Disclamier: Este fic esta basado en la serie televisiva "Dr House" o también llamada “House M.D” por lo tanto House, Wilson, Chase, Foreman, Taub, Trece y Cuddy no son mi creación, son creación de el Sr. David Shore ( :3 A quien estaré infinitamente agradecida, por ello) el único personaje de mi creación es "James B. Ivanov"
Aclaraciones: La historia transcurre en la Sexta temporada de la serie, inmediatamente después de que Wilson vuelve con Samantha (1era esposa), House Continua sin consumir Vicodin por lo que sigue asistiendo a sus sesiones Terapéuticas en el Hospital Psiquiátrico MayField.
Capitulo 15
Tratando de Llegar a Ti (Parte I)
Pese al esfuerzo que estaba colocando en prestar atención a la información que se encontraba en los archivos esparcidos en su escritorio, House sabia de antemano que de nada le iba a servir y no es que su cerebro, no intentase procesar aquellos valiosos datos sino mas bien que un extraño sentimiento de angustia se apoderaba de su ser, evitando para su entera sorpresa que se concentrase plenamente… miro distraídamente la puerta de su oficina como si por esta fuese a ingresar la causa de su “ansiedad” pero la bajo casi inmediatamente; eso no seria así o por lo menos no hasta pasadas las seis de la tarde, momento en que haría acto de presencia su “princesa”.
Aparto la vista molesto consigo mismo al recordar aquello, sabia la causa de su “angustia” y eso le molestaba aun mas… cansado froto sus dedos contra el puente de su nariz para después retirar los diversos folios y guardarlos en uno de sus cajones, estaba a punto de cometer el mismo error de siempre, así lo había hecho con Stacy, también con Cuddy y finalmente con Wilson.
House dejo escapar una exhalación mirando a la nada e inmerso en sus cavilaciones, posiblemente en su ADN estaba escrito además de la infinidad de códigos genéticos y sus caracteres particulares, el que debía de arruinar todas sus relaciones. Alejar a las personas que amaba por el estupido… si, debía admitirlo… por el ¡Estupido! Miedo que le embargaba cada vez que sentía las iba a perder irremediablemente. ¿Pero acaso eso no les parecía lógico? Por qué debía aferrarse a algo sabiendo que había más posibilidades de perderlo mientras más persistía en ello. Evadir sus responsabilidades siempre le había sido excesivamente fácil ¿Por qué no hacerlo ahora?
¿Qué acaso su dolor no iba a ser mayor cuando le perdiese? ¡Mucho mas doloroso que en estos momentos! ¿Porque tenia que continuar enfrentándose a su cruel realidad? Debía huir como siempre lo había hecho… si continuaba de esta forma jamás podría seguir adelante.
¿Seguir adelante? Repitió su cerebro ¿Era eso lo que deseaba? Seguir adelante solo… No, por supuesto que eso no era lo que quería y menos o que deseaba, nunca lo había querido pero parecía que siempre debía ser así.
Como si se tratase de un movimiento inconsciente el Nefrólogo se levanto de su silla recogió su bastón y se dirigió hacia su oficina aledaña completamente vacía; sabia que en un par de horas mas llegaría James, sabía también que su equipo se encargaría de su atención así como llevaban haciéndolo desde el día en que les había asegurado su futura paternidad y finalmente sabía que él no podría estar ahí.
Carraspeo molesto, era un hipócrita y lo sabia, cuantas veces se había vanagloriado sobre el hecho de que “Todo el mundo miente” Cuantas veces había recriminado a sus pacientes por ocultar la verdad… y ahora seria él quien lo haría, aun no podía hacer frente a la realidad innegable que parecía cernirse sobre sus hombros, ya bastante era saber con que podría perder a quien amaba, como para aumentar ese peso al saber que podría perder a su… ¿hijo?, si porque era su hijo o hija a quien podía perder… A partir del momento en que volviese a verle y más aun saber su sexo ya no seria más, solo un conjunto de células especializándose, sino su hijo.
Salio entonces de su oficina y se dirigió a la casi aledaña de su mejor amigo.
- ¿Quieres ir a beber? –Dijo House ni bien abrió la puerta de la oficina de Wilson, como siempre sin tocar para ser anunciado-
- … ¿Que? –Wilson levanto la vista sorprendido inmediatamente reconoció la voz del mayor y agradeciendo interiormente el haber despachado hace un par de minutos a uno de sus pacientes-
- Yo bebo, tu bebes –Ironizo House mirando al Oncólogo, al tiempo en que ingresaba y se sentaba en un cómodo sillón cerca de la salida- ¿Podríamos hacerlo en un mesa…? o por lo menos una dentro de un bar.
- ¡Por dios House! ¡¿Son las cinco de la tarde?!
