El tiempo siguió pasando has que el cumpleaños de nuestro rubio estaba a solo un día, pero el pequeño no se veía muy bien ya que su felicidad se había ido con cada día que pasaba y que se aproximaba más a su cumpleaños. El pequeño se encontraba con sus amigos los cuales intentaban animarlo.
Gaara: - abrazando al rubio – Vamos Naru-chan anímate…
Hina: Si, m-mañana s-será tu cum-pleaños, no te achaques – le sonreía.
Saku: - Sentada al otro lado de Naru – Por último muestra una sonrisa – sonriendo a la vez que lo decía.
Naru: No puedo, el solo hecho de pensar que no lo veré en un año y medio… me pone así de triste – agachando la cabeza.
Saku: - Pegándole una palmadita de ánimo en la espalda a Naru – No te preocupes más por él, piensa que al irte encontraras a una persona realmente maravillosa que si sabrá como amarte y cuidarte.
Gaara: - Apretando su abrazo – Además a tu padre no le gustaría verte con esa cara por un año y medio, si siempre vas a estar pensando en él.
Hina: Esto va a sonar egoísta pero… olvídalo, es lo mejor y tú no sufrirás.
Naru: - Levantando la vista – A lo mejor tengan razón, tal vez como dijo Sakura-chan encuentra a alguien que realmente me merezca y así me haga olvidar a ese teme – sonrió.
Hina: En ese caso… t-te deseo m-mucha su-erte Naruto-kun – le sonrió sonrojada.
Naru: Gracias Hinata – le sonrió.
Gaara: Cambiando el tema… ¿Qué harás mañana?
Naru: ¿Mañana? – Mirando a sus amigos – tenía pensado estar con mi oto-chan en casa.
Saku: Entonces… decidido, nos iremos a tu casa y te celebraremos el mejor cumpleaños de tu vida – le sonrió ampliamente.
Hina y Gaara: ¡SI!
Naru: ¿Enserio? – sorprendido por la decisión.
Gaara: Claro, ¿Cómo no estar en tu cumpleaños?
Naru: - Abrazando a los tres – Amigos, gracias.
Hina: No te preocupes, por algo somos amigos
Saku: y estamos para apoyarte en todo
Gaara: por que te queremos proteger
Naru: Los quiero, pero parecen vendedores de seguros – los miró divertido, viendo como sus amigos reían junto a él.
Gaara: Vamos, ya sonó el timbre y las clases ya deben de estar por empezar.
Su día pasó rápido, y llegado el siguiente, tuvo una sorpresa al despertar, su hermano Deidara lo despertó junto a su novio el cual traía una torta en sus manos, emocionando al menor con eso, había empezado un día maravilloso, se repetía, entro al colegio y sus amigos lo recibieron muy felices, pasó una tarde de escuela muy amena hasta que se fue a su casa, que al llegar y subir a su cuarto se encontró con el azabache que lo esperaba sentado en su cama.
Naru: ¿Qué haces aquí? – preguntó sorprendido.
Sasu: Como me es imposible hablar contigo en el colegio, no tuve otra opción que infiltrarme a tu cuarto dobe. – lo miraba serio
Naru: Bien, entonces dime lo que me quieras decir y luego vete de mi cuarto.
Sasu: Sniff… mira, no sé que es lo que te pasa, porque no me hablas y tampoco se que hice, pero lo que si sé es que tengo el derecho de saber que hice para que me trates así, somos amigos y no quiero que nos distanciemos de esta forma.
Naru: No pienso responderte, no es asunto tuyo.
Sasu: Claro que lo es… eres mi mejor amigo y te aprecio por algo te digo que me importa y quiero saber…
Naru: - Con los ojos llorosos – Vete por favor, no te quiero ver… - una lágrima resbaló por su mejilla.
Sasu: Naru… está bien me voy, ten… - entregándole una pequeña cajita – Feliz cumpleaños Naru-chan – sonriéndole tristemente
Naru: Gracias… - con la mirada baja.
