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Mi artística estupidez por Aoi tsuki

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Notas del fanfic:

Bueno, después de tanto tiempo teniendolo inconcluso por fin lo he terminado. He cambiado el final de una manera asombrosa, no es para nada lo que había planeado en un principio XD.


¡Espero que les guste y dejen Review para saber que les ha parecido! Comentarios constructivos y destructivos siempre ayudan. Este fic se lo dedico a Ally quien fue una de las personas que más ansió ver terminado este trabajo, asi que linda Ally, esto es para tí. ¡Te quiero!

Desde ya gracias por leer y sin más, les dejo que sigan su camino hacia este One-Shot~

 

Hacía semanas que no podía dormir más de dos horas seguidas, esas frases tan frescas como si las acabasen de decir rondaban en su mente en todo momento sin dejarlo descansar.

 

“mira lo que he encontrado Aoi... es sobre nosotros”, “Realmente es muy buena, me pregunto ¿Quién la habrá escrito?”, “No pongas esa cara, es tan solo una historia, nunca sucederá Aoishi”.

 

Pero Aoi sabía quién era su autor y que no era una simple historia común creada por las niñitas a las cuales él apodaba fans-yaoistas-obsesivas-con-trastornos-severos. ¡Es que él nunca se imaginó en su maldita vida de que el enano estaba al tanto de esas páginas llenas de porno escrito sobre ellos! Y es que había tantas dando vueltas por la red, ¿Cómo iba a pensar que podría entrar en esa en específico? Con ese pensamientos fue por lo que se arriesgó a subir su historia a una página de Internet, conocida como FanFic, sobre sus sentimientos hacia el vocalista de la banda a la cual pertenecía razonando en que nadie pensaría que había sido él mismo el que la hubiese escrito. Pero nunca tuvo como opción, ni en sus más retorcidos pensamientos, de que Ruki leía y se encontraba informado sobre esos lugares, aunque en cualquier caso... ¿Para qué mierda quería leer ese tipo de historias? y más aún, nunca pensó de que se tomaría la molestia de imprimir la suya para traérsela al otro día muy emocionado para hacérsela leer.

 

“Me pareció muy interesante, léela Aoishi, es una de las mejores que he encontrado”, “Me hace sentir diferente cuando la leo, no es como las otras”.

 

Ya no aguantaba, necesitaba descansar para tener la mente despejada al otro día y afrontar el problema para poder trabajar como debía, y de la única forma que eso podría suceder era contárselo a alguien de confianza, no iba a arriesgarse nuevamente al que el vocalista le llevase el nuevo relato impreso al otro día. Sin pensarlo dos veces tomó el teléfono y marcó un número colocando el aparato en su oreja esperando oír la ansiada voz.

 

-¡Maldición Aoi! Son las tres de la mañana ¿Para qué mierda llamas?

 

Reita tenía una voz de medio enfado adormilado, el morocho estaba conciente de que este contaba con un teléfono con identificador de llamadas, por lo que no le impresionó que supiese quien era. Comenzó a contarle su problema sin contestar a la pregunta realizada anteriormente, desde cómo había subido la historia a Internet hasta cómo era que Ruki se la había llevado al otro día para que la leyera. A Reita no le impresiono el saber los sentimientos de Aoi ya que él había sido el primero al cual el pelinegro había recurrido para hablar al aceptar y comprender sus emociones para con el enano.

 

-¿A qué  página la subiste?

 

-Hum... a una llamada “The GazettE Yaoi FanFic” o algo así, no lo recuerdo muy bien, fue a lo que menos le presté atención. ¿Por qué lo preguntas?

 

-No eres más idiota porque no te da el tiempo ¿verdad?- el silencio del pelinegro le contestó instantáneamente la pregunta -¿Nunca has leído debajo de ese título ‘FanSite oficial de la banda’?- el nuevo silencio volvió a afirmar la respuesta -Aoi... has subido tú Fic a la página oficial de la banda, es muy obvio que Ruki lo ha leído, le encanta entrar allí a leer como es que las fans imaginan y escriben esas cosas sobre nosotros, sabes que sus tipos de ‘Hobby’ son bastante raros y retorcidos.

 

Luego de unos minutos en que las dos neuronas de Aoi hicieran contacto entre ellas y provocaran la operación del razonamiento de las palabras que Reita había dicho, fue capaz de contestar a su defensiva.

