-Pero ya les dije que yo no estuve involucrado en esa pelea-se defendía Tobias Beecher ante los guardias.
-No nos importa si estaba o no, nosotros lo vimos ahí-decían mientras lo esposaban dirigiéndolo a los cuartos solitarios
-Yo creo que están exagerando llevándome ahí…
-Ah!-se molestó uno de los guardias- ahora nos dirás en qué lugar tienes que ir?, te quedaras allí adentro por un mes
-Eso es injusto!-empezó a moverse Tobias tratando de hacer más difícil el trabajo de los guardias
-Si Becheer como digas-se burló el otro, metiendo a Beecher en aquel cuarto.
Ese lugar sumamente era escalofriante, se rumoraba que los prisioneros que se quedaban ahí por un mes, al salir eran completamente diferentes, de vez en cuando unos no completaban el mes, ya que llegaban a suicidarse. Sólo en Oz guardaban silencio de aquellas noticias, daban a conocer que ese prisionero muria de otras causas, ya que no querían que les prohibieran las celdas solitarias.
Ahora Tobías Beecher, se encontraba en una de aquellas celdas, el cuarto no era tan grande, ya que solo contaba con una cama, un baño, y una regadera, todo junto en ese cubo de cemento. Era la primera vez que experimentaba estar ahí adentro. Su cabeza le daba vueltas, como iba a sobrevivir? No quería volverse más loco de lo que ya estaba, sentado sobre la cama tratando de no pensar en todas esas cosas, colocó sus manos en su rostro, cerrando los ojos empezó a murmurar “No estoy solo…Estoy conmigo mismo… y es lo único que necesito para sobrevivir” repetía una y otra vez esa oración para sí mismo.
Uno de los guardias que encerró a Tobías, mando a llamar a Ryan O’Reily un prisionero
-Que sucede…?-dijo éste un poco desesperado, ya que no le agradaba la idea de que los demás presos lo vieran hablando con un guardia.
-Ya está en solitario-comunico el guardia-ahora qué sigue?
-Espera a que te de la señal-Dijo Ryan mirando por todos lados- toma- de su bolsa de pantalón saco varios billetes y se los dio al guardia- el otro plan será lo doble de lo que te di ahora… así de que ponte atento-sin más se retiró sin esperar respuesta del guardia.
Salió de aquel escondite y se dirigió a una de las celdas, entró sin llamar mucho la atención, y se dirigió directamente con el prisionero que se encontraba recostado, en la cama de arriba de la litera.
-Ya está…-dijo Ryan con una sonrisa en el rostro- ahora qué?
El otro sólo lo miro de reojo, suspiro hondo, después de varios segundos dio un pequeño brinco abandonando la cama
-Sigo yo…-dijo casi en susurro
-Que…?-lo miró sorprendido-Keller te das cuenta de lo que me estas pidiendo…?
-Quieres el dinero o no
-Si… si lo quiero, pero como se supone que vamos a hacer para que también te metan a uno de esos cuartos?
-Eso tú lo tienes que averiguar
-Tu sí que estás loco hermano-dijo Ryan haciéndose para atrás- y la verdad no me quiero involucrar más con ustedes
Keller fijo su mirada a la del chico, expresando que no le importaba para nada los comentarios de éste.