Agua vs. Fuego.
Resumen.
El agua es amable e increíblemente trasparente, maleable e indispensable, pero de bajo de eso se encuentra un elemento poderoso y lleno de ímpetu capas de arrasar con todo aquello que se interponga en su camino. Es paz y guerra.
El fuego es dulce, cálido, útil, además de exquisitamente hermoso y hechizante, sin embargo es voluble y destructivo, carcome y consume. Es pasión y tormento.
Introducción.
Porque somos el cielo y la tierra, porque somos la gloria y el tormento.
Tal vez algún día tocare las estrellas con las manos, tal vez en algún momento detendré el tiempo.
Tal vez en un instante pueda rozarte.
Prologo.
Y así comenzó, cada uno se iría por su camino, ya no importaba las aventuras pasadas, las futuras serian inexistentes. Ahora ya no podía dar vuelta a tras. El compromiso estaba disuelto. Paradas junto a la puerta se encontraban Cecilie y Greta, la primera con una ligera incomodidad en el rostro, y la más pequeña con lagrimas en los ojos. Gwenldal leyó en voz alta todo el documento terminando por tomar el bolígrafo y estampar su portentosa firma en la línea que decía, “Testigos” en la parte inferior en donde se podía ver también la delicada y estilizada de Lord Von Bielefeld Wolfram, Conrad hizo lo propio y en la línea idéntica que se encontraba debajo del nombre de Yuuri.
El tramite estaba terminado. Fue simple y llano, sin miramientos o escenitas, muy distinto a lo que alguna vez se imagino Yuuri. Sin embargo algo le molestaba, ese tipo de algo que te carcome las entrañas y no te deja estar, porque a pesar de la burocracia con la que fue llevado el asunto, no pudo dejar de lado el hecho de ver los exquisitos ojos verdes de su ex prometido conteniendo las lagrimas. Intento dar un paso adelante, acortaría la distancia que ahora parecía ser tan extensa entre el príncipe y él. Levanto la mano e intento alcanzar el brazo del rubio.
La mano fuerte y gruesa del general se interpuso en su tentativa. El rey lo observo sin entender, Wolfram miro a su hermano mayor y este a él, con un asentimiento de cabeza se marcho del despacho del Maou.
Yuuri quiso correr tras él, el Patriota de Ruternberg le franqueo el paso negando con la cabeza. La puerta se cerro dejándolo todo en un silencio aplastante.
Capitulo 1. Cortesía.
A unas cuantas semanas de su disolución como pareja, el reino entero bullía en miles de comentarios, expectativas y una que otra puesta, sobre el rumbo que tomaría el país y sobre todo con la clara inquietud de saber quien ocuparía el lugar de Lord Von Bielefeld.
El regente estaba sinceramente molesto, miles de cartas se amontonaban en su escritorio, era una avalancha de propuestas e insinuaciones maritales interminables, y aunque estaba seguro que a Lord Waltorana estaba en la misma situación, no le hacia gracias el hecho de tener que leerlas, pero el dejarlas pasar así como así era inadmisible. Una gran vena estaba creciendo, ¿que los nobles de ahora ya habían perdido por completo la propiedad? Se pregunto al momento de repasar de forma rápida una de las tantas misivas, era vulgar y llena de proposiciones indecorosas. Deseaba hacerla pedazos y lanzarla al fuego. Por cortesía debía dar una respuesta. Cuando esa idea paso por su cabeza, levanto la mano para sujetarse el punte de su nariz y recargar su cabeza ahí, ¿como debía contestar a tales barbaries?
“Mi muy estimado.... —y colocaría el nombre del sujeto en turno — es para el rey un halago que le invite a participar en una de sus tantas orgías ocultistas...” No ni hablar, el no pensaba ni por asomo escribir algo como aquello.
Dos suaves toques, y la puerta se abrió.
Conrad entro con un enorme costal, el general lo miro y su menor le sonrió antes de dar por buenas las deducciones de su hermano. Eran mas cartas para el rey.
_Que bien nos la a jodido esta vez. _ dijo mientras se dejaba caer de forma pesada en su asiento. _Como si no tuviera suficiente trabajo. _ Gruño el regente mientras tomaba otra de las cartas. _ y para colmo, estos hijos de...
_Gwenldal. _ censuro el castaño.
_ Conrad, tanto tu como yo sabemos el porque de estas cartas. _ el patriota asintió. _ Entonces porque demonios tenemos que aguantar esto. _ se levanto de un salto y camino hacia la ventana. _ No me digas que no añoras los viejos tiempos.
_Se que el compromiso de Yuuri y Wolfram nos ahorraba muchas cosas, pero si ellos no se querían... _no le gustaba escuchar eso, pues aunque lo disimulara bien, le dolía en el alma ver como su pequeño hermano había tenido que tragarse sus sentimientos y dejar paso a la razón.
_ Eso dilo por el mocoso que tenemos por rey. _ sus ojos azules desprendieron molestia. _ aun no puedo creer que después de casi ocho años el compromiso se haya roto, es decir, ya todos daban por sentado que a mas tardar en un par de años ellos se casarían. _ junto las manos, estas se movieron en un ademán algo extraño, Conrad sabia que ese movimiento era un derecho y un revez. _ estamos pasando por una crisis.
