Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Pastel de Vainilla por knaxzerim

[Reviews - 8]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

kana.- hi!! de new

zerim.- dos capis maximo como lo prometimos

yugi.- lo partieron en dos por que completo no cabia

zerim.- ¬_¬ papi ssshhhh

kana.- enjoy

“la primera vez que escuche hablar de él pensé que sería una broma que alguien tan perfeccionista existiera, cuando Yami mencionó que tendría que pasar el fin de semana con un amigo suyo, pensé en todos menos en él, ahora Seto Kaiba, el jefe de mi hermano se encuentra en mi casa, intencionalmente dejé que mis empleados de planta fueran a su casa, no les dije que mi hermano no estaría en el fin de semana, y les dije que solo llegaría un poco tarde luego de una cena de negocios.”

 

Yugi Motto era un chico bastante peculiar, no era un genio en la escuela, sus notas nunca fueron excelentes, salvo en economía del hogar, pero era muy amigable sin proponérselo, lograba ganarse el cariño y la protección de la gente que lo rodeaba. Su cuerpo era delgado y poseía unos hermosos ojos en color amatista en contraste con su piel clara y el cabello en tres tonalidades diferentes; solo había un inconveniente: el usaba una silla de ruedas.  

 

La gente dice que todos tenemos un punto débil, la razón de tener que usar la silla era precisamente una debilidad innata extraña y permanente, su cuerpo y en especial sus piernas eran extremadamente sensibles a cualquier cosa, tacto temperatura y movimiento; sus muslos tan tersos desde que era pequeño se marcaban en moretones enormes cuando algo le tocaba, para protegerle le vendaban siempre las piernas con ungüentos y sedantes tópicos, para que no sintiera mas, para que no sufriera. Pero aun así, cuando ni sus padres, ni su hermano  lo veían, él se daba el valor de dar un par de pasos, probando que era capaz de hacer las cosas por si mismo, tal y como lo había hecho esa tarde. Pero ese obstinamiento tenía un alto costo  y luego de esforzarse de más tenía que pagarlo.

 

_mis…mis piernas

 

Estaban entumidas, se acercó al calefactor y lo encendió, pero tardaría un poco en calentar la habitación, su hermano le había dejado el pijama en la cama, cosa que ahora agradecía. Se retiro la camisa, descubriendo su pecho cubierto también de vendajes, se retiro las vendas, del pecho y se puso la delgada camisa de satén de la ropa de dormir, de inmediato se quitó los pantalones mirando sin verdadera sorpresa que sus tobillos tuvieran marcas rojas y sus dedos estuviesen morados por el cambio de temperatura luego que la chimenea se apagara. Retiro una a una las vendas que apresaban sus muslos y pantorrillas, apretando los dientes ante la falta de presión, su hermano siempre le ayudaba con eso, y ahora él lo tenía que hacer por si solo, y era molesto, su cuerpo temblaba de frio y los dedos de sus manos estaban mas torpes que nunca, no pudo evitar gemir de dolor cuando al fin retiró el ultimo trozo de tela de su tobillo, derramando una lagrima en el proceso.

 

_dios, me duele tanto

 

_espero no interrumpir

 

Sonó en la puerta, era obvio quien estaba entrando, tenía en la mano un plato pequeño con un tozo de pastel, al parecer solo había tomado una cucharada del mismo, cuando escuchó un ahogado gemido desde la sala dónde se había decidido a comerlo.

 

_no…esta bien, solo me preparaba, para…para…ngh dormir

 

El castaño encendió la luz y se acercó, dejando a un lado el plato del pastel, extrañamente tenía la cara en un tenue rosado, pero al escuchar al chico quejarse por segunda ocasión, prefirió dejar su agradecimiento para después.

 

_que te pasa?

 

_nada…por…por que lo pregunta

 

Sujetó su brazo para hacerle girar la cara, pero no esperaba que el chico gritara desesperado que lo soltara, asustado retiro la mano de aquel lugar, sintiendo en el proceso que una lagrima chocaba con el dorso de la misma. El tricolor se hizo un ovillo mostrando las piernas llenas de moretones y los brazos aun en una tonalidad azul.

 

_lo siento, te lastime…perdón…no…no lo sabía

 

No encontraba las palabras para disculparse, el chico lloraba y era claro que era su culpa lo primero en lo que reparó fue en el color de su piel, tenía frio a pesar de que el calefactor estuviera encendido.

