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La vida sigue igual por Kitta

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Notas del fanfic:

Todos y cada uno de los personajes de Harry Potter pertenecen a J. K. Rowling (xq Siirius?? J.K. XQQ??)

La canción es propiedad de Roberto Sánchez Ocampo (o en tal caso de sus herederos), conocido más que nada por su alias "Sandro". Este es mi homenaje. Espero les guste, lo hice con el corazón.

Es mi primer fanfic de esta pareja. Es mi preferida y espero pronto subir más de ellos =)

Notas del capitulo:

A un año (y días) del fallecimiento de éste ídolo argentino, les traigo un nuevo Songfic para continuar con la serie "El amor por el Gitano", los otros Songfics son:

Por que yo te amo - KuramaxHiei (Yu Yu Hakusho)

Me amas y me dejas - KuramaxHiei (Yu Yu Hakusho)

Noche de Amantes/Querida - SesshoumaruxInuyasha (Inuyasha)

Penumbras - LigthxL (Death Note)

Ave de Paso - SasukexNaruto (Naruto)

Así - ItachixSasuke (Naruto)

 

La vida sigue igual

Harry sólo tenía 11 años cuando aquel hombre gigante golpeó la puerta de su casa lanzándola al suelo y le dijo que era un gran mago. Había vivido toda su existencia al lado de sus tíos y su primo quienes lo maltrataban cuando el tiempo les sobraba -lo cual era muy seguido- y quienes le habían dicho que sus padres habían muerto en un accidente de tránsito. Menuda manera de morir, pensaba Harry con frecuencia. Sus padres lo habían dejado sólo y en manos de las personas más despreciables del mundo. Mundo Muggle, ahora que él era un mago. Si alguna vez hubiese sabido lo que la alegría era, seguramente habría llorado con amargura incontable números de veces para ahogar sus penas. Pero no puedes perder aquello que nunca tuviste, y tampoco puedes llorarlo. Por eso, Harry siempre había aceptado su miserable vida sin cuestionar nada. Sin embargo, ese barbudo hombre, cambió su existencia para siempre.

El tiempo y el destino me han golpeado sin cesar
mas yo sigo adelante sin dejarme doblegar
pues no vale llorar tampoco suplicar
hay que pensar que todo pasará.

El-niño-que-vivió. Era como todos en el mundo mágico le llamaban. Lo idolatraban. Lo adoraban. Era la esperanza en persona. Al principio se sentía un poco acosado por tanta atención, pero luego comenzó a aceptarla. Era como una persona famosa del Hollywood Muggle. A veces se cansaba de tanto hostigamiento, pero otras simplemente ignoraba a aquellos que vivían encima de él. Ron y Hermione le habían ayudado a llevar una vida normal. Ellos eran sus mejores amigos y le trataban como una persona común. Gracias a Dios. Nunca había tenido amigos así que estaba agradecido con ellos por todo lo que hacían por él. Sin embargo, se sentía un poco culpable por lo que estaba haciendo a escondida de ellos. ¿Podrían perdonarle si llegaban a enterarse? ¿Qué le dirían? ¿Lo delatarían o lo dejarían de lado? ¿Le dirían que estaba loco o que era la traición más grande del mundo?

Yo tuve los amigos que el dinero puede dar
y en noches de bohemia nos dejábamos ahogar
mas todo ya paso el tiempo lo llevo
y aquí ya ves yo estoy y río igual.

Hey! al final la vida sigue igual

Todos se habían enterado de la verdad. Sus amigos lo habían ayudado a ocultarlo en un principio pero luego las cosas se salieron de control. Estaba desvastado, no sólo porque todos supiesen lo de su relación con aquella persona, sino que porque contrario a lo que él pensó que le darían la espalda por su locura, le exigieron hacer lo peor que le podían exigir a alguien: matar a la persona que más amaba en el mundo. Estuvo noches envuelto en un mareo producido por el wisky y muchas otras en lo profundo de una oscuridad producida por sus pensamientos. Pero ni siquiera esas noches habían podido calmar la furia y el descontrol que se desataba en su corazón. No sabía que hacer. No quería decidir. Sólo quería morir. Sería la escapatoria más fácil. Una cobardía según Sirius. Un descanso eterno y libre de toda esa locura, según él mismo. No quería optar entre la vida de la única persona que fue capaz de amar y la vida de aquellos que tenían miedo a la muerte. Tampoco podía culparlos. Pero no quería ser él quien lo hiciese. Lo amaba tanto…

El vino las mujeres la parranda y el amor
son cosas que en la vida recompensan el dolor
debemos sonreír, morirnos por vivir
porque al final de qué vale sufrir.

