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SMILLEY JEANS por mana san

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SMILLEY JEANS


 


Los cuatro Gazettos se encontraban en el estudio esperando a su líder para otro agobiante día de ensayo, Kai, tenia la manía de hacerlos ensayar sus propias canciones hasta que las pudieran ejecutar hasta dormidos. Eso era bueno, pero generalmente Kai atravesaba la fina línea que divide al profesionalismo de la manía obsesiva.


 


Aun así ahí estaban, desperdigados perezosamente por la espaciosa habitación; Uruha y Ruki arrinconados por ahí diciéndose cosas al oído, Reita inmerso en las cuerdas de su bajo buscando la hasta ahora desconocida afinación perfecta y Aoi, el mas prudente y tranquilo; después de Kai claro, repasando acordes en su guitarra.


Su líder solía ser molestamente puntual, pero hoy se había retrasado.


 


-Ya vámonos…-Espeto Ruki fastidiado desde el regazo de Uruha quien se limitaba a dormitar recargado en la espalda de este con los brazos en torno a su cintura.


 


-Démosle 5 minutos, si no viene, pues lo buscamos y lo matamos por impuntual…- Respondió Reita sin despegar la vista de su instrumento.


 


-Ustedes llegan tarde siempre y el no les dice nada…ahora aguántense…- Habitualmente se limitaba a escuchar los comentarios de sus compañeros sin decir nada, por lo que esta observación causo conmoción en la sala, despertando incluso a Uruha.


 


-Mira…lo defiende…que tierno Aoi chan….defiendes a tu koi…- Aoi le lanzo una mirada rígida desde su lugar, su compañero de guitarras le saco la lengua para después esconderse tras la pequeña espalda de Ruki.


 


-Ya cállate…- Mascullo para volver a su guitarra, pero levemente sonrojado por eso; siempre lo molestaban por defender a Kai, pero era casi necesario, este ultimo era muy amable y se limitaba a sonreír socarronamente ante las a veces, acidas bromas de sus compañero.


 


Pasaron los cinco minutos sentenciados por Reita y comenzaron a considerar la opción de irse.


-Ahí viene…rayos…!!!!- Maldijo Ruki regresando de la puerta con el tedio esparcido por toda la cara, estaba por marcharse cuando vio a Kai entretenido con alguien en el corredor.


 


-Ya ven?…-Aoi se dirigió a la puerta y asomo la cabeza para comprobar la presencia del baterista, pero no lo vio.


 


-¿Dónde?...- Pregunto volteando hacia Ruki que se había posicionado en su sitio.


-Ahí…en el pasillo, esta conversando con un tipo…- Comento con fastidio mientras limpiaba con su camisa el borde de una lata de refresco, Aoi volvió a mirar al pasillo pero no lograba ubicarlo, solo estaban una chica de espaldas conversando con un muchacho.


 


-Delante de la chica?...- Con este comentario Ruki escupió todo el contenido de la lata de refresco que tomaba, salpicando a Reita y  a su inseparable bajo..


Espeto una escandalosa carcajada, misma que se prolongó hasta las ultimas consecuencias, terminando revolcándose junto a Uruha en un sillón, Aoi lo miraba contrariado preguntándose si al pequeño vocalista se le había olvidad tomar su medicación.


 


-¿Qué tienes…ya se te boto la canica…o que?...-Pregunto molesto, pero el otro no paro, su ataque había causado que aun Uruha y Reita se rieran un ignorando que era tan gracioso.


 


-Aoi…estas imbécil…le voy a decir a Kai que le dijiste chica…- Dijo una vez fue capaz de encadenar coherentemente las palabras, pero aun así carcajeándose entre palabra y palabra, lagrimeando por ello enronqueciendo aun mas su voz.


 


-¿Qué…?...-Aoi volvió a asomar la cabeza y estrecho la mirada, y Dios!!!!!...no era una chica,era Kai!!!!.


