Ash se encontraba descansando en su casa, recostado en su cama, abrumado por sus pensamientos. Acababa de llegar de uno de sus viajes y dormir en el centro pokemon o acampar no era muy comodo para él, estaba intentando dormir pero no lograba conciliar el sueño porque desde su regreso a Pueblo Paleta solo pensaba en una cosa, o más bien en alguien: Gary.
Gary era el rival de Ash desde que ambos eran muy pequeños y siempre lo habia superado en todo, pero habia algo en él que hacia que Ash se sinitera raro cuando estaba cerca de él, sentia como que flotaba entre las nubes; no sabia que era exactamente, no sabia si era ese alborotado cabello castaño o su forma de ser, siempre tan seguro de si mismo, e incluso se preguntaba si era solo el hecho de que le gustara estar discutiendo con él, pero lo que si sabia era que estaba enamorado de él. Claro que jamas lo admitiria y menos conociendo como se comprtaba Gary cuando estaba con él, era más que obvio que no habia nada mas que una amistosa rivalidad con Gary y eso solo lo hacia sentirse más inseguro con respecto a externar lo que sentia y tambia hacia que Ash continuara pensando en él.
-Gary- dejó escapar su nombre en un suspiro provocando que Pikachu moviera las orejas curioso.
-Vuelve a dormir amigo-dijo mientras acariciaba la cabeza del amarillo pokémon, este solo se limito a acomodarse en la orilla de la cama y Ash continuó pensando:
-Gary, jamas podre decirte lo que en verdad siento por ti-pensó aflijido
-¿Comó fue que me que me enamore sabiendo que tú jamas te fijaras en mi? solo me ves como un amigo y nada más- y sin poder apartar al chico de sus pensamientos cayó rendido al fin, sin saber todo lo que le esperaba al dia siguiente.
Temprano en la mañana su mamá lo desperto con un desayuno en la cama:
-Buenos dias, cariño- dijo la Sra. Ketchum en un tono meloso-Te traje el desayuno-
-Gracias mamá- dijo Ash emocionado al ver la cantidad de comida que le habia llevado su madre
-¿y qué haras hoy hijo- preguntó la Sra. Ketchum mientras le acercaba un vaso de jugo de naranja a Ash
-Yo creo que ir al laboratorio del Prof. Oak a ver a todos mis pokémon- contestó Ash mientras se llevaba una manzana a la boca
-Esta bien hijo, te dejo comer en paz y, por cierto, me saludas al Prof. Oak que hace mucho que no lo veo- Se despidió la Sra. Ketchum mientras salia de la habitación de su hijo.
Ash terminó en unos segundos su desayuno, se vistió y salio corriendo hacia el laboratorio del Prof. lleno de emoción porque no habia visto a sus amigos hacia ya un buen tiempo.
Cuando llegó , grande fue su sorpresa al ver que Gary estaba ahi, en la puerta del laboratorio.
-¿¡Ga... Ga... Gary!?, ¿¡Qué haces aqui!?-pronuncio Ash dejando ver su nerviosismo
-¿Qué Ash?, ¿Acaso no te da gusto verme?-respondió este en ese tono de presunción que lo caracterizaba
-Claro que si-dijo Ash mientras comenzaba a subir la sangre a su rostro- Es solo que no esperaba que estuvieras aqui-
-Esta bien, y ¿Tú qué haces aqui?- contestó Gary
-¿yo?, yo iba...- pero Gary no lo dejó continuar diciendo
-No, le hablaba a la piedra que esta junto a ti- mientras soltaba una risita burlona, Ash solo lo vio con algo de molestia y continuó
-Yo vine a ver a mis pokémon, y por desgracia estabas aqui- dijo mientras lo seguia observando de la misma manera
-Solo lo dices porque te molesta saber que soy mejor que tú- Respondió Gary logrando su cometido de comenzar a hacer enojar a Ash
-¡Eso ni siquiera viene al caso!- dijo Ash algo molesto
-¿Y? aun asi, es verad y tú lo sabes- esto ultimo fue la gota que derramo el vaso y Ash enfureció
-¡Claro que no!, ¡y te lo probare aqui y ahora!-gritó Ash ya muy molesto
-¿Me retas a una batalla?- preguntó Gary altanero
-¡Si!, mi Pikachu contra tu Umbreon- volvió a gritar Ash llegando al limite de su enojo, no por las burlas, si no porque en el fondo cada palabra le dolia por venir de Gary
-Esta bien, sal Umbreon- dijo Gary mientras lanzaba la pokébola y aparecia ante ellos el elegante pokémon negro
-¡Vamos Pikachu!- dijo Ash y al oir esto, el pokémon salto del hombro de su dueño listo para la batalla.
