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Dioses del JRock. por Yuki Yaoi hime

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Notas del capitulo:

 

-por todos los dioses, estoy muerto. -se quejó un joven de cabello castaño y ojos marrones.

 

 

 

-de que te quejas Yan, tu solo estuviste sentado en la bateria toda la noche. Yo, en cambio, estuve de un lado a otro en el escenario mientras cantaba y bailaba. -le reprimió una joven de cabello rojo sangre y ojos azules. -y tu cómo te sientes Leonard? -miró a un atractivo rubio de ojos verdes.

 

 

 

-perfecto. -dijo en respuesta Leonard al mismo tiempo que le dedicaba una sexy media sonrisa a la pelirroja. Provocando que se sonrojara.

 

 

 

-oye, Solange, te sientes bien? -le llamo Yan en forma de burla al verla sonrojarse. -estas tan roja como una cereza. -

 

 

 

-ash, callate Yan! -estuvo a punto de seguir gritándole al morocho cuando una joven, castaña ojizaul,  entró en el camerino llevando una revista y un vestuario de sacerdotiza griega muy antiguo. -Selena? No estabas purificándote en el templo de Selene? - “redundancia”

 

 

 

-si, estaba. -dijo la joven con una melodiosa voz entrecortada por la respiración agitada. -pero al ir al mercado, encontré este articulo. Miren. -extendió la revista de manera que los cuatro pudieran leer.

 

 

 

Yan y Leonard se acercaron a Solange de manera que cada uno quedó a cada lado de ella, demasiado cerca como para invadir el espacio personal de la joven.

 

 

 

-Versailles rompe listas de ventas en Francia y España; el atractivo vocalista de la banda, Kamijo Yuuji, ha expresado su deseo de visitar las bellas playas y puertos Helénicos y de hacer un “performance” con una afortunada banda que saldrá ganadora en el concurso anunciado proximamente por radio, television, internet y esta misma revista. -

 

 

 

cuando la mirada turquesa de la joven se posó en la mirada cobalto del joven peliplata, sus labios se curvaron lentamente en una sonrisa.

 

 

 

-Selena, creo que encontramos al hijo de Selene y Poseidón. -murmuró sin volver la vista ni borrar la sonrisa.

 

 

 

************en japon***********

 

 

 

-a Grecia?? -una pelirrosa de ojos amatistas exclamó sorprendida. -Porque tan lejos?? -

 

 

 

-bueno, Kamijo siempre quiso ver las playas de Atenas. Partimos este domingo. Irás a despedirnos al aeropuerto? -contestó un rubio de ojos negros vestido de princesa.

 

 

 

-por supuesto. Irán con Mana-sama? -volvió a hablar la pelirrosa dejando su taza de porcelana en la mesa de centro. Señalando a una muñeca de porcelana sentada al lado de la princesa.

 

 

 

-si, desde que comenzamos a salir, hacemos todo juntos. -el rubio habló sonrojandose mientras la muñeca tomaba su mano izquierda y entrelazaba sus dedos.

 

 

 

-me alegro por ustedes, lo que me preocupa es, cómo lo tomaron Klaha y Kamijo? -los miró la joven tomando de nuevo su taza.

 

 

 

-Kamijo estaba muy tranquilo. Fue como si lo supiera desde antes. -respondió de nuevo el rubio.

 

 

 

-Klaha lo tomó mal, lo ultimo que supe de él fué que estaba en su casa con Atora y Chopin. Despues de eso, Gackt fue a hablar conmigo. Pero es todo. -murmuró en alto, Mana.

 

 

 

-lo siento por ellos. -comentó la pelirrosa. -podrían hacerme un favor? -

 

 

 

-lo que pidas. -

 

 

 

la joven se levantó de su asiento victoriano de terciopelo rojo y caminó hasta un mueble de madera rojiza tomando un trozo de papel de un cajón.

 

 

 

Camino de vuelta a los bellos jovenes y les entregó lo que había resultado ser una fotografia de una joven pelirroja y ojos azules vestida con un bello vestido rojo con dorado de tiempos medievales; sentada en un banco del jardin con rosales a su alrededor y su rojo cabello cayendo libremente sobre sus hombros.

 

 

 

-y ella es... -

 

 

 

-mi prima, Solange. Vive en Grecia. Quisiera que le llevaran mis saludos, y mis felicitaciones por su banda. -

 

 

 

-por supuesto. Se las daremos con gusto. -sonrió el rubio.

 

 

 

-ah, y denle las gracias por los panes que me envió su madre. -recordó la pelirrosa cuando los guitarristas se preparaban para retirarse.

 

 

 

-lo haremos; bueno nos vemos mañana en el aeropuerto; el vuelo parte a las siete de la noche. -comentó Mana ayudando al rubio a ponerse de pie.

