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Engaño ficticio por miiku-sama

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Notas del capitulo:

Hola!!!!!!!!! aqui esta un one-shop es un !Akiharu x Takuya!

Miku: Ya termine de limpiar la cocin,a el baño y bañe a tu perra, alguna otra cosa?

No! xDDD Gracias Miku, por eso te adoro :')

Miku: ahora quiero mi recompensa :D

Aqui esta tu pizza!

Miku: Y es de peperoni delicioso - w -

Me vas a dar =')

Miku: Bien, mientras llega el pizzero vamos a leer!

SI! *0*

Engaño ficticio

Era de mañana y en un departamento, nuestros protagonistas dormían plácidamente en cama, ambos desnudos, lo único que los tapaba era aquellas sabanas blancas y delgadas. Uno de los chicos despertaba, tenía  el cabello café oscuro mientras que el otro lo tenía castaño claro; el chico salió de la cama, cubierto por una sabana, fue directo al baño a tomar una ducha mientras que el otro aun dormía en aquel mueble desordenado por la noche anterior. Habían hecho lo que toda pareja hacia.

El menor entró en la regadera, sintiendo como las gotas calientes caían sobre él como si de lluvia se tratase, se puso el shampoo y después el acondicionador, se pasó el jabón por todo el cuerpo quitándose el sudor que lo tenía completamente invadido.

-Debiste haberme esperado.-Habló una voz en la puerta.

-No te quería despertar, te mirabas tan tierno.- Confesó el de la regadera quien aún seguía bañándose.

-Creo que me miraría más tierno si estuviera contigo en la regadera.- Rió un poco y después se quitó la sabana que traía en la cintura y entró con él.-Dame el jabón, yo mismo quiero limpiarte.- Pasó su lengua por sus labios, le encantaba hacer eso. Tomó el jabón y empezó a pasarlo por todo su cuerpo, poco después de sorpresa, lo puso cerca del miembro de su pareja haciendo que este se excitara un poco.

-A-Akiharu, de-detente estamos e-en la ducha. -Akiharu no hizo caso y empezó a mover el jabón por todo su miembro, le encantaba torturar a su amante- Mi-Miku –susurró. Solo le decía así cuando se excitaba y cuando estaban a punto de hacer el amor, por que así se llamaba, no solamente era sexo, no para ellos.

-Taku-chan -susurró en su oído- Quiero repetir lo de anoche, aquí y ahora.- dijo Akiharu como suplica.

-Y-Yo también.- Confesó.

-Pues…no podremos hacerlo en la cama porque ya estamos mojados.- Sonrió, Takuya lo ignoró y se sonrojó, Akiharu lo miro triunfalmente.

Sin permiso alguno agarró a su pareja y lo cargó, obligándolo a que lo rodeara con sus dos piernas y brazos. Akiharu lo penetro de solo una embestida causando que Takuya ahogara un grito de placer, luego el castaño claro, lo empezó a embestir lentamente pero en cada segundo las embestidas subían de nivel, más rápidas y mas penetrantes para el menor que empezó a susurrar cosas poco entendibles, ya que los decía muy agitadamente.

-Me-Me voy a correr.- Avisó el menor.

-Yo-Yo también me voy a co-correr.-Y así, ambos se corrieron al mismo tiempo, Akiharu dentro de el y Takuya afuera asiendo que a ambos les cayera semen.

-Como siempre, eres delicioso.- Probó aquel pegajoso líquido y el de cabellos cafés se sonrojo.-Bien, creo que tendremos que enjuagarnos.- Salió de el lentamente dejando salir un poco su esencia del ano del menor.

-Y tú, sigues sin tener compasión, Miku- Lo último el mayor lo escuchó y sin previo aviso beso a su pareja, era tan feliz estando con él, que no querría otra cosa.

Ambos salieron de la ducha y se cambiaron. Akiharu tenía que irse a cambiar ya que necesitaba ir a la oficina con su padre, mientras que Takuya iría a visitar a su madre a su trabajo, ambos eran hijos de familias muy prestigiosas en el mundo de los negocios en Japón, así que algún día ellos tomarían el lugar de sus padres.

