Draco pov.
Mis rodillas dolían de estar arrodillado sobre el helado suelo de piedra de una enorme cueva durante casi una hora, mi mente comenzaba a nublarse por el esfuerzo de mantener mis pensamientos cerrados, si bien era cierto que había mejorado muchísimo mi oclumancia en el ultimo mes, estaba frente al oclumante mas poderoso de la historia y de mantener a raya lo que veía dependía mi vida. Los constantes crucios no ayudaban muchos que digamos, mi cuerpo se estremecía levemente por los continuos espasmos de dolor que seguían atravesándome aun después de concluida la maldición.
Muy bien Draco, debo de decir que eras un digno hijo de tu padre. -me dijo con diversión en la voz mi nuevo amo acercándose a mi y tomando mi cara con sus heladas manos.- dado la misión que te será concedida no podrás aun llevar la marca- suspire con alivio en mi interior sin dejar de lado mi fría mascara- pero comprenderás que de alguna manera debo de marcarte verdad pequeño?- saco una daga que brillo aun ante la escasa luz de la tétrica cueva, levanto mi tunica en el brazo izquierdo donde se suponía que debía de ir la marca y trazo un profundo corte, la sangre mano a borbotones de mi brazo mientras el solo se reía con esa lúgubre risa que hacia estremecer hasta al mas valiente de los hombres.
Contuve el gemido de dolor mordiendo fuertemente mi labio el cual comenzó a sangrar por la presión que ejercía sobre el, pero es que la daga debía de ser mágica y el corte no dejaba de quemar como si dagas calientes siguieran rompiendo mis músculos, me estremecí al sentir con asco como unos delgados y fríos labios se posaban sobre los míos y una serpentina lengua limpiaba la sangre de mis labios. Me quede quieto intentado contener las nauseas que me provocaba su toque y a los pocos segundos el dolor ceso y el se alejo. Mire hacia abajo y vi su varita sobre mi brazo, donde antes se escurría sangre ahora se veía una horrible cicatriz.
Bien, has probado ser merecedor de servirme Draco- contuve el gemido de ironía en mi interior mientras volvía a inclinar mi cabeza en una reverencia al oscuro y despreciable ser frente a mi, aun seguía arrodillado en el suelo de la fría cueva y comenzaba a preguntarme cuanto mas faltaría. – Estas cerca del joven Potter verdad?
El miedo me asaltó por un momento pero me recordé dejar de lado las emociones y conteste- Lo veo cada día en la escuela mi señor, es difícil estar cerca de semejante escoria sin poder hacer nada al respecto.
Otra vez esa lúgubre risa..- no te preocupes Draco, pronto habrá algo que puedas hacer- levante la vista sin comprender.- Esa será tu misión, quiero que hagas que confíe en ti, acércate a el.
Pero mi señor- no sabia por que pero esto no me daba buena espina, y no quería tener nada ver con esto, no quería que Potter corriera peligro ¡maldito Amantis Maghas! Seguro que era eso... si eso tenia que ser...
Quiero que confíe en ti deberás entregármelo Draco- me dijo sonriendo perversamente mientras mi interior me gritaba que me revelara contra esa orden y yo me esforzaba por mantener la mascara de frialdad y las barreras de mi mente.- quiero que lo seduzcas... que lo enamores... es un tonto Gryffindor después de todo, no puede ser demasiado difícil... y una vez que así sea me lo entregaras tu mismo.
Si señor... susurre bajo mientras pensaba en como iba a hacer para safarme de esto.
Bien puedes irte.- volví a hacer una reverencia y camine hacia la puerta seguido de Severus, cuando estaba alcanzando al puerta que me permitiría salir de este infierno su voz me detuvo- te veo en un mes Draco, para ver tus avances, y no lo olvides no me gusta que me decepcionen
No amo.- cruce la puerta y camine directamente hacia las afueras de la cueva, necesitaba salir de ese lugar y necesitaba hacerlo ya. Sin mirar atrás desaparecí en cuanto cruce las barreras de protecciones apareciendo en Hosmade donde nuevamente sin mirar atrás me dirigí hacia el castillo, podía oír los pasos de mi padrino detrás de mi pero no me importaba nada necesitaba algo con que liberar mi furia, necesitaba algo co que olvidar por un momento.
Draco detente!- escuche la voz de mi padrino ni bien pose las manos sobre las puertas de roble del castillo, las empuje y seguí con mi camino.- detente!- me tomo por el brazo girándome
No me digas que hacer!- le grite furioso!- estoy harto de que todos me digan que debo hacer! Tu! Dumbledore! Voldemort! Déjenme en paz! Al menos una noche!
Draco se que tu y ese Potter...- lo mire de una forma fiera que hizo que se detuviera.
