por nada...-murmuro el pequeño mientras que los mira-"Kanda no debió retar a Tykki... pudo morir..."-se decía mientras que suspira.



-Pues paranoicos o no, se debe andar con cuidado, no dejare que nada ni nadie estropee la felicidad de Tykki y Allen-dice Road mirando al espadachín y luego a Tykki-Y eso también te incluye a ti Tykki.



-¿Pero por qué me dices esto a mi si fue …L quien empezó todo esto?-dijo haciéndose la victima mientras comenzaba a fumar con una venita en la sien.



El espadachín ya no dijo nada más, solo se dedicaba a mirar al Noé en silencio.



-Como sea, los dos son culpables y punto-dice la chiquilla mientras infla las mejillas-Será mejor regresar al arca-dice seria-Allen, después te diré que haremos y cuando...



-¿Ah? Yo no puedo regresar, tengo una misión que cumplir...-dijo el Conde Mikk posando su mirada sobre la menor.



-Yo también tengo misión-dijo con seriedad el nipón observando al peliblanco.



Allen y Road se miraron.



-Eso es un gran problema...-dijeron al unísono.



-Seguro que tiene que ver con la inocencia-dice Allen mientras mira a uno y a otro.



-¿Qué más si no?-dijo con tono sarcástico el pelilargo viéndole con una venita en la sien.



-Que lata me da todo esto...-susurró para sí el ojimiel posando su mirada en el cielo.



-¿Cómo solucionaremos esto?-se pregunta en voz alta el menor.



-Mmmh pues por mí que los exorcistas se queden con la inocencia-dice Road-A fin de cuentas... si todo sale bien nosotros ya no la necesitaremos-añade la pequeña.



Suspira con algo de fastidio Tykki, pero no dice nada, a fin de cuentas, ni idea tenia de lo que hablaban.



- Entonces vete, Espadachín-kun, tienes una Inocencia que recoger -sonrió con malicia



-Tch, ya verás...-dijo amenazante viéndole, ambos echaban chispitas al verse a los ojos.



-Quieren otro golpe de mi Crown clown ¿verdad?-dice con una sonrisa demoniaca, como cuando juega cartas



-A mi no me das miedo, Moyashi-dijo dándole la espalda- no tengo tiempo que perder con ustedes, ya nos veremos Noah…-dijo sonriendo.



-Je, cuando quieras...-le respondió el otro viendo de reojo al ojiplateado.



Suelta un suspiro de fastidio antes de patear una piedra con ganas de ahorcar a ambos.



-Moohh yo iré a acompañar a él-dice Road acercándose a Kanda para tomarlo del brazo con una sonrisa perversa a Tykki.



El Noah no puede evitar sonreír divertido ante la manera de actuar del menor y luego posa su mirada sobre la menor.



-¡No te le acerques tanto, Road! Es un perro rabioso...-dijo buscando provocar al japonés.



-¡¿Qué has dicho?!-dijo viéndole por sobre el hombro con una enorme vena en su sien.



-Ah no le hagas caso, mejor vamos, vamos-dice la niña antes de darle un beso en la mejilla de modo pícaro.



-Tykki...-le mira Allen con ojos entrecerrados.



-¡Tch!-da como respuesta para luego desaparecer junto con la Noah de los Sueños del lugar.



-¿Qué pasa, chaval?-pregunta con expresión cínica viéndole con una enorme sonrisa de oreja a oreja.



-Que eres terrible...mira que andar provocándolo así... después de que Road y yo te dijimos que debías comportarte... aahh  y ese también...



-Solo estoy jugando...-dice tratando de calmarle- es él quien se enfada y eso no es problema mi...-no alcanza a terminar su frase ya que vomita un poco de sangre.



-¡Tykki!-exclama antes de acercarse y sujetarlo-Tenemos que revisarte...-dice con preocupación mientras limpia la sangre.



-Estoy bien...es solo el impacto, ya verás que estaré bien-dijo en un susurro con los ojos entre cerrados sintiéndose algo mareado.