Se cambiaron como siempre lo hacían en las mañanas, Akiharu se puso su traje y Takuya como el joven que es, se puso una camiseta de manga larga con un chaleco de cuadros color crema con blanco y un pantalón color blanco, se peinaron y salieron. Akiharu se ofreció a llevarlo con su madre ya que de camino le quedaba “según el” pero solo era un pretexto para estar con él.

 Subieron al carro de Akiharu y se fueron, como era de esperarse, desde temprano había tráfico ya que era la hora en que todo mundo entraba a trabajar. En el camino el menor solo le contaba lo que ha estado haciendo en la universidad, se dedicaba a la carrera de arquitectura ya llevaba 2 años así que aun le faltaba mucho.

Sin darse cuenta llegaron al destino de Takuya, estaban enfrente de un edificio, era algo así como de 5 pisos, pero era muy ancho el lugar, se notaba que venía de padres algo ricos.

-Nos vemos a la hora de comida ¿sí?-pregunto Takuya quien salía del carro pero una mano lo detuvo.

-Quiero mi beso. -Aquella petición hizo sonrojar al menor

-sí, si.-Hablo resignado, no quería que pasara lo de la ultima vez…

 

-Quiero mi beso.-Ordeno un Akiharu chibi.

-Tengo prisa así que….-No termino ya que Akiharu cerró la puerta y se fue a toda velocidad

Después de eso, no le hablo por 3 días. Si que era un berrinchudo pero aun así lo quería.

 

Le dio un corto beso y se alejó del carro entrando al edificio, Akiharu espero tantito y se fue al trabajo.

Akiharu solo le ganaba con 4 años así que no había mucha diferencia “según ellos”. Se fue al trabajo y mandó a estacionar su carro que lo había dejado en la entrada, era un edificio de 10 pisos, su familia era de una de las empresas de reciclaje de Japón, la basura la convertían en energía para la tierra así que hacían un beneficio a todo el país.

Fue directamente al décimo piso y miro como su secretaria lo saludaba educadamente, pero  este como de costumbre la ignoraba completamente, su secretaria era de más o menos 30 años, cabello largo un poco más arriba de la cintura, lacio lo traía, tenia ojos cafés como cualquier otro persona, sin embargo tenía algo que toda mujer envidiaría, el cuerpo escultural.

Entró a su oficina y un mundo de papeles lo esperaba, aunque hay que admitir que cuando miraba esos papeles se estresaba, pero se acostumbraba rápido a ellos y dejaban de ser molestos para él, así no se estresaba tanto como todos pensaban.

Paso horas y horas en su oficina revisando un conteo enorme de papeles que tenía que ver hasta el último detalle, no vaya a hacer que firme algo que no. Pasó el tiempo y para su sorpresa ya eran las 8 de la noche así que era tiempo de salir. Iba por los pasillos y se encontró a Sano y Yuuki quienes hablaban de quien sabe qué, pero algo que escucho no le agrado mucho.

-Sí, el otro día me dijo que paso la noche con Takuya, dijo que tener sexo con él era lo mejor, dijo Teruki que…-pero no escucho otra cosa porque solo paso por ahí, rodarían cabezas esta noche. Siguió caminando a paso apresurado mientras Sano seguía hablando- Akiharu le había dicho eso.- Aquello no lo escuchó.

Akiharu con el alma partida salió a matar a su novio, digo fue a casa ya que su novio estaba ahí.

 --

-Bien, estos son los resultados de los análisis que se hizo señor Kimura.-Mencionó un doctor a su lado estaba la enfermera y al lado de la enfermera no había nadie. A un lado de Takuya estaba su madre que se había tomado la molestia de acompañarlo al doctor ya que no tenía nada que hacer, por el momento.- Felicidades, tiene 10 semanas de embarazo. -Takuya sonrió y lagrimas estaban por caer a sus mejillas, estaba tan feliz que se lo podía gritar al mundo.

