El bosque se hallaba sumergido en un cómodo silencio, los pájaros trinaban de vez en cuando y la suave brisa mecía las hojas de los arboles creando una sinfonía realmente hermosa.
Y la única persona que estaba allí para disfrutarlo era un hermoso rubio de ojos azules, que eran capaces de hacerle sentir envidia al propio mar, contaba de tres marcas en cada una de sus mejillas que le hacían parecer un hermoso zorrito. Pero este chico no disfrutaba ni mucho menos, del paisaje que ante él se cernía sino todo lo contrario.
-Moooo….¡¡ESTOY HARTO, DONDE DEMONIOS ESTÁ EL MALDITO COLEGIO!!-dijo agarrándose la cabeza, acababa de descubrir que era la cuarta vez que pasaba por delante del mismo árbol, es que acaso no podían poner indicaciones en el camino para hacerlo todo más fácil.
Hacía ya varias horas que llevaba buscando la entrada del colegio pero parecía una misión imposible.
La academia Konoha era una de las escuelas de canto más importantes de Japón, de ella era normal que salieran artistas y cantantes famosos. Pero no todo en ella era música, también había un apartado para gente normal, a ella solían acudir los hijos de las familias ya que el colegio era muy caro.
Naruto había conseguido entrar ahí con una beca para estudiar Empresariales, pero pensaba pedir un cambio a la sección de música, ese era su sueño, llegar a ser el mejor cantante de todo Japón, pero por desgracia sus abuelos no aceptaban esa decisión así que tendría que hacerlo a escondidas.
Continuo caminando, llevaba encima un humor de perros, por fin y después de un hora más consiguió llegar a la entrada, estaba totalmente despeinado con el uniforme completamente sucio un con la cara manchada de barro, se había caído varias veces pero al fin y al cabo había logrado llegar sano y salvo.
La entrada al colegio consistía de un impresionante y gigantesco parking donde incontables limusinas dejaban a los estudiantes, también tenía unos bonitos jardines y una fuente un poco antes de llegar a la puerta.
Al verla Naruto se quedo maravillado, eso consiguió que su mal humor se disipara, aunque no por mucho tiempo ya que una chica de cabellos rosas y ojos verde paso por su lado chocando con él mientras le dirigía una mirada de superioridad y asco.
Esto dejó furioso a Naruto, en el pasado ya había tenido que lidiar con ese tipo de miradas, por eso había decidido aprender a defenderse, ya que en su antigua escuela los ataques eran muy frecuentes.
Decidió controlarse no era bueno montar una escena nada más llegar, pero antes de que pudiera llegar hasta la fuente volvió a tropezar con otra persona.
Esta vez se trataba de una chica rubia con ojos azules, antes de verle la cara se preguntó si sería como la otra chica, pero instantáneamente desecho esa idea, no estaba bien ser prejuicioso y juzgar a las personas antes de conocerlas.
Por eso se levanto y le tendió una mano a la chica para ayudarla a levantarse.
-Perdona, ¿Estás bien?-dijo con una radiante sonrisa. La chica se limito a asentir, devolverle la sonrisa y aceptar su ayuda.
-Oye ¿Eres nuevo? Nunca te había visto por aquí.-dijo cuando estuvo de pie y frente a frente con Naruto.
-Sí, empiezo este año, estoy realmente nervioso.-le confesó con una tímida sonrisa.
La chica se quedo asombrada por lo lindo que podía llegar a ser el rubio y sin poder contenerse salto encima de él y le revolvió el pelo.
-Pero que lindo eres, como me gustaría tener un hermanito como tú.-dijo le abrazaba protectoramente.
Naruto al principio se quedó sorprendido, era la primera vez que una persona le trataba así, nunca se habían acercado tanto a él y debía de admitir que esa sensación no le disgustaba en absoluto. El único problema que veía en todo eso era que la chica le apretaba tan fuerte que estaba empezándole a faltar el aire.
Y cuando creía que se iba a desmayar por falta de oxigeno finalmente le soltó.
-Mi nombre es Ino, estoy en la sección de música, es una pena que tu estés en la sección normal, me hubiera gustado ir a clases contigo.-le dijo mientras caminaban hacia las habitaciones.
-Encantado, yo soy Naruto ¿Cómo sabes que estoy en la sección normal?-le pregunto, si no recordaba mal en ningún momento le había dicho a que sección iba.
-Oh, lo sé por tu uniforme si te das cuenta el mío es diferente al tuyo.-dijo señalándoselo.
En ese momento Naruto se dio cuenta que mientras su uniforme era blanco con los detalles en color negro, el de Ino era de color negro con los detalles en color oro.
