Capitulo IV: “Cambios”
-¡¡Naru!!
Naruto y Sasuke se separaron inmediatamente al escuchar como alguien llamaba al rubio. Por el balcón apareció una pelirroja despampanante que vestía un corto vestido negro pegado al cuerpo, un cinturón ancho y de color rojo en la cintura, realzándola mas y unos zapatos negros de tacón bastante alto. Era aquella chica con la que el rubio había realizado ese sensual baile horas antes y el cual no le había agradado en lo absoluto al azabache.
-Naru creo que…- empezó a decir la chica con una voz que denotaba que ella también tenia cierto grado de ebriedad cuando noto que su rubio amigo estaba acompañado- Eh… ¿Interrumpo algo?
-No Ari-chan- le dijo el rubio con una risa nerviosa, su voz aun sonaba alcoholizada- ¿queee pasaa?
*¡Claro que si interrumpes algo maldita perra! ¡Largo de aquí!* pensaba a gritos Sasuke, le dedico una mirada gélida a la co-protagonista del rubio, aunque esta pareció ni siquiera darse cuenta del detalle.
-Creo que ya es tiempo de dejar de tomar- le dijo la chica negando la cabeza levemente- si no queremos armar un escándalo, es mejor salir lo suficientemente sobrios como para ser capaces de disimular que estamos ebrios
-¿Quién esssta ebriooo?- pregunto Naruto con indignación- pero ssssi yo andoo geniiaaaial… meeejor que bieeen
La chica se echo a reír.
-Siii, yoo tambieen ando genial. ¿Y quien es tu amigo Naru?
-Es el teme de Sasuke- le contesto a la chica. Sasuke se sorprendió de que aquel rubio supiera su nombre. ¿Cómo lo sabia? No se lo había dicho.
La chica frunció en ceño para luego abrir la boca en una perfecta “O”
-¿El de Jinchuriki?
-Andaaaaleee, ese mismo
Sasuke rodó lo ojos, era obvio que hablaban de él, así como era obvio que aquel dobe le había contado todo lo sucedido en el centro comercial a su compañera de trabajo.
La chica se adelanto hasta llegar a ellos y se coloco frente a Sasuke
-Bien, chico teme, necesito un favor
Sasuke arrugo el ceño, molesto ¿ahora quería que le hiciera un favor? Esa chica estaba loca, nunca haría nada por ella, tal vez si ella se alejara del rubio para siempre lo considerara. Iba a contestar una negativa a la chica cuando esta lo interrumpió
-Necesito que cuides de Naru
-¿Are?- el rubio estaba confundido
-No debe probar mas alcohol o no podré sacarlo conciente de aquí, asegúrate de eso ¿vale?- y diciendo esto dio media vuelta y se dirigió hacia dentro del casino, alzando la mano en forma de despedida- Iré a asegurarme que los demás dejen de alcoholizarse, ya regreso. Gracias, eres un teme-amor con patas.
*¿Qué demonios…?* Sasuke estaba sorprendido, ¿le había dejado solo al rubio con él? ¿Con un desconocido? Definitivamente la chica estaba loca, eso, o que tal vez se había dado cuenta de lo que él y el rubio estuvieron a punto de hacer y no quería interrumpir.
-¡Queee injusto! ¡Pero si yo ando conciriente y sobrio!- exclamo el rubio indignado
-Conciente, dobe
-Esoo mismo dije, no es justooo, ¡yoo qui… quiero seguir probando esas bebidas!- y miro al azabache con esos hipnotizantes orbes azules llenos de suplica- Me falto muuucho por probar, ¡yo quiero probar!
El azabache lo miro, se veía irresistiblemente sexi. No podía creer que había estado a punto de besarlo, ¡A Naruto Namikaze!, ¡Su amor platónico!
Pero desgraciadamente habían sido interrumpidos, joder con su suerte de mierda. Sin embargo, ahora estaban solos ¿cierto?
-¿Quieres probar cosas nuevas?- le pregunto al rubio y se le acerco
-¡Si! ¿Me dejaras?
