Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Striper por Aluminia

[Reviews - 354]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola!

bueno, aqui les dejo el nuevo capítulo, hay unas cosas un poco...fuertes al final,

enjoy :3

Sintió un agradable calorcillo recorrerle el cuello, la sensación le gustaba, sintió el calor intensificarse y convertirse en un suave roce, casi imperceptible, se removió en su agradable lecho y abrió los ojos con pereza para encontrarse con las orbes marrones de Theo.


-Perdón, te desperté- se disculpó el Nott, acariciando el cabello de Nev.


-No te preocupes-respondió el león, embelesado en los seductores y expresivos ojos de su novio.


Theodore besó los labios del gry con mucha delicadeza, se separaron con grandes sonrisas.


-¿Qué hora es?- preguntó el Longbottom, abrazándose a su serpiente.


-Cómo las seis de la mañana-


-Rayos…entro a trabajar en una hora, no tendré tiempo de llegar a mi casa y cambiarme-


-Te puedo prestar algo de ropa- Ofreció el sly, poniéndose de pie y empezando a rebuscar en sus cajones.


-Oh, no tienes que molestarte, de verdad, puedo llegar tarde…-


-Nev, no es molestia- aseguró el Nott, ofreciéndole ropa limpia, la cual Neville tomó muy agradecido.


Ambos jóvenes se vistieron en silencio, la ropa que Theo prestó a Nev era sencilla, un pantalón negro con rayas blancas, una camisa en un tono gris muy pálido y corbata negra a rayas, se puso los calcetines con facilidad pero sabía que los zapatos de su compañero ni de broma le quedarían, salió de la habitación junto con Theo, pero ambos olvidaron un pequeñísimo detalle...


-¡OH POR DIOS!-  exclamó Pansy, al ver a su amigo y a Longbottom aparecer tan quitados de la pena, Neville se sonrojó al instante y su rubor aumentó al ver a la morena vestida solamente con una ligera blusa de tirantes (sin sostén) y los bóxers de su novio.


Draco lo miró con una sonrisa en los labios, el rubio vestía pantalones de mezclilla negros, una camisa negra y un suéter del mismo color, Blaise por su parte usaba un uniforme, el italiano le dedicó una mirada severa pero no dijo nada.


-Ay, ¿Por qué carajo no avisas, Theo?- regañó la muchacha, mientras Draco se quitaba el suéter y se lo arrojaba para que se cubriera.


-Para que se te vaya quitando la costumbre de andar por ahí tan descubierta- le rezongó Theodore.


-No, no…ya debería irme…- intervino Neville, con la mirada baja y el rostro rojo como tomate.


-No, quédate a desayunar, por favor- pidió la Parkinson –Blaise, amor, ¿Podrías traer otra silla?-


El aludido rodó los ojos con fastidio, Pansy le lanzó una mirada enfurecida y no le quedó más remedio que hacer lo que le pedían.


-Yo…no creo que deba, de verdad…no me gustaría molestarlos-Dijo el león, mientras Blaise colocaba la silla junto a Pansy y ocupaba de nuevo su lugar.


-Oh, no molestas, cariño, siéntate- insistió Pansy, Nev ocupó su lugar (entre Pansy y Theo), la muchacha le sirvió un plato de huevos con jamón y un vaso de jugo de naranja, comenzó a comer tratando de no cruzar la mirada con nadie.


-Entonces…- empezó el Zabini  -¿La pasaron bien anoche?-


A Neville e le cayó el tenedor de la mano.


-Muy bien, como tú con Pansy- se defendió Theo.


La muchacha se sonrojó pero no dijo nada.


-Mmmm, ¿No habías terminado con Theo, Longbottom?- pegunta Blaise sin ningún tacto, al pobre Nev se le vuelve a caer el tenedor de la mano con todo y bocado.


-Yo, yo….- balbuceó el gry, nervioso.


-No hace falta que le respondas- interviene Draco, mirando a Blaise con desaprobación. –El joven Zabini esta comportándose como un tarado metiche-


Blaise frunció el ceño y dijo –Pues el heredero Malfoy también se entromete-


-Lo hace porque el muchachito Zabini es un impertinente- siseó Theodore.


-Ya basta, trío de niños malcriados- gruñó Pansy.


Los tres muchachos no tuvieron más opción que obedecer.


