EL ÚLTIMO BESO
By Carmín Sakuma de Uesugi
Capitulo 1. Celos
Yuki conducía como siempre a exceso de velocidad, le encantaba sentir el aire en su deportivo, Shuichi lloraba como de costumbre pues el miedo lo embargaba por ir demasiado rápido, en un momento dado se aferro al brazo del escritor, pidiéndole que se detuviera pero este no le hacía caso, los celos lo estaban matando en su cabeza la imagen de esta persona hablando cariñosamente con su peli rosa, pero este tiene la culpa de ser demasiado lindo, y no darse cuenta que este tipo traía algo entre manos.
Todo comenzó cuando Touhma les comunico a Bad Luck que después de su próximo concierto habría una recepción a la que estaban invitados y podían llevar a un acompañante, Eiri fue a ver a su cuñado y escucho todo claro que aunque la bola rosa le implorara el no accedería, pues nunca le han gustado este tipo de eventos con gente falsa que solo busca su provecho, se dio vuelta dirigiéndose a la oficina de Seguchi para hablar y después irse, no iba a ir a ver a Shu pues apenas hace unas horas se despidieron en el apartamento. Inverso en sus pensamientos se encontraba, levanto sus ojos en auto reflejo mirando al conejo deforme que tanto odiaba, este iba en modo chibi sonriendo y jugando, al encontrarse ambos se miraron desafiante por un segundo que más bien parecieron una eternidad siguiendo cada uno su camino, el rubio sabia que el oji azul trataba de quitarle a su amante y no lo permitiría.
Ya en la oficina del empresario y ex integrante de la famosa agrupación Nittle Grasper, hablaron de negocios y el escritor se retiro, así como si nada, ya se iba cuando creyó conveniente saludar al cantante, para hacerle saber que por más que le pidiera no lo acompañaría, menuda sorpresa se llevo al escuchar al peli verde decirle que no podía esperar más para que llegara el viernes en la noche y estar en la fiesta.
- Oye Shu, me gustaría que fueras mi pareja en la fiesta es que Touhma estará ocupado y Kumagoro y yo queremos estar contigo na no da, dijo mientras sonreía como un niño sosteniendo su conejo de peluche de un lado a otro.
- Lo siento Ryuichi pero pienso ir con mi adorado Yuki, contesto el peli rosa, emocionado por pasar una velada al lado de su amante.
- Pero Shuichi, creo que Eiri no va a querer acompañarte ya sabes que a él le disgustan estas cosas, le comento en modo serio.
- Tienes razón, susurro el de mirada amatista deprimiéndose.
- Entonces ¿qué dices nos acompañaras a Kumagoro y a mí?
El menor iba a respondes cuando un Yuki celoso entro, ¿Cómo era posible que este tipo se aprovechara de algo tan bajo?, que si pensó en no ir y todo pero no era asunto suyo el entrometerse en su vida, agarro del brazo a Shuichi y le dijo que se iban, ya en el auto Shu no entendía porque se fueron así, de seguro Yuki quería darle una sorpresa al ir por él a la disquera, en todo el transcurso no le dirigió una palabra pero su rubio era de ese modo y por eso lo amaba.
- Oye Yuki, dijo en tono tímido, -quería pedirte que… sabes vamos a tener un concierto el viernes… y después habrá una recepción y yo…
- Si te voy a acompañar interrumpió el rubio, fríamente sin dejar de ver al frente, tal vez le podía leer la mente si era así todos los pensamientos que tenían respecto a este y no pudo dejar de sonrojarse enormemente.
Llegaron al apartamento y el escritor acorralo al pequeño en la pared no podía dejar de besarlo su sabor es adictivo para él, sus manos recorrían cada centímetro de esa piel tan suave y que solo le pertenecía, quería tenerlo, marcarlo, como suyo, ese tipo no se lo arrebataría, no si podía evitarlo, lo levanto en sus brazos y lo dirigió a la alcoba, lo tendió suavemente quitándole la camisa, aprisiono de nuevo esos labios que lo incitaban tan rosas y apetitosos, beso su cuello y este gimió al sentir la lengua del mayor recorrer desde sus oídos, cuello bajando poco a poco, quedándose en sus pezones torturándolo, dándole tanto placer, las manos del cantante se entretenían acariciándole el cabello, el rubio se despojo de la camisa dejándole ver el bien formado tórax desde ese ángulo lo veía más sexy que nunca, el cabello revuelto pequeñas gotas de sudor en su frente y pecho, aunque nunca lo aceptara un leve rubor se formaba en sus mejillas, lo que lo hacía amar más a su Yuki, le bajo los pantalones cortos que traía puestos junto con su ropa interior, sus ojos se posaron en el miembro del menor que ya se despertaba y reclamaba su atención, sonrió pícaramente ante esta visión, -Shuichi eres un travieso le dijo de forma sexy-, este se sonrojo hasta las orejas, lo metió en su boca devorándolo como el mejor de los manjares hasta hacer que este se viniera, tragando todo el liquido, volvió a besarlo apasionadamente recorriendo cada espacio en esa boca con su lengua, se quito el pantalón lentamente provocando al menor que ya desesperado le ayudo a terminar de desvestirse, ya su erección se notaba, introdujo algunos dedos en la boca del chico y después lo volvió a besar mientras que introducía un dedo en su entrada, ahh gimió sin dejar de besarlo, después introdujo el segundo dedo moviéndolos circularmente y en forma de tijera, finalmente introdujo el tercero este instantáneamente arqueo la cadera demostrando que ya estaba preparado, el mayor saco los dedos y los reemplazo con su miembro que introdujo de una estocada, el peli rosa al sentirlo dentro no pudo evitar enterrar las uñas en la espalda del rubio, este sonreía de medio lado al sentir la estreches del menor ese espacio que solo le pertenecía a él y a nadie más, siempre había sido así desde que el cantante le entregara su virginidad porque fue el primero y el único, nadie más podía gozar del cuerpo del chiquillo que se metió en su vida para nunca salir, empezó el vaivén rítmico, cuerpos sudorosos entrelazados, respiraciones aceleradas terminaron unánime, el rubio dentro del pequeño y este en el vientre de ambos, el cuerpo del peli rosa marcado por el rubio como suyo, y la espalda del mayor por las uñas del chico.
