“Desde que papá se fue al extranjero, nos la hemos pasado la navidad juntos, después llegó el año nuevo y nosotros le seguimos esperando, después el día de reyes, pero ni una postal a mandado y la personas que nos cuida es simplemente fastidiosa, por que tuvo que escoger a Roy para que cuidara a dos niños?
El tiempo ha pasado y cada que nos peleábamos Al y yo, nuestro castigo era darnos un beso en la boca, ese castigo nos lo impuso ese hombre pervertido desde que éramos pequeños, después no fue simplemente por pelearnos, sino que también por cada cosa mal que hacíamos llegando al punto de acostumbrarnos.
-me han llamado de la escuela, dicen que Ed. Se peleó con un chico que le llamó bajito y que Al no ha asistido a clases de canto, me podrían decir que es lo que esta sucediendo aquí?- en ese momento estábamos jugando videojuegos tan a gusto- y bien, con que se van a justificar ahora?-
-se lo buscó- dije sin despegar los ojos del juego
-el canto no se me da- dijo Al de la misma forma que yo
Ambos fingimos que no nos importaba eso en ese momento, si bien, sabíamos que nos metíamos en la boca del lobo y con esa actitud le dábamos ganas de comer carne xD
-quiero que le pidas disculpas a tu compañero y que Al no falte otra vez a clases, ni siquiera se que es lo que hacen en ese momento, con tantas clases que ustedes desperdician tienen mucho tiempo libre, creo que llamaré a su padre para decirle que sus hijos se están saliendo de mi control-
Mi hermano y yo sentimos que nos hervía la sangre, cada vez que Roy llamaba a papá, solo era para darle las malas noticias y con tanto despapaye aquí y allá, el no querría regresar pronto. Tanto tiempo había pasado desde la última vez que lo vimos, pero Al aun no perdía las esperanzas para verlo otra vez
-no!!- gritamos al unísono
-no le llames a papá, queremos que el llegue en navidad- dije triste, no me importaba si regresaba o no, pero Al quería verlo, ya lo extrañaba y si ese era el deseo de mi hermanito, haría cualquier cosa para que se hiciera realidad
-bueno, entonces le diré cual es el deseo de sus hijos, a ver que es lo que puedo hacer, mientras tanto… que es lo que deben hacer en este momento que estoy enojado con ustedes?- sabíamos a lo que se refería, siempre lo sabemos
-esta bien- dijimos ambos resignados, algo que el tomó muy en cuenta; dejamos el juego en el suelo y nos miramos como si nada, solamente rosamos nuestro labios en un pequeño y corto beso, luego seguimos haciendo lo que estábamos haciendo
-esperen un momento… siento que esto ya no es una tortura para ustedes- dijo Roy molesto
-pues claro que no, ya estamos mas que acostumbrados a esto- dijo Al con una sonrisa burlona
-umm… con que ya están acostumbrados eh? Entonces cambiare un poco el castigo, ahora no será solo un beso, quiero que sea un beso francés- dijo despiadadamente
-un… beso francés? En ese es en el que se utiliza la…- Al estaba sorprendido y anonadado
-si, es en donde se utiliza la lengua- nuestras miradas se cruzaron y el nerviosismo nos atacó, siempre me había preguntado que pasaría si profundizaba un beso con mi hermano, pero solo lo había pensado y nunca me imaginé que llegaría un momento en donde iba a llevarlo a cabo
-bueno… pues que esperan? No veo que se estén besando- sin duda alguna era el castigo que ese pervertido mas disfrutaba, siempre se nos quedaba viendo cuando nos dábamos nuestro “castigo” impuesto por el.
Nervioso por lo que estaba a punto de hacer me giré para ver los ojos de mi hermano que también me miraban fijamente, en su mirada también me pude dar cuenta del nerviosismo que tenía, pero no tenía ningún reproche con que lo hiciera, al contrario, parecía que quería que lo hiciera
-Al… lo siento- fue lo primero que le dije
-no te preocupes- dijo mi hermano tímidamente y nos encaminamos a besarnos, antes de tocar sus labios recordé que el nunca se había besado con nadie mas, al menos de esa manera en que lo haríamos nosotros ahora, entonces… este sería su primer beso!! Maldito Roy, estoy muy seguro que ese desgraciado también lo sabe, siempre sabe todo lo que hacemos, te juro que te mataré hijo de toda tu…-onii-chan te sucede algo?- me regreso la voz de Al a la realidad, al parecer me adentré tanto en mis pensamientos que no me di cuenta de que me había detenido muy cerca de su ruborizado rostro, nunca me había dado cuenta de que su piel era tan liza y brillante, y sus ojos siempre mostraban esa mirada tierna que me hacen someterme en los momentos en que me salgo de control
-Al…- le susurré al oído- ya se que esto se trata de tu primer beso, así que lo haré lo mejor que pueda- mis palabras sacaron un gemido de sus labios que alteró mis sentidos, por una extraña razón quería escuchar ese sonido otra vez-entonces comenzaré- no podía creer que mi voz había cambiado a una mas seductora.
