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Soledad por Hermi Black

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Notas del fanfic:

 

Disclaimer:  Ni FMA ni, nada de su mundo me perteneces, por desgracias.. si asi fuera esta pareja seria legal en el anime.y seria un anime yaoi

Soledad

Cap1: Tú esencia en mí

 

- a quien le llamas enano diminuto que cuando llueve es el ultimo en darse cuenta- grito el rubio como cada vez que regresaba de sus viajes, para traer sus correspondientes reportes.

-nadie ha dicho eso hagane no- le respondió el Coronel con su característica y sarcástica sonrisa

 

Le miro fijamente mientras el rubio se acercaba al escritorio para dejar su reporte… cuanto tiempo tenia queriéndole ver, observar esos dorados ojos que le miraban perniciosamente.

 

-que tanto piensas…- escuchó la calida voz de Ed , saliendo un poco de   ese trance que este le causaba..

- nada, nada solo estoy un poco cansado… bueno eso es todo Hagane no…- contesto, al salir de su trance, apoyándose en su silla de piel negra…

- estas seguro que no es nada- susurro el Rubio en el oído del moreno tomándole por sorpresa, pues no le había notado venir…

 

Edward se separa  del oído de su Taisa no sin antes morderle ligeramente el lóbulo en una forma sensual.

 

-No sabes cuanto ansiaba verte, yo también- volvió a decir ya separado, quedado rostro a rostro. Y sin decir mas junto sus labios con los del taisa cálidamente, beso que este respondió sin reproches, colocando sus manos en la cintura de Edo para acercarlo más a su cuerpo

 

Se volvieron a separa, quedando Edward sentado en las piernas de Roy cual niño chiquito, quien  inicio a acariciar los rubios cabellos del niño en sus piernas.

 

- Así que me extrañaste.. Pues no parece..- dijo jugando con los rubios cabellos

- ah con que en esas estamos… oye… ahora si ya me vas a  dejar descansar o el taisa tiene otra misión para mi- dijo mientras jugaba con los botones del uniforme militar del pelinegro, mientras a la vez  volteaba el rostro a otro lado en tono de reproche.

- No, lo se.. Como te has portado chibi..- contesto sarcásticamente el moreno, haciendo que el rubio  hiciera un puchero de enojo.- Pero no… esta vez podrás descansar por lo menos unos días… eso creo

-eso es bueno… no- volteo el rubio volviendo a prestar atención a los botones del moreno, volviéndole a besar tiernamente

-Ah si, por que… - dijo bajando la mano que se encontraba en los cabellos de Ed por toda su espalda, tocando ligeramente los glúteos de este, quien le miro picaramente…

 

La puerta inicio a abrirse y  ambos se separan instantáneamente, Edward se paro de las piernas del militar y este se  acomodo como siempre solía estar en su silla.

 

No es que  les diera  miedo que se enteraran, todos los subordinados de Roy sabían a la perfección la relación que este mantenía con el alquimista de Acero y todos les respetaban más por el  hecho de que ambos tenían un carácter endemoniado. La puerta se abrió y entro la teniente Hawkeye acompañada de unos cuantos papeles.

 

-Más no por favor…- reclamo el coronel con una cara de fastidio que saco una risa al rubio…

- No seas flojo es lo único que haces…

-así es taisa, es lo único que Hace, buenas tardes edward-Kun

- Buenas tardes, Teniente

- Que bueno que llegaste, ya no soportábamos al Taisa llorar por los rincones porque te extrañaba…- dijo burlonamente la rubia dejando  los papeles en el escritorio ante la mirada de reproche del moreno.

- Ja, me imagino como ha de ver sufrido.- rió tb le rubio uniéndose a las burlas de la teniente.

- edward… riza…- murmuro el militar antes de chasquear su dedos ligeramente..y crearle fuego a los pies de Ed

-Hey que demonios te pasa….

- nada… teniente estoy algo cansado, revisare esos reportes mañana además ya es mi hora de salir- dijo parándose perezosamente de su asiento

- Como usted quería, solo que mañana tendrá aun mas trabajo- dijo saliendo de la oficina. -Edward-Kun te lo encargo no dejes que se desvele pues si no mañana estará de mal humor.

-No se preocupe teniente…entonces ya nos vamos- dijo cuando la teniente  salio completamente.

.-¿ Nos vamos? Me suena a manada - contesto mientras buscaba su guardarropa- además tu hermano te debe de estar esperando no es así?