-Y…- continuó Pansy- Neville ¿Te puedo decir Neville?- el aludido asintió sonriente –Bien, en diciembre pasado vimos un artículo en el periódico sobre la boda de Granger y Weasley, ahí mencionaba que trabajan en la empresa de Potter… ¿Qué es lo que haces en el grupo?-


-Oh, si…esas fotos…- murmuró el gry –Me encargo de manejar el dinero, junto con Hermione, hacemos presupuestos, balances, declaraciones de impuestos…además me encargo de organizar comidas, cenas eventos y cosas así-


-Sin ofender, pero…- volvió a hablar Blaise –No me cuadra para nada esto de dedicarse a bienes raíces, quiero decir…yo me los imaginaba de aurores…-


Cierto rubio no pudo contener una sonrisa al recordar que casi lo mismo había dicho el al joven Potter.


-Harry y Ron terminaron sus estudios de auror- comentó Nev, algo más cómodo – Herms, Gin y Luna se fueron por otros rumbos, George aun tiene la tienda de sortilegios Weasley, y yo estudié herbología pero…Harry necesitaba un respiro, y bueno…no pude hacer más que apoyarlo.-


-Eso es muy dulce- dijo la morena- y por lo que leí no les va nada mal-


-Sí, la verdad nos va muy bien- admitió el gry, encogiéndose de hombros.


-¿Y se la pasaron bien anoche o no?- insistió el Zabini.


-Blaise, deja de preguntar esas cosas- le gruñó Theo.


-¿Qué tiene de malo?- se defendió el moreno, con carita de inocencia –Yo solo trato de ser cortés, me interesa tu felicidad, Theo-


-Te agradezco tu interés, pero esas cosas son privadas, el hecho de que tu y Pans griten como posesos no significa que les guste que los escuchen, ¿O si?-


-¡Theo!-reprimió Pansy, completamente ruborizada.


-No ha dicho nada que sea mentira- Hablo Draco –Pero tus alaridos se escuchan hasta la sala-


Los slytherin comenzaron a reír de buena gana, el Longbottom observaba a Theo embelesado, esa risa y sus gestos eran simplemente…encantadores.


-¡Igual los grititos de Blaise cuando se viene!-bromeó el Nott, y de nuevo todos las serpientes rompieron a reír, Nev solo podía observar a su novio, quien notó la mirada del león -¿Pasa algo, Ne…?-


Aquella pregunta jamás conocería su fin, pues los labios de quien la pronunciaban fueron besados con ternura por otros muy cálidos, Thedore no pudo reaccionar, solo se limitó a sentir y a mirar a Nev separarse de él, mirándolo a los ojos.


El silencio reinó en el comedor, Neville pareció reaccionar, había besado a Theo frente a sus amigos, pronto su rostro se pintó de un rojo manzana y se levantó torpemente de la mesa.


-Creo que debería irme- farfulló el león, entonces recordó que no portaba calzado alguno, además de que no tenía las llaves de su camioneta, miró a Theo suplicante –Mis cosas….-


El joven Nott se levantó y fue directo al balcón, regresó con la ropa de Nev doblada, sus zapatos y las llaves de la Journey.


-¡Theo!, ¿Lo hicieron en el jacuzzi?, por si no lo sabías me gustaba relajarme ahí- le riñó Blaise.


-Ay, por favor-habló Theodore, en tono de fastidio –También lo hicimos en el sillón y sigues sentándote ahí-


A Neville se le cayeron las cosas de las manos por la impresión, se agachó a recogerlas y dedicó a Theo una mirada de reproche, se incorporó y fue a la sala a calzarse los zapatos, Theo notó el enojo de su león y lo siguió, sentándose a su lado.


-Perdóname- susurró el Nott, Nev se enderezó y se levantó de pronto.


-No importa, olvídalo…- observó las llaves en su mano y se le ocurrió una idea -¿Qué tal si los llevo a trabajar?-


-Pues por mi está bien, pero pregúntales a ellos- contestó Theo, él y Nev caminaron a la mesa donde el resto de las serpientes terminaba de desayunar.


-¿Los llevo?- preguntó Neville.


-¿No llegarás tarde?- preguntó Pansy, que llegaba del cuarto de Blaise ya vestida.


-Sí, un poco, pero Harry me la debe-


-Ahmmm…no quiero ser aprovechado pero… ¿Te molestaría dejarme en la lavandería?, queda a unas cuadras de aquí pero…caminando y cargando toda la ropa se hace pesado- pidió el Malfoy.


-No es molestia, cuando estén listos nos vamos-


No tardaron ni cinco minutos en salir, Nev los llevó hasta el auto y les abrió las puertas, subieron diciendo un par de cumplidos a Neville por la bonita camioneta, al subir lo primero que hizo Theo fue tratar de prender la radio.