 

 

 

Ambos se despidieron de la pelirrosa con un beso en cada mejilla y salieron de la casa con paso elegante.

 

 

 

*************Aeropuerto Internacional de Tokyo. 6:35 pm. ****************

 

 

 

-descuida princesa, ya llegara. -dijo Mana al oido del rubio mientras ambos esperaban el llamado de abordaje.

 

 

 

-lo sé. Es que me preocupa que le haya surgido un compromiso. Además, quiero contarle lo de anoche. -termino el rubio con una sonrisa tímida comtemplando el hermoso anillo de plata que el moreno le habia regalado la noche anterior.

 

 

 

-me hace feliz que me hayas dicho que si. -susurró el moreno.

 

 

 

-me hace feliz que me lo hayas propuesto. -sonrió mas ampliamente el rubio.

 

 

 

-mina san!!! -se oyo un grito que los sacó de su burbuja. -lamento llegar tarde, me tuve que escapar de mis guardaespaldas. Saldré en un viaje de negocios y mi vuelo parte en diez minutos. -

 

 

 

-Yuki-chan!! -gritó un precioso joven peliplata con ojos azules. -viniste a despedirnos?? -le decía mientras la abrazaban fuerte el y un castaño de ojos casi blancos.

 

 

 

-porsupuesto, no se iban a ir sin despedirse de mi, verdad Teru-chan? -

 

 

 

-estuvimos a punto. -bromeó el castaño.

 

 

 

-Kamijo-san Malo. -dijo la chica haciendo un puchero. -solo por eso. -la joven se erigió en las puntas de los pies y alcanzó a besar al castaño en los labios. -no me dejen!! -gritó mientras se colgaba del hombre con brazos y piernas.

 

 

 

-solo serán unas semanas, ni siquiera llegará el mes cuando volvamos. -la calmó otro castaño de ojos verde aqua.

 

 

 

-lo dices enserio Tocayo?? -la joven lo miró ilusionada.

 

 

 

-si. -le reiteró el castaño baterista sonriendo de forma sexy.

 

 

 

-Masashi-san, no me dices nada? -esta vez, la joven miró al bajista ojigranate con suplica.

 

 

 

El moreno se acercó a la joven, la tomó de su asesino apretón sobre Kamijo, y la tomó en sus brazos. -que se divierta en su viaje, señorita Yuki. -le ronrroneó al oído a la joven haciendola sonrojarse.

 

 

 

-lo han entrenado bien, Masashi-san sabe muy bien como jugar sus cartas. -comentó la joven al pequeño Teru.

 

 

 

-Hinokawa Yuki. Cuantas veces te he dicho que no te escapes de tus guaruras a menos que vayas a verme especialmente a mi!! -se oyó una voz que no era mas que de Gackt vestido con un traje de vestir y acompañado de Klaha, tambien vestido con traje.

 

 

 

-amm, como veinticinco, contando esta. -contestó la joven mordiéndose el pulgar. Con una expresión de pesar en su rostro. -gomen? -

 

 

 

-nada de gomen, ahora ve con tus guardaespaldas antes de que hagan retén en el aeropuerto. -le regañó el hombre.

 

 

 

-hai, Gackt-san. -respondio Yuki con la cabeza gacha.

 

 

 

Cuando paso junto al hombre, este la tomó de la cintura y la abrazó contra si.

 

 

 

-asi nada mas? No te vas a despedir de mi y Klaha? -le susurró al oido.

 

 

 

-Gackt-san malo. Me asustaste, crei que estabas enojado conmigo. -se volvio la joven con la mirada triste y la cabeza gacha.

 

 

 

-es dificil enojarse contigo, aun cuando haces cosas realmente tontas. -bromeo el hombre sonriendole sexymente. -ahora despidete de mi como dios manda. -le puso la mejilla para que la joven la besara.

 

 

 

Yuki se erigio en las puntas y beso la mejilla del hombre suavemente.

 

 

 

-ahora dame una bella sonrisa, quiero llevarme esa imagen tuya a Grecia. -

 

 

 

la chica sonrio ampliamente antes de soltarse y caminó hacia donde sus guardaespaldas la buscaban.

 

-pasajeros  del vuelo numero 713 con destino a Grecia. Favor de abordar por la puerta C. -se oyó la voz de la azafata por el intercomunicador. -pasajeros con destino a Grecia, la puerta C. -

 

 

 

-es el nuestro. -anuncio Gackt.

 

 

 

El grupo se puso en marcha, cada uno, a excepción de Mana y Hizaki, en sus pensamientos:

 

 

 

Klaha dolido por el abandono de Mana.

 

 

 

Kamijo por el de Hizaki.

 

 

 

Yuki aun melancólico por la partida de Jasmine.

 

 

 

Masashi triste por haberse enamorado de alguien cuyo corazón ya estaba ocupado.