-Por supuesto que si
Y tomándolo por la cintura, acorto la distancia entre ellos uniendo sus labios. El rubio al principio se sorprendió pero luego se dejo llevar. Sasuke sintió como si una descarga eléctrica le recorriera todo el cuerpo, su cuerpo reaccionaba por si solo, era como si ya supiera que hacer, como si sus labios y los del rubio hubieran sido creados para besarse, como si sus cuerpos hubieran existido para tocarse y estar juntos. Y se dejo llevar por aquella sensación que le embargaba el cuerpo, dejo de pensar… besar esos labios, era lo mejor que podía existir en ese mundo.
Pero el rubio no iba a dejar que Sasuke llevara todo el control, por supuesto que no. Mordió levemente el labio inferior de Sasuke, haciéndolo jadear levemente y aprovecho para meter su lengua en aquella cavidad, recorriéndola a placer. Sasuke no se quedo atrás y también puso en acción su lengua.
Jadeos entrecortados, respiraciones agitadas, incremento de temperaturas en ambos cuerpos… para ambos chicos, aquello era la gloria.
-¡Naru, vámonos!- se escucho la voz de Ino desde algún lugar dentro del casino.
Naruto se separo de Sasuke con lentitud, apoyando su frente con la del azabache, estaba sonrojado, aunque Sasuke no supo si era por el alcohol o por lo que había sucedido, él también sentía sus mejillas arder, pero le importo muy poco.
-Wow…- exclamo el rubio quedamente mientras recuperaba el aliento. El azabache estaba en las mismas, ni siquiera tenía palabras para describir lo que había sentido con ese beso.
-¡Naru! ¿Dónde estas? ¡Debemos irnos!- una voz femenina diferente se escucho.
Naruto miro hacia adentro del casino, se alejo del azabache algo nervioso
-Yo… creo que debo irme- le dijo al azabache
-¡¡Naruto!! ¿Dónde diablos se metió ese chico?
-Tengan paciencia, ah de andar por ahí- esta vez era la voz de Arisa- ¡Naru!
Sasuke tenía ganas de asesinar lenta y dolorosamente a todos esos idiotas fastidiosos que habían echo que aquel beso terminara.
-Hn… Creo que si- le contesto al rubio muy a su pesar.
Naruto se encamino hacia la entrada hacia el casino. Se detuvo y volvió hacia el azabache, parecía tener una lucha interna en esos momentos. Entonces apretó los puños y se dirigió hacia Sasuke una vez mas, se detuvo frente a el y lo miro fijamente a los ojos. Sasuke sintió el escalofrío que le daba siempre que esos ojos azul brillante lo miraban, pero se abstuvo de mostrar alguna expresión, eso seria dejar demasiado al descubierto.
-¿Cómo te llamas?- le pregunto con su voz suave y varonil que hizo sentir escalofríos por todo el cuerpo al azabache
-Ya lo sabes dobe
-Si pero… tu apellido… ¿Cuál es…?
-Uchiha, Sasuke Uchiha
Naruto asintió y le dedico al azabache una sonrisa de medio lado sin dejar de acosarle con la mirada. Y se veía tan condenadamente sexi que Sasuke tuvo que aguantarse las ganas de volver a tomarlo y besarlo hasta que sus labios se acabasen.
-¡Naru!
Un último vistazo, una sonrisa que se convirtió en una seductora y pícara, y el rubio se dio la vuelta para entrar en el casino y reunirse con sus amigos.
Después de unos minutos en los que el azabache procesaba lo que acababa de suceder para darse cuenta de que era realidad y que no estaba teniendo una alucinación por el alcohol, Sasuke también entro en el casino y empezó a buscar al idiota y posiblemente muy ebrio de Suigetsu. Lo encontró sentado en la barra y se dirigió hasta ahí.
-Andando- fue lo único que le dijo al peliplatinado. Suigetsu se levanto del asiento y lo siguió hacia la salida del salón. Una vez afuera de ese lugar, recorrieron el vestíbulo hasta llegar a la puerta, en donde el ballet-parking que los había atendido antes los reconoció y salio corriendo en busca del auto del azabache.
-¿Dónde estabas?- le pregunto un despeinado Suigetsu al azabache.
-Por ahí- le contesto con aburrimiento, después le miro Suigetsu estaba muy despeinado y con las ropas mal puestas- ¿Dónde estabas tu?
Suigetsu sonrío pícaramente
-Conociendo el… lugar
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Los rayos de sol entraron por aquella ventanita iluminando el cuarto y dejando ver los muebles sencillos tallados en caoba. Eran bonitos y acogedores.