- Sip, el mejor momento ¡A esta hora los bares están vacíos! Seremos los dueños de la barra.
Volvió a canturrear House divertido al tiempo en que se levantaba y recogía su bastón, para después salir de su oficina sin siquiera oír la respuesta del castaño, quien con el ceño fruncido comenzaba a pararse y seguirle profiriendo una de sus usuales protestas en un vano intento de que este entrase en razón.
House continuo cojeando hacia la salida del hospital, ignorando como siempre las reprimendas del castaño hasta que ambos se hallaron en el amplio parqueo frente al auto de Wilson.
- House deja de ignorarme y recuérdame ¿Por qué debería de acompañarte? Además de claro, faltar a mis compromisos en el hospital como doctor –Reprendió Wilson con el ceño fruncido-
- ¡Eres mi amigo! ¡Duh! Es uno de tus cientos de deberes…
- Bien, Supongamos que en el mundo bizarro que creaste en tu cabeza debo acompañarte, lo entiendo –suspiro tratando de calmarse- Lo que no entiendo es porque debe ser ahora y no después de las ocho como siempre.
- ¡Tengo una razón medica legitima! –Dramatizo House intentado abrir una de las puertas del automóvil- Solo que aun no la se… -miro hacia el castaño con una de sus muecas de niño regañado- No puedes callarte de una vez y ayudar a un invalido.
- ¿Cómo esta tu pierna?
- Duele pero es tolerable… y seguirá doliendo y siendo tolerable –Añadió con sátira ante la consabida pregunta- ¿Seguirás preguntando o tendré que ir a emborracharme solo, hasta que sea mi hígado el que de un grito de auxilio?
- Se que me arrepentiré de esto…
Concluyo el oncólogo completamente resignado al tiempo en que abría ambas puertas para después internarse en el automóvil seguido por el Nefrólogo quien no dudo ni un instante en seguirle.
******************************
Pasaban de las nueve de la noche en el hospital Princenton Plainsboro, dentro de las paredes que conformaban la gran instalación medica, casi todas las salas habían sido desocupadas tanto de los consultorios así como de los familiares que entraban y salían de las habitaciones de los pacientes; dejando que solo algunos médicos y enfermeras de guardia rondaran sus blancos pasillos.
De la misma forma todas las oficinas habían sido abandonadas por sus respectivos dueños y el ambiente permanecía en un silencio casi etéreo o por lo menos eso debería de ser pero insistentemente una luz continuaba encendida en una de aquellas oficinas.
James permanecía en la oficina del Nefrólogo esperando pacientemente su regreso; no sabia el porque de la ausencia de House durante el examen pero intuía que debía ser algo importante o mejor dicho algo que debía averiguar, lo que si sabia o por lo menos había notado al dejar su automóvil en el parqueo del hospital, era que la motocicleta del Nefrólogo permanecía en su sitio... No se la había llevado a donde quiera que fuese y eso ya le resultaba extraño; además sabia que su celular se encontraba apagado dejando que la monótona voz del contestador sea la que sonase cada vez que le llamaba.
¿Qué le podía haber pasado? ¿Dónde se encontraba si había abandonado su medio de transporte? ¿Acaso había olvidado su visita? ¿Estaba solo? Medito algunas posibilidades mas al tiempo en que recogía entre sus manos la pequeña esfera roja y gris, con la que el mayor jugaba constantemente, para intentar distraerse mientras continuase esperando.
Con calma de acomodo mejor en su sitio algo le decía que tendría que esperar un rato mas; parecía como si la soledad de ese lugar le hiciese perderse en sus pensamientos, con una de sus manos acomodo sus cabellos al tiempo en que sonreía para si mismo ya no deseaba pensar mas en el porque la desaparición de House, mas bien se pregunto como reaccionaria el mayor al saber las noticias referentes al desarrollo de su hija; ¿Estaría feliz?, derramaría alguna lágrima de felicidad o como todo padre (O por lo menos como él mismo lo había hecho en su momento) comenzaría a hacer varios planes elaborados para el futuro de su pequeña, ¿A que universidad iría? Oxford, Cambridge o talvez Princeton; intentarían acaso imaginar como seria cuando creciese, tendrían la discusión típica de padres primerizos sobre ¿El qué rasgos heredaría su hija de ambos? ¿Qué deporte le gustaría? Sin poder evitarlo mas rió ante sus propios pensamientos, algo receloso a que estos pudiesen llegar a suceder o por lo menos a que Gregory House decidiese participar activamente en ellos; bueno debía admitir que si alguien le hubiese dicho que esta particular “situación” le iba a suceder hace 6 meses el también no habría podido siquiera intentar asimilarlos.
