Misaki’s Pov
El reloj despertador ha sonado nuevamente, son las 6:00 am y mi molestosa rutina diaria comienza.
Mi nombre es Takahashi Misaki; tengo veinte años y mi vida no podría ser más monótona…todos los días me levanto a las seis de la madrugada y me dirijo a la ducha; mi desayuno es lo más importante puesto que como estoy en la universidad y además tengo empleo, muy a menudo me salto el almuerzo para hacer los deberes que no alcanzo a hacer luego del trabajo.
Mi vida jamás ha sido genial, pero tampoco ha sido mala, vengo de una familia a medias, mis padres murieron cuando tenía ocho años y mi hermano diez años mayor me crio, Takahashi Takahiro es mi adorado niichan; hace dos años decidí dejar de vivir con él con la intención de que viviera tranquilo sin tener que preocuparse por mí…al parecer la libertad de responsabilidades le agradó bastante puesto que dos meses después de haberme mudado al pequeño cuarto en donde vivo, mi hermano se marchó a Osaka donde conoció a la que ahora es su esposa….de esa forma, me quedé completamente solo en Tokio.
-ah….es hora de correr- mis mañanas son agitadas, el lugar donde vivo queda un poco alejado de la Universidad y el trabajo, por lo que debo correr para alcanzar el autobús y llegar a tiempo…lo sé…mi vida es horriblemente monótona y aburrida pero la verdad es que no sé qué hacer.
Akihiko’s Pov
-ah… ¿son las seis ya? – mi despertador a sonado temprano hoy, mi nombre es Usami Akihiko, tengo veintiséis años y estoy comenzando la que al parecer es una prometedora carrera como escritor; además hago clases particulares para no tener que hacer nada…mi familia fue un desastre, mis padres jamás estaban en casa y el único que se quedaba conmigo era Tanaka, el mayordomo…si, como lo suponen soy un señorito jeje…mi abuelo fue el dueño de la corporación familiar Usami y dejó para mí una gran herencia que no me fue permitido rechazar, para mi desgracia he tenido que vivir de ella y aunque muchos estarían encantados, a mi no me agrada para nada…no quiero deberle mi estabilidad al trabajo de mi abuelo y que por el resto de mis días mi familia me lo eche en cara como lo han hecho hasta ahora.
Vivo solo desde que tengo memoria, la verdad es que desde pequeño supe valerme por mí mismo así que jamás causé demasiados problemas…eso al menos hasta que cumplí los dieciocho y decidí mudarme a un apartamento propio, se suponía que en ese momento sería yo quien asumiría el mando de la corporación Usami pero la verdad es que jamás tuve intenciones de hacerlo y…no lo hice, me negué hasta el último momento y mi abuelo, como su única buena obra en mi beneficio, decidió aceptar mi decisión con el último aliento que le quedaba.
Supondrán que por ser un hombre que proviene de una familia adinerada, soy un completo desastre viviendo solo…pues piensan bien…las labores domésticas no se me dan para nada, además tengo una extraña pero adorable fijación por los osos de peluche por lo que cada vez que puedo compro más y más…y bueno, con mi poca disposición a hacer de mi apartamento un lugar habitable, los animales de felpa han estado acumulándose rápidamente sin orden alguno…por eso es que hoy me he levantado temprano, por primera vez vendrá alguien a hacer la limpieza y prefiero vigilarla en todos sus movimientos.
Ding-Dong. Debe ser ella, la mujer que viene a asear mi casa
-Usami-sama…soy Yukiya Ritsuko…he venido a hacer la limpieza- una mujer menuda y de cabello castaño se encuentra parada frente a mi, sus sonrisa maternal me asusta…jamás me han visto de esa manera
-humm…si, pase- susurro moviéndome para dejarla entrar, no me había dado cuenta de que traía un carro con unas cuantas cosas que jamás había visto
-¿por donde desea que empiece?- es cierto, yo jamás he hablado con ella, no tiene claro lo que debe hacer.