 

“por eso quiso encender la chimenea”

 

Salió a la sala, había aun unas cuantas brazas entre la ceniza, coloco algunos periódicos y leños que estaban en la cocina, un suave fuego se encendió; de inmediato se volvió a la habitación encontrando al chico hurgando entre el cajón del buró al lado de la cama, sus manos temblaban y tenía que hacer un gran esfuerzo por mantener la calma. Seto se acercó, indicándole que le ayudaría, estaba alterado, pero no lo demostraría seguro que haría al pequeño sentirse aun peor.

 

_es…el…frasco…azul

 

_iré por un poco…de agua

 

Concluyó, al ver que el chico le arrancaba las pastillas de la mano y tragándose una de inmediato, su respiración era agitada, y en cuanto tocaba su brazo, un leve sollozo escapaba de su garganta, miró el pantalón del pijama a un lado de sus piernas, desdoblado pensó que sería mejor ayudarle a vestirse y arroparse, la chimenea no tardaría en calentar toda la casa en unos instantes.   

 

_lo siento…

 

_no te disculpes

 

_se que tenía que decírselo…pero eres la primera persona que nunca lo pregunto…simplemente no pude

 

_ya te dije que no importa…es tu vida y la de tu hermano, sus razones tendrán para no comentar esto con cualquiera.

 

_quieres saberlo?

 

Dijo al aire cuando las mantas le cubrían ya el pecho hasta la barbilla. Seto se tenso, en verdad le causaba curiosidad el saber por que de la crisis de hace un momento, pero no tenía derecho a preguntar, así que tomó una decisión corporativa.

 

_puedes resumirlo?

 

Cuidó su tono de voz, eso era algo común, las explicaciones largas, solo hacían mas grande el problema, y de esta forma tal vez podría decirle por que razón no se acabó el dichoso pastel.

 

_mi cuerpo es muy sensible, a todo tipo de tacto…un simple roce me causa moretones, mucha presión…causa dolor.

 

_bueno, eso explica por que gritaste.

 

_me disculp…

 

_sabes…hace mucho tiempo conocí a alguien que tenía un problema similar…

 

_en serio…y se curó?

 

_algo parecido, esa persona, sufría mucho por otro sentido, su cabeza daba vueltas cuando un olor desagradable llegaba a su nariz y le daban muchas nauseas cuando era un aroma dulce, pero un dia de tantos, alguien le dijo algo muy cierto…tenía que buscar el otro extremo.

 

_perdona pero no te entiendo.

 

_normalmente los sentidos están ligados a los impulsos eléctricos del cerebro, el dolor y los aromas son solo información que el cerebro almacena para repetirla en cuanto una sensación similar se presente, alertar al cuerpo…por ejemplo cuando te quemas, retiras de inmediato la mano dañada, y sabes que cuando hay fuego existe el riesgo de quemarte, por ende lo evitas.

 

_claro, pero…

 

_espera, no me gustan los dulces por que el extremo del olfato, normalmente es el gusto, por medio de la lengua puedes apreciar la información del aroma y puedes reducir el efecto que causa…una vez deducido eso resulta mas sencillo el soportarlos, pero aun así existen algunos contratiempos que no te curan del todo, desde siempre solo hubo un aroma que no pude evitar me alterara…

 

_pero, estas hablando de ti?

 

_si, nadie fuera de mi familia lo sabe, incluso Mokuba lo ignora, el nació mucho después que yo me curara 

 

_por desgracia mi padecimiento es algo mas complejo que simples esencias…

 

_pues…no lo se, solo pregúntate…cual es el otro extremo del dolor?

 

 _...no…no lo se

 

_es algo muy sencillo si lo piensas bien, si te duele cuando te tocan, programa a tu cuerpo para que el cerebro no lo registre…

 

Dijo algo serio como intentando sonar convincente, al momento que tomaba el plato del pastel e inconscientemente tomaba un bocado, trago con dificultad, y después acercó su nariz al postre, percibiendo el aroma de este…vainilla, el único aroma que lo volvía realmente loco, no le causaba nauseas, tampoco le mareaba, era algo sublime estar cerca de ese aroma, tanto y a tal grado que era realmente peligroso; saboreó el betún que quedaba en sus labios, mordiendo ligeramente y relamiéndose, deseando no dejar ningún rastro, había ocurrido lo mismo que cuando lo probó por primera vez, su cuerpo había sido completamente sincero al advertirle sobre probarlo, pero simplemente no fue posible para él resistirse.