-Felicidades hijo.-Su madre lo abrazó para luego felicitarlo, su hijo correspondió el abrazo.

-Gracias doctor.-Salieron del Hospital y Takuya estaba muy feliz, iba a tener un bebe del ser que más ama.

-¿Te llevo a casa?-pregunto su madre.

-Sí, le tengo que dar la noticia a Akiharu.-Su felicidad se notaba en la cara, pero muy pronto esa felicidad se esfumaría ¿Para siempre?

Se fueron en el carro de su madre, y un chofer iba conduciendo, Takuya iba atrás con su madre y esta solo le decía lo que le iba a comprar a su nieto o nieta. Llegaron al departamento y Takuya se despidió de su madre, miro como se iban y luego entró a su hogar.

-Ya llegue.-Avisó Takuya.

-¡¡¡COMO PUDISTE TAKUYA, COMO PUDISTE ENGAÑARME ASI Y LO PEOR, CON MI MEJOR AMIGO!!! –Gritó desesperado mientras se acercaba a su pareja y lo tomaba de los hombros.-COMO PUDISTE. -estaba llorando.

-Pe-¿Pero de qué hablas? -Estaba muy confundido, ¿De que rayos hablaba su novio?

-¿Te acostaste con Teruki, no? -preguntó y el mismo respondió la pregunta.-Claro, fue una de esas noches ¿no? En las que decías que te ibas  ir con tu madre a dormir.-Estaba furioso y Takuya empezó a temblar.

-Yo nunca te he engañado, y si lo hubiera hecho, ya te hubiera dejado. Te amo, no entiendo de donde sacaste semejante idiotez. Yo solo he hablado con Teruki-san 3 veces.- Mencionó, estaba llorando, como se atrevía a dudar de el.- Ve y pregúntale. -Estaba enojado.-Y ni siquiera somos amigos él y yo, ni siquiera nos hablamos, si quieres revisa mi celular,  ¡no hay ninguna estúpida llamada!.-Gritó, Akiharu solo se quedo pasmado.

-Sano le dijo a Yuuki que tú te habías acostado con Teruki, y yo los escuche.-Habló el castaño.

-Eso es mentira, yo nunca sería capaz de…Sabes, no vale la pena darte explicaciones si ni siquiera vas a creerme, voy a recoger mis cosas. Me voy.-Habló este y se fue al cuarto a recoger sus cosas.

-Me voy a ir y cuando regrese espero que ya te hayas marchado.- Salió del departamento y dejo a Takuya solo, llorando sin ningún tipo de consuelo.-Como rallos pudo pasar esto.-Se maldecía con todo.-Como pude ser tan tonto de dejarme engañar.- Empezó a llorar el también, se sentía muy mal y se fue al único lugar donde sabía que podía olvidarse de todo.

--

Adentro del departamento estaba un Takuya saliendo con una maleta muy ancha.

-Adiós Akiharu, lástima que no vayas a conocer a tu hijo.-Tenia los ojos hinchados de tanto llorar, le dolía saber que su pareja había dudado y más, que ni siquiera pudo decirle que esperaba un hijo de él.

Tomo un taxi y se fue a la casa de su madre.

Se fue a la casa de su madre, quien al mirarlo llegar con maletas se sorprendió, se suponía que horita tenían que estar festejando la venida de su bebé.

-¿Qué pasó Taku-chan?-pregunto su madre preocupada.

-Alguien le dijo a Akiharu que yo lo estaba engañando con Teruki, su mejor amigo.-Empezó a llorar “otra vez”.

-¡¿Cómo?! -Preguntó la madre desconcertada.

-Parece ser que un empleado de Akiharu estaba platicando con Yuu-Yuuki y los escuchó diciendo que Teruki-san el mejor amigo de Akiharu se acostó conmigo.- Soltó la maleta y cayó de rodillas.- Nunca pensé que Akiharu fuera a dudar de mi, por todo lo que pasamos, ¡DUDO DE MI!- Las lagrimas salían y salían de sus ojos, se sentía destrozado.

