En verdad, no sé como sucedió, simplemente, sucedió
Yo antes, tenía una vida que podría decirse simple y de lo más normal, pero todo mi mundo se vino cabeza abajo cuando lo conocí, lo admito, me enloquece, pero, simplemente debo contener mis deseos, es por el bien de todos, en especial por el de Shaka, mi mejor amigo, mas que mi amigo, mi hermano mayor, quien solo me ha protegido y comprendido durante todos estos años que estuve con él, creo que él no se merece esto, pero, ¿Y mi felicidad que?, ¿será que realmente estará con ese hombre?, en verdad todo es muy confuso, a veces me hubiera gustado que él nunca hubiera llegado a mi vida: Milo de Escorpio
Era un día como cualquiera, regresaba del colegio, otro pesado día, es decir, todavía no me adaptaba a mi nueva escuela, siempre he pensado que estaría mejor en mi antigua escuela, donde mis amigos si me querían y me aceptaban como era, en cambio, cómo en esta simplemente no me adapto entre mis compañeros, en especial en ese chico fastidioso que se hace llamar Death Mask de Cáncer, no tengo nada con él, pero, ¿por qué fastidia tanto?, es tan ruidoso, muy voluble, siempre queriendo llamar la atención, un perfecto cobarde, y siempre queriéndome humillarme, y todavía el muy hipócrita me habla tan bien cuando está con sus amigos, pero cuando está solo, me molesta, me irrita tanto.
Pero eso no es nada para mí, simplemente me gustaría que las cosas fueran mejor, aparte de los maestros ser tan pesados, siempre dejándome tarea, pero aún así, mi maestro de de Literatura, Lune de Balrog, simplemente muy creído, y en contra mía porque hasta yo podría dar su clase, es una lástima que arruine una materia tan bella como la literatura.
Pero no todo es tan malo, cuando menos si tengo buenos amigos, Mu de Aries, y Aioria de Leo, que siempre están conmigo, pero todavía no nos conocemos bien, pero aún así me caen muy bien, son muy amigables y me hacen sentirme bien en la escuela
Regresaba a casa, esperando que alguien me diera la bienvenida, pero no, solo encontré a mi perro, quien gozaba de una larga siesta, le acariciaba su largo pelaje, volví a revisar la casa, y no había nadie, por un momento me sentí aliviado, pues a veces me gusta estar solo, pero en esta ocasión no, quería estar con alguien, y más en especial, con Shaka
Mis padres, casi nunca están en casa, mi papá siempre trabajando y viajando, y mi madrastra, pues siempre con sus amigas o de compras, realmente nunca hay nadie para mí, mas que mi amigo, mi hermano Shaka.
Desde pequeño que lo conocí, siempre me apoyó y siempre estuvo conmigo, pese a que me lleva cinco años de edad, pero realmente eso no importó, somos muy buenos amigos, y yo en verdad aprecio su amistad, y siempre lo estimo, y es por eso que me siento culpable, él en verdad no se merecía que le hiriera así, en verdad yo no me merezco su amistad, sus cuidados, me sentía tan culpable, y más aún, porque ese hombre que se apareció en mi vida, me inquietó desde el primer momento en que lo conocí.
Aquel día en que tuve que ir a la biblioteca, a tomar algunos libros de consulta para mi proyecto, y mas aparte algunos para leerlos en mi tiempo libre. Bajaba el ascensor con mi pesada carga, un muchacho bien parecido que se subió en el segundo piso, a primera vista no le tomé importancia; sin embargo, cuando llegué a la planta baja, caminé hacia la salida, y él también, caminaba por la calle y él también. Cuando me di cuenta de que estaba atrás de mí, me sentí algo incómodo, así que apresuré el paso, luego, veo que él también lo hace, me puse muy nervioso, así que corro hacia mi casa, y él también lo hace; pero la carga de libros que traía, me impedía correr más rápido, el muchacho me pisaba los talones, yo no sabía que mas podía hacer
Pero no me fijé bien en el suelo, de modo que tropecé con una piedra en el camino, así que caí al suelo.
