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Noche de Tormenta por Ran_Yuri

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Notas del fanfic:

UN fic romantico y de humor, de Kanda x Allen ^^ para las Fans del Yuullen!

Notas del capitulo:

NyakO_Nya! Mucho gusto Mi ser Ran_ku! (o ran_yuri xD) pero prefiero Ran numas ^^ Es un enorme gusto poder puplicar un fic e esta pagina qe me paso mas de la mitad de mi vida leyendo fic aqui xD he disfrutado extremadamente de sus fics x3 y aunque no es mucho... quiero dejar mi humilde aporte ^///^ espero les guste!

Biien como toodos ya sabemos los personajes de DGM no me pertenecen (lastimosamente xD) son propiedad de Katsura Hoshino! (x cierto es hombre o mujer?) asii demosle gracias x  crear esta maravillosa serie! wii!

Bueh... mucho ya... A leer!! ^^

 Noche Tormentosa

 

 

   Era una noche calurosa y muy tormentosa, por los pasillos de la Orden pocas personas circulaban, pues la hora era la mayor causa; era la hora habitual en donde la mayoría se disponían a cenar. Y como siempre encontramos a, quizás el mas joven de los exorcistas, pidiendo una gran cantidad de comida y postres tratando de satisfacer así su gran apetito.

   A pesar de la tormenta y los deslumbrantes rayos y relámpagos las personas estaban tranquilas, no mostraban una visible preocupación por el clima, simplemente disfrutaban del pequeño descanso del arduo trabajo.

  Ya satisfecho, Allen se dispone a tomar un paseo para asentar su estomago, recorriendo los pasillos de ese enorme edificio. Caminando sin rumbo fijo, sin algún pensamiento en particular, simplemente se disponía a caminar; tan tranquilo iba que no se percato de que se adentraba por unos pasillos bastantes oscuros, con muy pocas lámparas. Mas aun no mostraba preocupación, solo seguía el trayecto estrecho de esos lugares. Los relámpagos se intensificaban más, y sus rayos de luz traspasaban por las enormes ventanas de esas zonas provocando una escena perturbadora. Esto alarmo al pequeño exorcista: E-Esto… son solo relámpagos… no hay razón por la que tenga miedo, no pasara nada… verdad?” . Trago saliva y siguió caminado con la ilusión de encontrarse con alguien que lo sacara de ese sitio. Si, afirmativamente Allen se había perdido; no había forma de que regresara por el trayecto que hizo, ya que iba tan distraído que no noto cuantas vueltas pudo haber dado, y por los pasillos donde se adentro. No le quedo otra opción que seguir adelante con la poca iluminación que tenía por parte de las lámparas, y las luces extras de los relámpagos que realmente prefería no tenerlas.

  Adentrándose por esos confusos pasadizos, marchaba a paso lento hasta que una fuerte luz lo saco de su cautela. Un estrepitoso rayo sacudió todo el edificio provocando el corte de electricidad en cada esquina del aposento. Se escucharon numerosos gritos entre ellos el de los ojos grisáceos y perturbados. Soñaba con estar en su habitación o el comedor con el resto de sus compañeros, y se reprochaba por la idea de salir a dar un paseo. Sacudió su cabeza de lado a lado y retomo firmeza, no se dejaría intimidar por un simple corte de electricidad, asumió unos ojos mostrando valentía y prosiguió con su camino. Pero lamentablemente no duro mucho, solo unos cuantos pasos que dio, otro atronador rayo lo hizo endurecer; se tapo los oídos y se sentó en un rincón del enorme ventanal presionando con fuerza sus parpados para no notar los espeluznantes rasgos de ese lugar.

 Permaneció en esa postura por unos minutos, no se atrevía siquiera a abrir los ojos, pero pudo percibir que alguien se acercaba con pasos fuertes y un tanto perturbador, cuando se disponía a abrir los ojos para ver de quien se trataba un turbulento relámpago lo obligaba a cerrarlos. Parecía un pequeño gatito asustado en aquel rincón, acurrucado entre sus piernas, indirectamente pidiendo un refugio que lo apartase de sus miedos.

