Caminaba casi arrastrando los pies. Le pesaba tener que ser él quien fuera a buscar a Kai y Aoi. Pero qué más daba? Así le daba oportunidad a Ruki de mover alguna pieza en su rompecabezas mental que le impedía gritarle a Reita en la cara que lo amaba.
Siguió caminando hasta el comedor pero se detuvo en seco al ver a Kai sin camisa y un ocupado Aoi besándole el cuello.
Se le revolvió el estómago, se cubrió la boca y agachó la mirada. Rogó porque nadie lo viera y salió silenciosamente de ahí.
Regresó rápidamente sin decir palabra alguna a sus compañeros que vieron sorprendidos al veloz Uruha salir por la pequeña puerta del garaje. Después de un par de segundos se dieron cuenta que el guitarrista no se encontraba bien – Iré a ver qué pasa- dijo Reita levantándose al tiempo que salía en busca de su compañero de cuerdas
-Uru? Uru.. Que pasa?-preguntó el bajista viéndolo sentado en la acera fumando con los ojos hinchados y rojos a punto de llorar
Le dio una calada a su cigarrillo intentando calmarse – Se estaban cogiendo en el comedor.. – dijo sacando un hilo de humo de su boca y mirando el suelo-Eh?- preguntó descolocado el de la bandita – No creo Uruha.. No habrás visto mal? – preguntó aún incrédulo
-Ah.. pero claro! Entro, los veo encima del comedor sin camisa tragándose entre sí.. Hmm, probablemente estaba jugando monopoly – dijo sarcásticamente el castaño terminándose el cigarrillo
El Suzuki se sorprendió al escuchar aquello. Kai no era de los que se ponían a follar en cualquier lugar.. O bueno, esa impresión tenía de él. Lo conocía de hace ya mucho tiempo y el no era así.
Ése se pensaba mil veces las cosas antes de hacerlas, no por nada era el líder, era organizado, calculador, ordenado, tranquilo.. Como se notaba que tenía a Aoi de pareja. Ése pequeño arrebatado, revoltoso y sucio sujeto estaba corrompiendo al buen Kai.. Sonrió al pensar aquello – Ése Aoi puede llegar a ser un verdadero idiota cuando se lo propone..-
-No se lo propuso Reita, ni siquiera sabe de esto, nunca jamás tendré una oportunidad con él.. No si las cosas van tan bien que se tienen que manosear en el comedor por la desesperación de comerse entre sí – dijo suspirando – A veces quisiera que pelearan de manera tan terrible que Aoi lo mandara al diablo – agregó sin notar lo venenoso que sonaba
- Si te muerdes la lengua te inyectas tu veneno, víbora- dijo Reita mordazmente – Tanto te desagrada el pobre Kai?-
- Claro que no me desagrada. Todo lo contrario, yo lo aprecio muchísimo, es solo que.. Ahora que está con Aoi.. – el guitarrista dio un fuerte suspiro. No quería desearle mal a nadie. Mucho menos a uno de sus amigos, pero diablos! Como le dolió que Aoi se viera tan feliz con alguien que no fuese él.
Aún no estaba muy seguro de cómo su Shiroyama había terminado envolviéndose con el Yutaka. El segundo era tranquilo, hogareño, pacífico.. Mientras el mayor era un maldito maniático. Se la pasaba de revoltoso con Ruki. Pero quería dejar de ser tan ácido en su manera de pensar, después de todo.. Kai era también su amigo.. No quería desearle mal al buen muchacho.
-Y bueno, tu y Ruki.. Que estaban haciendo?-preguntó curioso encendiendo otro cigarrillo
-Ah pues.. Él terminaba de escribir una canción. Eso fue todo, aunque hablamos un poco de porque solo escribe canciones de desamor..-contó el Suzuki
-Ah, sí?..-
-Sí, pero ya sabes como es.. Nunca le gusta mucho hablar de esas cosas que involucran amor-
-Creo que teme salir lastimado. Ya sabes, con eso de que nunca falta el típico tonto que no entiende indirectas ni aunque se las paseen en la cara.. Hay que tener nariz para esas cosas de entender indirectas-dijo tirándole piedras al cielo
-Saben que? Me voy al carajo! Si no pensaban ensayar hubieran dicho desde el inicio, pude haberme ido a casa desde hace rato a seguir escribiendo-decía un muy enfadado Ruki saliendo de la casa del batero con un cigarrillo en la mano
-Opino lo mismo – secundó el sin nariz
- Pues vámonos – se resignó Uruha, quien a decir verdad, después de aquella escena que había presenciado tampoco tenia muchas ganas de ver a los dos faltantes
- Textearé a Aoi – avisó Reita sacando su móvil y escribiendo un mensaje
Y así los 3 partieron, llevándose sus instrumentos. Caminaron lento, con paso despreocupado, contemplando el bello paisaje grisáceo que parecía sacado de un cuento.