Tú no sabes nada de mí y de Potter! Y no hay nada que saber tampoco!- le respondí con un grito colérico- no hasta ahora al menos...
Draco...
Déjame en paz! Solo esta noche si..- me di la vuelta soltándome de su brazo y me dirigí hacia la sala común de Slytherin, nada mas entrar vi al trío dorado sentado rodeado de libros, Potter me dirigió una mirada y luego volvió a lo suyo, hacia mas de un mes que eso era así. Mientras había gente a nuestro alrededor todo era como siempre había sido, pero en cuanto nos quedábamos solos parecía como si una fuerza magnética nos arrastrara al uno contra el otro, pero Potter siempre se detenía cuando las cosas comenzaban a ponerse calientes y huía.
Una sonrisa maliciosa brillo en mi cara y comprendí que era lo que necesitaba en ese momento, necesitaba sexo, si esa era lo que necesitaba un buen revolcón donde descargar mi furia y olvidar por un momento mi jodida vida. Recorrí la sala común con la mirada buscando una presa y vi a Blaise mi buen amigo sentado riendo con Pansy... Sonreí y me dirigí directo hacia el.
Blaise podemos hablar un momento a solas?- mi amigo me sonrío sensualmente con solo ver mi mirada y me siguió escaleras arriba rumbo a mi cuarto. En cuanto cerro la puerta detrás de el lo aplaste contra ella besándolo fieramente y con un movimiento de varita ambos estábamos desnudos. No quería perder el tiempo con juegos no estaba para eso, lo arroje sobre la cama y lo observe, profundos ojos azules, piel casi tan pálida como la mía, largo cabello azabache, salte sobre el devorando su boca mientras sin mas me empalaba dentro suyo de un solo movimiento.
Zabini soltó un grito de dolor, me detuve un momento esperando que se acostumbrara a la intrusión y luego de unos pocos minutos cuando al fin se relajo comencé a moverme dentro suyo. Acelere rápidamente las embestidas sintiendo como el placer se despertaba en mi pero no era suficiente.
Que demonios haces!?, abrí los ojos asustado al oír su voz en mi cabeza pero debajo mío era el cuerpo de Zabini el que se retorcía de placer, aumente las embestidas llegando rápidamente al orgasmo, un orgasmo no demasiado satisfactorio pero orgasmo al fin. Mierda! Para! Otra vez su voz en mi cabeza, Sali rápidamente del interior de Zabini justo al mismo tiempo en que la puerta de la habitación era azotada fuertemente contra la pared y entraba Potter echo una furia.
Creo que será mejor que te vallas Blaise...- me miro confundido- después iré a verte, creo que tengo algo que discutir con Potter., me miro aun confundido pero tomo su tunica se la coló y salio cerrando la puerta. Active un hechizo silenciador y uno aislador y me volví hacia Potter.
Que demonios te pasa ahora!- le solté molesto por ser interrumpió
Puedes explicarme por que demonios sentí que estabas tirando a ese idiota de Zabini!?- me grito colérico- y por que demonios me dolió!?
No lo se Potter... tal vez allá mas sentimientos en ti de los que quieres reconocer- le dije burlón tratando desviar el tema, aun no había conseguido nada para revertir el maldito hechizo.
Hablo enserio Malfoy! Dime que demonios pasa!- me grito entre colérico y asustado.
Es el hechizo Potter, se supone que tu eres mío, y yo soy algo así como tu amo- conteste viendo que no me iba a dejar en paz hasta que se lo explicara- nuestras magia se resiente si hago mío a alguien mas.
Y aun sabiendo eso lo hiciste!- solo seguí mirándolo viendo como su furia aumentaba.- maldito desgraciado!
Hey que pretendes!? Que tome el celibato por ti Potter?- le dije sarcástico- no voy a vivir solo del aire hasta que encontremos una solución. A esto- vi como su expresión de furia iba cambiando a una malévola sonrisa que no me gusto nada.
Magia antigua eh? Eso es...- rodé los ojos era eso? Recién ahora lo había comprendido?- asíque si yo sufre si tu haces tuyo a alguien mas, tu que eres mi “amo” sufrirás mas si alguien me reclama a mi como suyo verdad?- mi rostro borro la sonrisa en un segundo- no soy estupido Malfoy, yo soy tuyo asíque para ti será peor de lo que es para mi..
No te atrevas Potter!- le grite cuando ya salía por la puerta de la habitación.
No me pongas a prueba entonces Malfoy... no quiero verte cerca de nadie mas...- y salio, su voz sonó tan enojada, tan posesiva que me dejo pasmado pero sorprendentemente no me enojo sino que despertó el calor en mi interior que aquel orgasmo no había conseguido despertar.