 La persona se coloco en frente del pequeño neko asustado, aguardando un poco de distancia tratando de reconocerlo ya que la oscuridad le impedía una buena visión. Se tardo unos segundos para descifrar de quien se trataba, cuando lo reconoció una diminuta risa escapo sus labios para luego ignorarlo completamente seguir con su trayectoria. Pero su avance fue detenido por un agarre tímido pero con firmeza en su pierna, el mayor frunció el seño y lo miro con ojos fríos y filosos. En tanto el menor sostenía con fuerza la pierna ajena sin predisposición de detenerse, lo que enfureció un mas al portador de dicho miembro. Allen abrió los ojos, su curiosidad lo obligaba para darse cuenta de la persona quien esta ajunto. Al notarlo, una enorme sonrisa se formo en su rostro y de un salto se pudo de pie para dar un enérgico abrazo a aquella persona mencionando su nombre con alegría y alivio.

 

-         Kanda!! Que bien, me alegra tanto… creí que jamás vendría alguien por aquí…que bueno…- Ya recuperado de su miedo, allen abrazaba a su compañero con mucho cariño y frotando su cabeza entre las ropas del pelilargo. Lamentablemente la reacción por parte de éste no fue la misma.

 

-         Suéltame, o te cortare en pedazos.- Tan frió como siempre fue la respuesta al calido y tierno abrazo ofrecido por el peliblanco.

 

-         Eh?... ah, si lo siento… es que me emocione un poco jejeje lo lamento Kanda.- Rápidamente rompió el abrazo y se incorporo nuevamente.

 

-         Hn!-  Soltó un pequeño reproche y continuo su recorrido.

 

  Sus pasos eran seguros, dando a entender que sabia precisamente donde se dirigía no parecía importarle la falta de iluminación, su caminata era segura. Trascurrieron así unos minutos para luego dar media vuelta hacia atrás y detenerse.

 

-         Hasta cuando piensas seguirme?- Exclamo con una mirada amenazadora al chico que lo estaba siguiendo desde su encuentro.

 

-         Emm… bueno, es que me perdí y no se donde esta mi habitación o el comedor, no te diriges a alguno de esos?

 

-         Me dirijo a mi habitación.

 

-         He! Que bien, te acompañare hasta allá, así me ubico mas o menos en donde estoy.- Terminando su frase con una calida sonrisa. En tanto Kanda solo lo miro por unos segundos, bajo su mirada e introdujo la llave en la cerradura.

 

-         Ya estamos aquí, idiota.- Abrió la puerta e hizo el primer paso hacia adentro.

 

-         Eh?! P-pero….- Miro hacia todas partes confundidamente, pero sus ojos no lograban reconocer el lugar. – E-Eto… no me suena nada familiar, esta muy oscuro. Kanda te molestaría mucho si espero en tu habitación hasta que regrese la electricidad, estoy seguro de ya lo están reparando así que no tardaran mucho, que dices puedo?- Su pregunta desconcertó al moreno, se preguntaba si había oído bien, que ese enano molesto se quedara en su cuarto hasta entonces?!. En tanto Allen solo ofreció una de sus típicas y dulces sonrisas que atrapaban e hipnotizaban a cualquiera; pero… funcionaría con Kanda? Aguardaba con impaciencia la respuesta por parte de éste. Finalmente después de unos minutos de espera la puerta se cerro quedando las dos personas en esa oscura habitación, cuya una fuente de luz eran los relámpagos.

 

-         En cuanto regrese la electricidad, te largas inmediatamente de aquí. Entendiste?