 

-¡Pero nunca lo supe! ¿Desde cuando existe esa página? Además, que iba a pensar yo de que Ruki pudiese entrar ahí de todas maneras, nunca mencionó que le gustaba más leer pornografía sobre nosotros en vez de ver videos.

 

-Si no te quedaras dormido en las reuniones que el manager nos da sabrías que hay un sitio que ofrecemos nosotros para que las YOTS suban sus historias... y con respecto a Ruki, se la pasa gritando a los cuatro vientos todas las parejas posibles que pueden armarse en la banda, incluso hasta los tríos. Así que eso de no estar enterado, ya es problema tuyo.

 

Aoi quedó pensativo por un momento sobre el tema de Ruki para luego preguntar sobre una parte que no había entendido del todo a su amigo -¿YOTS?

 

-¡Por Kami-sama! Ahora me vas a decir que no recordas como llamas a nuestras fans ¿no? Creo que esta hora de la madrugada no te favorece demasiado. Tomaré nota mental de eso.

 

-¡Ah! Ya... pero te falto la F, es Fans-yaoistas-obsesivas-con-trastornos-severos

 

-¡No estoy para que me corrijas en esa estupidez! Ve a quejarte con Uruha si no te gusta, él lo abrevió de esa manera.

 

-Oye bueno, ni que la frase estuviese acompañada del nombre de su creador para saberlo ¿no?- contestó enérgico ante el reproche de su amigo, a diferencia de éste, él realmente estaba despierto y con un mejor humor.

 

El chico iguana, apodo dado cariñosamente por sus fans a causa de la banda que se encargaba de desaparecer su nariz dándole un toque enigmático, tan solo quería cortar la llamada y volver a su cómodo y cálido sueño del cual lo habían quitado de manera tan desconsiderada. ¿Acaso Aoi no podía hablar del tema en el trabajo, mientras tomaban un café y comían alguna porquería para el desayuno? Sí, Reita sabía que a veces podía ser increíblemente insensible cuando era interrumpido en un momento no muy favorable para la otra persona, como por ejemplo, cuando dormía y era despertado.

 

-En fin, ¿Piensas decirle a Ruki sobre tus sentimientos y todo ese problema?- sabia que Aoi necesitaba una mano con el tema, aunque el déficit mental de su amigo era grande nunca llegaba al hecho de llamarlo tan entrada la noche, casi madrugada, por un problema que le carcomía la cabeza, por lo que supuso que en verdad necesitaría de su ayuda en esos momentos, así que ante ese pensamiento positivo se levantó de su cama y tomó la dirección hacia su cocina, se prepararía un té para poder quitar ese mal humor que había adquirido en el corto plazo de la llamada, ya que sabía que si tomaba un café, la cafeína de éste lo único que ocasionaría sería el tenerlo despierto durante veinticuatro horas más.

 

-Reita, lo que menos quiero es que Ruki se entere. Es por eso que volqué mis sentimientos en la escritura para desahogarme sobre ese tema, pero lo único que ocurrió fue que la situación empeorase. Me carcome la conciencia el hecho de saber que el petiso conoce de forma indirecta mis sentimientos y no esté al tanto de ello- ahora que se encontraba más tranquilo pudo notar la angustia de la voz de su amigo de hacía tantos años. Se sintió mal al darse cuenta de lo incorrectamente que lo había tratado por su molesto temperamento mientras que el pelinegro lo único que necesitaba eran palabras alentadoras.

 

-¿Temes una negativa? Creo que Ruki es lo suficientemente raro como para patear hacia el otro lado Aoishi.- Una fuerte carcajada se dejo escuchar en el auricular del teléfono, provocando también una suave sonrisa en el rostro de Reita.

 

-No es eso, sabes... aunque estoy conciente de que a Ruki le gustan los hombres, es algo completamente diferente porque, una cosa son hombres y otra cosa tu mejor amigo e integrante de banda. Quizás... debería esperar más. Darle tiempo al tiempo- el silencio hizo su presencia dejando a ambos jóvenes pensando y procesando ideas. Reita estaba conciente de que Aoi no se atrevería a decirle nada a Ruki y él tampoco se metería a decirle al petiso sobre los sentimientos del mayor. En verdad, eso sería lo mejor, darle tiempo al tiempo para que las cosas sucedieran con naturalidad.

 

-Como te sientas más cómodo- fue su corta respuesta- ¿Estas más tranquilo?

 

-Sí...- suspiró para luego continuar- Gracias Rei, siempre me ayudas en los momentos en los que más te necesito.