-Hay hijo.-Se acercó su madre y lo abrazo.- Akiharu cometió un error, a lo mejor, esos chicos dijeron otra cosa y Akiharu entendió mal.- Trato de animarlo.

-Pero eso…El no tiene porque desconfiar así, siempre le demostré el cuanto lo amaba.

Y es que no estaba mintiendo, siempre le demostró su cariño y amor, siempre estaba con él en las buenas y en las malas. Takuya siempre viajaba a todas partes con Akiharu desde que se hicieron pareja y es que al principio ambos padres estaban en desacuerdo con el compromiso pero la pareja fue fuerte y convencieron a ambas familias hasta llegar al punto que ambas se hicieran amigos del yerno.

-Vamos.

-¿A dónde?

-A tu cuarto hijo, no pensaras quedarte aquí ¿o sí?

Tan solo asintió con la cabeza y subieron al cuarto del futuro papá. Un joven quien era un guardia de la casa llegó y se ofreció a llevarle las cosas. Al llegar al cuarto de Takuya pudo mirar que no era un cuarto muy chico, estaba tan grande que parecía un hotel. Las paredes eran color azul con rallas blancas junto con un juego de muebles color blanco, la cama era muy ancha, parecía matrimonial, que estaba cubierta por una colcha blanca con rayas azules, unos cajones para cada lado adornadas con una lámpara en cada una junto con un pequeño florero con flores blancas.

-Sigue igual.

-Desde que te fuiste lo quise dejar como lo dejaste, aun que lo único que se hace es quitar el polvo y claro, se ve limpia por que tú siempre fuiste muy ordenado.

-Y lo sigo siendo.- Sonrió, su madre siempre sabía como animarlo.

-No te preocupes, cuando Akiharu se dé cuenta de esa mentira seguro y viene a buscarte.-

-Gracias madre.-

-Hijo, no quiero dejarte pero iré a la cocina a pedir que te hagan algo.-

-No te preocupes madre, ve, desempacare mis cosas.

Y su madre salió de aquel cuarto, aun con preocupación.

Takuya tan solo miro alrededor de su cuarto y miro que era verdad, seguía igual que antes.

-Akiharu…

--

En un bar cerca de la estación de tren se encontraba Akiharu ahogado en cerveza, en la barra había por lo menos 18 latas de cerveza, y un cantinero mirándolo con preocupación.

-Tsukiyama-san, ya vamos a cerrar.

-No quiero.-Se rehusó.

-Tsukiyama-san, si no se va, va a venir mi jefe y lo va a echar.

-No me importa.

-Dígame, ¿es por una mujer? –Preguntó.

-Mi novio me engaño.- Se tomo la cerveza que tenía en mano.

El cantinero se sorprendió, quien lo diría que “el” fuera gay, se escucho que se abría la puerta que estaba detrás del bar dando a entender que era el jefe que llego a cerrar el lugar.

-Tsukiyama-san, será mejor que se valla.

-No quiero.

-Miratsu.- Hablo su jefe.

-Jan-san.

-¿Y este? -Hablo con una voz muy grave.

-Tsukiyama-san ya se iba.-

-Yio, nou me boouy a niungunae parieet eeehh.

De pronto término en el suelo afuera del bar, el jefe de Miratsu lo saco prácticamente arrastrándolo del bar. Akiharu se paró y como pudo se fue a su departamento, al llegar prendió la luz ya que estaba completamente oscuro y sólo. Fue directamente a su cuarto y se tiro a la cama quedando como una “T”, se volteó quedando boca bajo y de pronto empezó a dar largos suspiros.

-Takuya…

Después de pronuncias aquel nombre se quedo completamente dormido, mañana seria un largo día.

--

-Hijo.- llamó su madre.

-Aki-haru. -Nombró a su amado.