-No, Al se quedo en los dormitorios  de los militares, le dije que iba a venir y no me quiso acompaña

 

El menor de los Elric también sabia sobre la relación que su hermano sostenía con el mayor así que sintiéndose un tanto incomodo cuando estaba con el taisa siempre evitaba hacer un mal tercio.

 

-Que no piensas celebrar mi regreso, tres semanas, son tres semanas, como has de ver sufrido por mi ausencia- dijo tomando el también su gabardina roja

-Vale, vamos a celebrar- dice poniendo su portafolio en la cabeza del pequeño con broma.

 

Ambos caminaron en   dirección al departamento del Taisa, dónde  celebrarían…,  los dos eran tan tercos, necios, pero a la vez penosos, y no les gustaba demostrar sus sentimientos en publico.

 

- pero que sucio tienes, se nota que nunca estas en casa- critico el rubio cuando llegaron

-Para que, si nunca nadie viene mas que tu- dijo abrazándole por la cintura dándole un pequeño beso en el cuello- No sabes cuando extrañe este olor

- Roy…- dijo dejándose abrazar- déjame caminar….

 

Se voltea quedando cara a cara con su Koi, ambos se sonrieron antes de inicia con un calido rose de besos, el pequeño subió sus brazo al cuello del moreno y este seguía con sus manos en la cintura del pequeño.

 

Los juegos de besos fueron cambiando de ligeros roces de labios a profundos besos apasionados de amor. A tientas  Roy fue conduciendo a   edward hasta su habitación., fiel testigo de su amor, donde tantas veces había amanecidos ambos, después de cada regreso del rubio.

 

-Roy..- inicio a murmurar el rubio mientras este le acostaba en la cama, depositando tiernos besos en la frente, nariz y labios del menor, recorriendo con sus manos el pequeño cuerpo del Elric, quien seguía sujetado a este del cuello.

 

 El moreno inicio a desabotonar y a  sacar la chamarra negra del  alquimista de acero, dejando pequeños besos en su recorrido, mientras que el rubio  sobaba la espalda del moreno.

 

Regreso a la boca del Mayor dejándose explorar por este, quien  le tomaba el rostro con una mano mientras la otras se posaba bajo su playera negra, incaico a prestar atención a uno de sus pezones

 

 

- Ahhh- se separo repentinamente al sentir un pellizco en este,  soltando el ligero gemido y tirando el cuello para atrás dándole a  Roy mas piel que besar

-Edward, cuanto te extrañe mi chibi neko- le susurro al oído  lo que el rubio dio un pequeño ronroneo como contestación, era curioso que cuando estaba con Roy no le importaba que este le llamase chibi, pues su tono era de completa ternura.

 

El ojidorado  no se quedo atrás e inició a desabotonar la ropa del militar iniciando a desnudarle la parte superior de su cuerpo, mostrando los marcados músculos de su pareja, comenzando a acariciar con su mano  metálica, sabiendo que eso le causaba placer a este.

 

- Ed….- dijo entre un gemido al sentir el metal contra su piel….

 

 Roy dejo de prestar atención al cuello del alquimistas para iniciar un camino de besos  por el desnudo pecho de este, recorriéndole ala vez con su lengua,  con pequeños roses llego hasta uno de sus pezones e inicio a jugar con el, mojándole con la lengua y pellizcando, sacando ligeros gemiditos por parte del rubio quien había bajado sus manos hasta  el trasero del militar tocándole sobre la ropa.

 

Las hombrías de ambos iniciaban a reaccionar ante las caricias que recibían sus cuerpos, Mustang bajo su mano hasta los pantalones del menor iniciando a desabotonarles,  sacando esos molestos pantalones junto con los boxers al alquimista, siguiendo con su camino de  besos, llegando a la hombría de este, dándole un beso y lamiéndole un poco, sacando un gemido un poco mas audible al excitado rubio.

 

- Roy…..Ahhhh

 

Este seguía dando caricias al miembro erecto de Ed, besándole, lamiéndolo, metiéndolo ligeramente a su boca, iniciado a dar pequeñas simulaciones de embestidas. El rubio al sentir las acciones del mayo inicio a mover sus caderas, ayudándole a este a incrementar las embestidas que le daba a la boca del Taisa. En un juego erótico de gemidos y ritmos, aumentando cada vez más los movimientos, haciendo un poco más brusco. El sabía a la perfección que no tardaría en venirse.