 

_ah…mmgghh

 

Gimió extasiado al terminar de degustar su pequeño bocado de pastel, dejando completamente atónito al pelirrojo que estaba expectante y a hora semi-incorporado en la cama.

 

_no pude terminar…el pastel que preparaste, precisamente por eso.

 

_te…gusta…el aroma de vainilla?      

 

“no solo eso, es una droga afrodisiaca”

 

_espera, lo tengo…el otro extremo

 

_de que habla, Kaiba_san?

 

_el otro, extremo, ya se como puedes “curar” tu problema

 

_es en serio?

 

_quieres intentarlo…

 

Pregunto sonriendo y claramente convencido que algo ahí estaba mal planteado, pero después de un pastel de vainilla como ese, era muy difícil, contenerse, así que despojó al muchacho de las mantas, y poco a poco desabotonó su camisa.

 

_es muy sencillo, cierra los ojos e imagina que mis yemas son algo ligero…suave, liviano…

 

_pe…pero…

 

_inténtalo…te he dicho que funcionó conmigo, no veo por que no lo hará contigo

 

_es…esta bien

 

El menor cerro lo ojos, y recordó el roce de los claveles que ocasionalmente llevaba su empleada para adornar la casa, su aroma era suave a hierva silvestre, después pasó a recordar el pasto de su jardín, áspero pero mullido y la sensación de frio que se presentó al verse descubierto ante la mirada azulina del  castaño ahora se tornaba cálida, demasiado cálida. Abrió los ojos y encontró que el chico ahora respiraba cerca a su aureola derecha, sorprendido buscó su mirada, pidiendo una explicación pero lo que recibió fue una pequeña lamida, lenta y cadenciosa y después de nuevo el vaho de su boca alteraba su sistema nervioso, eso no le había dolido, pero había algo mas, un algo que le preocupó, pero que al mismo tiempo quiso volver a  sentir.

 

_que…que fue eso

 

_eso…se llama placer…ahora entiendes

 

“será mejor que lo deje así o terminaré metiéndome en problemas”

 

Pensó el castaño mientras se retiraba del contacto del ojirubí y acomodaba su ropa, tenía un pequeño problema bajo la pretina del pantalón, que por mucho le gustara no podía saciar ahí. Pero el chico lo sujetó por la camisa, se le miraba molesto.

 

_piensas dejarme así

 

_no creo que sea el momento adecuado para…

 

Ahora las palabras se fueron de su boca, el muchacho tenía en las manos el frasco con la esencia de vainilla que recién le había dado. Su ceño estaba fruncido pero, de pronto su mirada se calmó dando paso a una extrañamente analítica, abrió a medias el frasco.

 

_el problema de dejar al descubierto tus debilidades es que alguien puede sacar ventaja de ellas…Seto_san…que ocurriría si por casualidad una gota de esta esencia cae en mi cuerpo?

 

_ no…lo abras…por…por favor

 

_a que le tiene miedo…yo quiero curarme y si tengo que hacer esto para lograrlo…

 

Tomó el frasco y lo inclinó un poco sobre su pecho, Seto tomó su muñeca tratando de evitar que el liquido saliera de la botella, en medio del forcejeo dejó caer tal y como amenazó el tricolor al principio una sola gota del negro liquido sobre el cuello del joven , la cual resbaló por en medio de su pecho, estomago hasta perderse en el limite de su pantalón, Kaiba se callo de rodillas cubriendo su nariz, pero el olor penetraba su nariz de una forma impresionante, era como si hubieran extraído ese aroma de mil flores de vainilla, solo para concentrarlas en ese pequeño frasco.

 

_Yugi…acaso no sabes lo que acabas de hacer?