-Takuya. -Habló nuevamente su madre.

Takuya poco a poco fue abriendo los ojos mirando a su madre quien estaba sentada en su cama, estaba ya arreglada como siempre, traía un traje Azul marino como toda una ejecutiva y el pelo lo tenía lacio con una media cola. Miro que había un plato de comida a un lado de, era su desayuno.

-Takuya, te traje tu desayuno.

-Ma-Madre, gracias.- La miró con preocupación, su madre siempre estaba muy ocupada.

-Sabes que no me molesta, al contrario, sabes que me encanta ayudar a mi familia.

La señora Kimura se despidió con la mirada y salió de aquel cuarto grande, el castaño oscuro tan solo miro el desayuno, sintió asco ante la comida que estaba a un lado de el. Salió corriendo al baño, tenía ganas de vomitar, los síntomas del embarazado estaba saliendo a flote. Se llevo la mano a la boca y trato de no vomitar pero se pudo controlar y no lo hizo.

Después de las nauseas Takuya desayunó. No tenía mucha hambre por lo tanto dejo la mitad de la comida.

--

Un Akiharu apenas llego a su trabajo, tenía ojeras exageradamente notorias, no se miraba nada bien, la corbata la tenía chueca y la camisa completamente arrugada y es que Takuya siempre hacia todo eso un día anterior, se encargaba de la limpieza y de dejarle todo preparado. Akiharu era una persona que se iba a trabajar y regresaba hasta en la tarde, para ese entonces, todo estaba listo.

Su secretaria no hizo caso al momento en que llego ya que estaba coqueteando con el cartero quien había venido a recoger unas cartas de no sé qué. Se entró a su oficina y empezó a revisar quien sabe cuántas hojas, pasó horas ahí hasta que llego Teruki.

-Buenos días Akiharu.

-¡TU!, ¡COMO PUDISTE TERUKI!- Grito Akiharu parándose de su lugar.

-¿De qué hablas?- Preguntó entre sorprendido y confundido, no estaba entendiendo nada.

-No te hagas, Takuya me engañó contigo.- Susurró con la cabeza agachada.

-¡¿Qué?! -Soltó la pregunta junto con una carcajada.- No puedo creer que TU pienses eso, es que, como es posible que tu…-Empezó a reír cínicamente.- Akiharu, Takuya-kun y yo no tenemos NADA, es más, dime ¿cuando me has mirado a solas con él?- Teruki tenía razón, nunca los había visto hablar a solas ni siquiera que se mandaran una miradita o algo por el estilo.

-Le escuché a Sano decir que tú y Takuya habían tenido sexo.

-Seguramente entendiste mal Akiharu, yo solo le conté a Sano que tu disfrutabas el hacer el amor con Takuya.- Akiharu le mando una mirada asesina, se suponía que no le diría a nadie. Teruki se dio cuenta de eso y sonrió.- Es mi pareja que querías.- se excusó y su amigo lo miró con sorpresa. ¿El con Sano? Pero si eran exageradamente diferentes como el aceite y el agua, no se podían juntar pero parece que Teruki y el sí lo hicieron posible.

Akiharu empezó a reír, era una risa muy fingida y después empezó a llorar, Teruki lo miró y se preocupo, lagrimas salían de aquellos ojos cafés, su amigo se acercó y le ofreció un pañuelo.

-Créeme, el pañuelo funciona. Ahora, lo que tienes que hacer es salir de esa puerta e ir a casa de la madre de Takuya y pedirle perdón a tu novio.

-Teruki, perdón por haber dudado de ti y Takuya.-No espero respuesta y salió prácticamente volando del edificio, ahora su destino no era su departamento, era la casa de los Kimura.

Había mucho tráfico así que le costó tiempo llegar a la casa de la madre de Takuya, al llegar toco la puerta, una de las sirvientas le abrió y le dijo que Takuya estaba arriba. Pasó corriendo subiendo al cuarto de Takuya, abrió la puerta y este se estaba cambiando.