Allen no responde nada solo hace que se siente en el suelo comenzando a quitarle la chaqueta y la camisa para revisarlo.



-Aún así...ustedes dos...pudieron matarse en esa riña...-dice con voz triste.



-No pensé...que era tan fuerte...-sonríe débilmente manteniendo su mirada posada en la nada misma mientras tose un poco.



-Tonto...no debes subestimar a los exorcistas...-dice comenzando a curarle un poco, lo mejor que puede-Si algo malo te pasa...yo me muero...no puedo ya vivir sin ti...-dice acariciándole el rostro.



-No seas ridículo...estoy vivo, aún, y no moriré, no en manos de ese estúpido...-dice mosqueado cerrando los ojos unos segundos- solo...necesito descansar...-suelta un largo suspiro.



Recarga la mejilla en el desnudo pecho del Noah y se muerde los labios, por su mente pasaba la duda de porque esa pelea...había sido mucho más violenta que otras.



-¿Que no sea ridículo? ¿Qué pensarías tú si yo estuviera todo golpeado peleando con los gemelos?



Abrió los ojos de golpe ante las palabras del menor.



-No digas eso, yo siempre supe que tú serias capaz contra ellos...son solo...unos críos inmaduros…-susurra abrazándole.



-Pero estaría cometiendo un error... al solo pensar que son unos inmaduros...y si me llego a confiar puede irme mal-responde mientras le da besitos en el pecho.



Se queda callado unos segundos, tenia razón, era verdad...no debía subestimarlos tampoco.



-Tranquilo, estaré bien...solo...quédate a mi lado...-susurro apretujándole un poco.



-Aquí estaré...no te dejaré nunca...te amo Tykki-dice antes de besarlo acariciándole el cabello.



Corresponde el beso de la misma manera tomándole de la cintura para atraerlo un poco más a él, cerrando los ojos.



Había tenido mucho miedo al verlos peleando, pues sabía que Kanda no dudaría en matarlo...sabía los sentimientos de Kanda...comienza a acariciarle el rostro mientras se siente cerca a él.



Tykki rompe suavemente el beso.



-Aunque...no entendí del todo algo que dijo mientras peleábamos...-dijo repentinamente el moreno viendo los ojos del menor.



-¿Algo que dijo?-inquiere mirándolo mientras lo observa.



-Si, dijo algo como..."No voy a dejar que te lo quedes"-dijo parpadeando un par de veces- aún no comprendo a que se refería...-dice rascándose la nuca despreocupadamente.



El menor se quedo de piedra ante esas palabras, ahora toda duda quedaba desvelada...Kanda estaba peleando por él.



-Bueno...él...él sabe que estoy contigo...tal vez cree que no eres de fiar...-dice tragando saliva.



-¿Aahh?-le mira un tanto incrédulo-¿Así que es eso?-ahora le ve de reojo con una mirada bastante sospechosa.



-Supongo...realmente nunca he entendido el modo de pensar de Kanda...siempre ha sido extraño como me llevo con él-suspira para luego recargarse.



-Según lo que me das a entender...-dice pensando lo que le había dicho-¿Puede que Espadachín-kun guste de ti?-pregunta viéndole con una expresión tranquila, aunque con una mirada penetrante.



-Podría ser... no es nada seguro...-responde el menor cerrando los ojos-Aunque eso le daría sentido a que te dijera eso-suspira.



-Mmmh… quien sabe...-dijo un tanto pensativo limpiándose la sangre de los labios, sintiéndose un poco mejor- aunque si es así, que se muera...-comenta sonriendo sádicamente.



-¡Oi! ¿Cómo que se muera? No olvides que a fin de cuentas es mi camarada...-dice con un puchero-Además...lo único que debe importarte es que yo te amo a ti-responde mientras suspira



-Aún sabiendo eso...-dice observando el cielo unos segundos- prefiero eliminarle de la lista -dice con una sádica sonrisa en el rostro soltando una carcajada.