 

 

 

Teru preocupado por Kamijo.

 

 

 

Y Gackt preocupado por Klaha.

 

 

 

Durante el viaje, ninguno habló. Mana y Hizaki se habian quedado dormidos abrazados en medio de la larga fila de asientos, Kamijo, sentado junto a Hizaki, solo desviaba la vista, incomodando a Teru a su lado. Klaha, al lado de Mana, mantenía la mirada baja mientras, a su lado, Gackt lo abrazaba por la cintura tratando de calmarlo. Masashi y Yuki habian quedado, cada uno en un extremo de la fila, Yuki al lado de Gackt y Masashi al lado de Teru. Ambos leyendo una revista X.

 

 

 

*******************en Grecia************************

 

 

 

al salir del aeropuerto:

 

 

 

-ustedes son el grupo Versailles? -los encontró la misma castaña de ojos azules con ropas antiguas.

 

 

 

-si, y tu eres... -comenzo Kamijo.

 

 

 

-mi nombre es... -la chica fue interrumpida por una cabeza de piedra que obviamente iba dirigida a Teru.

 

 

 

-Hijo de Selene!! -gritó una mujer vestida igual que la castaña, pero esta tenia cabellos de serpientes.

 

 

 

-cuidado Teru!!. -Kamijo logro jalar a tiempo al pequeño antes de que la enorme roca lo aplastara; cayendo ambos al suelo, varios metros lejos de la castaña y sus amigos. -estas bien? -lo reviso buscando heridas graves.

 

 

 

-si, gracias por salvarme. -respondio Teru poniendose de pie.

 

 

 

-Medusa!! -grito la castaña mirandola.

 

 

 

-hola querida. -dijo la otra sonriendo burlonamente.

 

 

 

-estas en territorio de Atenea, tienes prohibido estar aqui! -le espetó la castaña sacándo un pendiente de cristal con forma de luna  en cuarto menguante.

 

 

 

-espera Selena. -aparecio un joven pelinegro vestido como heroe griego.

 

 

 

-Arce. Deberias de estar en el templo de Poseidón. -

 

 

 

-fui enviado para proteger a una sacerdotiza de Selene. -le menciono el joven sonriendo.

 

 

 

-es el. -ambos miraron a Teru.

 

 

 

-llevale el collar. Lo mantendrá protegido. -

 

 

 

la joven corrió hasta donde Teru y Kamijo estaban, y le colocó al menor el collar de cristal.

 

 

 

-y esto? -pregunto el joven confundido.

 

 

 

-es de tu madre celestial. Y de tu padre marino. Los dioses Selene y Poseidón lo forjaron para tu cuidado. -le explico la joven. -no lo pierdas, y cuando te sientas perdido, habla con ellos, te escucharán y guiarán. -

 

 

 

el menor estaba confundido, pero aun asi acepto el obsequio.

 

 

 

-tu eres... -comenzo la joven mirando a Kamijo, pero fue interrumpida por Arce, quien la jaló al tratar de quitarla del camino de una lluvia de rocas.

 

 

 

-corran!! -grito aun jalando a la castaña. -Y por lo que mas quieran, no la miren a los ojos. -

 

 

 

-a los ojos? -preguntó Hizaki asustado.

 

 

 

-los convertirá en roca. -

 

 

 

-vaya recepciones las que tienen en Grecia. -comentó burlón Gackt echándose a correr y tomando a Klaha de la mano.

 

 

 

Medusa se paro en seco al ver a Klaha a los ojos.

 

 

 

-Hijo de Atenea. -susurro asustada y fúrica. -tu madre me humilló en su propio templo. -

 

 

 

-Atenea? Mi madre? -murmuró el pelinegro. -no lo creo. -

 

 

 

-yo te daré algo para que lo creas. -

 

 

 

la mujer hizo salir del suelo miles de serpientes que se lanzaron contra Klaha y Teru.

 

 

 

-Teru!! -

 

 

 

-Klaha!! -

 

 

 

gritaron Kamijo y Gackt al verse impotentes de salvar a los jovenes.

 

 

 

Justo antes de que las serpientes tocaran la piel de Teru y Klaha, aparecio un hombre rubio de ojos azules vestido como guerrero griego antiguo.

 

 

 

-Medusa!! -grito el hombre enojado.

 

-Zeus. -susurro la mujer retrocediendo.

 

 

 

-te has atrevido a atacar al hijo de un dios, en la ciudad de Atenea. Regresarás a tu confinamiento, o recibirás un peor castigo, tu escoge. -

 

 

 

-regresaré a mi confinamiento. -contesto la mujer agachando la cabeza.

 

 

 

Tanto Medusa, como Zeus, desaparecieron sin dejar rastro. Dejando a Teru y Klaha sumidos en la inconciencia. Ambos en el suelo.