-La verdad es que puede que dentro de poco me cambie de sección, me gustaría ser cantante, así que pediré un cambio de beca.-dijo sonriendo.
Se dio cuenta de que la cara de Ino cambio de alegre a asustada y se pregunto que había dicho mal.
-¿Pasa algo?- le preguntó preocupado.
-Tienes que tener cuidado, ser becado en este colegio no es algo bueno.-le dijo en un susurro.-Todos los chicos que han venido con beca no han durado ni dos semanas, hasta los que se juntaban con ellos acababan mal.
Al escuchar esto Naruto se sintió apenado, eso significaría que no podría seguir siendo amigo de Ino y no le sería fácil hacer amigos.
Ino se dio cuenta del cambio en su amigo y volvió a deshacerle el pelo.
-No te preocupes, eso a mí no me importa, pase lo que pase soy tu amiga.-dijo sonriendo, de repente se cayó y se quedo pensativa.- Mejor que eso desde hoy soy tu hermana mayor. Eres tan lindo que me haces querer protegerte.-dijo mientras le pellizcaba las mejillas.
Naruto se rio feliz, parecía que su primer día de clase empezaba bastante bien.
-Oye Ino-san sabes…-no pudo continuar ya que esta le interrumpió.
-No es Ino-san, es Nee-chan- dijo seriamente.
-Ino-nee-chan.- dijo un poco sonrojado por la vergüenza.- Sabes donde están los dormitorios de la Hoja.
-Claro, yo también estoy ahí, ven sígueme.
Por el camino Ino le hablo de algunos de sus amigos, de cómo funcionaban las cosas en la academia. Por el camino, atravesaron las instalaciones deportivas y más jardines.
Y antes de llegar vieron como un chico de cabello negro y ojos oscuros como la noche era rodeado por cinco chicos de aspecto amenazante. El chico se mantenía frio e inexpresivo mientras los otros empezaban a sacar palos y navajas.
Naruto al verlo no se pudo contener odiaba las injusticias y estaba claro que esa era una.
-¡NARUTO NO…!
Pero antes de que Ino pudiera decir algo más Naruto había pasado por entre los chicos y luchaba contra ellos a una velocidad espectacular. Y antes de darse cuenta solamente quedaban en pie el misterioso chico y él.
-¿Estás bien?-dijo Naruto volteándose hacia él y alargando se mano para tocarle. En ese momento se dio cuenta de lo alto que este era, una cosa que antes se le había pasado por alto.
-No me toques.-le dijo apartando la mano y se alejo caminando con una orgullosa pose.
Naruto se sintió irritado, quien coño se creía que era para tratarle así, sin ni siquiera darle las gracias por haberle ayudado, siguió pensando en eso hasta que sintió como una mano se posaba en su brazo, al girar la mirada se dio cuenta de que era Ino que estaba igual de blanca que una hoja de papel.
-Ne Ino ¿Quién era ese TEME?
-¡NARUTO! No tendrías que haberle ayudado, el solo podía con todos, él y su hermano son los que dominan la escuela.
-¿Y eso porque?- Preguntó curioso
-La familia Uchiha domina una de las mayores empresas del mundo, ellos son sin ninguna duda los más ricos con diferencia, además al ser tan guapos casi todas las chicas están detrás de ellas.
-¿Cómo se llaman?
-Él que nos hemos encontrado antes es Sasuke y su hermano mayor se llama Itachi. Naruto por lo que más quieras no te acerques a ellos.
Naruto la miro sin entender nada. Ino al ver la mirada desconcertada de Naruto se apresuro a explicarse.
-En el colegio hay dos bandas que se hacen la competencia entre ellas. La primera está liderada por Itachi, AKATSUKI, a esta banda le hace la competencia la banda de Sasori, SUNNA.
Después de contarle todo lo que creía que Naruto tenía que saber finalmente llegaron a la residencia.
-Bueno Naruto me voy, está prohibida la entrada de chicas en vuestro lado.-dijo despiendose de él.
-Hasta mañana Ino-san.- le contesto mientras veía que se alejaba.
-Es Nee-chan.-dijo gritándole debido a que ya se encontraba lejos de él.
Naruto al escuchar eso no pudo evitar sonreír. Y con esa sonrisa en la cara empezó a buscar su habitación.
Cuando la encontró se apresuro a entrar preguntándose cómo sería su compañero de habitación.
No se imagino que detrás de esa puerta iba a encontrarse con Sasuke y mucho menos en ropa interior.
-¡TÚ!- grito mientras le señalaba.