La guerra había terminado hace tiempo ya. Años habían pasado y él había sido quien derrotó a Voldemort. El-niño-que-vivió-y-venció. Era como lo llamaban ahora. Aunque hubiese preferido algo así como el-niño-que-vivió-y-murió. Quizá era lo más acertado. O el-niño-que-vivió-y-sufrió… No eran malas alternativas. Le había rogado una y otra vez a Voldemort que se entregase. Hasta le había propuesto huir y acabar con toda aquella locura. Pero se había opuesto. Él no tenía ninguna intención de retirarse. Él no quería saber nada de perder la guerra. Él quería triunfar. Quitar a los muggles de la faz de la tierra, le había dicho. Con gran odio y tiranía le escupió en la cara a Harry que sólo había estado con él para debilitar sus fuerzas, para tener el momento oportuno de matarle, para poder destrozar su corazón de una sola estocada. Y lo había logrado. Sus planes siempre funcionaban. Harry estaba destrozado. Voldemort había sido la única persona a la que Harry amó de verdad. Una ironía, dijeron muchos después de enterado aquel rumor. Él también lo creía así pero no le importaba. Había perdido la cuenta de cuantas veces les había pedido perdón a sus padres por cometer tal acto. Pero no habían sido suficientes al parecer. Para Voldemort el amor no existía y Harry tendría que haberlo sabido mucho antes. Su amor no alcanzó para salvarle la vida, pues él no quería ser salvado… 

Yo le aposté a la vida que jamás iba a llorar
y a veces le hice trampas para poderle ganar
pues yo no sé perder, nací para triunfar
y aquí ya ves yo estoy y río igual.

Hey! al final la vida sigue igual

Aquella profecía había condenado su vida. Se había enamorado de su enemigo mortal y le habían obligado a matarle. Nació para eso. Esa era la finalidad de la existencia del gran Harry Potter. Asesinar a Lord Voldemort y morir junto a él. Luego de la guerra había llorado su muerte tantas veces que ahora, ya grande, no sabía si era capaz de hacer aquello. Su corazón le dolía tanto como lo había hecho su cicatriz tantas veces mientras Voldemort estaba vivo. Sin embargo, él sabía que el corazón dolía siempre mucho más. Tanto dolor había sentido en su larga vida, que ya no recordaba bien lo que era el verdadero dolor. Ni siquiera un cruciatus le haría recordarlo. Ya estaba acostumbrado a todo eso. Él tiempo había hecho que Harry soportase dolores intolerables sin quejarse, pero aún así, no podía dejar de sentir aquel dolor por esa persona. Voldemort le había terminado diciendo que en verdad no lo amaba pero… ¿Era completamente cierto?

Si a veces una pena desgarró mi corazón
seguí siempre adelante sin prestar mucha atención
al viento yo me alié y la pena se fue
porque el dolor mi amigo siempre fue.

Había intentado muchas veces no pensar en aquello, pero la situación a veces lo requería. Quizá era el amor que Harry le profesaba a él, el que impedía que no pudiese aceptar la traición de Voldemort no obstante, muchas veces se había sentado debajo de un árbol a admirar las estrellas y a recordar cada instante de los último minutos de vida de su gran amor. Sus gestos, sus ojos, sus palabras. ¿Habían sido ciertos todos? Harry estaba cansado de pensar. Estaba cansado de sufrir. Pero no podía evitarlo. Le había amado tanto. Y aún le amaba. En verdad se sintió traicionado cuando Voldemort le había dicho aquellas horribles cosas, pero simplemente no quería aceptarlas ahora. No quería pensar que en verdad había sido meramente ultrajado para poder ser vencido. ¿Por qué? Era la única persona que Harry pudo amar alguna vez, entonces, ¿Por qué?

Jamás se cumplirán aquellas cosas que soñé
pues en mi largo viaje tantos sueños olvidé
mas tanto recogí y ya tanto viví
que pienso hoy que yo nada perdí.

Hey! al final la vida sigue igual.

Tres hijos, una hermosa esposa y una falsa vida era lo que había construido y obtenido después de aquella guerra en donde su único amor le quitó la vida. Sí. Después de mucho pensar concluyó en que Voldemort había logrado su objetivo, aunque le había costado su propia vida, había logrado matar al Gran Harry Potter. Pero eso ahora no importaba, ¿O si? Es decir, ¿Qué importancia tiene ahora que el niño-que-vivió esté vivo o muerto? Voldemort ya no existía, ¿Qué importaba que pasara con el Gran Harry Potter? Ya nadie se preocupaba por él. Sólo era una persona más en el mundo. No importaba si soñaba, si respiraba, si se ilusionaba, si su poder aumentaba, si vivía o si moría. Ya nada de eso importaba, porque su objetivo había concluido. Pero, a él tampoco le importaba. Voldemort estaba muerto y él, si quería vivir de verdad, debía empezar a aceptar, que el amor de Tom Riddle hacia él, no era más que otra de sus ilusiones.

 

 

Fin

Notas finales:

Kitta: Como siempre lo hago, recomiendo escuchar la canción cantada por Sandro. Amo (es mi favorita) esta canción, sobre todo la parte de: Yo le aposté a la vida que jamás iba a llorar y a veces le hice trampa para poderle ganar... amé esa parte. jejej

Helio: Gracias a los que dejan sus reviews! Espero poder continuar pronto con mi otra historia, ésta fue algo fugaz. jeje.


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