Y fue asi como se desató una feroz batalla, los ataques eran poderosos y en su mayoria certeros, pero lamentablemente la pelea no duró mucho y ésta termino en otra derrota para Ash.
-¿Lo ves?, te dije que era mejor que tú-terminó Gary.
Antes estas palabras Ash no pudó más y una lagrima se deslizó por su mejilla.
-Ven Pikachu, vamos con los demas-apenas pudó pronunciar Ash mientras trataba de ocultar su tristeza y entró en el laboratorio sin siquiera dirigirle la mirada a Gary.
-Ash, por favor, no te enojes- dijo Gary confundiendo la tristeza de Ash con enojo.
-Sabes que solo es porque me gusta discutir contigo- pero este no respondió y siguio su camino.
-Wow-pensó Gary- Creo que ahora si se me pasó un poco la mano- trató de alcanzar a Ash pero este ya habia llegado con sus amigos y estaba jugando con ellos, tratando de olvidar lo sucedido hacia unos minutos.
Gary solo se quedó ahi, observando, y es que no le agradaba que Ash estuviera molesto con él
-Genial, lo puedo ver en pocas ocaciones y cuando lo veo, lo arruino- se dijo Gary a si mismo preocupado ya que, en secreto, sentia algo por Ash.
Gary no sabia como o cuando es que empezó a sentirse asi por Ash, pero cada que lo veia no podia evitar imaginarse abrazando a Ash y, teniendolo entre sus brazos, diciendole que era la persona más importante en su vida. Para evitarlo se lapasaba todo el tiempo molestando al pobre de Ash, porque pensaba que si lo mantenia lejos, tarde o temprano, ese sentimiento acabaria por desaparecer, pero eso no funcionaba y solo lo hacia sentir mal por provocar el enojo de Ash, se sentia terrible al ver como este quedaba muy mal en cada derrota, pero preferia que fuera asi debido al miedo que tenia de la reacción de Ash al enterarse de lo que en verdad sentia por él.
Despues de esta ultima pelea con Ash, Gary estaba muy arrepentido porque pensaba que si alguna vez habia tenido alguna oportunidad de declarar su amor por Ash, esta habia quedado sepultada bajo lo que el pensaba era furia provocada por sus ultimas palabras que no dejaban de resonar en su cabeza: "Lo ves, te dije que era mejor que tú"
Una vez que Ash habia terminado de jugar con sus pokémon ya se habia hecho de noche y Gary decidio ir a hablar con él antes de que se fuera.
-¿Ash?- comenzó Gary
-Dime Gary- contestó Ash con el tono más indiferente que pudo fingir
-Es que... yo... queria disculparme contigo por lo de hace un rato, no queria hacerte enfadar- dijo Gary en un tono que de verdad reflejaba arrepentimiento
-Vaya, de verdad le importo-Pensó Ash por un momento y respondió-No me enfade Gary-Éste noto el tono aflijido de Ash
-¿Entonces?- preguntó Gary haciendo notar su preocupación
-Solo me puse un poco triste por perder-dijo mientras pensaba- y porque me duele que me hables de ese modo-
-Perdon, mi intención no era hacerte sentir mal- dijo Gary, sintiendose aun peor de lo que se sentia por ser el culpable de la tristeza de Ash
-Esta bien Gary, acepto tus disculpas- respondio Ash con una falsa sonrisa, no porque no lo perdonara si no porque aun se sentia un poco mal por eso
-Gracias, y de nuevo perdon, es más, te acompaño a tu casa, hace mucho que no hablamos- dijo Gary
-Esta bien- Respondió Ash sonrojandose un poco por la atención que le estaba prestando Gary, él tambien se sonrojo al darse cuenta de que, sin querer, comenzaban a hacerce mas notorios su sentimientos hacia Ash.
