Xalih…
Capitulo 1: Prólogo
Mi nombre es Sasuke Uchiha, de los Uchiha del norte, de Theso. Hijo de Fugaku y Mikoto, reyes de mi país. Próximo heredero al trono.
Soy de Theso, una ciudad al norte del continente. De hecho, es la ciudad más grande del territorio. Me explicaré, en nuestro continente hay cinco zonas diferenciadas por las costumbres y la gente. Theso, dominada por Uchiha, mi familia, que dominaba el fuego. Arur, dominada por Hyuga, dominador del rayo. Youri, dominada por los Haruno, la cura era su vida y la fuerza bruta su corazón. Y por último Teliv dominada por Sabaku, adoradores de la arena.
Si sabéis contar, habréis notado que sólo he pronunciado cuatro de las cinco. Eso se debe a que una de ellas ya no existe. Se llamaba Xalih, y estaba situada en unos barrancos lejanos. Dominada por los Uzumaki y su especial habilidad con los animales y el aire, Xalih era una ciudad grandiosa. La más rica y grande del mundo.
Pero hace un centenar de años, fue atacada por la unión de los otros cuatro anteriores, y fue destruida. Cuando quisieron arrasarla, descubrieron que la ciudad había desaparecido y nunca más se volvió a saber donde estaba.
Naturalmente, esta historia es desconocida para la mayoría de personas. Es una canción que tal vez canten los viejos pueblerinos cuando se les va la cabeza.
Bien, pues si me permiten, sigo con la historia. Yo era un Uchiha de las familias ricas que tienen el mando en Theso. Vivía acomodadamente en mi ciudad. Criado entre miradas recelosas y engreídas, aprendí a ser un niño callado y obediente. Pero por encima de todo, yo era hipócrita. Terriblemente. Y malo de corazón. De esas personas que te destrozan la vida y no sienten remordimientos.
Mi padre me había criado de forma severa. Mi madre me había malcriado cientos de veces. Y yo ya me creía el rey del mundo cuando sólo tenía cinco años. No voy a decir que me enorgullezca de estos sentimientos, pero debo alegar en mi defensa que no fue culpa mía. Fue de mis padres y de sus estúpidas habladurías.
La única verdad en medio de todas las mentiras en las que me había criado, era mi hermano. Itachi Uchiha. En la adolescencia se había enamorado de un pueblerino y había huido con él ante las quejas de nuestros padres. Ellos se habían olvidado de él. E Itachi de ellos. Nunca hablábamos de él más de lo estrictamente necesario y yo me sentía hijo único. Razón de más por mi actitud.
Durante años crecí en esas condiciones, hasta que cuando era un adolescente, mi nivel de desfachatez se multiplicó por mil. Trataba mal al pueblo, al servicio, a mis padres… Era incapaz de tener sentimientos por alguien más que por mí mismo. Pero no os penséis que era el típico niñato engreído que no se sabe defender. No. Desde pequeño me habían instruido para aprender todo tipo de habilidades de lucha, y con la poca edad que tenía, era el mejor le reino.
Aquí comienza mi historia….
¿Querréis acompañarme en ella...?