Después de todo él era un hombre (Bueno, gran parte de su cuerpo lo era) y todo ese tipo de sensaciones era nuevo… muy nuevo y ciertamente había comenzado a admirar al sexo opuesto por la fortaleza que demostraban en la concepción de una nueva vida, fortaleza que deseaba imitar; mas aun ahora que se acercaba el parto; tenia menos de cuatro meses y pese a que eso le inquietaba pretendía disfrutar el tiempo restante del embarazo o por lo menos disfrutarlo con las dos personas que amaba... Gregory House y su pequeña Elizabeth House Ivanov.
- Elizabeth House Ivanov… - Se dijo a si mismo mirando hacia la salida, al tiempo en que divertido agradecía interiormente a los doctores que conformaban el equipo de House, por la nueva modificación hormonal que le habían hecho esa mismo noche; comenzaba a actuar como una verdadera “mujer” ya que desde que había sabido el sexo de su hija su cerebro no había parado de conjeturar una infinidad de nombres hasta dar con el que finalmente había elegido y no quería que el mayor se burlase por ello; ya tendría tiempo después para informar y convencer a su pareja sobre el nombre que había escogido para su hija.
Entonces recordando las pocas veces que había podido estar solo en aquella oficina, se dedico a apreciar sus detalles, la guitarra eléctrica en una de sus esquinas, el Game boy abandonado en una de las repisas y lo desordenado de sus documentos…
Suspiro cansino había pasado casi una hora y pese a no admitirlo a voces altas tenia el persistente deseo de ver al dueño de su corazón, James se sobo la espalda por varios minutos como siempre hacia después de permanecer sentado por bastante tiempo una pequeña molestia que había adquirido recientemente pero que estaba dispuesto a soportar por su hija.
Minutos después algo inquieto se removió una vez más en su sitio, pese a la comodidad del sillón de House parecía ser que su hija no podría aguantar mucho tiempo mas en esa posición, con calma acaricio su abdomen tratando de calmar a la pequeña quien insistentemente comenzó a moverse un poco mas.
- Vamos… -Dijo James con suavidad acariciando su vientre- ya volverá y nos iremos los tres a casa –Sonrió con añoranza- Ten un poco de paciencia mi pequeña… ¿O es que no quieres darle la nueva noticia? y hacer que nos prepare un festín en castigo a su demora.
Como si comprendiese las palabras de su padre la pequeña dejo de moverse para acomodarse y sentir las caricias que el rubio no dejaba de proporcionarle.
- Ya vendrá… -
******************************
La habitación parecía estar en penumbras o por lo menos eso era lo que apenas podía distinguir… y lo peor de todo era que todo su cuerpo rehusaba a hacerle caso, ¿Dónde estaba? Intento distinguir más levantando la mirada pero fue su cerebro el que en esta oportunidad se negó a obedecer… ¡Demonios!
Talvez lo mejor era desconectarse por un momento, de esa forma su cuerpo no le pesaría y mucho menos su conciencia… si eso era lo mejor… dejándose llevar por ese pensamiento, el Nefrólogo se dejo envolver por un soporífero sueño.
Sueño que se vio interrumpido cuando se sintió invadido por un extraño ¿Calor? Su mente le dijo, al tiempo en que su cuerpo era rodeado de calor… un calor que pese a parecer lejano era embriagante para ser mas exactos, algo recorría su rostro y después mas calor… de nuevo esa sensación embriagante en su adormilado cuerpo, intentado apegarse mas a lo provocaba esa sensación en su cuerpo, se removió muy ligeramente aun sin el completo dominio de su cuerpo, pero el calor era mucho mas cercano ahora y algo en su interior ambicionaba sentirlo mas cerca aun… mucho mas cerca.
Intento abrir con algo mas de dificultad nuevamente sus ojos pues aun ahora le parecía que sus parpados pesaban una tonelada, pero no distinguió nada… mas aun sintió que unas manos cubrían sus ojos para después sentir que sus labios eran reclamados con autoridad, consiguiendo que este le correspondiera de inmediatamente con pasión sin ser conciente de ello.
Sus lenguas se entrelazaron con la misma intensidad mientras ambos hombres se rodeaban sus brazos, buscando mas de ese intimo contacto… se besaron una y otra vez, demasiado sumergidos en su propia lujuria… pues eso era lo único que dominaban los mas profundos instintos básicos del cuerpo de House, lujuria y deseo en ese momento poco o nada le importaba con quien podía satisfacerlos. Atrapó nuevamente los labios de Wilson con pasión, consiguiendo con la acción que el deseo llegara hasta su entrepierna, haciéndola reaccionar con su excitación. El Oncólogo lo atrajo hacia si con pasión, aferrándole de su cabello con necesidad para que sus dos bocas se unieran más si eso era posible, fusionado sus dos torsos y su piel hasta formar un solo ser.