 


Ahora tendría que aguantar todo el show de Ruki por su equivocación, solo por confundir al delgado músico con una chica; no podían culparlo, de espaldas y a esa distancia era posible la comparación, sin mencionar que, si la vista no le fallaba, los pantalones que Kai vestía eran de mujer.


 


-¿Qué es tan gracioso?-Kai hizo acto de presencia, con esa calida sonrisa ; aunque la ocultaba bajo un semblante de “muérete” en las portadas de los álbumes, las sesiones fotográficas y los videos, en vivo era poseedor de las mas dulce y preciosa sonrisa que muchos hubieran visto jamás.


Aoi rogó mentalmente por que Ruki cerrara su bocota, pero desgraciadamente no fue así.


 


-Pues es que…- En ese momento Uruha le cubrió la boca.


 


-Nada Kai…intimidades nuestras…¿quieres que te cuente?...- Pregunto el guitarrista, Kai negó con la cabeza pasándolos de largo para armar su batería. Aoi le agradeció con la mirada a su compañero recibiendo un guiño de su parte, en señal de complicidad.


Ruki se soltó e hizo un puchero ante el largo dedo de su novio sobre sus labios indicándole que no digiera nada.


-Váyanse al demonio aguafiestas…- Musito y se dirigió a su posición.


Kai estaba muy entretenido armando su batería.


-Pudieron armarla en lo que llegaba…- Recrimino, nada les costaba pero lo habían esperado a propósito sabiendo que detestaba perder el tiempo.


-Pues encima de que llegas tarde todavía te tenemos que armar el instrumento…bonita cosa!...- Ruki era muy honesto, y generalmente discutía con Kai por ese tipo de trivialidades, uno por hablador y el otro por susceptible. Pero habitualmente no pasaba de una riña infantil que terminaba cuando Kai le enmarañaba el pelo al vocalista en señal de paz, o cuando Ruki le picaba las costillas al baterista para hacerlo reír.


-No les costaba nada…sobre todo a ti…-


-Pues si me pagaras para ello lo haría…pero como no…-


 


Aquello iba a durar hasta que Kai terminara de armar la dichosa batería, entonces Uruha noto algo muy particular, Kai vestía pantalones de mujer, era mas que obvio por el corte de los mismos, no se le veían nada mal debido a su espigado cuerpo ,pero de todos modos eran pantalones de mujer.Asi que o se había equivocado al comprarlos, o se sentía muy cómodo con ese tipo de ropa. Cautelosamente se dirigió a Aoi y le comento con secretismo.


-¿Son pantalones de mujer?..- Pregunto, Aoi dio un vistazo a su líder y asintió, en efecto eran de mujer, de la bastilla a la delgada pretina.


Reita que estaba al otro lado de la habitación y que por su seriedad tenía la provechosa habilidad de leer los labios, descifró la secreta conversación, y miro a Kai, sonrió juguetonamente al comprobar que aquello que había “escuchado” era verdad y volvió a su bajo.


-Ya cállate!!..- Ruki se aparto sonriendo como un gato después de haber fastidiado a Kai y, entorpeciendo de paso su empresa de armar su batería.


-Ya listos…- Dijo tomando su papel de líder. El ambiente disipado y risueño se plago de seriedad, si había algo que era muy serio para los cinco era su música. Así que durante el ensayo, nada de bromas, nada de juegos.


Ya en esa situación, incluso Ruki obedecía serenamente a todas las indicaciones de su líder, demostrando que pese a su carácter travieso se tomaba esto muy enserio, como todos los demás.


 


Así pasaron seis horas de ardua práctica, de reacomodo de acordes, de cambio de posicionamientos vocales, de complicaciones de bajeos y de cambios de compás. Pero el único recurso no renobable ahí era la voz de Ruki, estaba ya muy ronca y era obvio que necesitaba descansar. Aunque el lo negara.


-Estoy bien…-Insistió aforrándose al pedestal del micrófono.


-Haber…alcanzas esto?- Kai se acerco a un piano instalado en la habitación y presiono una nota aguda, muy por encima del registro normal de un hombre pero que Ruki alcanzaba sin mayor problema, en optimas condiciones claro. Sabiendo que no la alcanzaría ni en sueño después de esas horas de practica.