Allen abre los ojos ante las palabras del hombre y le da un leve golpe en el pecho.



-No puedes, no puede, además, parece que al conejo le gusta... y si es así... seguro lo conquista-dice mordiéndole la mejilla.



-Solo decía...-susurra sobándose el lugar donde le habían golpeado a pesar de que no le haya dolido- ¿Conejo? -parpadea un par de veces viéndole algo confuso- ¿Quien es Conejo?



Se la piensa antes de nombrarlo al recordar que quería matarlo.



-Pues... mmhh Bookman Jr.



-Oh así que a Parche-kun le gusta Espadachín-kun -parpadea un par de veces observando las nubes del cielo- Que pequeño es el mundo...-dice sonriendo cínicamente.



-Sí pero así no tienes que matar nadie-dice antes de abrazarlo y besarlo apasionadamente-Solo debemos pensar en nosotros.



-Sí, tienes razón, no tengo porque calentarme la cabeza con ese exorcista, si te tengo junto a mí...-le apretuja con algo de fuerza para luego volver a besarle en los labios.



Mientras tanto... en el camino hacia la inocencia... Road seguía colgada del brazo del exorcista mirándolo con una gran sonrisa.



Sin embargo, para el nipón no le hacía mucha gracia aquella situación, uno; porque son enemigos y dos; porque nunca le ha gustado que se apeguen tanto a él.



- Oi, suéltame...-dijo amenazante.



-No quiero-dijo ella con descaro-Hueles a caramelo... de limón-dice ella con una sonrisa.



-Tch-una vena palpitante dio aparición en su frente mientras se mordía con brusquedad el labio inferior y de un rápido movimiento saco su espada y puso la punta de esta cerca del cuello de la menor.



-Con eso no me mataras-dijo ella sacando un caramelo para comerlo-Mmhh no deberías ser tan enojón...



Varias venitas más dieron aparición en su sien y guardando su espada se dispuso a seguir su camino en silencio, dándole la espalda a la menor.



-Eres lindo...es una pena que seas tan enojo... y que solo te vayan los hombres...-dice ella en un susurro caminando a su lado.



-¡¿Nandato?!(Que has dicho)-dijo viéndole de reojo con un notorio tic nervioso en su ceja izquierda, ¿cómo mierda sabia ella eso?



Soltó una risita al ver la reacción, sin duda le había atinado al clavo.



-Parece que tengo razón ¿verdad?-dice ella antes de dar un brinco y robarle un beso.



Se queda de hielo unos segundos sonrojándose de sobre manera.



-Es-estas realmente loca...-dice para luego apresurar el paso, huyendo de la Noah de los Sueños.



 -Oi, no me dejes aquí-dice ella corriendo detrás del chico, divertida de la reacción-¡Vamos lindo neko-tan!-exclama divertida antes de brincar y caerle en la espalda con cierta suavidad.



-¡Estás loca, niña!-grito corriendo más rápido, y cuando sintió el peso de la menor en su espalda frunció levemente el ceño y comenzó a correr más rápido, al mismo tiempo que se sonrojaba más.



Road rió  suavemente en el oído del mayor, de un modo que podría decirse coqueto.



-Eres lindo Kanda...-susurra aferrada sin soltarse-Moohh creo que hemos pasado el punto donde pasan cosas raras...



Le observa de reojo.



-¿Qué quieres decir?-pregunta sin entender del todo a que se refería la menor con aquellas palabras y volvió su vista al frente, recordando que no tenía tiempo para "tontear".



-Pues que creo que tu preciada inocencia está por allá...-señala un torbellino-¿O me dirás que es muy normal que haya un tornado en esta región?-dice para después reír entre dientes.



Posa su mirada sobre el lugar que le señala la menor y sin si quiera dudarlo corre hasta allá, tomando a la Mugen en sus manos, hasta que algo lo deja casi de piedra con un paro cardiaco.


 


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