Al día siguiente todo transcurrió como de costumbre, pensó que quizás al rubio se le olvido lo de la recepción no importaba pues anoche fue suyo, siguieron los ensayos pues ya estaban a jueves, termino el ensayo y regreso al departamento, Yuki se encontraba en “su santuario” trabajando, no quiso molestarlo y se acostó a dormir pues no durmieron en toda la noche, cuando despertó ya no se encontraba en el departamento su amante sintió un dolor en su pecho, arreglo la ropa que usaría en el concierto y se fue a la disquera, se reunieron para ver los últimos detalles del espectáculo y se fueron juntos al auditorio, hicieron pruebas de audio, llego la hora de inicio y empezaron, cuando termino se sorprendió al ver a su querido Yuki esperándolo para que se fueran juntos prácticamente salto encima del de mirada ambarina, la localidad se encontraba a las afueras de la ciudad.
Llegaron al sitio una hermosa hacienda de uno de los empresarios más acaudalados de todo Japón que admiraba a la banda, unas mujeres abordaron a Yuki y este sonriendo falsamente las atendió mientras elogiaban su última novela, sin darse cuenta ese conejo se acerco a su pequeño y empezó a acosarlo, porque ese era acoso pero su bola rosa es tan tonto que no lo nota, el peli verde acaricio la mejilla del de mirada amatista y este sonreía, pues creía que solo jugaba, los celos se hicieron presente y ordeno a Shuichi que se despidiera porque en ese momento se irían. Este no comprendía porque Yuki estaba enojado, casi lo arrastro al auto, y acelero a fondo, estaba oscuro el alumbrado pobre no iluminaba el camino, el peli rosa se puso el cinturón de seguridad al que se agarraba muy asustado el camino casi no lo conocía y a oscuras mucho menos, empezaron a discutir porque el rubio le recriminaba al peli rosa que le daba alas a Sakuma, según el escritor ese era un atajo para llegar más rápido a la ciudad, pasaron el anuncio de desviación al que no le tomo importancia y seguía acelerando.
- Yuki para tengo miedo
- No pasa nada deja de estar llorando, si todo es tu culpa
- Por favor me quiero bajar, Shuichi tomo el volante tratando de parar todo, el escritor perdió el control del vehículo, en una curva muy cerrada se volcó el auto, dando vueltas Yuki salió disparado pues no usaba el cinturón de seguridad, quedando inconsciente a unos metros de la colisión, el menor no tuvo la misma suerte pues no reacciono a tiempo y como el si traía el cinturón puesto, tuvo fuertes contracturas, el rubio al despertar y recordar lo sucedió empezó a gritar el nombre de su amante y no encontró respuestas corrió muy rápido hasta el vehículo y lo encontró semiconsciente, cubierto de sangre sin poderse mover, lo levanto en brazos y lo recostó en la hierba.
- Yuki “te amo” susurro con unas lagrimas saliendo de sus orbes amatistas. El escritor lo abrazo fuertemente sentía que lo perdía.
- No por favor no hables. Lo beso dulcemente en los labios.
- Yuki nunca me olvides
- Shuichi no digas eso pronto te recuperaras.
- Lo abrazaba no quería dejarlo ir. El pequeño empezó a cerrar los ojos, el rubio sentía que las fuerzas lo dejaban, -“Shu yo te amo” no me dejes le decía y repetía mientras lo abrazaba mas y mas, lo volvió a besar este solo sonrió acaricio la mejilla del portador de orbes doradas y dejo caer su mano, pues las fuerzas lo dejaron, el rubio solo lloraba la pérdida del ser amado por sus tontos celos.