Estaba todo sucio, y mis libros se habían salido de mi mochila, por consecuencia, aquel hombre que veía detrás de mí, quiso ayudarme a levantar, sin embargo me opuse, pero él insistió; me levantó con un poco de brusquedad, pero a la vez un poco con delicadeza, con la mirada baja le di las gracias
-¿Estás bien?-, me preguntó
-Si gracias-, dije
Luego, traté de levantar mis libros, el quiso hacerlo, san embargo, un dolor en la pierna me lo impidió, me quejé un poco
-Tal parece que no estás bien-, dijo aquel muchacho, mientras recogía los libros y me volteaba a ver
Luego se levantó y me dio los libros, de nuevo le agradecí, con la mirada baja, sin embargo, aún muy nervioso, quise preguntarle porqué me seguía, pero alguna razón tenía para no hacerlo, no sabía qué.
Pero al alzar la mirada, simplemente no supe cómo reaccionar, ni en el ascensor lo había visto tan detenidamente, sus ojos azul obscuro me intrigaron, cómo me sonreía, y me veía detenidamente, estaba considerablemente muy cerca de mí, sentía una gran curiosidad de ese hombre, simplemente no dejaba de ver su rostro, su piel perfectamente bronceada, su sonrisa dibujada entre sus labios carnosos, pero sus ojos, tenía unos ojos tan profundos, y que me miraban de cierta manera, simplemente, no lo pude evitar, era muy lindo.
-Veo que no puedes caminar bien, permíteme acompañarte a tu casa-, dijo directamente
Pero yo me desconcerté mucho, es decir, yo ni lo conocía, y aparte de que me seguía, todavía quería ir a mi casa.
Yo no quise su ayuda de primer momento, principalmente porque yo no acepto mucho la ayuda de nadie, pero, algo me decía que sí, que sí quería.
Entonces noté que me había sonrojado, quizá y lo hice desde que lo vi, y no me di cuenta.
-Ya veo-, dijo mientras sonreía, -¡Vamos!-, exclamó, mientras se colgaba mi mochila sobre su hombro
-¿Vamos?-, fue lo único que pude decir
-Sí, veo que si quieres, pese a que no has dicho ni una palabra-, respondió
Yo no sabía que decir, simplemente todavía no reaccionaba, solo pensaba en sus ojos, su mirada, su sonrisa
Luego de que reaccioné, le tomé el brazo para poder agarrar mis cosas, e irme yo solo a casa, él volteó y me miró
-¿Qué sucede?-, dijo mientras se volteaba
-Sucede que no quiero que me ayudes-, respondí con un poco de enojo
-Ah! ya entiendo!- dijo y después soltó una risilla
-¿Qué es lo gracioso?- dije algo molesto
-Tú, pequeño-, dijo mientras me volvía a arrebatar mis cosas, era muy terco
-Mira, yo te voy a ayudar quieras o no, entonces te sugiero que sea de la manera fácil, para que así no te tenga que llevar a la fuerza-, continuó él, mientras me tomaba del brazo
Yo aún no sabía que hacer, trataba de soltarme, pero tenía fuerza, traté de que me dejara, pero era terco, pero yo no pude resistirme, simplemente acepté el que me llevara.
-¿Cuál es tu nombre pequeño?-, me preguntó
-Camus-, dije en tono un poco bajo
En ese momento quise preguntarle cómo se llama, pero sentía que no podía hablarle, solo miraba hacia el otro lado de la calle
Se rió un poco
-Soy Milo, por si te lo preguntas, Milo de Escorpio-, dijo mientras me miraba sonriente
Milo, Milo de Escorpio, aquel nombre que aquella tarde no pude dejar de pensar, sus seductora sonrisa, y sus lindos ojos azules obscuro me atrajeron desde ese momento, desde ese momento, en que mi vida dio un giro total
Continuara...