En ese momento, un rubio iba abriendo sus impresionantes y únicos ojos azul cielo regresando así de aquel sueño raro y muy pasional que había tenido. Miro el techo blanco del cuarto, sintió las sabanas debajo de él y entonces lo noto. Esa no era su cama, se incorporo rápidamente para observar donde estaba, no reconocía nada. ¿Qué estaba pasando?
A su lado alguien se movió un poco bajo las sabanas para luego volver a quedarse quieto, una suave respiración lo sorprendió. ¡Alguien había dormido con él en la misma cama! Miro hacia abajo y noto que no traía camiseta, movió las piernas y sintió en todo el cuerpo el tacto de las sabanas. ¡Estaba desnudo!
No, esto no podía estar pasando, ¿Qué hacia en un cuarto ajeno, en una cama ajena, durmiendo con una persona y totalmente desnudo? ¡¿Qué había echo?! ¡¿Qué había sucedido la noche pasada?!
La persona a su lado se volvió a mover, el blondo volteo hacia ella y sus ojos se abrieron desmesuradamente por la sorpresa.
-Oh no…- dejo escapar en un susurro el rubio al ver a la persona desnuda apenas cubierta por la sabana que estaba acostada a su lado y, que en esos momentos, completamente despierta, le dedicaba una amplia y triunfadora sonrisa.
-Buenos días… Takeshi-kun
-¡CORTE! ¡SE QUEDA!- grito Kakashi mientras se levantaba de la silla del director. Las cámaras empezaron a retroceder- ¡Muchas gracias por su trabajo!
-¡Muchas gracias por su trabajo!- se escucharon varios gritos de el staff para agradecerse a si mismos y a los demás.
-Buen trabajo chicos- les dijo Kakashi al par de rubios que ahora se iban acercando a él- Con esta escena terminamos por hoy- les dijo sonriendo
Ino, la rubia con cuerpo de infarto y ojos azules, se encontraba abrazándose a si misma para cubrirse un poco, pues se encontraba únicamente en unos pequeños boxers y un top del color de su piel. Kakashi reparo en ese detalle y se apresuro a llamar al ayudante del staff.
-¡Tobi!
Un chico azabache y de piel nívea que se encontraba comiendo distraídamente las galletas de la mesa de comida para el staff, dio un brinco al escuchar aquel grito y tomando las cosas que necesitaba, acudió corriendo hacia su jefe.
-¡Voy Kakashi-san!
Tobi llego hasta ellos sano y salvo, sin caerse ni una sola vez, o resbalarse con una botella de agua que se le hubiera caído, o que las toallas hubiera volado lejos por que no las agarro bien, o golpearse contra alguna cámara por que iba concentrado viendo sus pies para no tropezar o alguno de los accidentes clásicos de Tobi.
Dejo las cosas sobre una silla cercana y tomo una bata de seda blanca la cual fue a poner sobre los hombros de la chica con una mirada embelesada.
-Gracias- le respondió la chica mientras pasaba los brazos por las mangas y se colocaba bien la bata, le sonri0 al azabache que casi dio un gritillo mientras sus ojos se volvían corazoncitos. Kakashi suspiro mientras una gotita aparecía en su frente, tomo a Tobi por los hombros y despidiéndose de los rubios, se fueron.
-Estoy molida- dijo la rubia mientras estiraba los brazos estirándose. Los dos empezaron a caminar hacia la salida, donde un guardaespaldas ya esperaba a la rubia para llevarla a su residencia. Ino poseía uno de los mejores cuerpos del estrellato japonés, por lo cual era muy común que la acosaran constantemente- Te lo juro Naru, pensé que me quedaría dormida ahí contigo en la cama del plató.
-Eso hubiera salido lindo en la grabación- le dijo el rubio riéndose, ella le dio un leve golpe en el brazo mientras le sonreía.
-Lo bueno es que por fin puedo irme a mi casa a descansar- la chica casi parecía deleitarse con la sola idea- ¿Qué tal tu Naru? De seguro que también estas cansado y necesitas descansar
-Si, estoy molido también, pero yo no tengo tanta suerte, tengo una entrevista en 30 minutos- le dijo y una mueca de abatimiento se poso en su atractivo y perfecto rostro
-Ay Naru, trabajas demasiado, deberías tomarte vacaciones
-Eso díselo a Iruka
La chica se quedo pensativa y luego río por lo bajo
-Fúgate uno de estos días, los chicos y yo te cubriremos y adelantaremos escenas en donde no salgas.