-Como sea…-Enfurruñado se levanto de su lugar y empezó a tomar sus cosas, Uruha incluido, le puso encima su chaqueta como si fuera un perchero. Jalo la punta de la bufanda decorativa que el castaño guitarrista portaba  alrededor del cuello y se envolvió la garganta con ella.


-Nos vamos entonces?...- Pese a los ademanes de dignidad de diva, se dirigió hacia Kai para preguntar si era licito marcharse.


-Si…ya fue suficiente por hoy…vámonos…-Respondió con su  usual sonrisa, capaz de bajarle los humos incluso al explosivo Ruki. Los demás empezaron a guardar los instrumentos y a prepararse para irse.


-Hasta mañana entonces…- Dijo tomando sus cosas del sillón.


-Cuídate la garganta si?...- Ya se arrepentía de haber dicho eso, aunque lo había dicho en el sentido mas inocente del mundo, Ruki lo tomo a mal, quizás por el lado menos inocente de la cosa, tomando en cuenta que se iba con Uruha.


-¡No me digas que hacer…!- Fastidiado y buscando no empezar con una discusión innecesaria lo ignoro, otro garrafal error.


-¡No me ignores….sabes que odio eso…- Reita y Aoi que hasta ahora ignoraban la discusión por suponer que se terminaría pronto empezaban a temer que las cosas se pusieran serias. Ruki podía convertir un simple comentario en una pelea titánica, o ignorar olímpicamente el peor de los pleitos, con el nunca se sabia.


Kai continuo ignorándolo, entonces para provocarlo Ruki lo llamo de la manera que sabia lo haría repelar de coraje.


-Te estoy hablando…estupido…- El flemático Kai, se incorporo de su instrumento y lo hizo a un lado de una patada, se abalanzó sobre Ruki y lo tiro al piso.


Uruha y Aoi corriendo a separarlos detestando internamente a Reita por haberse ido ya, pues se necesitaban dos personas para detener a Kai de retorcerle el cuello a Ruki.


Llamar así a Kai era una seria cosa, odiaba hasta las entrañas que le digieran de esa manera, odiaba que lo consideraran un idiota por el hecho de ser amable y atento con los demás. Ruki logro exactamente lo que quería, hacerlo enojar.


Una vez los hubieron separado, Ruki continuaba repitiendo aquello, haciendo que Kai se retorciera de coraje en los brazos de Aoi que lo detenía con dificultad abrazándolo por el pecho.


-Estupido…estupido!!!- Incluso le agrego una tonadita, el rostro de Kai estaba enrojecido y las lágrimas empezaban a salir de sus ojos.


-¡Llévatelo…llévatelo…!!!-Rogó Uruha al ver que Ruki no paraba de provocarlo, poniendo en peligro la integridad de su persona. Con dificultad Aoi arrastro a Kai fuera de la habitación.


-¡Estúpido…trasero de chica…!-Finalizo gritando lo suficientemente fuerte para que escuchara donde fuera que Aoi le llevara, entonces la delicada mano de Uruha se estampo en el pálido rostro de Ruki, dejándolo en total silencio.


-Ya por favor!...-Dijo titubeante ante la mirada atónita del rubio vocalista que lo veía impresionado con la mano sobre la mejilla afectada.


-Uruha…- Musito débilmente, no le había dolido tanto, en realidad no le había dolido nada; le dolían mas las mordidas y moretones que le había hecho la noche anterior; aun así la simple acción lo dejo estupefacto.


Uruha tenía miedo de la reacción de Ruki, pero mantenía el semblante recio y severo, enfatizando que no se arrepentía de su acción.