 

_estoy buscando una revelación…

 

_no…pequeño…ahora y justo ahora, acabas de provocar tu violación…

 

Se coloco en cuatro sobre su cuerpo, quitándole el dichoso frasco de la mano, estaba que se volvía loco, pero después de todo, ¿Cuándo volvería a tener la oportunidad de tocar a un virgen? Lo tapó y dejó que se rodara de las manos del ojivioleta mientras le tiraba del mentón para besarle, dudando primero, después devorando esa dulce boca, deslizó sus manos por los brazos, el flanco y después sin mas tomar las dos nalgas para sentirlas suaves e inmaculadas, el chico trataba de gritar pero en medio de sus quejas había suspiros de alivio y su rostro mas que encarnado dejaba claro que estaba aprendiendo algo. Comenzó a participar del beso, deslizando su lengua junto con la del castaño, el cual no se conformo simplemente con besos y roces y de inmediato despojó al chico de la poca ropa que le quedaba sobre el cuerpo, deslizó su lengua por todo el torso inundado por el aroma de la vainilla.

 

_Seto…Seto…san…pare…pare por favor 

 

_que acaso vas a decirme que te duele…déjame decirte que me importa poco

 

_perdóneme, por favor…pero…pero…no… quiero… no quiero que sea así

 

El muchacho estaba llorando, pero el castaño ahora se tiraba mentalmente del cabello, esa cara, esa simple visión hacía el desearlo aun mas, tragó grueso, y le miró temblando conteniendo su deseo lo mas posible haciendo el intento por levantarse, pero contrario a las palabras recién emitidas por su anfitrión el mas bajito le abrazó por el cuello.

 

_quiero que me vende los ojos…

 

_perdón?

 

_ya…ya se que fue mi culpa, pero si lo veo, seguramente pensare que me dolerá y no quiero eso

 

_te han dicho que eres un pequeño perverso…Yugi_san

 

Se acercó a su oído, susurrándole suavemente “cierra los ojos” y después lamer obscenamente el lóbulo de su oreja, pasando a mordisquear partes de su cuello, la clavícula y después su pecho, al mismo tiempo que su lengua se encargaba de marcar camino entre el inicio del cuello y una de las tetillas del chico, sus manos deslizaron poco a poco el pantalón recién puesto junto con la ropa interior, una sensación fresca alerto al ojivioleta, pero no se atrevió a abrir los ojos, nuevamente sintió la lengua del castaño reptar por su estomago y hacer cadenciosos círculos en su ombligo, se mordió el labio reprimiendo un quejido leve de satisfacción, era cierto, eso que sentía no era dolor, y era algo a lo que fácilmente podía acostumbrarse.

 

El pulso acelerado del chico y el jadeo mal reprimido le dio la pauta para seguir, al diablo con su amigo, Yami había sido el culpable de esa situación al dejarlo a cargo de un hermano tan jodidamente inocente, sintió la dureza de sus pantalones y la imperiosa necesidad de liberarse, así que jugando al seductor, tomó la mano de Yugi dirigiéndola a su entrepierna, logrando que el acunara en su palma aquella erección aun cautiva.

 

_mira lo que tu dichoso pastel me provocó…lo sientes

 

Yugi no respondió con palabras, en respuesta solo presionó levemente su mano sobre aquel abultamiento, “esto lo provoque yo…no, esto lo provocó la esencia”. No hubo respuesta por parte del mayor de nuevo a ciegas sentía su mano ser dirigida a la parte superior del pantalón indicándole se deshiciera de la prenda lo antes posible. Bajó el zipper, y recordando lo que hacia con su propio miembro liberó la erección del castaño, deslizando su dedo índice y pulgar por toda la extensión, sacando un gemido ahogado al CEO. No pudo esperar mas abrió los ojos.

 

_cuantas…?

 

_es la primera…deberías notarlo    

 

Ahora ambos miembros estaban cautivos en la diestra del castaño mientras la siniestra se encargaba de preparar lo que venía, Yugi se tensó, la invasión de los digitos era mas de lo que anteriormente había experimentado con roces y golpes, quería llorar, pero también quería curarse, respiraba agitado y conforme pasaba el tiempo los movimientos de la mano de Seto le parecieron lentos tanto al frente como en su interior, así que comenzó a mover las caderas en delicado vaivén, sintiendo el aire ausente en sus pulmones exhalo con ganas cuando vació su esencia en la mano del mayor, el primer orgasmo de su vida y ahora le hacía reventar cada poro de su cuerpo ansiando mas.