El chico le sonrío
-Suena tentador ¿Quién eres? ¿El diablo en persona?
Ino se echo a reír. Salieron del edificio con el guardaespaldas de la rubia tras de ellos, hablando por radio avisando que la rubia iba en camino. Una limosina negra y elegante ya estaba afuera del lugar esperando por el rubio.
-Que puntuales- dijo la rubia sorprendida de que Iruka llegara siempre a la hora correcta- Entonces… nos vemos mañana, cuídate Naru
El blondo se despidió de la rubia y entro a la limosina, donde Iruka hablaba por móvil al parecer con alguien que deseaba a Naruto. Iruka hizo una seña al chofer para que arrancara y empezaron a movilizarse hacia los estudios televisivos.
-Suena interesante señor Haruno- decía el castaño a la persona al otro lado del móvil- Si, sin duda las dos partes saldrían totalmente beneficiadas… claro, dígame, cuando quiere que nos reunamos- el castaño había sacado una agenda electrónica- Si, estoy libre ese día, ¿Qué dice de una comida de negocios?... perfecto, entonces nos veremos después, saludos a su esposa y a su linda hija- y colgó.
Naruto miraba ausente por la ventanilla de la limosina, había pensado en preguntarle a su manager quien era y de que iba el asunto, pero decidió esperar, si algo se concretaba, el castaño le avisaría sin duda. Los pensamientos del rubio en esos momentos volaban lejos, hasta una noche estrellada en donde estaba un apuesto azabache de ojos penetrantes y de un profundo negro.
En cuanto llegaron, los primeros en acosar al rubio fueron los de maquillaje y asesores de imagen, quienes se llevaron al rubio para dejarlo perfecto para la entrevista. Cuando Naruto estuvo listo y perfecto, lo llevaron a un pequeño plató amueblado con dos grandes y cómodos sillones color rojo.
Una chica bajita y de cabello corto rubio se acerco al blondo.
-Namikaze-san…
-Dime Naruto- la interrumpió el blondo con una calida sonrisa. La chica se ruborizo ferozmente y bajo la cabeza así como su tono de voz.
-Na… Naruto-san… ese de ahí será su asiento- le señalo uno de los sillones rojos que tenia detrás de él, detrás de éste estaba colgada una gran manta donde se había impreso una de las fotografías de propaganda de Tokio Drama. La fotografía mostraba a un Naruto con una mano detrás de su cabeza, sus cabellos rubios estaban despeinados por el aire artificial que habían utilizado para la sesión de fotos, el rubio tenían una amplia sonrisa divertida en el rostro y sus ojos mostraban un brillo azulino increible.
A su lado estaba Arisa con una sonrisa radiante mientra abrazaba fuertemente por la cintura al rubio, al otro lado de Naruto estaba Ino con los brazos cruzados sobre su pecho y con una pose seductora, los demás actores estaban a ambos lados de Naruto, con poses y rostros que denotaban su papel en la serie. El fondo de la fotografía era el Scramble Kousaten, con miles de luces y autos en movimiento que dejaban estelas de luz. En la parte superior y con grandes letras plateadas y doradas rezaba el nombre de la serie: Tokio Drama.
Una mujer joven se acerco al rubio y a Iruka, que estaba al lado de éste, iba vestida a la moda. Tenía el cabello negro como la noche y lo llevaba recogido en un elegante peinado. Naruto la reconoció ya que era una famosa conductora y periodista en un programa de Japón.
-Buenas noches, me llamo Yuhi Tsumori, pero mejor solo llámenme Yuhi, yo seré quien te entreviste Naruto-san, ¿estas listo?
-Claro- le respondió el blondo y ambos fueron a sentarse a los sillones rojos. El director de cámara ordeno silencio y comenzó a grabar.
-Rodando en 3…2…1
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-Señor Uchiha- llamo un hombre de tez morena con varias cicatrices en la cara a un azabache quien en esos momentos miraba distraídamente por la ventana, la clase se le estaba haciendo tan pesada y aburrida que había decidido enfocar su atención al cielo, que le recordaba a un rubio de perfectas facciones y a sus labios- ¿Puede decir la respuesta?
