Capítulo VII
Término.
La navidad había acabado y quedaba una semana antes de año nuevo.
El invierno silbaba en su oído y los copos de nieve se derretían por sobre la piel de su mano desnuda.
Al mirar el cielo grisáceo, podía darse cuenta de cuán rápido había pasado el tiempo desde que comenzó el año. Cuando aún su mundo era pacífico y sin inconvenientes, cuando no tenía que estar preguntándose lo que se estaba preguntando…
Sólo quería ver acabar el año…nada más eso, quería terminar el año y decir que con ello, todos los problemas quedarían atrás.
Una amarga sonrisa se asomó por sobre sus gruesos y fríos labios. ¿Por qué la idea sonaba tan lejana?
Frotó sus manos desnudas cerca de su boca para calentarlas con el aliento.
Sin saber porque tenía la ligera impresión de que todo saldría mal…Comenzando por el hecho de que no tenía el valor siquiera para esperar a su novia a las afueras de la estación de tren en donde acordaron juntarse justo un día después de haber hablado por teléfono.
Hay algo que debo decirte, recordó le había dicho con completa sinceridad, pero ahora que estaba allí esperando para decírselo, sentía que su fuerza y su coraje se habían ido corriendo como niñitas asustadas.
¿Cómo decirle que realmente estaba dudando de su relación por el beso que se había dado con su mejor amigo?
¿¡Acaso estaba aceptando algo como eso!?
¡No soy homosexual! ¡Qué asco!
Al parecer sí, pero eso era algo que no iba a aceptarlo tan fácilmente.
Su novia apareció justo en aquel instante con su rostro sonriente y sus manos extendidas hasta él.
Yuu apenas y pudo darse cuenta cuando ésta se encontraba abrazándolo con tal cariño que él no pudo evitar rodearla con sus brazos.
Su cuerpo delgado cabía perfectamente y su cabeza se amoldaba con cuidado en su pecho mientras ella depositaba un tierno beso sobre su ropa.
-Te extrañé tanto Yuu-chan-Murmuró para luego ir de puntillas para besarlo.
Pudo ver completamente su rostro al momento en el que Chizuru se inclinó para juntar sus delicados y fríos labios con los suyos. Sintió el rozar de la bufanda rosa de la chica por sobre su barbilla, e incluso llegó a fijarse en el pequeño rasmillón que tenía ella por sobre la ceja izquierda.
Chizuru se despegó de él y Yuu ni siquiera se dio cuenta de que había rechazado el beso de su novia.
Algo andaba mal. Sólo había estado pensando en Uruha desde el beso y ahora ni se inmutaba por su novia quien había conseguido despertar en él más que suspiros y sonrisas bonitas.
¿¡Qué mierda andaba mal en él!? ¿¡Qué le había hecho el maldito pato para lavarle el cerebro!? ¿Acaso él TAMBIÉN era gay?
¿¡Acababa de decir “también!?
Oh, Dios mátame, pensó angustiado.
-Yuu-chan…
Tenía que averiguar qué es lo que…
-Yuu.
Andaba mal. No podía seguir así, esto estaba afectándole más de lo que debería…
-¿Shiroyama Yuu, me estás escuchando?
-¿Ah?
Habían sido pocas las veces en las cuales le había visto enfadada, y ésta era una de esas veces.
-Tú crees que soy tonta y que no me doy cuenta de lo que está sucediendo aquí-Dijo secamente-. Puedo ver perfectamente las cosas, Yuu.
Estoico, Aoi la miró como si la desconociera. Su tono de voz difícilmente podría parecerse al de la tierna y dulce Chizuru.
-Sé que me estás evitando-Afirmó-. Sé que no sientes lo mismo por mí. Sé que hay otra persona.
En ese instante, él se preguntó porque dijo “otra persona” en vez de sólo “otra” para referirse a una mujer.
…La revolución Francesa, fue uno de los acontecimientos más importantes de la humanidad, ya que estos conllevaron a…
-Mierda.
El teléfono volvía a sonar.
Reita lo había estado llamando todo el día luego de su conversación de ayer…y la verdad, no quería ni tenía intenciones de hablarle hasta que no estuviera seguro de lo que tendría para decirle. Aún era DEMASIADA información para sus oídos.
- Yo no puedo estar con Ruki porque él está enamorado de ti.