 

-No te preocupes, aunque para la próxima, espera a que sea más tarde para llamar, por favor- ambos rieron y luego de despedirse dieron por finalizada la llamada.

 

 

El rubio esperaba impacientemente en la sala de ensayo a que llegaran sus compañeros, golpeando constantemente su pie contra el piso, manteniendo un tiempo de forma completamente inconciente.

Era la enésima vez que miraba su reloj, veinte minutos, veinte malditos minutos habían pasado desde la hora en la cual el ensayo había sido programado. Dirigió con frustración su mirada nuevamente hacia la puerta, la única salida y entrada hacia la habitación, ya que la que les había tocado en esa ocasión no poseía ventana alguna. Estaba dispuesto a irse cuando notó que uno de sus compañeros hacía su mágica aparición entrando en el lugar.

 

-Linda hora de llegar ¿no?- dijo con sorna el rubio mirando al pelinegro con enojo.

 

-Lo lamento, el trafico estaba bastante complicado pero... ¿Tan solo estas tú? ¿Y los demás?- Aoi miro a su alrededor notando que efectivamente tan solo ellos dos se encontraban allí ocasionando que eso lo pusiese un tanto nervioso.

 

-Se ve que no han tenido ganas de asistir porque ninguno se ha presentado, tan solo yo tomo esto en serio- se cruzó de brazos y se dejo caer pesadamente sobre el sillón detrás suyo haciendo un encantador puchero, no estaba enojado por la espera sino porque todos habían decidido faltar, aunque sea le habría gustado que por lo menos sus amigos se hubiesen tomado la molestia de avisarle a él también. Aoi no pude evitar conmoverse ante tal acto.

 

-¿Trataste de comunicarte con ellos?- y mientras su conversación sobre la falta de sus compañeros ante la cita del ensayo de esa mañana comenzaba a fluir ignoraban que un integrante más había asistido al lugar, pero no para practicar ni para nada que estuviese ligado a eso, sino tan solo, para darles tiempo. Para que aquellos dos jóvenes que se encontraban juntos en el interior de aquella habitación haciendo conjeturas y charlando animadamente supieran y se diesen cuenta de que si el tiempo hasta ese momento nunca les había dado tiempo a ellos ¿Por qué ellos sí deberían dárselo a él?

Sin más colocó la llave en la puerta cerrándola, observó su reloj y una sonrisa apareció en su rostro “con tres horas será más que suficiente” pensó alejándose dejando a sus amigos encerrados sin que estos lo notasen.

Se sobresaltó al instante al sentir una vibración en su bolsillo, sacó el aparato y contesto la llamada.

 

-Sí Kai, Aoi esta mucho mejor, ahora esta dormido tratando de descansar un poco y ya le avisé a Ruki de que el ensayo se cancelo.

 

-Cualquier cosa me avisas Reita. Quiero saber como progresa con esa indigestión.

 

-No te preocupes, te mantendré informado- sonrió al notar como su mentira había sido creída totalmente por el líder de la banda. Aunque no le gustase mentirle esa era una situación que lo ameritaba- Cuida de Uruha, me imagino que debe estar aprovechando el tiempo libre durmiendo por ahí.

 

-Que no te quepa la menor duda. Prefiero eso a que ande tomando en cualquier bar.

 

Finalizó la llamada con una cálida despedida, estaba seguro de que Aoi y Ruki no podrían contactarse con el exterior por medio de sus celulares, ya que dentro de la habitación no había señal alguna. Sonrió nuevamente al recordar como unos papeles eran cargados por Ruki antes de entrar allí, sabía que Aoi esta vez no podría escaparse, literalmente.

 

-Espero me lo agradezcas Aoishi. Nunca hay que darle tiempo al tiempo si al fin y al cabo, él nunca te lo da en los momentos más necesitados.- miró por última vez la puerta, la cual separaba a la próxima pareja que se formaría en la PSCompany, del mundo real que se desenvolvía al otro lado.- No hay que dar tiempo, sino pedirlo en cuanto se lo necesite.- Y sin más se dio la vuelta comenzando a caminar despreocupado al piso superior del edificio, quizás y con un poco de suerte Saga se encontrase practicando un poco en esos momentos.

 

 

Notas finales:

¡Realmente espero que les haya gustado y lo hayan disfrutado tanto como yo al escribirlo y, por fin, terminarlo!

¡Los reviews significan amor!

Gracias por tomarse la molestia de leerlo.Se los agradezco infinitamente ^^

¡Besos y abrazos!

 


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