-humm…pues…supongo que necesito limpiar y ordenar la sala y…luego…humm- ella sonrió
-¿le parece si comienzo aquí y luego continúo con el baño y las habitaciones?- susurró con aquella maternal sonrisa aún en su rostro ella me da miedo…jamás me han tratado así y a pesar de que sé que no es algo malo que me vea de esa forma…n-no se como reaccionar. Asentí levemente y ella se dispuso a sacar una serie de extraños objetos de aquel carrito
-¿ha desayunado ya?- a decir verdad, no había notado el hambre que sentía hasta que lo mencionó
-n-no- sonrió nuevamente ¿seré capaz de acostumbrarme a esta situación?
-¿desea que le prepare algo de comer?- ella es realmente amable, quizás si pueda acostumbrarme a esto.
-si…gracias-
La mañana pasó de forma rápida, jamás pensé que un solo ser humano pudiese dejar tan limpio y reluciente cada cuarto de mi apartamento en unas cuantas horas, Yukiya-san dejó el carrito en una de las habitaciones desocupadas y prometió volver dentro de dos días.
-me tomé la libertad de dejarle la cena y el desayuno de mañana…espero no le moleste Usami-sama-
-p-por supuesto que no….muchas gracias Yukiya-san, es usted de gran ayuda- me sorprendí siendo amable con ella y, aún más sorpresivamente, era algo que se me daba muy bien.
Yukiya-san se fue cerca del medio día y yo pude recorrer el apartamento para notar los cambios que habían en él, no había notado lo brillante del piso y tampoco sabía que todos mis osos de felpa podían ser ordenadas en un solo cuarto, también me sorprendí al ver mi habitación bastante ordenada y la cocina limpia…ella no es humana…ella es una especie de extraño ser con…súper poderes de limpieza.
-¿qué demonios es esto?- pensé en el momento en que vi un ser metálico en el carrito de la señora de la limpieza; un tubo salía de un lado y un cable del otro. Lo conecté al toma corriente y presioné el botón que decía ON/OFF; en seguida un ruido extraño me espantó, luego el tubo comenzó a succionar mi camisa y eso bueno…me espantó aún más
-¡¡aahhh…. ¿qué demonios es esta cosa?!!- lo apagué enseguida y salí de la habitación, no sabía por qué pero no quería volver a ver una cosa así nunca más.
Misaki’s Pov.
El día en la universidad ha sido difícil; en la mañana no tengo mayores problemas por que con el estómago lleno y la concentración al más alto nivel puedo comprender todas las materias difíciles, los estudios se me dan bien pero…en las tardes, luego de los almuerzos que yo tristemente me salto, las horas de literatura e historia se me hacen horribles. Por eso es que cuando tengo tiempo me dedico a buscar a alguien que pueda enseñarme para poder subir mis calificaciones…aún no encuentro a nadie.
-¡Takahashi, deja de soñar y presta atención!- lamentablemente a Kamijou-sensei no le basta con gritarnos para despertar, un golpe de la primera lapicera que encontró terminó por sacarme de mi ensoñación, además de otorgarme un doloroso moratón en la frente
-s-si…lo siento Kamijou-sensei…n-no volverá a ocurrir-
-más te vale o lo próximo que voy a lanzarte será mi escritorio ¿has entendido Takahashi?- asentí asustado, conociendo al demonio que tengo por maestro, es probable que cumpla su palabra.. Volví a asentir enérgicamente y me dediqué a intentar comprender las palabras que decía…fue un caso perdido.