Naruto vio salir a Sasuke, quedándose solo en la habitación, con la mirada triste; mientras que el moreno no estaba mejor que el, bajó las escaleras con la mirada en el piso, chocando con su hermano en el trayecto, junto a Deidara.
Dei: ¿Cómo te fue?
Itachi: ¿Pudiste hablar con él?
Sasu: Si, pude hablarle pero… no me quiso decir lo que le pasaba – se sintió peor al contarle a los presentes.
Dei: Me lo suponía – mirando triste a Sasu. – ¿Vas a venir a la tarde?
Sasu: No lo creo, él no quiere verme – dijo triste – “¿Qué haré?”
Dei: Ya veo…
Itachi: Yo hablaré con Naru-chan – dijo yendo a la pieza del menor, al cual encontró llorando – Naru-chan ¿Qué ocurre?
Naru: - sobresaltándose por la repentina aparición del moreno - ¿Qué haces aquí Ita-chan?
Itachi: Estaba preocupado por ti, por todo lo que me a contado Dei y… me preguntaba el que te pasaba.
Naru: - sonriendo levemente – Estoy… triste
Itachi: - riendo suavemente - ¿Enserio? No me había dado cuenta – le sacó una risilla a Naru con su comentario - ¿Por qué lo estás?
Naru: Son… cosas mías, no hay de que preocuparse
Itachi: Está bien, cuídate – saliendo del cuarto.
Naru: Tú también – alcanza a responder antes de que saliera el mayor en su totalidad.
Itachi: -ya fuera del cuarto – Vaya, este niño tiene una atmosfera deprimente dentro de su cuarto – miró a su novio que junto a su hermano lo miraban interrogantes.
Dei y Sasu: ¿Qué le pasa?
Itachi: Lo único que me dijo es que está triste y que eran cosas suyas…
Sasu: - dando media vuelta – Me voy…
Dei: Descuida ve con cuidado, yo después hablo con él
Sasu: Gracias Dei-nii…
Itachi: ¿Estarás con tú novia?
Sasu: No, quiero estar solo en casa – se va.
Dei: ¿Qué le ocurre a tú hermano?
Itachi: No sé pero luego hablaré con él.
Ding- Dong- (Efectos de sonido 2.0 jejeje)
Sonó el timbre y Deidara fue a abrir gritando un “Yo voy”, encontrándose a los amigos de su hermanito los cuales saludaron cortésmente para luego entrar a la casa.
Dei: Chico, ¿Me ayudan a reanimar a Naruto? – les preguntó
Gaara: ¿Qué le ocurrió?
Dei: Solo otro pequeño ataque de depresión – respondió
Hina: ¿Vio a S-Sasuke-kun?
Dei: Más que eso, también habló con él
Saku: Ya veo, hablaré con él – entró a la pieza de Naruto, encontrándolo boca abajo llorando sobre su colchón
Naru: - Mirando a la puerta – Sa… Sakura-ch… an
Saku: ¿Te sientes bien? – se acercó a Naru, abrasándolo – Tranquilo.
Naru: Se lo d- debí ha- haber d-dicho…
Saku: Calma no es tu culpa…
Naru: S-si la es, n-no tu-ve el valor d-de decirle lo que s-siento por él.
Saku: Naruto, no dejaré que te haga y que tu mismo te hagas más daño… cálmate y bajemos, Gaa-chan y Hina-chan nos están esperando – le sonrió, a la par que acariciaba los rubios cabellos de su amigo.
Naru: Está bien… - Limpiándose las lágrimas – Muchas gracias Sakura-chan
Saku: No hay de que… - esperó un rato – venga vamos.
Naru: Ok.
Ambos salieron de la habitación y se dirigieron al comedor donde estaban todos reunidos, su padre, hermano, sus amigos y Itachi; la noche fue amena y muy agradable, el rubio esa noche no tuvo ninguna preocupación, sus amigos se encargaron de que esa noche fuera solamente suya.