-¡Akiharu!-Se sorprendió.

-Takuya, yo…-Empezó a derramar lagrimas.- ¡PERDONAME!-Grito e izo una reverencia.- Yo… ¡Soy el más imbécil que pudo haber existido en este mundo!- gritó. Takuya se acercó y lo miro serio comenzando también a derramar lágrimas.

-Akiharu.-Susurró.- ¿Qué haces aquí?-

-Takuya.- Se acercó a él.- Perdón.-

-Yo…-No pudo terminar porque Akiharu lo beso, un beso desesperado, el menor se sorprendió mucho pero poco a poco fue respondiendo el beso con la misma intensidad. El beso se hizo largo para ambos.

-Takuya, no llores. -El empezó a llorar mas.- Takuya.- Susurro en sus labios pero este no lo escuchaba, solo atinaba a llorar un poco más fuerte mientras lo abrazaba.

-¿Cómo pudiste? –Hizo una pausa- ¿Cómo pudiste dudar así de mi? –le hablo entre lloriqueos y suspiros de gran intensidad -¡Dudaste de mi amor! –se separó del cuerpo de su “pareja”

-Por favor, Takuya –trató de articular el mayor algo asustado- Se que me equivoqué, no me dejes por favor –se arrodillo y abrazó su cuerpo de forma desesperada. –Sin ti no soy nada.

-A-Akiharu… -trató de no seguir llorando- Se me hizo una eternidad el que no estuvieras conmigo- habló lentamente- Y el no poder decirte la noticia, cuando me gritaste ayer así.

-¿Qué te ocurrió? –Le preguntó asustado.

 -venía del ginecólogo.- se sorprendió al escuchar esas palabras de su novio ¿Por qué iría con ese doctor?- E-Estoy embarazado.-

Akiharu lo miro sorprendido, sonrió y se puso muy feliz, prácticamente estaba saltando de alegría. De sorpresa se levantó para acercase a sus labios, los cuales besó dulcemente y luego lo tomó en brazos  para observarlo unos segundos

- ¡Estoy tan feliz, vamos  hacer padres!-Grito muy emocionado, lo cargó y lo depositó suavemente en la cama- Takuya – le susurró mirándolo a los ojos. Se subió en la cama y juntó su rostro con el de su amado. –Gracias.

El menor atrapó con sus brazos el cuello de Akiharu, ambos acercaron sus rostros y se besaron con pasión. Luego el mayor deshizo el agarre y fue bajando por el cuerpo de su pareja con besos encima de su ropa hasta llegar al vientre.

-Pequeño –sonrió- o pequeña, perdóname por haber dudado de tu papá Takuya –el aludido sonrió tiernamente mientras seguía escuchando las palabras del castaño- Prometo que los voy a cuidar mucho. –Depositó un beso en el vientre para luego acomodarse quedando acostado sobre este.

Takuya acarició el castaño cabello de su pareja, estuvieron así unos cuantos minutos, y suspiró.

-Te perdono, Akiharu –este lo miró sorprendido.

-Takuya…- lo miró a sus ojos, se levantó de la cama haciendo que el menor quedara sentado en ella. Sin perder el contacto visual.

-¿Si?-Preguntó y miro como su novio se arrodillaba, este solo miro con completa confusión.

-¿Quieres casarte conmigo?- Preguntó sacando un anillo de compromiso “para hombre”.

-¿Enserio?-Preguntó sorprendido.- Claro que quiero.- Se aventó a sus brazos.

-Por fin.- Una voz se escucho en la puerta, la pareja volteó y se sorprendió cuando miraron como la madre del menor sonreía de oreja a oreja.- Akiharu, pensé que te tardarías más.

-Pues ya ve, Teruki me explico la situación y vine inmediatamente para acá.- Confesó.

-Espero que no vaya a ver más malos entendidos, no quiero volver a mirar a mi hijo así.- No fue una petición, más bien fue una orden.

-Si.- sonrió, su suegra no es tan mala después de todo.

