Capítulo 2
-Flash Back-
-¿Dónde se habrá metido Alphonse? Le dije que me esperara, además a estas horas es peligroso…-Se decía Edward a sí mismo, mientras caminaba por las calles de central en busca de su hermano menor.
Habían llegado hace unas horas desde Rush Valey, ya que tuvieron que hacerle una visita a Winry para que verificara las extremidades de Automail. El 'paseo' había durado dos semanas, pero ya estaban listos para continuar con la búsqueda de la piedra filosofal y recuperar el cuerpo de Alphonse.
Se separaron en la biblioteca, cuando Alphonse le comento que quería ir a ver a Gracia y Elysia luego de un largo tiempo sin compartir con ellas y como es propio de Edward, ni siquiera se separó del libro que tenía en sus manos.
-Bueno, bueno mándales saludos de mi parte. Regresa temprano porque tengo que ir a visitar al Coronel Mustang para ponerle al tanto de la investigación- Le había dicho, para luego volver a perderse en el libro.
-¡Mierda! ¿Dónde te has metido Alphonse? ¡Ya sé, usare la famosa 'Telepatía Elric'! Ahahaha -Exclamó mientras seguía caminando por las calles cada vez más vacías de personas.- Alphonse, estoy aquí…-murmuraba mientras se frotaba ambas sienes y atraía miradas de los escasos transeúntes.-T-tenga más cuidado, ¡Idiota!
Había chocado con un hombre de apariencia extraña, que iba caminando en dirección opuesta.
-Lo siento, muchacho-se disculpó el hombre.
-No hay de que, idiota. Para la próxima fíjese ¡Estaba intentando tomar contacto con mi hermano telepáticamente!-exclamo con furia.
-Sí, si-dijo algo cabreado.
-¿Sabe quién soy yo? Soy el Alquimista de Acero Edward Elric, así que solo tenga más cuidado, so idiota-agrego en un tono burlón.
-'Muchacho estúpido, me cabreo. Probare mi nuevo tatuaje con el'-Pensó el hombre, luego se quitó el guante izquierdo y dejo ver un tatuaje en forma de circulo que Edward no logro distinguir. Acto seguido abrió el puño e impactó su mano de lleno contra el abdomen de Edward.
-¿Qué mierda?-Quito la mano del hombre y lo lanzo contra una pared- ¡No te metas con un alquimista estatal!
-Ahahaha Muchacho, si yo fuera tu; Tendría más cuidado a la hora de tener sexo de ahora en adelante- El hombre sonrió y lo miro a los ojos. Luego saco un reluciente reloj de bolsillo para hacerlo girar en el espacio que había entre ellos después lo devolvió a su sitio y se marchó, despidiéndose con un gesto de una mano elevada.
Edward lo iba a seguir, pero en ese momento vio a Alphonse que se acercaba por la esquina en la que había desaparecido ese tipo y se acercó a saludarlo.
-Alphonse, ¿Dónde andabas?-Preguntó el mayor, haciéndole notar que no le había prestado atención en la biblioteca.
-Yo… No importa ¿Tienes que ir a ver al Coronel, no? Mándale saludos de mi parte-Sonrió y luego agrego. - Nos vemos mañana en las afueras de la Oficina Central.
-Sí, mañana a afuera de… ¡No me cambies el tema! Te estaba retando, además me encontré con un tipo extraño hace unos momentos.-Exclamo aun sobándose el abdomen- Bueno, da igual ¡Nos vemos!-
Dicho esto le dio la espalda y se encamino a la Oficina Central para encontrarse con su amante, llevaban meses sin verse y de seguro esa noche no la iba a dedicar para estudiar o dormir.
-El Coronel está esperándolo Alquimista de Acero- le dijo con una reverencia el soldado de recepción.
Edward asintió y se dirigió a los ascensores.
-Buenas noches Coronel- exclamó al entrar a la oficina-No ese imagina todo lo que lo extrañe…-agrego se quedó parado ahí, esperando a que este fuese en su bienvenida.
-Edo, Creí que ya no vendrías… ya estaba poniéndome triste-susurro y luego cerró la cortina para ir a recibir con los brazos abiertos a su amante.
Le dio un largo y apasionante beso de bienvenida y lo estrecho en sus brazos
-Ya di aviso para que no me molestaran e hice toda mi tarea… Esta noche soy todo tuyo Acero- Y lo beso nuevamente.
Ed se separó y con un gesto de preocupación en el rostro le pregunto.
-¿Hay algún alquimista que haya llegado hace poco a central?
-Hemmm-Roy cerraba la puerta, luego se giró y lo estrecho contra el sofá- Hay un idiota que se hace llamar el 'Crea Vidas' No es más que un charlatán, pero no es conveniente que te acerques a él.
Dicho esto, lo empezó a desnudar poco a poco y de la misma manera, la preocupación de Edward se esfumaba.
-Fin del Flash Back-