-No, no pongas el radio- habló Nev.


-Como quieras- dijo Theo, encogiéndose de hombros, no pensó que molestara a Neville con eso.


-Abre la guantera- indicó el león, Theodore siguió la indicación, dentro encontró algo que le encantó.


-¡Por Dios!, ¡No puedo creerlo!- exclamó el Nott con genuina emoción en sus hermosos ojos marrones.


-Me dijiste que te gustaba, pensé que sería un buen detalle- se justificó el gry, riendo al ver el entusiasmo en Theo.


El joven Nott puso el disco de Frank Sinatra, la primera canción fue “My way”.


-And now….the end is here…(Y ahora...el final está aqui)- cantó Theodore, con esa voz que fascinaba a Nevile.


-Oh no- se quejó Pansy, en broma –Ya va a cantar-


-And so i face the final curtin (enfrentaré el telón final)- continuo Theo, todos los pasajeros sonrieron.


El primero en bajar fue Draco, se despidió de todos con un movimiento de mano, después bajó Blaise, le siguió Pansy, Nev condujo el camino ya conocido para llegar al centro de reciclaje.


-Bien, hoy no puedo salir contigo, pero quiero….- Neville suspiró –quiero decirte que pasé…que…-


-Te quiero- le interrupió Theo, depositando un suave beso en los labios de su novio–Esta bien, tienes trabajo, nos vemos-



-Claro, adiós…Yo también te quiero…-


--------------------------------------------------



Era casi automático, carga de ropa, jabón, suavizante, iniciar ciclo, sacar de lavadora, meter a la secadora… lo había hecho tantas veces que había dejado de ser interesante o si quiera entretenido, se sentó en una de las sillas a esperar, tomó una revista vieja al azar y la hojeó sin leer en realidad.


-¿Ocupado?-


-Algo- respondió Draco, sin voltear a ver a la persona que le hablaba. –Quehaceres diarios, nada especial-


-Entonces no te importara acompañarme a comer-


El rubio levantó la vista de la revista para encontrarse con la mirada esmeralda de Harry.


-Hola, Dra...Malfoy-


-Hola…-


 Harry se quedó mirando esos ojos plateados, completamente hipnotizado, lo mismo pasaba con su rubio compañero.


-Eh…yo…este…-balbuceó Harry –Sí, eso…acompáñame a comer-


-No he acabado de lavar la ropa- se excusó el rubio, levantándose para poner otra carga de prendas.


-Olvida eso- gruñó Harry, acercándose a Malfoy.


-Tengo que lavarlo.-


-Recógelo todo, yo pago la tintorería-


-En realidad ya casi acabo- insistió el heredero Malfoy, tratando de poner la ropa en la lavadora pero el gry se lo impidió.


-Me estás esquivando- concluyó el ojiverde, mirando a Draco con gesto serio.


-Claro que no- se defendió la serpiente, pero Harry no estaba equivocado, el de verdad lo estaba evitando.


-Claro que si-


-¿Por qué crees eso?-


-¿Por qué rayos insistes en lavar la estúpida ropa si ya te dije que yo pago la tintorería?-


Malfoy lanzó un suspiro cansino, le dio el canasto con ropa sucia a Harry quien sonreía abiertamente.


-Ya, tu ganas, paga la tintorería y desperdicia dinero, como sea a ti nada te falta-


-Eso no es cierto- contraatacó el Potter, mientras ayudaba a su amante a recoger la ropa.


-Sí lo es- afirmó Draco, al tiempo que ambos caminaban al auto de Harry con las cargas de ropa –Tienes un auto lujoso, una empresa exitosa y mucho dinero, en gringotts y en el banco, ¿Qué es lo que te falta?-


-No todo en la vida es dinero-Contestó Harry, “en realidad me faltas tú…” pensó, pero omitió el comentario creyéndolo ridículo, ambos dejaron las cosas en los asientos de atrás y ocuparon sus respectivos lugares.


-Tienes razón-cedió la serpiente, ajustando el cinturón de seguridad. -¿A dónde iremos?-


-Hay un restaurante de comida china que…-


Harry se detuvo al ver la expresión de asco en la cara de Draco.


-No me gusta mucho la comida china- admitió el Malfoy.


-Ok, ¿Qué te gusta entonces?-


-Pues…. ¿Qué tal el restaurante francés del que hablaste?-


-Oh, cierto, eres un Malfoy…- recordó el Potter, sonriendo.