 

_ahora voy yo

 

Fue lo que alcanzó a escuchar a medias mientras sentía su cuerpo ser invertido sobre el colchón, sintió la cadera muy por sobre su pecho y la lengua de Seto en el lugar que hace unos momentos su mano se encargaba de abrir para él, si antes mantener los ojos abiertos era algo que no quería hacer, en es preciso momento lo que mas quería era enfocar el cuerpo semi desnudo del castaño ahora entrando en su cuerpo con su bien dotada virilidad, la había sentido, gruesa, palpitante igual a la suya ahora de nuevo cautiva de la mano del castaño, un jadeo ahogado y un llanto lastimero acompañaron la penetración.

 

_mas…mas despacio

 

Pero sus suplicas llegaron a oídos sordos, el balanceo suave pero vigoroso subsecuente a su suplica lo confirmó, parecía que de pronto su cuerpo no quería registrar nada de lo que el castaño hiciera, ni su roce, ni su presencia en aquella intima parte de su dueño. Pero pronto cambio de opinión, dejando pasar en bandada holeadas de placer que parecían nacer desde las caderas estrechas y torneadas del castaño hasta las puntas de sus cabellos tricolores. Cuanto duró no lo sabía, recordaba al mayor cambiarle de su postura a cuatro patas para mirarle de frente y hacerle montarlo, con gozo y sin recato, aceptando la orden lograron nuevamente el orgasmo abrazados uno sentado en el regazo del otro.

 

Ninguno de los dos dijo nada, el castaño que parecía despertar de un extraño letargo, miró al muchacho desnudo en sus brazos y le acuno, besando su coronilla y llevándoselo al colchón cuando exhausto calló, ya dormido.    

 

Al dia siguiente lo que los despertó fue el sonido del celular del menor que había estado sonando hacía rato, mirando la pantalla el chico vio la leyenda “llamadas perdidas”, contestó con desgano.

 

_si?

 

_Yugi?...estas dormido aun?

 

_Yami! Si… to…tomaba una siesta…que ocurre?

 

_nada, solo quería saber como te la estabas pasando con Seto, se que no le dije nada de lo de tu problema pero estoy seguro que él no te preguntara cosas que sabe te molestaran…

 

_de hecho, él se encerró en tu habitación, nada mas llegamos del aeropuerto…pero no ha sido tan malo

 

_hermanito, perdóname por dejarte este fin de semana

 

_no te preocupes, yo entiendo, regresas mañana no es así?

 

_si, tomare el primer vuelo del dia para llegar temprano…

 

_te veré mañana entonces

 

_si, descansa y_ hico una pausa, temiendo terminar la frase_ no te esfuerces mucho

 

_si, si ya entendí

 

_te quiero hermanito, nos vemos mañana

 

Y finalizo la llamada, y se dio la vuelta topándose con la cara del castaño, tenía los ojos abiertos y le miraba extrañado, se incorporó sus piernas estaban entornadas a la cintura del mayor y este aunque inmutable estaba levemente sonrojado.

 

_tu hermano regresa mañana….como te sientes.

 

_no lo se…

 

Miró hacia el techo mientras liberaba el cuerpo de su compañero, la luz del sol entraba de lleno por la ventana, a través de las cortinas, la sensación era agradable, miro nuevamente su cuerpo, parcialmente cubierto por una delgada sabana y los brazos de Seto, no tenía frio y a pesar de sus moretones no había molestias…

 

_no siento nada…

 

_que?

 

_ya no siento nada, Seto no me duele

 

Concluyo alegre mientras se abrazaba a su cuello riendo, el mayor le abrazó por la espalda y deslizó su mano por todo el dorso, logrando con este simple acto un gemido largo y prolongado.

 

_...creo que ahora tenemos otro problema

 

_habrá que solucionarlo antes que mi hermano regrese….no cree Seto_san?

 

Ambos se miraron cómplices y soltaron a reír, era cierto aun tenían todo ese día y toda la noche para arreglar el nuevo problema del pequeño Yugi. Después de todo…aun quedaba un pastel completo en la cocina.    

Notas finales:

yami.- como pueden ustedes hijas de su....!!!

kana.- papi calmate....

zerim.- a poco no estaba lindo?

yugi.- ahora quien va a pagar las consecuencias soy yo =_=

kana.- quejas...amenazas

zerim.- no se olviden en un rew !!!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).