Pasaron dos días y llego el día de su viaje, su mañana fue muy ajetreada por el hecho de arreglar sus maletas y todo lo necesario para el viaje, al menor solo le faltaba despedirse de su hermano y de Itachi ya que estos los iban a ir a dejar al aeropuerto, Naru no quiso despedirse de Sasuke porque no quería arrepentirse de nada.
Minato: Bien, ¿Estás bien hijo? – Miró a Naru, el cual estaba un poco pálido.
Naru: Si, es solo que estoy un poco nervioso, es primera vez que vuelo en avión – dijo estrujando una pobre hoja que tenía entre sus manos.
Minato: Jajajaja… calma, no ocurrirá nada.
Dei: A menos que el avión se estropee – rió malicioso al ver la reacción de su hermanito.
Itachi y Minato: ¡Deidara! – regañaron al rubio.
Dei: Lo siento – bajo la mirada pero satisfecho de su logro, Naru estaba más nervioso aún.
Minato: Tranquilo Naru-chan, Dei lo dijo para asustarte…
Naru: Y lo logro – abrazando el brazo de su oto-chan
La llamada por el altoparlante los alertó de que su vuelo ya estaba por partir así que se despidieron de los dos jóvenes que los miraban.
Dei: - llorando – Espero que te cuides mi pequeño naru-chan – lo abrazó fuerte
Naru: -Llorando también – Tú también cuídate y no molestes a Ita-chan – correspondió el abrazo.
Dei: ¡Oye!
Itachi: Esperamos que lleguen bien – separando a Dei de Naru – Naru-chan cuídate mucho y se feliz en este año y medio.
Naru: Lo seré Itachi-nii – le sonrió feliz.
Minato: Cuídense mucho – tomando el brazo de Naru y despidiéndose con la otra mano – hasta luego
Ambos rubios desaparecieron por la puerta que los guiaba a su avión, dejando a los dos jóvenes mirando el recorrido que habían hecho hasta perderse en la nada.
Dei: Se fueron…
Itachi: - Abrazándolo – Si, ¿Nos vamos?
Dei: Está bien… - caminado junto al moreno - ¿Vas a hablar con él?
Itachi: Si, y está vez me va a escuchar – dijo serio.
Dei: - Mirándolo picadamente – Me encanta cuando te pones así
Itachi: - Mirándolo igual – Lo sé – miró al frente y sonrió – A mi también me gusta
Ambos se fueron del lugar dejando atrás a los dos rubios que ya iban dentro del avión, Minato se entretenía leyendo una revista que le dieron al entrar y Naru miraba un poco perdido en el horizonte la ventana que dejaba ver aquellas esponjosas nubes.
Su mirada seguía fija y en su mente pasaban muchas de sus vivencias con sus amigos de la escuela, y cosas del pasado cuando aún era feliz junto a Sasuke, siguió recordando hasta que recordó el día en donde Sasuke le contó que tenía novia y el día en que se la presento, los dos peores días de su vida.
Naru: - pensando – “Sasuke, ya no puedo más con esto, en este viaje voy a lograr olvidarte a ti y a este amor que algún día comencé a sentir por ti, no quiero sufrir más, mi pasado quedará enterrado junto a ti ahora… No sé si realmente valió la pena amarte como lo hice, amarte tanto que sufrí lo que nunca debí sufrir pero ya no, buscaré mi felicidad y nada más… - Miró el cielo en todo su esplendor – Adiós Sasuke y gracias por poder aprender contigo lo que es el amor, aunque nunca supiste mis sentimiento.”
Miró la silla de enfrente esperanzado de un nuevo futuro dejando atrás su pasado y a Sasuke, ya no quería sufrir más por amor, desde ahora nacería un nuevo Naruto, uno que si sería feliz y que miraría hacia delante dejando atrás lo pasado.