El profesor Ibiki parecía molesto por el echo de que Sasuke no prestara atención a la clase, sin embargo, Ibiki-sensei no contaba con que Sasuke no solo era guapo, si no también un genio.
-3 a – 2 b (5 a + 2 c) + 7 c – contesto Sasuke como si estuviera diciendo que el día era soleado.
-Correcto…- Ibiki-sensei parecía frustrado, nunca había logrado agarrar al pelinegro de bajada por más distraído que estuviera.
El timbre sonó anunciando el tan esperado término de clases. Los alumnos recogieron rápidamente sus cosas y salían velozmente del salón de clases, como si creyesen que si se quedaban un minuto más ahí, al profesor Ibiki le daría por querer dar clases extra vespertinas.
-Hoy has estado raro- Suigetsu lo había alcanzado por el pasillo cuando se dirigía hacia la salida para poder ir a su casa de una buena vez.
-Hn…
-Y expresivo
-Hn
-¡Joder Sasuke! ¡No seas tan fastidioso! ¡Deja de hablar aunque sea por un solo segundo!- dijo Suigetsu son fingida cara de enojo. Sasuke se limito a poner lo ojos en blanco e ignorarlo.
Suigetsu hizo una mueca de molestia, ese día Sasuke estaba muy raro, y él tenia el presentimiento de que era por algo que había ocurrido en esa fiesta.
-¡Sasukee-kuuun!
Una voz chillona se acercaba por el mismo pasillo, Suigetsu bufo con irritación mientras que Sasuke seguía caminando como si nada hubiera pasado.
Por el pasillo venia una chica de cabello pelirrojo con ojos de un café rojizo.
La chica los alcanzo y se colgó del brazo de Sasuke con una expresión de felicidad.
-¿Acaso no tienes a otra persona a la cual joderle la vida, Karin?- le pregunto Suigetsu con una nota acida en su voz
-Mira pez apestoso, yo vine a ver a Sasuke, no a ti, de echo, no creo que alguien pueda venir a verte a ti… que asco- le contesto la chica con un tono irritado mientras hacia una mueca de asco.
Suigetsu se llevo una mano a la boca, haciendo un gesto de sorpresa
-¿Celosa?
-¿De ti? ¡Jah!
-De que a mi si me quieran
-¿A ti? ¿Quererte? No me hagas reír, ¿Quién podría querer a una cosa como tu?
-Hm.… déjame ver- dijo Suigetsu mientras fingía pensar- ¡Ah si!- con un ágil movimiento la quito del brazo de Sasuke y se colgó el en el brazo- Sasuke.
Karin tenía una cara que hacia parecer que echaría espuma por la boca de lo enojada que estaba.
-¿Cómo te atreves a insinuar que tu… que tu y el grandioso de Sasuke-kun…?
Suigetsu se empezó a reír
-No insinúo nada, es la verdad
-Escúchame bien intento de pez humano, ¡Mi Sasuke-kun jamás seria como tú! Un… un… ¡Un asqueroso y repugnante enfermo sexual gay!
-¡Karin!- Grito Sasuke
-¿Si Sasuke-kun?- la chica lo miro con ojos ensoñadores
-¿Puede callarte de una buena vez? ¡Me tienes harto!, ya te eh dicho que no me sigas, ¡Que no tengo ni la mas cojonuda intención de salir contigo! ¡Aléjate de mí de una puta vez!- le dijo el azabache encolerizado, Karin compuso una mueca dolida y confusa.
-Pero Sasuke-kun…
-¡¡Entiéndelo joder!! No me gustas, no me gustaras nunca, eso no va a cambiar, deja ya de rebajarte de esa manera. ¡¡Déjame en paz!!
Sasuke se desasió del agarre de Suigetsu, y furioso, siguió su camino. Suigetsu lo siguió en silencio, lo más sensato era no molestarlo en esos momentos a menos que quisiera terminar con un ojo morado y el labio partido cortesía de su azabache amigo.
Mientras tanto la cara dolida de Karin cambiaba por una irritada.
-Ya lo veras Sasuke Uchiha, tu terminaras siendo mío
Y diciendo esto, dio media vuelta para alejarse de ahí.
-¿Este es el plato para la 17?- pregunto una joven de largo cabello castaño con un uniforme conformado por un pantalón negro un una camisa blanca a un hombre que estaba arreglando y limpiando el plato para darle una buena presentación.