-Ah.. Aoi.. A-Aoi.. E-El tele-fo-no.. Ah.. Estaah.. sonando-podía apenas pronunciar un agito Kai
-Déjalo – indicó el mayor que besaba desesperado el cuello de su amante mientras mantenía ambas manos ocupadas en la entrepierna del mismo
- N-no.. que t-al sssi.. Ahhh.. Es aaa-lgo.. Importaaaaah.. nte.. – pudo apenas decir ante el maravilloso trabajo que le hacía el guitarrista a su miembro
-De acuerdo – cedió Aoi tomando de mala gana el endemoniado aparatito – Es un mensaje de Reita.. –
“Degenerados, el ensayo será para mañana. ¡Buen sexo! ¡Digo.. Buena tarde!”
-Maldito Reita – pensó el pelinegro ante la idea de aquella iguana espiándolos desde lejos. Pero, que más da. Así tenía toda la tarde libre para divertirse con Kai, quien comenzaba a enfriarse pues hacía minutos que había interrumpido su trabajito.
Arrojó el celular al suelo, y procedió a –literalmente- devorarse al baterista. Lo besaba desesperadamente, recorriéndole cada rincón de esa pequeña boca con su ávida lengua. Lo mordía de vez en cuando en el labio superior e inferior, alternando con sus manos que se paseaban por toda su extención.
Kai por su parte, intentaba seguirle el ritmo, el estaba acostumbrado a cosas tranquilas, y le era difícil corresponder a cada caricia que le proporcionaba el mayor. No sabía si suspirar por las caricias que le eran otorgadas, o gemir de puro placer al sentir los labios de Aoi pasearse por su cuello. Haló un poco el cabello del pelinegro para acercar la boca de este a la suya. Lo besó un largo rato, y entonces Aoi continuó. El vaivén de sus manos iba cada vez más rápido, provocándole espasmos repentinos a Kai, quien arqueaba su espalda y gemía en voz baja. Ya no iba a aguantar mucho más, las caricias que le otorgaba el mayor, lo estaban llevando al límite. Y de pronto, pasó.
Un escalofrío le recorrió toda la columna vertebral hasta llegar a la punta de su miembro. Lanzando un sonoro gemido se corrió en la mano de Aoi. Quien al ver la acción, sonrió con satisfacción para llevarse la mano derecha, que estaba llena de líquido blanquecino a la boca y chuparla un poco.
Kai lo miró con desapruebo. No le gustaba que hiciera eso. Y no era precisamente asco, si no que le daba bastante pena que el pelinegro probara aquella sustancia que salía de su cuerpo justo enfrente de sus narices.
Aoi por su parte disfrutaba de ver las caras de Kai, era tan gracioso como se apenaba por cualquiera cosa y se la pasaba disculpándose.. Se aprovechaba a veces.. Claro, por el “bien de los dos”. Así que sin más ni más, prosiguió con su trabajo de besar a su amante, arrancándole más suspiros..
-Bueno, yo paso a retirarme – avisó Reita quien debía tomar otro camino para llegar a su casa
-Hasta mañana, que descanses – le sonrió Uruha mientras le hacía señas con la mano
-Adiós – se limitó a decir Ruki sin siquiera mirarlo
-Adios Uru.. Y tú pequeñín – dijo pasándole una mano por la cabeza a Ruki quitándole el gorro y despeinando toda su rubia cabellera – Ya no hagas corajes! Es mucho mal humor para alguien de tu talla – se burló
- Hmmp..- espetó Ruki bastante molesto acomodándose el cabello de nuevo bajo su gorrito mientras veía al bajista alejarse
Uruha no pudo evitar soltar una risita – El no tiene ni idea Ruki.. Reita es el tipo de personas que le pueden pegar las pedradas en la cara y él ni por enterado se daría –
-Sí es bastante despistado, pero que más dá? No es como si yo tuviera alguna oportunidad con él.. Es decir, ni siquiera creo que él sea bisexual.. Siempre anda por ahí cogiéndose a cualquier tipa que le abra las piernas.. Porque querría estar conmigo? – dijo en un tono bastante melancólico
-Vamos Ruki, esas tipas son solo un calentón y lo sabes. Reita las quiere para no aburrirse y sentirse suficientemente semental de acostarse con una y otra para no tener que darse placer propio – le explicó el castaño haciendo ademanes de masturbación – Y para que te lo sepas, si es bisexual. Pero nunca se le ha interesado ningún chico.. El solamente necesita darse cuenta que tu eres esa persona que él ha estado esperando –
- Eres tan lindo cuando me das ánimos Shima-chan.. – aseguró el Matsumoto
- Vamos, vamos. Todo saldrá bien señorito, ahora vayamos a mi casa a tomar algo.. ¿Te parece? – preguntó el más alto
- Síiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii – le respondió saltando por todas partes una adorable versión de Ruki chibi