Aun recuerdo la noche en que todo comenzó... ¿O debería decir que reinicio?, eran los días fríos de Enero, era una noche particularmente fría y el trabajo había estado demasiado ajetreado, demasiados heridos y fallecimientos, RCP, confrontación con familiares, no quería saber nada mas, así que lo que hice ese día fue darme un baño de agua caliente y acostarme, apague mi localizador, no me importo que urgencias pudieran llegar al hospital, seguro que se las arreglarían sin mi, era mi ultima guardia antes de salir de vacaciones, sin embargo, únicamente di indicaciones a las enfermeras de llamarme si había casos de verdad graves. Por un momento también pensé en apagar mi celular, pero algo me detuvo, no podría explicarlo, quizá fue la culpa, o el sentimiento de responsabilidad, lo deje sobre el buró al lado de la cama, me acosté y cerré los ojos, parecía que apenas los había cerrado cuando el timbrar de mi celular me despertó, tantee nada mas el área del buró, en busca del mismo, lo encontré, mire el reloj del celular, eran la 4:30 de la mañana, había dormido cerca de 6 horas y apenas había descansado, y ahora por culpa de alguien que no hizo su trabajo tendría que regresar al hospital, sin embargo al observar una segunda ocasión el número que aparecía en la pantalla, no correspondía a la lada del estado, y sin embargo el número telefónico me parecía familiar. Conteste sin apuro - ¿Bueno? - nada, solo se escuchaba una respiración al otro lado de la bocina - ¿Como consiguió este numero?, ¿Se le ofrece algo? - nada, no hubo respuesta, no me preocupe, ni me moleste en hacer contacto con la persona al otro lado de la bocina, estaba a punto de colgar, cuando escuche un débil: ¿Bueno? Por la bocina, me acerque de nuevo el celular y hable - ¿bueno? ¿quien habla? - pregunte con un tono algo molesto.
- Lo siento, se que no es hora para hablar – el tono de la voz se me hizo particularmente conocido – pero..- continuo la voz, que se escuchaba con un tono cansado – solo tu me puedes ayudar, escape de mi casa, no sabia a quien mas acudir – hizo una pausa y continuo – lo siento, no se porque te hable a ti, y no se porque vine hasta acá, creo que fue un error, disculpame Damon – al momento de escuchar eso, supe inmediatamente quien era, pero aun estaba renuente a creer, antes de que colgara hable con duda en mi voz – No te preocupes, no es molestia, tu nunca me molestarías, Trey, ¿en donde estas? - pregunte vacilando aun – Estoy en la terminal de autobuses, pero si te molesto disculpame, no quiero que te preocupes por mi, me... - interrumpí ansiosamente - ¡No digas Tonterías!, como te dije antes y ahora, TU nunca seras una molestia para mi, esperame ahí, iré por ti – colgué, me cambie rápidamente y salí en el auto.
Mientras conducía hacia la terminal de autobuses recordé lo que había pasado hace dos años con Trey, ciertamente, ambos la pasamos bien, y aunque yo soy 5 años mas grande que el, el no me trataba o me hacia sentir mayor, el me contaba sus problemas y yo intentaba ayudarlo, sin embargo todo cambio cuando decidí confesarle mis sentimientos hacia el, y a partir de ese momento, el se distancio, nunca me dio una explicación, ni yo le intente explicar lo sucedido, mientras pensaba en todo esto, vi que me acercaba a la terminal de autobuses.