 

-         ha… Sip! Muchas gracias Kanda! n_n.-

 

-         Hn.-

 

 

  Allen se sentó tímidamente en la silla cerca de un escritorio, mientras que Kanda se paro al borde la ventana semi-recostado mirando hacia fuera. El silencio por partes de ellos era inmenso, solo se escuchaba las primeras gotas de lluvia y el sonido que hacían al chocar por el vidrio de la ventana. Para Allen era una atmosfera tensa, no quería escuchar los estruendos de afuera, pero… se atrevería a iniciar una conversación con el serio pelilargo? Muchas veces lo había intentado, pero su respuestas siempre eran precisas y cortantes; pero reunió coraje.

 

-         Eto… eh… no sabía que podías ver tan claramente a pesar de la oscuridad, eso es muy útil. verdad?.-fueron las primeras palabras del intento de platicar con el frío e indiferente Kanda.

 

-         …cualquiera pudiera a verlo hecho, serás que eres lo bastante inútil como hacer que cosas tan simples se vea útil?.-Una respuesta muy incomoda que enfureció a su intruso.

 

-         No tenias porque contestarme de esa manera! Dime una cosa: acaso te hice algo tan malo como para que me trates asi? No que yo recuerde… además solo intento ser amable contigo.-

 

-         No te pedí que fueras así conmigo, si no te gusta ahí esta la puerta.- Allen frunció nuevamente el ceño, se levanto bruscamente de la silla y se dirigía con dirección a la puerta, antes girar el picaporte se detuvo, volteo su cabeza para dirigir una triste mirada al frío Kanda que se encontraba viendo hacia fuera.

 

-         Sabes? Si siempre tratas de esa manera a las personas que te rodean, comenzaran a alejarse de ti, y terminaras solo. Créeme que nadie quiere vivir completamente solo. Kanda… deberías aprender a apreciar un poco a los demás… por lo menos a los que están cerca de ti, sino… estarás muy triste….- Ante las delicadas palabras del chico, el moreno en ningún momento aparto los ojos del oscuro paisaje de afuera, ignorándolo completamente.

 

 Al ver esa indiferente reacción, Allen soltó un suspiro y se encamino hacia donde se encontraba Kanda, lo miro fijamente por unos segundos y una pequeña sonrisa se dibujo en su rostro. Se puso de puntitas en los pies para lograr alcanzar el rostro de aquel ser indiferente que tenia enfrente, tomo sus mejillas en un movimiento rápido  deposito un suave y delicado beso en la mejilla derecha del mayor. La acción fue tan rápida y sorpresiva que Kanda no lo vio venir. Allen logro sorprenderlo totalmente, miraba atónito al pequeño valiente que se atrevió a hacer eso arriesgando parte de su propia vida. Dirigió sus dedos al lugar donde fue depositado el sutil beso, aun no creyendo lo ocurrido.

 

-         Ju, si quieres recibir mas de esos. Es mejor que comiences a tratar un poco mejor a los demás “Yu”.- Uno de los pecados mas grandes que hizo Allen (además de tratar de resucitar a su padre) fue llamar a Kanda por su primer nombre, ahora si era su muerte segura el frío, indiferente y malvado Kanda lo despedazaría sin dejar rastros.