-¿Y eso qué?- gruñó Draco a la defensiva.


-Que eres francés, ¿Qué pensaste?-


-No, nada…- Draco se sintió algo tonto por haberse puesto a la defensiva por algo así.


El gryffindor condujo hasta una tintorería, dejaron encargada la ropa y reanudaron el vieaje, el león manejó hasta el restaurante en el que había comido con Ginny, estacionó y caminaron en silencio al lugar, Draco se detuvo en seco y miró  a su compañero.


-¿Ahora qué?- preguntó  Harry.


-Creo que debí ir a cambiarme…-


-¿Por qué?, estas guapo con esa ropa- halagó el Potter, Draco sintió que el corazón se le aceleraba pero lo disimuló muy bien.


-Ajá, pero es tan informal…-


-Oh, vamos, no tienes que preocuparte por eso-


-Lo dices porque tú si vas bien vestido- reprochó el Malfoy, y tenía razón, el niño de oro vestía un traje gris, camisa negra, cinto y zapatos negros.


-No, no es por eso…- alegó el ojiverde, rodeando a Draco por la espalda, acercó sus labios al oído del rubio y susurró –Tu te ves bien vistiendo cualquier cosa…o sin prenda alguna, así que no te acomplejes-


Draco sintió un escalofrío recorrerle la espalda y unas ganas tremendas de tomar a Potter del brazo, meterlo al auto y tener sexo hasta dejarlo seco…


-Vamos- insistió Harry, dejando pasar la excitación de Draco.


Al entrar el maître reconoció al ojiverde, pronto les ofreció una mesa, la carta es fue entregada a ambos, Draco explicó a Harry lo del menú, pues siendo de ascendencia francesa dominaba el idioma, ambos disfrutaron sus platillos, hablaron de esto y de aquello, al terminar la agradable comida los dos muchachos se dirigieron al auto, Harry arrancó sin decir nada pero con una sonrisa en el rostro, cuando pasaban cerca de unos terrenos abandonados Draco habló.


-Estaciónate aquí- pidió el Malfoy, indicando un lote baldío entre dos edificios solos.


-¿Qué?-


-Que aparques aquí, carajo-


-¿Por qué?-


Draco suspiró –No te la puedo chupar mientras manejas, no sería ético ni responsable-


Harry estacionó el auto, estaba en shock, volvió su mirada al Malfoy que ya estaba sobre sus pantalones, abrió el cierre y comenzó a acariciar sobre el bóxer.


-¿Qué rayos haces?- preguntó Harry, deleitándose con las caricias del rubio.


-¿Qué te parece que hago?- Draco retiró el bóxer lo suficiente para liberar la erección de Harry, siguió acariciando con mano experta la extensión del falo, lo tomó con ambas manos y lo guió hasta su boca, introdujo solo la cabeza, chupando suavemente, luego fue introduciendo más y más hasta que logró tenerlo todo en la boca.


-Mhmmmm…ohh… ¿Por qué tan complaciente?- preguntó el Potter, acariciando la rubia melena de su amante.


Draco se dejó lo que hacía sin levantarse, miró a Harry a los ojos y dijo –Tú tienes la culpa, me excitas cuando dices esas estupideces…-


Sin dejar de mirarlo a los ojos, el rubio volvió a introducir el miembro del Potter en su boca, comenzó a succionar con un poco mas de fuerza.


-Ohhhh...ahhh…que rico…mhhhhhhhh- gemía Harry, Draco continuó con su tarea mientras acariciaba los testículos de su amante –Mhmmm…Draco…-


El Potter terminó dentro de la boca del sly, quien tomó hasta la última gota de la semilla de su león.


-P-p-p-perdón- balbuceó el niño de oro, mientras el Malfoy le acomodaba el bóxer y los pantalones de nuevo.


-No importa, no me molesta- contestó la serpiente, volviéndose  acomodar en su asiento –Vámonos-


-¿No quieres que yo…?-


-No, estoy bien, vámonos-


Harry no dijo nada más, simplemente condujo, llegaron a la tintorería a recoger la ropa y volvieron al camino, al llegar al edificio del Malfoy, Harry se sintió algo torpe, no sabía que decirle.


-Fue…una…comida agradable- dijo Harry, sintiéndose medio estúpido.


-Pues si…- concordó el rubio.


-Ah…yo…ehmmm…-balbuceó el Potter.


-¿Qué pasa?-


Harry suspiró resignado –Me encantas- soltó.