-Te pasaste….si tu y el juegan esta bien…pero el nunca te lastima…sabes como le duele que le digan así…- Reprimió, Ruki se dio cuenta al fin de lo que le había dicho a Kai y, secretamente agradecía que Aoi le hubiera sostenido, aunque estaba muy delgado esos brazos de baterista podían aplastarle la delicada traquea a Ruki en un dos por tres. Pero lo que mas le dolió fue darse cuenta de su comportamiento, reconocía que se había pasado, odiaba saberse culpable.


-No tenias que golpearme…vuélvelo a hacer y tendrás que tirarte a las almohadas…- Sentencio receloso sobándose la mejilla, salió de la habitación caminando lo suficientemente despacio para que Uruha lo alcanzara.


-Pues lo siento, pero era necesario….además no te dolió tanto…tu aguantas palmadas mas fuertes…- Recuperando su tono juguetón Uruha golpeo suavemente  el trasero de Ruki , haciéndolo sonrojar y sonreír al mismo tiempo.


-Como sea…-Bufo tratando de sostener el talante de indignación.


-Además te voy a pedir que te disculpes con Kai…o será tu quien tendrá que dejar que te cojan las almohadas…por que hoy oficialmente te portaste como un tonto, y a mi no me gustan los tontos…-Ruki se paro en seco, ignorando incluso el soez comentario de las almohadas.


-¿Perdón?...quieres que me disculpe con Kai…-Uruha asintió.


-Yo?...-Preguntó de nuevo.


-Si tu…es lo justo…digo el no te arranco la cabeza…y  mira que te lo merecías.


Lo consideró un rato y reconoció que eso era lo correcto, aunque odiara discurrir siquiera esa situación.


-Pues bueno…ni modo…yo me lo busque…-Continuo caminando hacia la salida junto con Uruha, después de todo habían venido en su vehiculo y debía regresar con el.


-Pero hasta mañana…no creo que hoy quiera hablarme…- Dijo con algo de tristeza mientras abordaba el auto de Uruha, en realidad le dolía haber lastimado a Kai, era su amigo y se sentía avergonzado de haberse portado así con el, que siempre lo trataba como a un hermanito menor.


Uruha noto la visible tristeza de Ruki a través de sus lentes oscuros,


-No te preocupes …es Kai…solo discúlpate con sinceridad y te va a perdonar…-Acaricio tiernamente la mejilla de Ruki mientras las luces del semáforo se reflejaban en las oscuras micas de los lentes.


-Si …eso espero.


 


Mientras tanto Kai se mantenía enfurruñado frente al ventanal de uno de los despachos donde Aoi lo había metido para evitar que matara a Ruki.


-Ya Kai…deja el berrinche…- Aunque nunca había visto tan molesto a Kai, consideró que una hora de patear paredes y muebles  y llorar como una nenita habrían sido suficiente para bajarle el enojo.


-Déjame en paz!!! ,debiste dejarme romperle la cara a ese enano bipolar…me tiene harto…-Musito toscamente lanzándole una mirada asesina a quien había truncado sus planes de homicidio hacia Ruki.. Esta vez había ido demasiado lejos, herirlo así tan deliberadamente lo hacían dudar seriamente de si Ruki, en realidad era sincero a la hora de demostrarle su compañerismo con abrazos y juegos.


-Tampoco seas fatalista Kai…a Ruki se le van las cosas de las manos muy pronto…te apuesto que ahora mismo se siente muy mal…- Eso era verdad.


-No me importa si se siente  una sabandija…me hirió de verdad y no se lo voy a perdonar, no siempre voy a ser el idiota que se aguanta sus bromas, tengo mi limite…- La dulce sonrisa de Kai había estado ausente desde hacia un buen rato.Y Aoi empezaba a extrañarla.


-Haber…- Aoi se dirigió al rincón donde se encontraba Kai y tomo asiento junto a el.


-Sabes que ninguno de nosotros te lastimaríamos a propósito…somos como hermanos…- Trato de tomarle de la mano pero Kai la aparto violentamente.


-Pues son unos hermanos del carajo…me tratan como basura y esperan que nunca les responda…que aprovechados…- Las lágrimas habían vuelto a brotarde sus castaños ojos, Aoi sintió una punzada en el pecho. Recordando todas las burlas y chistes dirigidos hacia Kai, la mayoría eran inofensivas, pero algunas eran bastante abrasivas.