 Es lo que cualquiera pensaría y afirmaría que pasaría… pero será esta vez una excepción? Kanda le dirigió una mirada intimidante al chico de cabellos blancos, pero sin surgir efecto. Allen solo le ofreció una de sus típicas sonrisas para luego darse la vuelta y encaminarse rumbo a la puerta, pero antes de alejarse más su brazo fue sujetado obligándolo a detenerse; se dio la vuelta para enfrentarlo pero antes de dirigir su mirada un estruendo sumamente atronador hizo que de un salto se aferrara al otro cuerpo que se encontraba en esa habitación, justamente el del moreno de cabellos largos. Fue un susto verdaderamente inmenso para obligarlo a realizar tal acción que ponía en riesgo su vida, primero el beso, luego llamarlo por su primer nombre, y ahora un abrazo… ya había excedido el límite máximo. Aun acurrucado entre el abrigo del pelinegro, el asustado gatito se esperaba una de las mayores reprimendas de su vida seguidas de unas cuantas cortadas con el Murgen… Pero jamás se hubiese podido imaginar esta respuesta, en lugar de ser cortado y despedazado su abrazo fue respondido de la manera mas dulce que hubiese podido dar el pelinegro; un abrazo suave y delicado. Kanda bajo su cabeza y se acobijo entre el cuello y el abrigo de Allen, uno de sus brazos rodeaba la cintura del chico, mientras que el otro se posaba en la cabeza enredándose entre finos y delicados cabellos de plata. Fue unos de los momentos mas conmociónate del chico, sus mejillas estaban teñidas de un tono muy rojizo, su corazón palpitaba muy aceleradamente que parecía ser una bomba de tiempo; en momentos se preguntaba si ya estaba muerto y había llegado al cielo o si estaba soñando inconcientemente tirado en el piso. Pero no, todo eso era real… era  difícil de creer; el chico de ojos grisáceos trago saliva, no quería pronunciar ni un solo sonido por temor al romper tal escena que perduro por largos minutos. No se sabía qué, si por la postura que presentaban o por la atmosfera tranquila y relajante, la tormenta pareció cesar un poco. Al parecer ninguno de los dos quería terminar con ese abrazo tan insólito, sus rostros lucían relajados… Allen se sentía más que cómodo incapaz de pensar en otra cosa, nisiquiera se sentía intimidado por los pocos rayos que aun resonaban, su mente estaba en un lecho de rosas. Lamentablemente no podían estar en esa posición toda la noche, pero parecía no importarles hasta que la luz se hizo presente. La electricidad estaba reparada y funcionaba como de costumbre, ahora los pasillos estaban iluminados al igual que todo el resto del edificio, incluyendo la habitación de Kanda.

 La iluminación se torno molesta, ahora que se veían perfectamente la vergüenza tomo su lugar obligándolos a separarse con un rubor en las mejillas. Allen se puso de espalda mirando al piso tratando de ocultar su rostro muy enrojecido; mientras que Kanda tuvo una reacción similar pero más calmada volviendo a dirigir su mirada hacia fuera. Permanecieron en esa posición por largos minutos, afuera de la habitación se escuchaban algunos pasos y bullicios los demás miembros se estaban movilizando hacia sus respectivas habitaciones; por lo que Allen debiera hacerlo ya que el trato era hasta que volviera la electricidad. Muy nerviosamente el chico volteo hacia donde estaba el otro cuerpo con la mirada perdida en el triste paisaje de afuera.

 

-         Eto… Bueno… Muchas gracias por permitirme quedarme un rato acá, y lamento las molestias.- Se da media vuelta en dirección a la puerta, pero sin avanzar.- y… n-no te preocupes no le diré a nadie que estuve aquí… B-Bueno ya me voy, gracias de nuevo Kanda.- Se retira sin recibir respuesta por parte del otro, salio con cautela para que nadie se diera cuenta para finalmente reposar en su legítimo cuarto.

 

Las horas pasaron y el chico de cabellos blancos no lograba reconciliar el sueño, su Golem dorado revoloteaba por toda la habitación mientras ojos grisáceos lo seguían, su mente estaba en blanco divagando en la nada. Arto de estar así se dio vuelta de un costado acomodándose para obligar al sueño apropiarse de él pero con pocos resultados, mas que solo bostezos derivados del aburrimiento o la fatiga de no poder cerrar los parpados para hundirse en su mundo de ilusiones. Horas y horas parecían aver pasado, ya por los pasillos no se escuchaba nada todos estaban en sus mas profundos sueños, a excepción de los guardias pero se encontraban muy lejos de allí; el chico de ojos grisáceos todavía estaba despierto y distinguió pasos que cada vez se hacían mas fuertes. Intrigado, pero con pereza giro su cuerpo entre las sábanas hacia la puerta y observo que alguien se había parado en frente de su cuarto. Pasaron algunos minutos, y ese alguien no toco la puerta, la curiosidad de Allen creció y le dio fuerzas para levantarse y ver de quien se trataba, tal vez podría ser Lavi pensó, o Lenalee; de cualquier forma la curiosidad era inmensa. Se acerco a la puerta y primero pregunto de quien se trataba, solo para asegurarse.