Comenzaron a caminar hacia casa de Ash mientras Umbreon y Pikachu iban jugado delante de ellos, ninguno de los dos pronunciaba palabra alguna, ya que lols nervios que ambos sentian al estar solos se los impedian hasta que al fin Gary empezó:
-Oye Ash, solo queria que supieras que te concidero un muy buen amigo y que si te molesto es solo porque me agradas mucho- y despue de decir esto ultimo se sonrojó
-Tú tambien me agradas mucho Gary- contestó Ash sonorjandose tambien, y luego de decir esto Ash tropezó con una piedra por mirar a Gary y no fijarse en el camino, pero éste lo abrazo evitando que callera. Al sentir a Ash entre sus brazos se quedó inmovil y deseó que ese momento no acabara nunca, ambos se sonrojaronde sombremanera y asi se quedaron hasta que Ash dijo:
-Gracias Gary, pero ya puedes soltarme- Gary reaccionó y su cara se tornó de un rojo intenso
-Gary, ¿por qué te sonrojas?- cuestionó Ash provocando que el rojo de la cara de Gary aumentara de intensidad
-Ah... yo... este...-cuando interrumpió Ash
-En fin, gracias-y se quedaron en silencio por un largo rato.
Ambos habian notado el comportamiento del otro pero no sabian que hacer o decir, y la casa de Ash ya estaba cerca.
-Bueno, ahora o nunca-pensó Ash ya que se habia percatado de que Gary estaba tan apenado como él
-Gary... yo... que...queria decirte...-Cuando de pronto Gary lo envolvio entre sus brazos y dijo:
-Te amo Ash- Este se sonrojó como nunca antes y se quedó completamente inmovil
-Te amo, te amo, ¡TE AMO!- Repitió Gary sin apartarse de Ash
-Yo... yo... yo tambien te amo Gary-contestó tartamudeando el pelinegro mientras devolvia el abrazo a Gary y se aferraba fuertemente a él
-No sabes cuanto miedo tenia de no oir eso, Ash- dijo Gary separando un poco a Ash
-Gary, ¿Por qué te se...- pero Ash no pudo decir nada más ya que Gary lo interrumpió poniendole un dedo en los labios en señal de que guardara silencio.
Y lentamente, poco a poco, Gary se acercó al rostro de Ash hasta culminar en un beso, un beso que ambos deseaban desde hacia ya tanto tiempo que ninguno sabia exactamente cuanto habia esperado por él, un beso con el que por fin podian demostrar todo lo que sentian el uno por el otro, que explicaba todo sin decir absolutamente nada, que los llenaba de una felicidad que ambos creian imposible, incluso creyerone escuchar los latidos de sus corazones al unisono; se abrazaron con todas sus fuerzas como no queriendo volver a separarse nunca, pasaron segundos, minutos, tal vez horas pero ambos perdieron en sentido del tiempo; solo se separaron hasta que la necesidad de aire se hizo presente. Al separarse ambos se sonrojaron y no pudieron evitar sonreir, sin emitir sonido alguno, Gary tomó la mano de Ash y continuaron caminando en absoluto silencio, y es que no habia nada que decir.
Al llegar a la casa de Ash se pararon enfrente de la puerta sin poder decir nada, Gary nuevamente besó a Ash tomandolopor la sintura mientras éste se abrazaba a su cuello dando lugar a un tierno beso que ninguno queria terminar, cuando al fin se separaron Ash exclamó:
-Gary, te amo- sonrojandose por ultima vez
-Y yo te amo a ti Ash- contestó este
-¿Te vere mañana?- preguntó Ash algo preocupado
-Por supuesto-contestó-Mi vida no tendria sentido sin ti-dijo mientras daba unos pasos atras haciendo que un rayo de luna iluminara su rostro
-¿Enserio?- cuestionó Ash un poco avergonzado
-Seguro que si-respondió Gary comenzando a caminar hacia el laboratorio y despidiendose con la mano mientras Ash lo veia alejarse poco a poco, sin poder evitar sonreir al penar en todo lo que vivirian juntos a partir de ese momento