-Vamos…no te lo tomes tan a pecho…- había logrado pescar la mano del baterista y ahora trataba de abrazarlo, cuando adivino sus intenciones lo aparto de un empujón.


-Y tu bien listo no?...piensas que por gustarme voy a dejar que me manipules como idiota…lastima pero no…- Kai se sonrojo violentamente,pegando la cara al vidrio del ventanal para evitar la mirada de Aoi, todo el mundo sabia cuanto le gustaba, incluso el mismo Aoi; no le incomodaba que lo supiera, pero no le gustaba tener que repetirlo.


-Yo no haría eso nunca Kai…yo te respeto, mas de lo que te respetas tu mismo…- Ruki odiaba que lo ignoraran, Kai que lo ofendieran, Uruha que lo desafiaran, Reita que lo interrumpieran y Aoi odiaba que lo malinterpretaran; y eso era exactamente lo que Kai acababa de hacer. Se golpeo la cabeza con el vidrio al sentir la presencia de Aoi esfumarse de su lado por lo que le había dicho.


-Nooo…Aoi…ven…- Suplico entre dientes, se estaba volviendo un experto en meter la pata, y ahora lo había hecho al puro estilo de Ruki.


Despego el rostro del frió vidrio y miro lastimeramente a Aoi que se había detenido; su alta figura a la luz del crepúsculo frente a el ,observándolo detenidamente con esos ojos negros tan apacibles pero tan profundos hizo que olvidara lo que quería decirle, de hecho solo mirarlo hacia que olvidara hasta su nombre.


-Perdón…no quise hacerte enojar…-Aoi se arrodillo frente a el tomando su rostro con ambas manos.


-Mira Kai…tu a mi no me haces enojar… pero te voy a pedir que, si algo te molesta pues dínoslo y ya…así evitamos que estalles como un volcán cunado a alguien se le ocurra colmarte la paciencia…- Kai bajo el rostro apenado por las tibian manos de Aoi sobre sus mejillas.


-Sabes que va en contra de mi naturaleza…soy el típico idiota que todos pisotean y se queda sonriendo tontamente…- Las amargas palabras eran totalmente inapropiadas para una persona como Kai, no solo era dulce y amable, sino también confiable como pocos, firme y ambiciosos en sus deisiciones,su gentileza no era as que el resultado de un buen corazón digno de admiración, desgraciadamente parecía ignorar todo esto.La ternura que aquella equivoca descripción provocara en Aoi lo llevo a tomarlo entre sus brazos y apretujarlo repetidamente, sacudiéndolo también.


-Naaa…solo eres un niño dulce que necesita que lo apapachen de vez en cuando, además yo te adoro así como eres….- Kai sonrió y se quedo ahí  en los brazos de Aoi por un minuto, el tiempo que su relación de compañerismo permitía, si su querido guitarrista aseguraba adorarlo siendo así, quizás no eran tan malo después de todo


 


-¿Qué vas a hacer mañana cuando Ruki se disculpe?...- Dijo mientras se dirigían juntos al estacionamiento subterráneo del edificio, donde ambos resguardaban sus vehículos; Kai frunció el seño, la palabra “Ruki” y “disculpa” no debían ir juntas.


-Lo voy a mandar al demonio después de repetirle cien mil veces que es un enano odioso- Esa fue la única oportunidad que tuvo de decir eso, porque en cuanto el vocal se le parara enfrente con una lastimera imitación de disculpa el sonreiría y lo perdonaría; así funcionaba y ya no le molestaba en lo absoluto.


-Por cierto…tengo una duda…?por que me llamo trasero de chica…?-De toda la retahíla que el cantante le había soltado eso ultimo no lo comprendió.


-Es que…no se si ya lo notaste…pero tus pantalones son de mujer…- Respondió lo mas calmado posible.