 

-         Hola? Quien esta allí? Lavi eres  tú, o es Lenalee? O será…- Se asomo hasta estar pegado a la puerta, al no oír respuesta tubo la decepción de que la tal vez seria su imaginación o algún objeto. Con la cara de disgusto se propuso a abrir la puerta, mantenía su cabeza agachada por lo que lo primero que vio fueron unas botas, siguió su mirada hasta toparse con un rostro, uno muy familiar, fue una sorpresa grande encontrarse con esa persona a esa hora de la noche y justo en frente de su habitación, porque razón se preguntaba.- Eto… pasa algo? Es raro verlo por aquí, y a esta hora…-

 

-         S-Si… lamento molestarlo señor, pero me enviaron a darle un mensaje.-

 

-         Un mensaje, acaso se trata de Kamui-san?-

 

-         N-No…, eto… alguien quiere verlo en la en azotea.-

 

-         Alguien? Quien es…?-

 

-         Lo siento, ya tengo que irme señor Walker, nos veremos.-

 

-         Eh… pero… Espera! Al menos dime de quien se trata…-Allen se quedo mirando al Buscador mientras se desvanecía a lo largo del pasillo. Al no notar mas su figura, busco su abrigo y sus zapatos y se dirigió camino a la azotea. “si no es Kamui… entonces quien? Será Lavi jugándome una broma?! Es lo mas seguro, solo él haría algo así…. Bueno por más que sea, estaba aburrido. Sus pasos cada vez mas lo llevaban a su destino, por esas oscuras escaleras poco iluminadas y muy extensas, mientras su mente seguía divagando entre ideas, hasta que una muy poco común surgió. “… me pregunto si Kanda estará durmiendo….lo que paso hace un rato… me pregunto por que habrá sido, era extraño pero… en cierto modo, se sintió bien… Wha! eso no debería de importarme, siempre me trata mal y me llama Brote de Frijol! Quien se cree que es?! Maldito, maldito maldito! >.<”. – ah! … ya estoy aquí… no se porque… pero me siento muy nervioso.- El chico de cabellos blancos traga saliva, gira el picaporte y abre la puerta. Mira de un rincón a otro pero no había ningún alma a la vista; al notar solo su presencia frunció el ceño y apretó con fuerza su puño, sentía una gran decepción de caer en una broma así… pero sentía mucha mas frustración por creer de que alguien en que el pensaba lo estaría esperando en ese lugar. – jum... que idiota, en que estaba pensando? Por que pensé en algo tan ridículo como eso? … algo como eso es imposible que llegara a pasar… aun después de aquello…es….- cerro fuertemente sus parpados y apretó con mas fuerza sus puños, dejo salir un suspiro y dirigió su cabeza hacia el cielo pero sin abrir los ojos.- ah… debería de regresar a mi habitación… pero… es como si esperara algo….-

 

-         Así que estas esperando a alguien….

 

-         Eh?! - Allen abrió los ojos y sus pupilas buscaban por todos los rincones el provenir de esa voz muy familiar, pero sin resultados.

 

-         Si que eres idiota… mocoso.

 

-         K-Kanda?! .- Mira hacia arriba para encontrarse con el moreno de cabellos largos y mirada intimidante.- Kanda… que haces ahí arriba?! P-Por que estas aquí…?.- Pregunta tontamente el aturdido Allen.

 

-          Hn.- Fue la respuesta del mayor.