-Creo que ambos sabíamos que esto podría llegar a pasar- habló el Malfoy, Harry no pudo más que darle la razón.


-Pero…es solo el sexo- mintió el de los ojos esmeralda, maldiciéndose por no hacer uso del valor gryffindor.


Draco se sintió desilusionado y, para que negarlo, dolido por aquel comentario.


-Me lo imaginaba- habló el rubio –Es normal, pero en cuanto te sientas más seguro de ti podrás hacerlo con cualquiera-


El heredero Malfoy resintió sus propias palabras, definitivamente le gustaba Harry Potter, pero al sentir ese extraño dolor con su comentario supo cuán grande era su atracción por el azabache.


-Sí, lo sé –cedió el Potter, cuando lo único que podía pensar era “Yo solo quiero hacerlo contigo”


-Bueno, por hoy ya fue bastante-


-Sí, de verdad bastante- concordó el moreno –el sexo oral es genial contigo-


-¿Lo probaste con alguien más?- Draco por poco se da un tope contra el tablero, aquello no era su asunto, no debía preguntar.


-Sí, con Ginny…pero no es…solo que…bueno, tu sabes…sin erección pierde el sentido- Los dos rieron ante el comentario.


-¿Me llamarás?


-Te llamaré- confirmó el Potter –además necesitas decirme cuando tienes el fin de semana libre-


-Claro, sobre eso… ¿Seguro que quieres que vaya?-


-Tan seguro como de que me llamo Harry James Potter Evans-


-Ya, muy seguro- le bromeó Draco –En fin, debo hacer la comida, nos vemos-



-Hasta luego-


---------------------------------------------



Entró al café sonriendo, pero al ver a aquella mujer que había sido la causa de la pelea entre ella y Blaise se congeló.


-Blaise- saludó la muchacha extraña, el aludido sonrió.


-Hola Kim, ¿Lo de siempre?-


-Claro cariño- habló la tal Kim, en tono coqueto, entregó un billete al italiano quien lo tomó como si nada, cobró y entrego el cambio.


-Está en un minuto- dijo Blaise, más bien por rutina.


-Y… ¿Cómo has estado?- preguntó Kim, recargándose en el aparador para pronunciar su escote, Pansy se sintió enrojecer de furia.


-Bien, gracias, ¿Y tú?-


-Pues…muuuy bien…-


-Aquí tienes- Blaise cortó el flirteo, entregó a la mujer su pedido y esta se quedó con la boca abierta por el rechazo.


-Blaise- saludó Pansy, fingiendo que recién entraba, el moreno sonrió ampliamente al verla, se aproximó y la besó en los labios.


-Hola amor- contestó Blaise.


-Mucho gusto- dijo Pansy, dirigiéndose a Kim.


-Oh, si, Kim, ella es mi prometida, Pansy Parkinson-


Kim se quedó como estatua, Pansy extendió su mano para saludarla pero fue rechazada con mucho desdén, la muchacha salió del café hecha una furia, dejando a Pansy con la mano extendida.


-Ay, si te quería mucho- le bromeó Pansy a su novio, los dos rieron de buena gana.


Los dos salieron del local riendo por lo alto, tomados de la mano.


-Blaise…-llamó la muchacha.


-Dime, preciosa-


-¿Quieres ir a mi departamento y hacerme el amor toda la tarde?-


-Ah, últimamente solo para eso me quieres- jugó el Zabini, con un fingido tono de indignación.


-Ya…entonces yo te hago el amor, ¿Te gusta más así?-


-Me fascina la idea, mi amor…pero se suave…-



Los dos se arrancaron a reír nuevamente, sin importarles que la gente los observara.


----------------------------------------------------------

Llegó a su casa con prisas, ya eran las ocho, cruzó los dedos y rogó a Dios que no hubiera llegado ya, entró al penthouse que compartían, estaba a media luz, suspiró aliviada, dejó las llaves del coche en una mesita, pensaba apresurarse a la cocina cuando lo vio, estaba sentado en  el sillón individual de la sala, tenía una copa de vino en la mano, la miraba furibundo.


-¿Dónde estabas?- le rugió, ella se sintió pequeña y frágil.


-Vengo del trabajo, Paulo, lo sabes-


-¡No mientas!- gritó el carioca, lanzando la copa a la alfombra, Ginny dio un respingo, se odiaba por ser tan cobarde.