 

 

 

****************en el templo de Selene. *******************

 

 

 

-Teru. Despierta, por favor, despierta. -el pequeño oyó una melodiosa voz llamarle desde una luz amarilla.

 

 

 

-eh? Donde estoy? -miró a todos lados viendo solo oscuridad.

 

 

 

-en el olimpo, cariño. -cuando la voz habló, las sombras se fueron, dejando ver una hermosa playa nocturna con una luna llena. -yo soy Selene, tu madre. -

 

 

 

al volverse, Teru vio a una bella mujer joven con cabello y ojos plateados y piel palida, vestida con un traje antiguo.

 

 

 

-mi madre? -

 

 

 

-si cariño. Vine a darte fuerzas. El ataque de Medusa te dejo al filo de la muerte; si Zeus no hubiera llegado, habrias muerto de seguro. -la mujer se acerco a Teru y lo abrazo fuertemente. -mi pequeño, temí que algo malo te pasara. -

 

 

 

instintivamente, Teru correspondió al abrazo de la mujer.

 

 

 

-bien, debes volver. Seguro tus amigos estaran preocupados. Y no lo olvides, este collar, -la mujer tomó entre sus manos delicadas el dije de cristal con forma de media luna. -nos mantendrá conectados. Tanto a mi, como a Poseidón, tu padre, contigo. Cuidalo mucho. -

 

 

 

-muchas gracias. -la palabra casi sonó extraña en labios del menor. -Madre. -

 

 

 

cuando Teru despertó, la primera persona que vio fue Kamijo sentado a su lado en la cama, con un brillo de preocupación en la mirada.

 

 

 

-que pasó? -pregunto adormilado.

 

 

 

-te desmayaste por tres dias completos. Como te sientes? -respondio la castaña.

 

 

 

-mareado y cansado. -intento sentarse sintiendo que la mano del vocal castaño se lo impedía y lo empujaba suavemente de vuelta a la cama. -que pasa? -miro a Kamijo despues de sentir su mano derecha en su pecho.

 

 

 

-no te levantes aun, estas debil. -susurró el vocal mirando al joven con ternura.

 

 

 

Teru se sonrosó levemente pero aun asi dejó que el mayor lo arropara y consintiera. Antes de que saliera caminando por la puerta al jardin, mientras el menor lo miraba.

 

 

 

-ha estado aqui los tres dias cuidando de ti. -comentó Hizaki sorprendiendo al joven.

 

 

 

Teru miro al rubio con sentimientos encontrados: por un lado, le agradecía el haberse apartado del camino entre el y Kamijo.

 

 

 

Por el otro: lo odiaba profundamente por haber hecho sufrir al castaño al abandonarlo.

 

 

 

Su mirada cobalto se dirijio a la puerta por la que antes saliera el castaño principe, y el celular sonó trayendo al menor de vuelta de sus pensamientos.

 

 

 

-moshi moshi? -contesto entre asustado y aliviado.

 

 

 

-cariño! Adivina donde estamos! -oyo la voz de su amigo castaño.

 

 

 

-Uruha! No me digan que tambien estan en Europa?! -al parecer, Teru habia olvidado momentaneamente su sentir hacia el rubio.

 

 

 

-estamos en Grecia, amor!! dinos en que hotel estan para ir a verte. -

 

 

 

-la verdad es que ni yo se. Me quede dormido en el avion y me tuvieron que traer cargando. Cuando desperte ya estaba en mi cama, pero no se bien donde queda. -mintio el menor mirando a la castaña.

 

 

 

La chica le asintio aprovando que mintiera.

 

 

 

-podrias darme alguna seña? Realmente tengo ganas de verte... ya te extraño. -Teru casi podia ver al castaño haciendo pucheros.

 

 

 

-muy bien, dejame bajar al lobby. -mientras hablaba, el pequeño miro a la castaña para preguntar si podia. La mujer asintio aceptando. -bien, Uru hay un templo antiguo. Es el unico por la calle cerca del aeropuerto. No hay pierde. -

 

 

 

-ok, estaremos ahi en un momento. Ja ne. -

 

 

 

-bye. -ambos colgaron a la vez.

 

 

 

-creo que tu amiguito es muy cariñoso, Teru. -comento burlon Yuki.

 

 

 

-cual amiguito? -entro Gackt.

 

 

 

-ya desperto Klaha-san? -pregunto Masashi al ver al pelinegro entrar.

 

 

 

-aun no. Al parecer el ataque estaba destinado mas a el, y el atacar a Teru fue una distraccion. Y Kamijo? -contesto el recien llegado.

 

 

 

-en el jardin. -contesto Hizaki.

 

 

 

Tanto el rubio como Mana sentian el latente desprecio del sexy vocal, aunque lo ignoraban.

 

 

 

Un momento despues de el sepulcral silencio, un auto se estaciono frente al templo.


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