Comencé con cortos y delicados besos desde su oreja que anteriormente había mordisqueado un poco y después el camino de esos fugaces besos se dirigió a la comisura de su pequeña boca, introduje mi lengua hasta alcanzar dentro la de mi hermano que se mantenía quieta la principio sin saber que hacer y después comenzó a seguir el ritmo, el sabor a los dulces que anteriormente había comido aun se encontraba en su boca y sin darme cuenta recorrí con mi lengua cada rincón de esta delicadamente.
Roy nos miraba desde una silla que estaba en la habitación, pero mas que pasmado se veía excitado, nunca pensé verlo así, me dio un poco de gracia cuando miró entre sus piernas y salió rápidamente corriendo hasta el baño, eso fue el detonante para que al y yo dejáramos ese beso que había durado mas de diez segundos unidos solo por un pequeño y fino hilo de saliva
-creo que me pasé un poco- dije respirando un poco agitado, Al negó con la cabeza en el mismo estado que yo- no te preocupes, no lo volveré a hacer- por que diablos digo todo lo contrario a lo que quiero hacer? Me alejé para que tuviéramos mas espacio entre los dos, pero ahora fue Al quien me atrapó deslizando rápidamente sus brazos alrededor de mi cuello, al parecer fui un buen maestro, por que mi pequeño hermano ahora me besaba como todo un experto; continúe el acto y le besé con mas pasión, ambos nos deleitábamos con esas caricias que comenzamos a darnos
-me di cuenta de que te estremeces cuando te muerdo la oreja- le dije pícaramente a Alphonse y acato seguido le mordí su pequeña oreja haciéndole soltar un fuerte gemino, agitado el me dijo
-y yo se que te dan cosquillas cuando alguien te toca el cuello- y comenzó a darme unos mordiscos que mas que darme cosquillas comenzaron excitarme- pero obvio que yo mejoré la estrategia- me murmuró al oído- y veo que hay algo en tus pantalones que grita por salir- o por Dios, e perdido a Al y ha aparecido un ser tan sensual que me tiene hasta el tope de calentura con esos mordiscos y esa ligera fricción de su pierna entre las mías
-quien eres y donde está Al?- le pregunté bromeando- por que donde quiera que esté, espero que se quede ahí por un buen rato- Alphonse rió un poco mientras se recostaba en el suelo de la habitación
-ven…- me hizo una seña con su dedo para que me acercara- y no te quedaran dudas de que ese Al soy yo- me guiñó un ojo con una sonrisa picara en el rostro, yo como un perro le obedecí colocándome entre sus piernas sintiendo como mi miembro chocaba contra el de él debajo de nuestra ropa provocando a ambos soltar un gemido
-Ed…- me llamó mi hermano en voz baja- muévete un poco- wow con esa forma tan erótica de pedir las cosas hasta un monje lo haría, me comencé a mover despacio sintiendo como dentro de mis bóxers y pantalones estaba húmedo, al parecer Alphonse no soportó mas y se desabrocho el pantalón bajando su bóxer casi hasta las rodillas- vamos Ed, quítate los pantalones- le obedecí nuevamente, el niño parecía tener mas experiencia que yo en estas cosas aunque lo sabía todo de él.
Nuevamente nuestros miembros se rosaron y el solo contacto nos excitó sobremanera y comenzamos a rozarlos cada vez mas rápido
-ahh…- Alphonse gemía fuertemente, me gustaba que lo hiciera- ahh… espera Ed… detente… ahh…- pero si seguía así no me detendría- espe… ra…- me alejó de él y lamió dos de sus dedos que después colocó bien lubricados en su entrada mientras se colocaba boca abajo- ahhh…- comenzaba a gemir mientras los metía y los sacaba de su interior con mucho cuidado, yo, me estimulaba con mi mano mientras lo veía, cuando por fin sintió que estaba listo me pidió que lo penetrara, yo tomé mi miembro y fui entrando poco a poco, Al se quejó un poco, pero se veía que lo disfrutaba
-Ed mételo… todo…- podía ver como una ligera gota de saliva recorría de su boca hasta su barbilla, dentro de él estaba caliente, muy caliente y apretado
-esto… se siente tan… bien- comencé a moverme, entraba y salía entraba y salía, me gustaba esa sensación, mas que eso, me encantaba-lo voy a hacer mas rápido- después solo eran los gemidos que ambos sacábamos a cada embestida placentera que dábamos
-Ed… creo que me voy a…-
-yo también Al… ahhh!!- terminé dentro de Al, pude escuchar como el decía que estaba caliente y se retorcía un poco debajo mío y aun así seguía moviendo un poco sus caderas en unas cortas y suaves estocadas mientras seguía adentro de él.
Cuando nos dimos cuenta de todo lo que había a nuestro alrededor nos percatamos de Roy que estaba sin moverse en la entrada de la habitación con su miembro completamente duro dentro de sus pantalones, Al y yo solo intercambiamos miradas y luego sonreímos
-tío Roy, por que no vienes y nos haces compañía?- Al lo tomó de la manga de su saco
-si, queremos que juegues con nosotros un bueeeen rato- no tengo idea, pero verlo así me calentaba de nuevo, pero me temo que lo que hicimos ese mismo día con Roy… eso es otra historia.