No puede ser
Los hermanos Winchester tienen un nuevo caso. Bobby les llamó diciendo que habían unas cuantas muertes,y que a todos les faltaba el corazón,no dudaron en que se trataría de un hombre lobo.Así pues ahora mismo están entrando en la habitación de el primer Motel que han encontrado,por suerte más limpio que el último,realmente está bastante bien para ser tan barato.
-Mira esto,Sammy,incluso tiene los dedos mágicos-dice sonriendo mientras se tira en la primera cama que ve,echando unas monedas al trasto.
-Dean hemos venido por un caso,no para que tú te des masajes hasta volver a quedarte sin dinero.-se queja colocando el ordenador en la mesa y enchufándolo para cargarlo.
-Vamos Samantha no fastidies.
-Idiota..-refunfuña entre dientes,fingiendo ignorarlo,pero suficientemente alto como para que Dean llegue a oírlo,sacándole una sonrisa.
Le encanta hacer enfadar a su hermano pequeño,y eso nadie podrá cambiarlo jamás.Aunque no sólo le gusta verlo enfadado,también le gusta ver su sonrisa,aún le gusta más.Es su hermano y quiere que sea feliz,siempre.Aunque la mayor parte del tiempo el chico se la pasa enfurruñado.Pero no puede negar que le gusta todo de él y quiere protegerlo para tenerlo siempre.
Sam lo mira y él aparta rápidamente la mirada,dándose cuenta en ese momento que lleva demasiado tiempo mirándolo inconscientemente.Sam lo mira extrañado pero luego vuelve la vista a la pantalla del ordenador.
Al verlo concentrado en algo que debe aparecer en la pantalla vuelve a mirarlo.El pelo le había crecido demasiado y el chico se lo había cortado,volviendo a tener su flequillo. Como cuando volvieron a viajar juntos ,buscando a su padre. A Dean le gusta más así,lo hace ver más como su pequeño hermano menor,aunque ya de pequeño tiene poco.
Vuelve su vista a la pantalla de televisor que está delante suya y la enciende,viendo sin prestar la más mínima atención a lo que estuviese viendose.
-Oye,Samantha..-dice con algo de burla,provocando que el otro trate de ignorarle.-Te ves mejor así.-pronuncia sincero,logrando captar la atención del menor,que se sorprende,siempre había pensado que Dean pensaba que se veía como una niña,él mismo se lo había dicho incontables veces,de ahí lo de Samantha.-Me refiero a tu pelo,no se si me has enten-comienza a murmurar al ver la cara del chico.
-¿Lo dices en serio?-pronuncia extrañado.
-..Sí,me gusta como te ves.-responde algo cohíbido.
-Mmm..de acuerdo.Gracias.-dice sin saber muy bien qué decir.Pero feliz de que le guste.
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“He encontrado algo” había dicho el chico antes de arrastrar al mayor fuera de la habitación. Las muertes estaban sucediendo todas en un barrio y justo ahí había una casa que se vendía,y tenían la suerte de que esa tarde se celebraba una fiesta para los que estuviesen interesados en comprarla.
Fueron a almorzar y luego el rubio volvió a ser arrastrado,ésta vez hacia una tienda de trajes.
-Vamos,Sam.Sabes que odio ponerme traje,no soy yo mismo.-se queja saliendo de la tienda,ya ambos con los trajes puestos.
-No te quejes tanto Dean. A la fiesta hay que ir de chaqueta, dijeron que son las reglas,yo no tengo la culpa.
-Además,¿Qué tiene que ver esa casa con los asesinatos?
-Todas las muertes son de personas que compraron o pensaban comprar la casa-explica llegando al coche y abriendo la puerta para entrar en él.
-Y supongo que nosotros haremos de cebo.-dice al saber lo que pensaba el menor.
-Bueno..mejor nosotros que alguien que no sepa qué hacer. Tampoco es la primera vez que hacemos algo así.
-De acuerdo,vayamos a esa maldita fiesta.Espero que acabe pronto.-pronuncia arrancando el Impala. Mientras el menor sonríe disimuladamente.