Se había quedado pegado al piso y había contenido demasiado la respiración.
Reita se dio cuenta de su sorpresa y alargó una sonrisa sarcástica.
Quizá llegar y soltarle algo tan importante tan descaradamente fue la peor forma de decírselo, pero debía de saberlo, era lo justo ¿no?
-Idiota-Se rió-¿Crees que es verdad? Sólo me gusta tomarte el pelo. No es como si yo fuera gay ni que mucho menos Ruki esté enamorado de ti. Si le dices tamaña calumnia me desholleja-Se carcajeó.
¿Podría creerle?
Evidentemente no. Lo que había dicho era cierto. Reita estaba enamorado de Ruki, y aparentemente el peque sentía lo mismo que él por Aoi.
¿¡Acaso esto era un rectángulo amoroso!?
Tamaño problema…
Todo se estaba volviendo igual que los doramas que pasaban por la tele, de aquellos de los cuales se había burlado con regularidad con sus amigos… ¿Ironías del destino?
Lo mejor era seguir estudiando.
…humanidad, ya que estos conllevaron a…
-¡Mierda! ¡Estúpido teléfono!
Era la última vez. Iba a apagarlo en ese mismísimo instante…
Sólo que…
-Yuu…
¿Podría cortarle a él? ¿Podría ignorarle una llamada a él?
Su corazón comenzó a acelerar el ritmo conforme las tonadas pasaban. Podía imaginarlo con el teléfono en su oreja, preparado para hablar apenas escuchara su respiración del otro lado…
Cerró los ojos con fuerza y presionó el botón de contestar de su teléfono.
Si no lo hubiera hecho ¿Habría sido para mejor?
-Hola…
-Quiero verte-Dijo cortantemente, lo cual, asustó a Uruha.
-Bueno… ¿Dónde quie…?
-Estoy en la entrada del complejo. Puedes bajar.
Su voz sonaba cortante, pero a la vez decidida, como si algo le fuera a confesar… ¿Sería que…? ¿Se habría dado cuenta de todo? ¿Lo sabía? ¿Y estaba allí abajo para…?
Mierda. No estaba preparado. ¿Saldría así? Obviamente la ropa era lo que menos importaba…
Se puso una parca y se abrigó bien porque afuera no se veía un buen sol tropical que digamos.
Al llegar a la entrada del complejo del edificio le vio frotándose las manos cerca del rostro con unos estúpidos guantes color crema que apenas y parecían entrar en sus manos.
Intentó reírse por ello al principio, pero al ver su rostro, áspero y malhumorado, supo que lo que tenía que decirle no era nada bueno.
Aminoró la caminata, intentando no llegar hasta él, con el pánico saltando en su cabeza de un lado a otro, gritando que no lo escuchase, que se devolviera.
No fue así. Llegó hasta él con las manos tiesas y el rostro extrañado.
-Por favor no me mires así-Suspiró él.
No pudo articular palabra. Ambos sabían lo que él estaba por decir.
Los ojos castaños del moreno penetraron en su rostro antes de poder murmurar algo más.
¿Cómo decirle a tu mejor amigo que no querías verlo porque te sentías confundido?
Uruha no tenía ninguna culpa.
-Me he estado comportando de una forma extraña-Comenzó-. No soy quien era y no me entiendo-Prosiguió-. Y todo ha sido desde tu estúpido beso de ebrio.
El corazón de Shima se detuvo por una fracción de segundo y si no hubiese sido por el excesivo frío de allá afuera, seguro sus mejillas se hubiesen encendido en un vivo color rojo.
-Yo no soy homosexual-Afirmó bastante seguro de sí mismo, pero en realidad, cuando la frase acabó y se tragó los residuos de palabras, una misteriosa y peligrosa duda le asaltó-, y sé que tú tampoco lo eres.
No…imposible…después de todo lo que había hecho, ¿Él seguía sin saber de su amor? ¡¡ ¿Acaso Yuu había tomado clases para ser idiota?!!