-Si, es ese y este de aquí- le contesto, la chica tomo el plato y luego compuso una pose de impaciencia
-Venga, se enfría la comida
-Oye, en un restaurante como este, cada pequeño detalle cuenta, y más si el cliente es uno de los herederos de la gran empresa Sharingan Corp.
-¿¿¿¿Qué???? ¿Lo dices en serio?- a la chica se le abrieron los ojos sorprendida- ¿En la 17?- la chica fue hacia la puerta de vaivén, y miro por la pequeña ventanilla en forma de circulo hacia la mesa 17
El joven chef, viendo lo que hacia fue hacia ella y la tomo del brazo
-Ni se te ocurra hacerlo
-¡Kami! ¡No solo es rico si no que esta guapísimo!
-Basta ya- le dijo tomándola por los hombros- Escúchame bien, no quiero que molestes al nuestro cliente ¿entendiste? No quiero problemas, si lo veo hacer una sola cara de molestia… te despido
-Pero…
-Des-pi-do
La chica torció el gesto molesta, que gran oportunidad se le estaba yendo.
-¡Amo este restaurante!- exclamo Suigetsu dando un pequeño brinquito en su silla- me gusta ver a la gente cruzar las calles desde aquí arriba
Suigetsu había convencido a Sasuke de salir por ahí a comer en algún restaurante ya que el azabache parecía zombie. El peliplatinado había escogido uno de sus restaurantes favoritos, el cual estaba en el 3 piso de un gran edificio frente a scramble kousaten. En cuando habían llegado Suigetsu había casi corrido a escoger una mesa frente a las enormes ventanas que tenían vista al cruce.
-Si como sea- le dijo un joven azabache con gesto de aburrimiento- ¿Para que querías que saliéramos?
-¿Por que siempre debes ir al meollo del asunto? Deberías irte por las ramas mas seguido, se obtiene mucha información de las personas de esa manera… y también llegas a conocer mejor a las personas de ese modo.
Sasuke levanto una ceja
-¿Desde cuando me interesa conocer a las personas?
-Así que no te interesa conocer a nadie ¿eh?
-Suigetsu, no se por que demonios debo repetirte las cosas dos veces
-Ya, vale… apuesto a que si fuera rubio y de ojos azules ahorita estuvieras yéndote por las ramas
Sasuke entrecerró los ojos
-Gracias a la suerte que no lo eres
-Itae Sasu-chan, ¡eres muy malo comigo!- el peliplatinado hizo una falsa mueca dolida y se toco el pecho justo donde esta el corazón
Sasuke estaba a punto de gritarle cuando la mesera apareció. Y les coloco lo que habían ordenado.
-¿Desean algo más?- pregunto, sin embargo, volteaba a ver única y exclusivamente a Sasuke
-No, pero si quieres una foto, cobramos por ellas- dijo Suigetsu
La chica se puso se sonrojo tanto que parecía que estabas frente a un semáforo en rojo. El azabache se limitaba a ver una de las televisiones de plasma que estaba localizada cerca de ellos, escuchando las noticias. Cuando la chica se hubo ido el azabache tomo los cubiertos y comenzó a comer, Suigetsu lo imito.
-¿Piensas decirme de lo que quieres hablar conmigo o simplemente venimos aquí por capricho tuyo? – le pregunto el azabache antes de llevarse un bocado de su platillo a la boca.
Suigetsu mastico con lentitud, mirando hacia el cruce donde la gente se apresuraba a caminar para llegar al otro lado, su amigo había estado raro ese día, no era simplemente el echo de que estuviera ausente, si no que también había estado mas paciente, mas comprensivo e incluso, Suigetsu podía jurar que lo vio sonreír levemente cuando, en clase de educación física, miro hacia el cielo.
-¿Piensas decirme que paso en la fiesta? – le devolvió la pregunta el peliplatinado
-¿Piensas decirme donde estabas y que hiciste cuando te estuve buscando?
Suigetsu entrecerró los ojos, maldito Sasuke, sin embargo, como siguieran así no conseguirían llegar a ningún lado.
-Si te digo que paso, ¿Me dirás que te paso a ti en esa fiesta?- le pregunto Suigetsu al azabache, este solo se limito a encogerse de hombros mientras tomaba de su copa de vino. Suigetsu suspiro derrotado.