 

 *-*-**-*-*-*-*-*-*-*-*-* unos minutos después *-*-*-*-*-*-*-*-*

 

-         Así que estas acá desde ya un tiempo… no sabía que venias a menudo a este lugar.- el chico estaba sentado en lo alto de la azotea junto al frío Kanda… que raramente esta vez no lucia tan amenazador como de costumbre, ahora el chico podía entablar una conversación con mas facilidad.- sabes? Hace un rato un buscador fue hasta mi habitación a decirme que alguien me llamaba y nos encontraríamos acá… pero desafortunadamente no fui muy inteligente y caí en la broma… pero aun asi… no me arrepiento de haber venido.- término su oración dedicándole una tierna sonrisa de las suyas al otro que se encontraba a su lado (lógico con cierta distancia todavía hablamos de Kanda).

 

-         Hn…. Dime una cosa… porque un mocoso como tú quiere estar cerca mi?.- una pregunta extraña para provenir de sus labios que sorprendió a Allen, pero a pesar de ser extraño tenia la justa respuesta.

 

-         Porque… muy en el fondo Kanda es una buena persona. Aunque no lo demuestres siempre… eres amable a tu manera, y digamos… que me gustaría poder ver mas de seguido esa parte tuya… por eso….- el rubor de sus mejillas se intensifico ante sus palabras, pero quería dejarlo en claro.- Por eso me gustaría poder acercarme un poco más y ver el lado tuyo que casi nadie ve, además de aprender a querer a las personas…

 

-         … de verdad que eres… un idiota.- ante esa fea respuesta Allen voltea para enfrentar el rostro de aquel moreno, pero antes de que pudiera decir algo una mano ajena lo tomo de las mejillas impulsándolo hacia el otro cuerpo para que los labios intrusos del moreno pudieran posarse finamente en la frente del chico cabellos de plata. Acción que desconcertó al menor, pero cerró suavemente sus ojos para sentir la calidez y delicadez de tal beso. Que no tardo en posarse ahora en labios tímidos del menor, suave y finamente, produciendo un mar se sensaciones nunca antes sentidas por ellos.

 

   Sus cuerpos más cercanos obstruyendo molestos centímetros abrigados bajo el manto de aquella tormentosa noche ya pasajera, cuyas nubes se la llevaron junto con los miedos dando lugar a numerosas estrellas. Pero la tormenta de sensaciones de los dos jóvenes parecía no extinguirse, y dando la idea de que no lo haría por un buen tiempo, estaban hundimos en su nuevo mundo hecho solo para ellos explorando distintas emociones y sentimientos. Un mundo nuevo donde poder descubrir y jugar de diversas formas, del cual Kanda se encargaría de enseñárselas muy a gusto al pequeño chico de cabellos de plata.

 

 

 *-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-* varios días después*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*

 

 

-         Ah… otra vez esta lloviendo! detesto la época de lluvias! No se puede hacer nada >.< - Eran las palabras de un molesto Lavi mirando por la ventana con cara de reproche.-

 

-         No te molestes por eso, el que no puedas salir afuera que no quiere decir que no puedas hacer nada. Anímate un poco.- Lenalee tratando de animar al fastidiado Lavi.

 

-         Mm… ahora que me doy cuenta no vi al aburrido de Yu-chan por ninguna parte, no puedo divertirme molestándolo si no esta.

 

-         Ahora que lo dices tampoco vi a Allen-kun, será que esta con Kanda?.

 

-         Ja, pero que dices si eso pasara entonces jamás dejaría de llover y tendríamos tormentas todo el tiempo! Eso seria terrible….

 

-         Je… tienes razón, aunque es verdad que desde hace varios días no para de llover, y siempre llueve muy fuerte de noche.

 

-         Es como si pareciera que todas las noches fueran tormentosas… es extraño.-

 

 

 

 

 

 

                FIN

 

Notas finales:

NyaKO! les gusto?? ojala que si ^////^ gomen si se esperaban algun lemon, pasa que en esa epoca (el fic es algo viejito jeje) no sabia escribirlos ^^ ahora see jej perdi la inocencia xD

Me avisan si quieren un extra con Lemon *¬*

Se aceptan cualquier tipo de comentarios (no me insulten mucho, nee T_T)

Hasta la proxima! ^^ Gracias x leer! Ganbatte nee~!

Nyako_Bye!


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