--

Dieciséis años después.

-¡Papá!- Habló un joven de castaño claro.

-Hiro.- Un hombre de 38 años, de cabello castaño oscuro, ojos del mismo color,  de piel blanca, traía unos lentes, traía un pantalón café con una camisa blanca bien fajada con el primer botón de arriba desabrochado, con unos zapatos cafés oscuros y un libro en mano.

-Ya regrese -

-Bienvenido hijo.- sonrió el padre.

-Te quiero presentar a alguien.- Su felicidad se le notaba en la cara.

-¿A quién?

-Shiru.-Llamo.

Un hombre más o menos de la estatura de Takuya salió a la vista. Era de cabellos negros no tan largos, de piel bronceada, los ojos café claro, traía el mismo uniforme que Hiro eso significaba que iba en el mismo grado y la misma escuela que el.

-Papá –Habló Hiro- Quiero presentarte a mi novio.- Takuya se sorprendió mucho que su hijo le hubiese presentado a su novio.

-Mucho gusto.- Saludo con formalidad la pareja de su hijo.

-El gusto es mío. - Le respondió muy educadamente.- Soy Takuya Tsukiyama.

-Espero que me pueda aceptar en su familia.- Sonrió.

-Claro que eres bienvenido a la familia.

-Ya llegue.- se escuchó una voz desde la puerta de la casa.

-Hola Tsukiyama-san.- Saludo Takuya muy feliz.

-Uy, ese tono me agrada.- Bromeó Akiharu dejando sus cosas a un costado para ir a saludar a su familia.

-Señor Akiharu, su hijo Hiro le tiene una noticia.- Le comunicó su esposo en el mismo tono que él había usado minutos antes.

-Me pregunto que será.- dijo para luego observar a su hijo detenidamente.

-Padre, Bienvenido.- Habló Hiro un poco nervioso

-He llegado, y bien, ¿Qué es lo que tengo que saber?- una pequeña risa se formó en su rostro maduro.

-Te quiero presentar a alguien.- Su padre lo miro con confusión y sonrió.- El es Shiru y es mi pareja.- Akiharu lo miró con sorpresa y después lo felicito.

-Ahora, hijo, este es solo el comienzo de tu propia historia de amor.- La pareja sonrió dulcemente. – ¿No lo crees así, amor?- miró a su esposo que estaba cruzado de brazos mirando la escena.

-Claro que sí- le respondió con una gran sonrisa. Hiro y Shiru se miraron entre si. Después de un rato de conversar ambos se retiraron hacia la habitación del hijo de la familia dejando a los mayores solos.

Akiharu se acercó, tomando de sorpresa a su esposo de la cintura para luego darle un beso apasionado en aquellos labios que solo él había besado.

-Te amo –dijo antes de volver a darle otro beso.

-Y yo a ti.

Ambos se sonrieron para después darse un último beso antes de comer.

Tal vez Akiharu tiene razón, esta sería una nueva historia de amor.

 

Notas finales:

Miku: Me quede con Takuya .////.

Si!!! xD es que simplemente con una pareja perfecta =)

Miku: porque lo dices?

Takuya: son totalmente opuestosHH

Miku: yo soy muy nyaapy? xD

sii! ;'D

Miku: xDDD

Takuya: cariño hola! (se habienta sobre el)

Miku: Yume!!!!!! Que le hiciste a Takuya?

Nada *-*

Miku: Takuya espera eso es mi...

Takuya: O vamos se que te gusta! n//n

Bien me despido antes de que Takuya llege muy lejos, Takuya ya no le are nada a Yuuki.

Takuya: encerio!? que alivio (se aleja y se pone atras de Yume para no morir asesinado por un Miku) Yume-san me obligo! TOT

si Akiharu, estas rojo! xDD ya tranquilo, solo te queria traumar un rato xDD

Miku: mejor dejamos aqui antes de que te valla a mata Yume!!!!!!!!!!

 

Me boy, Gracias por leeeeerrr!!!!!!


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