-¡¿Queeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee!?- Kai se detuvo a medio estacionamiento mirando a Aoi con pánico.


-Si…mira…- Aoi sujeto la pretina de la parte trasera del pantalón volteándola hacia fuera, mostrándole a Kai la marca del mismo, una marca famosa entre todas las idols de Japón, y Kai ni siquiera se había dado cuenta.


No imaginó que habría problema, aunque Ruki se burlara de el , pues nadie le había mandado a Kai comprarse ropa de niña, por muy bien que se viera.


Pero Kai no se molesto, se limito a sonreír maquiavélicamente.Suponiendo que ya había hecho suficiente Aoi lo paso por alto, rogando que Kai no se dirigiera a la casa de Ruki a asfixiarlo con alguna almohada.


-Nos vemos mañana Aoi…- Espeto sin borrar aquel gesto.


 


Al día siguiente, volvían a estar los cuatro Gazettos en el estudio, volvían a estar sin nada que hacer y volvía Kai a estar retrasado.


-Te vas a disculpar con Kai verdad?...- Aoi se planto frente a Ruki quien jugaba indiferente con el cierre de la chaqueta de cuero de Uruha.


-Si…-


-Espero que sea una disculpa aceptable, una patada en la pierna y un parco “perdón” no te van a servir ahora…-


-¡Ya deja eso…que ayer ya me regaño Uruha…yo se lo que hago…-Reita ni se metía en la conversación, cuando no quieres meterte en problemas, ignorar lo que sucede es la mejor manera de alejarte de las complicaciones, esa era su filosofía hasta el día de hoy y pretendía mantenerla.


-Hola, hola…-Por fin apareció Kai, mas alegre de lo común, trae consigo un paquete que parecía un regalo.


-Se te esta haciendo costumbre llegar tarde no?...-Uruha le dio un codazo a Ruki por su impertinencia, aunque la noche anterior le repitiera mil veces que ese día solo se dedicara a disculparse y a cantar.


-Bueno ya…haber Kai…-Se acerco a el tratando de pasar aquello lo mas rápido posible, pero Kai no se lo permitió, le extendió el colorido paquete con su linda sonrisa pintada en el rostro.


-Esto es para ti…-Ruki pensó que debía ser una bomba o algo así, por que retrocedió desconcertado.


-Hay Ruki!!…que desconfiado…tómalo es para ti, como agradecimiento anticipado por que ya vi que armaste mi batería…-Ruki tomo el paquete y arranco el moño de la caja, no cabía en el la duda acerca de la inocencia del regalo, eso si, ignoraba la razón, pero era Kai; era imposible que algo malo fuera a salir de esa caja.


Arranco todo el papel de la caja y quito la tapa, parecía un tipo de tela, lo tomo con las dos manos y lo extendió frente a todos, eran los pantalones que Kai portara el día de ayer.


-¿Qué es esto…a diferencia de ti yo no uso pantalones de mujer?...-


-Pero si son tuyos…no te acuerdas?...me dijiste que aunque te gustaban mucho te arrastraban así que me los regalaste…pero como veo que los extrañas te los devuelvo…-Ruki se puso de mil colores al recordar, se los había probado por error en una tienda, le gustaron por el color y simplemente los compro, aun cunado sabia que eran de mujer; quien se atrevería burlarse de el por eso?, fue la excusa que lo animo a comprarlos.


Aoi había estado contenido ua carcajada de los mas profundo de su ser, pero no aguantó mas y se desternillo de risa ahí frente a Ruki, lo mismo que Uruha e incluso Reita quien habría tenido que ponerse la banda en los ojos y no en la nariz para no apreciar el infinitamente cómico semblante del cantante. Kai solo lo miraba tranquilo.


-A mano Ruki chan…- Paso de largo junto a el y le revolvió el cabello con cariño, este esbozo una forzosa sonrisa.


-Pues a mano…- Espeto ignorando el mar de risas causadas por el y por este asunto de los “pantalones de mujer”.


 


 

Notas finales:

Espero que les guste...^.^


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