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Una vez en la fiesta:
-Esa es,Dean.Es la que vende la casa.-dice el menor de los Winchester señalando con la cabeza a la mujer que está en la puerta recibiendo a los invitados.
-Pues a que esperamos.-dice sonriendo con su sonrisa Dean Winchester.Se acercan y saludan.-Buenas noches,venimos por lo de la casa..
-Si,encantada.Me llamo Bella Mikk.
-Encantados,yo me llamo Dean y este es Sam-dice señalándolo con el pulgar-,mi..-pero la mujer lo interrumpe.
-Su pareja,supongo.-dice alegremente la mujer.
-¿Qué?-pregunta incrédulo Dean.
-Sí, vamos a casarnos. Es por eso que queremos comprar la casa. -contesta Sam antes de que el mayor pueda decir algo más.
-¿¡Qué!?-pregunta aún más incrédulo,ésta vez mirando a su hermano.
-Si,cariño no te preocupes.-dice mirando a Dean mientras lo abraza por la cintura. Este lo mira aún más incrédulo-Es que no le gusta decirlo delante de desconocidos.-dice mirando esta vez a Bella.
-No os preocupes,aquí a nadie le importa que hace cada uno con su vida.-sonríe sincera,y el menor sonríe igual.Mientras el mayor le cuesta poner una mueca que resulta una sonrisa falsa y extraña,que a la mujer le vale.-Bueno,pasad,pasad.Que disfrutéis de la fiesta.
La mujer se acerca a recibir a otros invitados y los chicos entran en la fiesta.
-¿Qué diablos ha sido eso?-pregunta el mayor aún confundido.-¿Por qué has dicho que sí?
-Fue ella quién lo pensó,y como siempre piensan lo mismo…De todos modos si decimos que no nos iba a creer,siempre pasa lo mismo.-explica el menor,y Dean no puede más que callarse.De todas formas tiene razón.
-Está bien..Pero la próxima avisa,no me dejes con cara de idiota.-le regaña algo molesto,a lo cual el otro ríe.
-Vale,lo siento.Tube que improvisar.
-Además quiero irme ya.-se queja mirando la chaqueta.
-Aguanta un poco.Solo quedémonos un poco para aparentar y miremos si hay alguien sospechoso.Luego nos vamos.
Estuvieron dando un par de vueltas y mirando a ver si veían algo.Al ver que todo era normal decidieron irse ya y volver cuando hubiese acabado la fiesta a ver si hay algo fuera de lo común en la casa.
Se despiden de Bella con la excusa de que tienen prisa ,ya que se había extrañado de que se fuesen tan pronto, ni siquiera había anochecido. y se dirigen al Impala.
Al estar ambos sentados Sam se da cuenta de que los está mirando demasiado interesada.
-Dean,nos está mirando.Creo que hay algo raro.Disimula.Creo que nos ha descubierto.-dice Sam tratando de aparentar normalidad.
-Está bien.-murmura Dean mientras se acerca lentamente a Sam y lo besa,un beso casto,solo un roce de labios.Pero a ambos les parece más húmedo de lo que es y les hace cerrar los ojos.Se separa y se miran a los ojos tan solo un instante, un par de segundos, para casi sin darse cuenta de lo que hacen vuelven a besarse,esta vez acercándose los dos. Vuelve a ser un roce de labios,pero ahora con algo más de presión.
No sabían siquiera que se encontraban en el Impala y que esa mujer los estaba mirando.No podían pensar ni les importaba.Ahora solo importaban ellos.
Hasta que Dean se da cuenta de lo que están haciendo y se separa lentamente,como si le costase.
-…Vamonos.-dice arrancando el Impala.
En el camino al motel no se escuchó absolutamente nada ni siquiera las cintas antiguas de Dean,él iba conduciendo sin apartar la vista de la carretera,y Sam no se despegó ni un segundo de la ventana.
Al llegar al Motel nada cambió,cada uno se fue a su cama y ni se miraron.Ni siquiera cenaron esa noche.
CONTINUARÁ...