-Estaba con Neji
Suigetsu miro a su amigo atentamente, esperando una reacción, unas palabras, una mala mirada, pero no hubo nada. Nada, Sasuke siguió comiendo como si nada.
-¿No dirás nada?
Sasuke lo miro, la verdad es que ya se imaginaba eso, más bien, estaba casi seguro de que Suigetsu había estado con Neji y lo que había pasado.
-¿Quieres que diga algo?
-La verdad no, y tengo el presentimiento de que ya sabias que me había sucedido, solo que estabas evadiendo mi pregunta. Pero eso ahora da igual, lo importante aquí es… que paso contigo
-Nada
-¡Sasuke!
-Te fui a buscar ¿vale? Eso me paso
-Esa es una gran y cínica mentira
-Piensa lo que quieras
-¿Estuviste con él verdad?
-Suigetsu, no te leo la mente, no se a que te refieres
-Bien, si así lo quieres- Suigetsu dejo los cubiertos sobre la mesa y coloco los codos cobre ésta, entrelazo los dedos frente a si y se recargo en sus manos unidas- Estuviste con Naruto Namikaze
Directo, certero y honesto. Aunque Sasuke considerara problemático hablar sobre el tema, era verdad, prefería las cosas de esa manera. Suigetsu espero una respuesta del azabache que nunca llego.
-Bien, dicen que el que calla, otorga. Así que, es cierto, estuviste con él. ¿Paso algo?
Sasuke siguió callado, no pensaba decir nada del tema, mientras menos supiera Suigetsu mucho mejor. Pero con lo que no contaba el azabache era con que su peliplatinado amigo era excelente leyendo expresiones y tenia mucha experiencia en la vida como para suponer correctamente las situaciones.
-Se besaron
-Suigetsu, no seas ridículo ¿En serio piensas que me bese con ese dobe?
-Vaya, así que ya le pusimos apodo ¿eh? Eso quiere decir que intimaron algo… definitivamente se besaron.
*¡Maldito Suigetsu! ¡Que te den cabron!*
En ese momento, el ruido de la televisión les trajo hasta la mesa unas palabras que les eran imposibles de ignorar “…actor Naruto Namikaze…”
Los dos voltearon hacia el aparato, en donde en esos momentos se encontraban las noticias del espectáculo, una mujer de gran sonrisa y cabello corto negro las presentaba.
“…Si, como lo escucharon chicas, justo ayer la periodista Yuhi Tsumori tuvo la gran oportunidad de entrevistar a nuestro rubio consentido. Y créanme, que hubo muchas declaraciones y secretos reveladores.
StarNews les trae todos los detalles a continuación.”
En el televisor aparecieron imágenes de un rubio sentado en un gran sillón rojo con una relampagueante sonrisa en su rostro mientras una chica de largo cabello negro como la noche hablaba con él.
“-Ni mas ni menos que Naruto Namikaze chicas, y justo a mi lado, no se si ponerme a gritar o a correr por la emoción”
El rubio río ante el comentario. La escena se cortó por otra de la misma grabación pero al parecer momentos más adelante.
“-Así que casi no sales, que mal escuchar eso, debe ser cansado- decía la periodista
N: No lo niego, lo es, pero son gajes del oficio y la verdad es que si me gusta mucho actuar
YT: Entonces no hay mucho tiempo para vida sentimental me imagino
N: Pues si, casi a todos los que estamos en la esfera artística nos pasa eso
YT: Yo tengo una duda Naruto-san, y es que dese hace ya tiempo se vienen escuchando fuertes rumores de que existe una relación amorosa entre tu y Arisa-san y por lo que me dices entonces, ¿debo concluir que son falsos?
El rubio río con ganas
N: Totalmente- volvió a reír- Arisa-chan y yo somos solo buenos amigos, no te voy a negar que la quiero mucho y que se volvió una muy buena amiga, pero hasta ahí. Si tenemos alguna relación, es puramente de amistad.
YT: Eso sin duda entristecerá a los que desean ver a la pareja de Takeshi & Kumiko en la vida real. Pero, y perdona que sea tan curiosa, también existen unos rumores de que no estas con Arisa-san por que en realidad… tu y tu compañero Gaara-san mantienen una relación. ¿Cierto o falso?