House le estaba masturbando sin ninguna inhibición... Lo hacia lento, apretando la vena ligeramente fuerte en su recorrido y expandiéndole a lo largo con fingida desgana para terminar contorneando su endurecida punta. No se le escucho palabra alguna, ni explicaciones, ni pedidos, solo su profunda respiración amartillada en la piel del cuello de Wilson mientras le abrazaba y escuchaba los apagados gemidos excitados de este mordiendo parte de su propia chaqueta.
Mandando su raciocinio a un lugar muy lejano y dejándose llevar por esas emociones, a Wilson poco le importaba lo que le pasase después, solo podía ser conciente de lo que estaba pasando en estos momentos, solo podía ser conciente de House solo de él… de House tocándole, de House besándole, de House poseyendo su ser… Solo era conciente de él… ¿Cuanto tiempo había escondido aquellos deseos por el mayor?, mucho en verdad. Tanto que el deseo de dejarse poseer ahí mismo luchaba con la cordura de lo moral y el equivocado lugar.
Los ojos de House ahora ensombrecidos por la lujuria y apuro, observaron el rostro debajo de él y sin siquiera prestar mucha atención solo fue capaz de sonreírle con arrogancia para después continuar explorando su cuerpo con ansiedad, sus manos descendieron por entre su ropa apartándola con fuerza, queriendo sentir aquel calor de nuevo. Wilson se removió arqueándose ligeramente y permitiendo que sus caderas y sexos se rozasen; sabía que esa sería su vía de escape, quería dejarse llevar por el deseo para apaciguar el dolor que desde hace meses le torturaba las entrañas, quería desahogar todo lo que sentía su ser.
- James...- Le susurró House al oído con sensualidad, consiguiendo que este sintiera un escalofrío de pies a cabeza ante la creciente excitación que ello provocaba en su cuerpo al tiempo en que nuevas dudas se cernían en su cerebro ¿Acaso House estaría despierto? ¿Conciente de lo que pasaba entre ambos en este momento? ¿O seria a su amante a quien llamase?
Pero no pudo siquiera pensar mas ya que de nuevo la excitación consumía su cuerpo, ahora era el mayor quien nuevamente comenzaba a masturbarlo deliciosamente, provocando que sonoros gemidos escapen de sus labios. Una y otra vez su mano ascendía y descendía por su dureza presionando la suave cabeza del sexo del castaño de forma incitante mientras ahora era este quien se ofrecía desinhibido, abriendo entonces su propia cremallera House llevo ya endurecido sexo hacia el del castaño y una vez juntos comenzó nuevamente su “trabajo” logrando con ello nuevos y sonoros jadeos por parte del Oncólogo.
Ambos, moviéndose juntos en un solo cuerpo una y otra vez hasta que sintieron que sus músculos encandilados como golpeados por una carga eléctrica llegaban al blanquecino clímax… Un acabose enloquecedor… dejándose ambos desvanecer en franca laxitud.
Casi inmediatamente el sopor se presento tentándoles poderosamente a cerrar los parpados y recuperar energías. Se formo en el ambiente un calido mutis que Wilson aprovecho para acariciar suavemente el cabello siempre desordenado de House y antes de que se diese cuenta de ello el mayor se había quedado profundamente dormido en sus brazos.
- House… -murmuro cerca de su oído, para comprobar su estado pero al mismo tiempo temeroso de que este despertase-
No hubo respuesta, además de la acompasada respiración del Nefrólogo. Estaba profundamente dormido.
- Que… he hecho… -se dijo Wilson en un nuevo susurro sin querer apartarse del calido cuerpo de House.
******************************
Solamente la luz de la luna entraba a través de los cristales de la habitación y dentro, se escuchaban apenas un par de sonidos y una respiración casi acompasadas desde la cama.
- Te dije que me arrepentiría…. –murmuro el castaño en la penumbra de la habitación de House, una vez conciente de lo ocurrido entre ambos y después de recuperar algo de su fortaleza, lo había llevado a su cama para después de retirarle su chaqueta, zapatos y limpiarle algunas partes de su anatomía, dejarlo completamente arropado, permitiéndose comportar como quien limpia la escena del crimen.
Wilson dedico unos minutos mas a obsérvale, estaba parado junto a la cama, a la cabecera, y cuando acerco la cara rompiendo la distancia pensó en que debía estar mas borracho de lo supuesto – Pero aun ahora no lo puedo hacer…
Declaro en un murmullo casi inaudible y sin nada mas que añadir volvió a posar sus labios contra los de House en un beso casi fugas para después salir de aquel departamento.
Continuara?…