-No sé…no sé qué pasó en tu departamento el otro día-Murmuró, avergonzado-. Y ni siquiera sé por qué estoy manteniendo este tipo de conversación gay con mi mejor amigo…
Si tan sólo hubiese tenido el valor…Si tan sólo hubiese sido capaz, Shima hubiera saltado sobre él para besarle, para amarle de las muchas maneras en las que sólo él sabía amarlo. Lo hubiera abrazado, besado y acariciado, le hubiera repetido incontables veces cuán imbécil podía llegar a ser…pero…
Evidentemente no fue capaz. Ni siquiera pudo responder a sus palabras, aun tuviera la mejor oportunidad para declarársele.
-Estoy confundido. Pero amo a Chizuru, eso lo sé. Así que creo que lo mejor es que nos distanciemos. No soy homosexual. No lo he sido nunca, no lo soy y no lo seré jamás.
¿Por qué tenía que ser tan doloroso?
-No me mires así…Idiota-Sonrió Yuu-, no te estoy desechando.
Claro, evidentemente había tomado clases para ser idiota y tenía un magister en ello…
-¿Qué se supone que diga para que esto no sea peor?-Preguntó Shima.
-Nada. No digas nada. Hasta que esté mejor.
-¿Y…?
¡Vamos! ¡No debo de perder la oportunidad!
-¿Y qué pasa si yo en verdad…?
-¿Qué cosa?
-¿Qué pasa si en verdad yo no deseo que ames a Chizuru?
-¿Qué?
-Yo no quiero que la quieras.
-¿Qué estupidez dices? Eres mi mejor amigo, sí sabes algo de ella…
¿Saber algo de ella? ¡Ella jamás haría algo malo para herir a Yuu! Sino, jamás hubiera permitido antes esa relación…sí ella hubiese sido como sus anteriores novias, no la hubiera tolerado tanto.
Sólo porque ella compartía el mismo amor que él por Yuu…sólo por eso, sólo por eso le agradaba un poco.
-Chizuru jamás haría nada para engañarte.
-¿Entonces?
Un silencio horrible se apoderó del ambiente y sólo fueron capaces de escuchar el ruido del tráfico cercano.
Shima no sabía cómo arreglar la frase sin llevar todo a la basura.
-¿Estás celoso?-Se carcajeó Aoi para su sorpresa-¿Estás celoso de mi novia?
Shima alzó la cabeza, sin entender su humor.
-¿Mi mejor amigo celoso del tiempo que paso con mi novia? ¿Eso es todo?
¡Perfecto! Nuevamente demostraba su gran idiotez.
-Ay Takashima Kouyou-Se rió-. Si es sólo eso me quedo más tranquilo.
¡Pensar que todo es eso! Por supuesto, Uruha jamás sería gay, por favor, debía de quitarse ese estúpido pensamiento de la cabeza.
Por un momento, sintió un gran alivio en su pecho.
Un alivio que se mezclaba con un extraño dolor de angustia.
-Seré tonto-Se rió nuevamente-. Es sólo eso.
Sólo eso…Sólo e-
-No. No es sólo eso.
De pronto, Yuu recordó que Shima era más alto que él. Lo recordó porque cuando levantó la vista para mirarle, él estaba muy cerca de él con los ojos fijos en él.
Pasó todo demasiado rápido.
No supo cuánto tiempo demoró su mejor amigo en bajar hasta su lado y robarle nuevamente un beso.
Sólo que ahora no existía alcohol. No existía forma para justificarlo.
Uruha lo estaba besando…en medio de la calle, en donde todo el mundo podría verlos.
De pronto, su cuerpo, completamente paralizado no pudo moverse y simplemente dejó que éste le besara…Aunque aquello, sólo fue una vil justificación. Una forma para evadir el dolor…Una forma de protección hacia la realidad, hacia el sentimiento de culpa que tendría nuevamente cuando viera a su novia.
Chizuru…
Observó los guantes que ella le había pasado. Tan pequeños que apenas y cabían entre sus manos.
-Tómalos-Sonrió ella-, si miro tus dedos, puedo ver lo congelados que están.
-No es necesario…
-No, no…yo me iré en el tren, y mi casa está cerca. Quédatelos.
Una amarga sonrisa apareció en sus labios.
-Recuerda que, a pesar de todo yo te amo. Y si hubiera algo que yo pudiera hacer para que lo recordaras…
-Yo también te amo-Respondió y se besaron.
Chizuru se dio cuenta.
Yuu ya no estaba pensando en ella.
Lo supo cuando al pasar por el departamento de Takashima-san lo vio besar a otra persona…
A otra persona.
Fin.