Y Naruto volvió a reír, echo la cabeza para atrás como Sasuke recordaba que lo hacia cada vez que le algo le parecía muy gracioso.
N: Falso, totalmente falso. Como ya te comente, no tengo tiempo para una relación amorosa por el momento. La verdad es que Gaara y yo ya hemos escuchado esos rumores, y nos dan mucha gracia. No podemos creer que digan que estamos juntos
YT: Pero, según lo que sabemos, Gaara-san ya ah declarado ser homosexual. Y aun así ¿No hay nada entre ustedes?
N: Nada, Gaara y yo somos excelentes amigos. Siéndote sincero él me contó sobre su sexualidad desde antes, me sorprendió mucho, pero respeto los gustos de cada quien. Gaara y yo tenemos mucho en común y fue fácil entablar una buena amistad con él, pero solo eso.
YT: Además de que tú eres heterosexual ¿verdad? ¿O será que también nos tienes una sorpresa como Gaara-san?
N: Para serte sincero, me consideraba totalmente heterosexual en el pasado, pero bien dicen que todo en este mundo cambia, y es verdad, todo cambia.
Sasuke tomo su copa de vino para darle un gran trago, no le habían gustado nada esos comentarios acerca del compañero de Naruto. Gaara No Sabaku era un actor pelirrojo de ojos aqua-marina muy guapo que tenia el papel de uno de los mejores amigos del protagonista en Tokio Drama, y desde hace tiempo atrás, las locas y obsesionadas fans Yaoi habían empezado a rumorear que los chicos eran muy cercanos y que lo mas probable es que existiera una relación amorosa entre ellos.
YT: Espera un momento, has hablado en pasado, ¿Eso quiere decir que ya no te consideras heterosexual? ¿Dejaron de gustarte las chicas? ¿Ahora prefieres a los chicos? Cuéntanos Naruto-san
N: Bueno Yuhi-san… ahora me considero bisexual”
Sasuke casi se atraganto con el vino al escuchar aquello. ¿Bisexual? ¿Lo decía en serio? ¿Pero como? Naruto siempre había declarado ser 100% heterosexual, ¿por que ahora se declaraba bisexual?
-¿Mas vino?- le pregunto un divertido Suigetsu, Sasuke lo ignoro y volvió su atención hacia la televisión. Habían quitado la grabación y en ese momento la chica conductora hablaba
“..Ahí lo tienen chicos y chicas, definitivamente a todos nos ah dejado asombrados estas fuertes declaraciones de Naruto-san. Estoy segura que ahora si las fanáticas Yaoi celebraran a lo grande el suceso. Mientras tanto yo solo les digo: ¡¡¡Chicos, ahora si ya tienen esperanzas con este joven y guapo actor!!!... yo soy Matsumoto Mizuki y esto fue… StarNews, nos vemos la próxima emisión, ¡¡Sayonara!!”
Sasuke estaba petrificado ¿Qué cojones había sido todo aquello? ¿Bisexual? ¿Por qué? ¿En que estaba pensando ese dobe? A Sasuke lo carcomía una inmensa duda y no estaba dispuesto a quedarse sin aclarar las cosas.
-Suigetsu- hablo con su voz grave y sensual, el aludido lo miro confuso- Necesito el teléfono del móvil de Hinata
-¿Qué…? Pero… ¿Para que?
-Necesito que me haga un favor. Necesito que me de un numero de teléfono.
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Tomo una pequeña toalla blanca y se la puso en la nuca, estaba molido, ese día había sido bastante cansado, necesitaba unas vacaciones, eso era seguro.
Y lo peor de todo es que aun tenia asuntos pendientes, no podía ir a su casa a descansar o ir a divertirse, el trato con Iruka le había salido caro.
Escucho una tonadita conocida y la reconoció como el timbre de su móvil, se llevo la mano al pantalón y saco el pequeño aparato, miro el número telefónico y arrugo el ceño confundido, era un número desconocido.
Pulso en la pantalla el recuadro para contestar la llamada y se llevo el celular al oído.
-¿Bueno?
-Naruto…- una grave, sensual y masculina voz le saludo desde el otro lado. Naruto abrió desmesuradamente los ojos, a pesar de que solo había escuchado esa voz dos veces la puso reconocer a la perfección.
-¿¡¿Sasuke?!?