 

Y así fue, faltaron unos cuantos minutos para que El rubio se viniera en al boca del mayor, llenándolo  de su semilla, soltando un audible y placentero “Roy”, el moreno se separa de este subiendo hasta el sudoroso rostro del rubio besándole con gran fuerza,  como invitándole a probar sus fluidos, a la vez de que sus lenguas comenzaban una danza interna. Edward ante tanta desesperación inicio a desabotonar también el pantalón del militar, sin tardar tanto estuvieron los dos desnudos.

 

- Por favor.. roy- kun…- suplico el rubio con los ojos entrecerrados intentado recuperar fuerza ante el orgasmo que había tenido…

 

Roy le sonrió pícaramente, llevando su mano de nuevo al miembro de Ed para hacerle reaccionar de nuevo. Le haría sufrir un poco por las tres semanas que se alejo de él,  lo torturaría  un poco para que así ambos disfrutaran.

 

- Ahhh- gimió el rubio levantando su cadera ante  la masturbación que recibía de Roy.

 

Pronto el miembro de Ed volvió a su erguida posición, mientras Roy se entretenía con su miembro este le besaba el cuello y le mordía ligeramente el lóbulo de las oreja,  lentamente se enderezo quedando sentado sobre las piernas de Roy, besándole el cuerpo y acercándose a este haciendo que sus hombrías se tocasen, haciendo que Mustang soltara un gemido.

 

Iniciaron a besarse acariciando el cuerpo ajeno, sintiéndose; Ed inicio a besar  el cuello de roy, delineándole con su lengua, mientras que este baja sus manos hasta el trasero del rubio jugando con este, rozado con su dedos la delicada entrada del mayor de los Elric. Este al sentir los dedos en esa zona tan erógena de su cuerpo se separa del cuerpo del mayor soltando un ligero gemido. Después se acerco al oído  de este

 

- Roy, no me estés torturando- dijo lamiéndole el oído  volviendo a su labor de besar el cuello de este, mordiendo,  chupando  cada parte de piel que su pareja le dejaba saborear.

- Por que no hacerlo- contesto este también en un susurro al oído del alquimistas  volviendo a pasar su mano por esa zona que excitaba al rubio.

 

Roy con lentitud se recostó en la cama, dejando a Ed sobre el, sin separarse de ese beso apasionado mientras sus hombrías volvían a tocarse, haciéndolos separar para proferir un gemido, Ed llevo instintivamente un dedo a su boca mordiéndolo por el deseo que Roy le causaba, sabiendo que este estaba torturándolo.

 

-Quieres que continué?- pregunto irónicamente el moreno recibiendo como contestación un gruñido de molestia

- Ya sabes..- contesto al final mirándole un poco desesperado – como si no supieras la respuesta.

 

 

Ya había sido suficiente de torturarlo, pensó el moreno así que llevo dos de sus dedos a la boca de Ed, el cual  inicio a lamerlos sin orden alguna, rodeándolos con la lengua. El moreno cuando creyó convenidote, los saco de la boca del rubio y lo llevo directo a la entrada de  este , e introdujo el primero el cual entro con un poco de dificultad, el rubio soltó un fuerte gemido al sentir el dedo dentro de el, el cual el moreno lentamente lo movía en círculos para acostumbrar la entrada de este a la intromisión, lentamente fue introduciendo un segundo dedo iniciando con este las pequeñas embestidas, buscando el placer para Ed, el cual iniciaba a agitarse ante tales movimientos, soltando gemidos cada vez mas seguidos. Al segundo dedo siguió otro el cual hizo que edward callera sobre el a causa del placer.

 

Roy saco por completo los dedos del la entrada de edward creyéndole ya perfectamente dilatado, este se levanto al sentirlos fuera y abrió un poco las piernas acomodándose sobre  Mustang , lentamente fue bajando introduciendo el  miembro del moreno en su entrada, el cual suspiro al sentir la estreches de la entrada del rubio, sintiendo como este dominaba es parte y se acomodaba para encontrar el placer juntos.

 

El rubio inicia a mover su cadera apoyando sus manos en el torso del moreno. Las embestidas iniciaron lenta y pausadamente, mientras  gemía murmurando pausadamente su nombre

 

-Roy…. Ahhhhh Roy… Si….- dijo subiendo y bajando de la hombría del mayor

- Ed…. Ahhh- el militar inicio también a jadear iniciando embestidas aun más fuertes.

