-Renji!!!!!!!!!!Ya volví!!! Traje…nii-san… ¿Qué haces aquí?-lo que observo la dejo con una buena predicción-¿Por qué estas encima de Renji? ¿Querías matarlo?
-Esto…yo…arrr… (¿Qué hago?)
-Uhm…ah! Rukia!-el citado abrió un ojo-bienvenidaaaaaaaaaaaahhhhhhhhh……T-tu hermano…e-el…sobre mi…¡¡¡Quería aprovecharse de mi inocencia??? ¿¿¿Provocarme un infarto!!!
-(En realidad si) no…lo que pasa…
-¿Les ofrezco té?-sonreía la joven con gracia
-Rukia…-pronunciaron ambos-por favor…
-También les preparare la cena, tomen asiento y Renji, cariño-aproximándose-vístete ¿quieres? Mi hermano va a pensar cosas desagradables de nosotros jeje
-Claro, disculpe la impresión que le pude ocasionar pero es cierto que aun no hemos hecho nada malo…aun-alzando un poco su ropa interior y pasando su mano por el alborotado cabello, dirigiéndose hacia unas escaleras.
-Adelante-se retiro del mozalbete –(es tan tímido… ¿Cómo pude siquiera pensar que es malo? Al contrario está bueno, muy bueno…ejem)
Al cabo de unos minutos bajo luciendo un traje sastre el cual le sentaba de maravilla (¡quiero un novio de esos!)
-Rukia, déjame el resto ve a cambiarte-beso su frente-anda antes de que me golpees por no ayudarte.
-Si quemas la casa yo…bueno ya conoces las consecuencias…
-Golosa…ya sabes que no me quejo…estoy a tus ordenes…los 365 días del año las 24 horas del día y fines de semana. También los festivos.
-(¿D-de que hablan? Acaso ellos ya…¡¡NO!! Puede que este embarazada…por eso… ¿Hisana que debería de hacer en estos momentos? Me estoy volviendo muy suave o simplemente viejo…) Disculpen…
-Seguramente querrán conversar un poco, los dejare a solas mientras me cambio, procurare no tardar.
-Quiero disculparme por lo que hice no es lo que crees, en realidad vine a discutir contigo la conexión que tienes con Rukia pero al parecer te he criticado injustamente, al parecer eres lo que necesito como (gulp que difícil será decirle esto) cuñado.-Se acerco a la puerta de la cocina-
-Vaya eres muy frio, llamar a tu hermana por su nombre es algo formal, podrías simplemente llamarla imoto y ya. No creo que se moleste.-lo comento con tranquilidad sin dejar de vigilar la comida-
-No lo había pensado de esa forma, seguiré tu consejo la próxima vez.
-(Espero no hacerle enojar) ¿Prefieres mariscos o pollo?
-Lo que sea estará bien.
-Ha mejorado bastante desde la primera vez que prendió la estufa…
-¿Perdón?
-Rukia, ella de verdad se esforzó para que la dejaran seguir en el curso porque quemo la cocina. Decía que si no aprendía a cocinar como es debido no podría casarse con el consentimiento de una persona muy importante y…supongo ese eres tú.
-No, tal vez no me he ganado su confianza para que cocine para mi, en cambio si lo haría por Kurosaki Ichigo…cuando la envié a este lugar me escribió en la primera carta que tan solo bajar del avión se sentía triste claro que no termine de leer esa carta por lo ocupado que me encontraba y así todas y cada una de esas pequeñeces las fui dejando para después cuando me di cuenta ya no me escribía con tanto asiduo como antes. No me entristeció por lo que cuando mande traerla de regreso ya no quería volver. Busque la razón de su necedad, en la última carta me platicaba de él… parecía tan emocionada de conocerlo e inmediatamente lo supuse como amenaza. La traje a la fuerza, le prohibí volver siquiera a mencionar a esa persona mientras me encontrara a cargo de ella. Dos días después enfermo por depresión. Posiblemente me siga odiando.
-Igual yo.
-¿Qué?
-Igual yo te odiaría. En primera instancia ¿Por qué la enviaste a un lugar al cual no quería ir? ¿Por qué le prohibiste dejar a un lado sus emociones para volver? ¿Por qué no te diste tiempo para leer lo que ella felizmente creía te resultaría un alivio para saber que se encontraba bien?
-Para educarla adecuadamente, necesitaba ser algo estricto…
-¿ALGO? ¡Si la ibas a tratar de esa forma mejor no la hubieras adoptado! ¡Se hubiera quedado conmigo! ¿Te has puesto a pensar en el daño psicológico que le provocaste? No mereces que te llame hermano.
-Ese era el deseo de mi hermana…que tuviera a alguien en quien confiar-llorando fue descendiendo poco a poco por las escaleras la chica de ojos violetas.
-R-Rukia…disculpa…no quería tratar de esta manera a tu hermano…-Ayudo a bajarla dejando a un lado la cena.
-Descuida, no tienes por qué disculparte en realidad yo soy la que debería agradecerte todo lo que haces por mí. Bastante tienes con aguantarme, no debo de quejarme.
El moreno sintiéndose bastante mal-ya era hora-decidió entonces pensarse bien las cosas y mirando cómo se abrazaban acertó a decidir lo siguiente:
-Acepto su compromiso pero por favor, perdóname Rukia-se puso de rodillas para esperar su castigo-
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