_ No creo que sea tan malo para clasificarlo de esa manera, el que Yuuri y Wolfram ya no... _ Gwenldal exageraba.
_ Lee esto. _ le extendió un pequeño papel que a todas luces era sin duda un menaje de Yosak.
Lo tomo sin prisas. Sus irises castañas de fueron deslizando por los escasos tres renglones. Cuando termino su cara era de sorpresa y pesar. Miro al hombre fuerte que era el general, este mantenía sus manos entretenidas en un tejido imaginario.
_ Lord Waltorana me lo ha confirmado esta mañana. _ Soltó intentando no darle tantas vueltas al asunto. _ Ya es oficial.
_ Pero, ¿como? Nunca se nos informo de esto. _ las palabras le salieron algo temblorosas. _ Madre ya lo sabe.
_Sí, sin embargo nada a podido hacer. Este acuerdo ya estaba redactado y firmado antes de la llegada del vigésimo séptimo Maou y se formo como una medida de contingencia cuando Stoffel tomo la regencia de Shin Makoku. El plazo esta vencido, o pagamos o...
_ No, eso no. Este país no soportaría otra guerra igual a la de...
_ Eso lo sabe perfectamente Waltora y... _ guardo silencio por algunos minutos. _ Ya no esta en nuestras manos, pasado mañana Wolfram tendrá que marchar llevando consigo el pago, creo que lo mejor que podemos hacer es no dejar que él se entere. _ su tono fue tan afectado que Conrad solo asintió pesaroso sabiendo de antemano que se refería a Yuuri.
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La cortesía bien podría también tomarse como sinónimo de caballerosidad y buenos modales, y era precisamente por ellos que casi todas las tardes de forma hipócrita sonreía a la vistita de ese día. Él que muchas veces rehusó convertirse en alguien frívolo, ahora de forma cínica miraba por encima de la chica sin prestar la mas mínima importancia en lo que esta decía. ¿Qué si era bonita? Claro que era bonita, todos los mazokus eran increíblemente guapos, sin embargo pasar 24/7 con el mas atractivo de todos por casi ocho años lo habían curado de deslumbrase con cuanta belleza, que no sobrepasaba la del príncipe nunca, se topase. Ella reía ante sus comentario o alguna que otra insinuación, que según ella, salía por accidente.
La puerta de la estancia se abrió de improviso, con elegancia nata Wolfram atravesó el umbral con un grueso libro en la mano derecha mientras con la otra dibujaba de forma graciosa caracteres en el aire. El rubio dio un respingo mal disimulado al encontrarse frente a una joven y al rey, rápidamente hizo una leve reverencia disculpándose de paso por la intromisión, dio media vuelta para salir de ahí.
Yuuri se levanto raudo, quitándole con juguetería el libro. _ ¿Que es lo que es tas leyendo, Wolf?. _dijo sonriente mientras lo miraba cómplice. Wolfram se sonrojo hasta las o rejas, solo habían pasado unas semanas, y por supuesto que aun le afectaba esa mirada seductora, ese aroma varonil y casi afrodisíaco que despedía el cuerpo de Yuuri. Los años no habían pasado en balde, ahora el rey tenia la musculatura marcada y un torso cuadrado, resaltado por la cintura estrecha y sus piernas largas y fuertes. Yuuri como medio mazoku crecía y se desarrollaba de forma lenta, pero sin llegar a competir con el de un demonio pura sangre como Wolfram, quien aun mantenía esa bella redondees de su dulce rostro de querubín, los ojos grandes propios de la infancia y la finura de un cuerpo adolescente. En momentos como esos, se podía notar con pormenores la diferencia entre ambos, el Maou casi tenia la altura de Conrad, y Wolfram a duras penas aumento unos cinco centímetros. Y la voz, ¡Dios! Su voz era tan seductora, que con solo escucharla susurrando a tu oído lograría llevarte al orgasmo. Sí, Wolfram Von Bielefeld seguía enamorado del rey hasta las trancas.
El rubio se retiro presuroso, y utilizando bien su agilidad le arrebato el libro al pelinegro, para contestar de manera prudente. _ Lenguaje y escritura Mazahuro. Tengo que aprender el idioma y la escritura básica. _ Yuuri fruncio el ceño ante la respuesta.
_ Se que te gusta saber de todo, pero porque en especifico ese idioma, ni cuando estábamos comprometidos te intereso aprender del todo japonés. _ dijo sin impórtale mucho el hecho de que su “invitada” se estaba sintiendo excluida.
_ Eso es porque dentro de unos días tendré que...
_ Wolfram. _ Gwenldal acaba de entrar con un estruendoso llamado, el rubio sujeto el libro contra su pecho y se cuadro al estilo militar. _Majestad. Me disculpo no sabia que se encontraba en esta sala. _ se excuso al tiempo en que hacia una leve reverencia. _ Señorita. Lord Von Bielefeld se solicita su presencia para la audiencia, las diez familias nobles desean hablar con usted. _ estaba por anexar algo mas, sin embargo la presencia del pelinegro lo amedrento.
_ Enseguida me presento. Como ya escucharon me solicitan, con permiso. _ y salió de la estancia.
Yuuri miro la puerta por varios segundos, su estomago estaba inquieto y su corazón bombeaba con fuerza, algo malo estaba pasando.
Continuara….