-No estoy mintiendo, estamos algo atareados por…-


-¡¿Tan atareada que saliste a comer con el hijo de puta de Potter?!- Paulo se levantó enfurecido, se acercó a Gin, quien en una reacción de protegerse retrocedió, el brasileño la tomó fuertemente del brazo y la azotó contra la pared con fuerza, Ginny trató de forcejear para liberarse, lo cual solo enojó más a su novio quien le propinó una bofetada que la dejó casi sin sentido, aprovechándose del estado de la pelirroja, Paulo la acorraló contra la pared.


-Déjame…por favor…no pasó nada entre Harry y yo, de verdad…- gimoteó Ginny, ya sin oponer resistencia a Paulo.


- ¿Por qué me haces esto, Gin?- preguntó el hombre, tomando a la Weasley del rostro con mucha fuerza –Yo no quiero maltratarte, de verdad que no Gin, lo sabes, pero tú me provocas…sales con ese imbécil, no llegas a tiempo para hacerme la cena…-


-Fue el trabajo, te digo que…-


-¡Cállate!- gritó Paulo -¿Por qué me interrumpes, estúpida?-


-Perdóname, yo…-


-¡Qué te calles, puta!- vociferó el brasileño, abofeteando a Ginny con fuerza descomunal, tuvo que sostener a Gin para que no cayera al suelo, la pelirroja temblaba de miedo. –Gin…- murmuró Paulo, con voz gutural, acariciando los mechones pelirrojos, apartándolos de la cara enrojecida y llena de lágrimas de su pareja  -Sabes que te amo, Gin, te amo mucho…pero si sigues comportándote como una perra impertinente, voy a verme en la necesidad de golpearte y lo haré tan fuerte que serás afortunada si solo te tumbo los dientes, ¿Quedó claro?-


La Weasley asintió, temerosa de hablar y ganarse otro golpe, estaba casi sin sentido, su cuerpo laxo y con poca movilidad era más que vulnerable en los brazos de esa bestia.


-Bien- concluyó Paulo, levantando a Ginebra en brazos, le sonrió ampliamente, la cara de Gin era de pánico puro –Ya que no cumpliste con tu deber haciéndome la cena, no te importará cumplir con tu otro deber, ¿Cierto?- Paulo llevó a Ginny hasta la habitación, la tumbó en la cama y comenzó a desvestirse, se acomodó sobre ella y aprovechó que la pelirroja usaba una falda para apartar la ropa interior con más facilidad.


-No…- susurró Ginebra, pero no sería escuchada, el carioca entró en ella sin ningún miramiento.


-Es tu obligación, no te quejes-


Ginebra fue tomada por la fuerza, no era la primera vez que su novio le hacía aquello, solo cerró los ojos y se imaginó lejos, pensó en tiempos mejores…como cuando Harry la abrazaba y la protegía de todo y de todos, no pudo evitar soltar sus lágrimas pero esto poco importó al brasileño, y siguió lastimándola hasta que se sintió satisfecho, derramándose dentro de Gin quien sintió ganas de vomitar, el carioca se tumbó al lado del cuerpo maltrecho de la pelirroja y pronto se durmió.


La Weasley se levantó procurando no hacer ningún ruido, tomó una toalla y fue directo al baño, se desvistió y se metió bajo el chorro caliente de la regadera, sintió sus músculos relajarse, pero el dolor no se iba, ya no sabía si lo que mojaba su cara eran lágrimas o agua, simplemente no lo sabía.


Salió tiritando del baño, pues Paulo insistía en mantener encendido el clima, se sentó frente a su peinador de ébano, las marcas en su cara eran muy notorias,  seguramente le quedarían moretones, en su brazo estaban marcados los dedos de su novio, terminó de peinarse, recogió su cabello de fuego en una trenza, se puso una pijama, el dolor se convirtió en una fuerte punzada cuando se sentó en la cama, se recostó dando la espalda a esa bestia que dormía a su lado, preguntándose si habría alguna manera de escapar.

Notas finales:

Ropa que Theo le presta a Nev (?) xD:

http://i207.photobucket.com/albums/bb19/KimikoSagara/00001f1.jpg

Ropa Harry:

http://i207.photobucket.com/albums/bb19/KimikoSagara/versace.jpg

Ropa Draco:

http://i207.photobucket.com/albums/bb19/KimikoSagara/lote-250-prendas-ropa-tiffosi-ou-1.jpg

Mmmm...bueno, espero que les  haya agradado el fic, creo que debo ponerle mas advertencias, Ustedes que opinan?

muchos saludos y GRACIAS por los reviews :3


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).