 

Las embestidas aumentaban conforme la excitación les aumentaba,  y ambos cuerpos adoptaban un mismo ritmo, en un sensual vaivén de las caderas de ambos. El rubio se tiro sobre el sin perder el ritmo de ese baile erótico. La velocidad aumentaba, en un solo movimiento y los jadeos parecían  sincronizados con estos, los cabellos revueltos de ambos caían sobre su rostro sudoroso , y sobre el rubor de las mejillas, el moreno beso fuertemente al rubio, quién le respondió de feroz manera mordiéndole el labio inferior, este respondió llevando una mano libre al miembro de Ed iniciándole a masturbarle, lo cual hizo que este se separara en un fuerte gemido de placer y gozo, al sentir al mano de este atendiéndole de  nuevo su miembro, lanzo un poco la cabeza hacia atrás aumentando las subidas y las bajadas.

 

- Ed… Ah…. Ed… yo…. Yo..- inicio a decir el moreno sintiendo como el momento del climax se acercaba a el, a lo cual el rubio se aferro aun mas al cuerpo de este haciendo que el palpitante miembro del mayor tocara  esa zona que le excitaba mas y que le llenaba de placer.

 

Una corriente eléctrica recorrió la espina dorsal de Roy, sintiendo placenteramente la llegada del orgasmo llenando la entrada de Ed con su semilla en una ultima embestida, la cual saco a la vez un resonante gemido de los labios del ojidorado, al sentir como el miembro del mayor tocaba una parte demasiado excitante para el. Este no tardo en venirse en el abdomen de ambos.

 

El joven cayo exhausto en el regazo del moreno quien le recibió con un abrazo y un beso en los cabellos rubios.

 

Lentamente salió de el y se acomodo a su lado abrazando al pequeño, quien se recostó sobre el pecho de este, largando un placentero suspiro.

 

-Ahhh… Roy ya extrañaba esto, ya extrañaba sentirte, amarte, el sentirme tuyo- dijo acariciando el desnudo pecho del que le abrazaba

- yo también ya te extrañaba, - dijo dando un beso tierno en los rubios cabellos- Te amo Ed

- Yo también te amo Roy

- hey y tu hermano…no se preocupara..

- Al ya es grandes y sabe a la perfección lo que existe entre nosotros, sabe que estoy contigo, no creo que me espere- dijo acurrucándose en el regazo del mayo quedándose placidamente dormido

- esta bien… mi niño- murmuro este dándole un beso en la frente con completo amor quedando también dormido abrazado del Elric.

 

-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-0-

 

La luz del sol le inicio a iluminar el rostro torturándole los parpados para que estos se abrieran

 

-Mmmm… no… mmm…. Edo… ya es hora…- murmuro iniciado a abrir los ojos buscando con las manos a la personas con quien había dormido, mas no encontrando a nadie

 

Abrió bruscamente los ojos, cayendo a la realidad, se levanto de la cama repentinamente llevando sus manos a su cabeza cabizbaja, de nuevo había soñado con el, de nuevo los dolorosos recuerdos de su feliz pasado le torturaban mostrando, aquellos calidos y placenteros días que había pasado con Edward Elric. Unas silenciosas  y solitarias lágrimas resbalaron por SU ojo.

 

Hacia 2 años desde la ultima vez que lo vio, desde aquellos fatídicos años en que misteriosamente, desapareció del otro lado de las puerta, para después regresar y volver a alejarse de su lado, sin darle la oportunidad de darle la bienvenidas, y desde hacia 2 años que esos tortuosos sueños le invadían, recordándole los momentos felices, los momentos tristes, lo momentos de pasión que paso, como el maldito sueño del que acababa de despertar.

 

Le extrañaba, extrañaba su olor, extrañaba su risa, extrañaba cada una de las caricias que Edward Elric le regalaba en cada oportunidad que tenían, extrañaba besar esos calidos labios, tocar esos rebeldes cabellos, sentirlo suyo y volverse una sola alma en un solo cuerpo…

 

Pero el estaba en otro mundo… un mundo alterno el suyo, un mundo donde no sabia si estaba vivo o muerto. Lo único que sabia era que él Roy Mustang estaba solo, solo en ese mundo que se le había salido de las manos, se encontraba solo en la inmensidad.. Solo ante el recuerdo de extrañarle… de extrañar  “ Tu esencia en mi”….

Notas finales:

Continua  Cap 3


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