-¿Charles? ¿Estás ahí?
-Pasa Erik
Erik entra en la sala. Charles levanta su copa de whisky sin siquiera levantar la cabeza del periódico para observar al recién llegado.
-¿Quieres un trago?
-Tú sabrás- Se burla Erik. Charles se lleva dos dedos a la sien.
-Toma, bebe de mi vaso, he puesto demasiado porque esta iba a ser una noche fría. Pero si me acompañas, tal vez entre en calor.
-Estás cogiendo demasiadas confianzas
-Bueno, al fin y al cabo somos buenos amigos, ¿no es eso lo que se hace?
Erik toma asiento frente a charles, les separa el tablero de ajedrez, perfectamente colocado para iniciar una partida.
-¿Sabías que vendría?
-Llámalo intuición –Charles mueve la primera pieza en el tablero. Erik le sigue y se enzarzan en una partida despreocupada, eso es lo que menos les importa.
-¿Y si nos descubren?
-¿Tan malo es jugar al ajedrez?-Muestra una fingida sorpresa acompañada de una sonrisa burlona.
Erik le dirige una mirada de reproche –Tú ya me entiendes…
-¿Entender qué?-Charles se lame los labios- Jaque mate.
-Entonces elije, te lo has ganado.
-Aquí y ahora.-Empuja las fichas a un lado haciéndolas caer al suelo en su mayoría, y acercándose a Erik se sienta en su regazo.
-Como quieras.-Erik cierra el pestillo de la puerta de la sala de juegos con un pequeño giro de muñeca y abraza a Charles.- ¿Pero que tal si vamos al sofá grande?
-Yo he ganado, yo elijo.-Se arrodilla ante él-Quieto.-Le desabrocha el cinturón y la bragueta. Acaricia su paquete, saca la polla de Erik y empieza a lamerla.
-Vaya, hoy estás juguetón. ¿Qué ha pasado Charles?
-¿Enserio quieres que te conteste? ¿No prefieres que siga? –Da pequeños mordiscos débiles en su pene aún algo flácido.
-Ahora te libras, pero luego te lo volveré a preguntar, cuando tengas la boca algo menos ocupada. -Ríe y acaricia el cabello del chico, notando como su miembro se endurece cada vez más en su húmeda boca.- Eres demasiado bueno en esto… Ahh…
Charles le absorbe con fuerza y pasión, introduciéndosela en la boca, lamiéndola de arriba abajo y acariciando sus testículos. Lame su punta ejerciendo presión con la lengua, jugando con su glande.
-Charles, me encanta verte así, voy a correrme…
Charles se la saca de la boca de golpe-No
-¿Qué haces?, no me irás a dejar así, ¿verdad?
-Quiero que acabes tú, quiero verte masturbándote.-Ante el gesto reacio de Erik Charles hace pucheritos-Recuerda que he ganado.-Se quita la camisa- Pero puedes acabar sobre mí.
Charles empieza a acariciarse la polla con suavidad, y va aumentando el ritmo. Masajeando su glande con el pulgar, recordando la lengua de Charles.
-Me encanta, deberías verte ahora mismo. Tu sumisión me pone muy cachondo.
Erik se lame los labios, sigue pajeándose, cada vez más fuerte. Hasta que siente el orgasmo próximo.
-Charles, abre la boquita querido- El obediente Charles se coloca ante él con la boca abierta en un gesto lascivo esperando su corrida.
El semen de Erik brota de su pene, salpicando la cara de Charles que se relame, para no dejar escapar ni una gota de su amado.
-Pero ahora quedo yo-Charles señala el bulto de su pantalón- Quiero que me penetres, quiero que me rompas en pedazos.
Erik se levanta con su miembro todavía erecto. Tumba de un empujón a Charles sobre la alfombra frente al fuego y le arranca los pantalones y la ropa interior, dejándole completamente desnudo.
-Levanta un poco las caderas. –Charles obedece, y Erik le ensarta sin preparación previa, encontrándose así con la estrecha entrada del chico que gime de dolor y pasión.
-Ahh! Sí! Más fuerte!
-Si le contara de tus gustos sadomasoquistas a alguien no me creería…-Murmura Erik mientras se mueve en el interior del chico con fuertes embestidas.
-Mmm! Erik, Ponme a cuatro patas!-Erik obedece y le da la vuelta con brusquedad, ensartándolo de nuevo mientras le propina azotes en las nalgas que provocan nuevos gemidos en la voz del chico.
-No… pares… Erik, Más..! Follame más fuerte!-Erik agarra el pene de Charles y empieza a masturbarlo con intensidad con una de sus manos mientras pellizca sus pezones con la otra. Aumentando el volumen de los gemidos de Charles.
-Ngh! Erik me corro! No aguanto más!-Y en un fuerte gemido suelta su esperma sobre la mano de Erik.-Cada vez se te da mejor.-Se da la vuelta y le besa.
-Yo aún no me he corrido, me debes algo.-Reprocha Erik
Charles le mira con lascivia y le tumba sobre la alfombra. Se sienta sobre su pene erecto introduciéndolo en su ano.-Hoy estaré yo arriba…
Empieza a mover sus caderas penetrándose a sí mismo con el duro miembro de Erik, absorbiéndolo con su ano, moviéndose con intensidad sobre su polla. Dejándose caer sobre ella para penetrarse más y más hondo gimiendo de placer con cada estocada.
-Esto empieza a gustarme-Erik agarra las caderas del chico para penetrarlo con más fuerza, a lo que Charles aumenta su intensidad, apoyándose en su pecho, gimiendo con lascivia ante el abrazo lujurioso de Erik a sus caderas que le incitan a más.
Erik se corre abundantemente en su interior con una última y honda embestida que hace a Charles correrse también sobre su pecho. Charles saca la polla de Erik de su interior, sintiendo el semen caliente escurrir por sus muslos sudorosos. Lame su propia semilla del pecho de Erik con lascivia.
-No pueden quedar manchas, o nos descubrirán.
-Estás muy sexy Charles, lo sabías. –Le abraza, y quedan tendidos sobre la alfombra.
-Envié a los chicos a un trabajito, no volverán hasta mañana al mediodía…
-¿Es una invitación a que esto dure toda la noche?
-Bueno… Se puede interpretar de muchas formas, pero sí.
-Pero no lo haré aquí en el suelo,-Erik se levanta cogiendo a charles en brazos- te llevo a mi cama.-Abre la puerta con un gesto y se dispone a salir con él en brazos.
-Eres tan atento, me siento como una princesa.-ríe y se funden en un beso de camino a una larga noche de pasión en la cama de Erik.