---------------------------------------------UN PAR DE HORAS DESPUÉS------------------------------------------------
Otra parte realmente monótona de mi vida es mi empleo; trabajo de mesero en un restaurante bastante sencillo en el que puedo ver cosas bastante fuera de lo común…la mayoría de los clientes son parejas y trabajadores solteros (as) que no tienen tiempo para cocinar en sus casas…
Yo por mi parte, bueno...la verdad es que jamás he tenido novia, no por que jamás me hayan pretendido lo que pasas es que….humm bueno...a mi no…me gustan las chicas jeje….humm, la verdad creo que lo descubrí en mi segundo año de secundaria, una chica que me pretendía me pidió que pasáramos la noche juntos y bueno…yo como todos los chicos de mi edad pues…quería sentirme un adulto así que…accedí, lo siguiente que recuerdo es que fue la experiencia más incómoda y extraña que e tenido…la verdad es que jamás creí llegar a sentir eso al estar en la cama con una mujer pero la verdad es que bueno…fue…raro.
En primer año en la universidad un senpai un año mayor me invitó a un bar cercano que en ese momento estaba de moda, fuimos y bebimos un poco, la pasamos de maravilla, éramos él yo y otro chico más del que no recuerdo su nombre, luego de aquella noche de juerga sólo él y yo nos fuimos a su apartamento y bueno…una cosa llevo a la otra y pues…lo hicimos... para ser sincero, se sintió infinitamente mejor de lo que se sintió aquella vez en secundaria pero…no me sentí completamente complacido, ¿habrá sido por que no sentíamos nada el uno por el otro? O quizás habrá sido el efecto del alcohol en nuestros cuerpos…no lo se, sólo se que desde ese momento he asumido tranquilamente mi…homosexualidad.
-Takahashi ha llegado un cliente, ve y atiéndelo- me susurró uno de mis compañeros de trabajo quien luchaba por llevar dos bandejas al mismo tiempo, asentí y me dirigí al lugar que me indicaba, al momento en que llegué unos metros más cerca mi corazón se detuvo Qué hombre más guapo…su cabello plateado caía con suavidad cubriendo levemente sus ojos, su piel blanca era…casi brillante, sus facciones eran muy masculinas y bien formadas…jamás había visto un hombre tan guapo.
-b-buenas tardes…¿q-qué puedo ofrecerle?- sus ojos se voltearon hacia mí, sus pupilas eran de un violeta intenso que me dejó sin palabras; una sonrisa curvó sus labios ¿le sonreirá así a todo el mundo?
-sólo quiero un cappuccino por ahora…- su voz grave y susurrante me hizo estremecer, anoté la orden y me volteé ligeramente
-¡espera!....lamento si esta pregunta te molesta pero ¿no eres muy joven para trabajar aquí?- ¿porque pregunta eso?
-humm…no lo creo, tengo veinte años- susurré sintiendo mis mejillas bastante calientes
-oh…es que te confundí con el amigo de uno de mis alumnos- así que es profesor
-p-pues dudo conocer a alguno de sus alumnos si es que enseña a chicos menores- murmuré con mi corazón aceleradísimo
-no es eso…es sólo que, siendo profesor de literatura te acostumbras a enseñar a los jóvenes que no entienden nada en secundaria y al inicio de la universidad- ¿profesor de literatura? ¿será esta mi oportunidad?
-lamento preguntarle esto pero….¿usted podría darme clases?- ¿cómo he tenido el valor de preguntar algo como eso así como así? Con semejante rostro se me hace difícil pensar en una clase con él sin que se me alboroten las hormonas…pero la verdad es que yo vendería mi alma por pasar una noche con él…y esas manos, y ese rostro…C-CÁLMATE MISAKI….NI SIQUIERA LO CONÓCES…el ya debe estar felizmente casado
-te esperaré hasta que estés libre, ¿cuándo termina tu turno?-¿me va a decir que si tan rápido?
-d-dentro de dos horas-no esperarás tanto
-tengo tiempo…nos vemos aquí mismo ¿está bien?-
-¡TAKAHASHI….LAS DEMÁS MESAS!- la voz de mi jefe me sacó de mis cavilaciones
-¿qué dices Takahashi-kun…te parece bien?- ¿cuándo le dije mi nombre? Mi jefe me miraba con expresión malhumorada así que me alejé un paso hacia él
-h-hai- susurré antes de irme definitivamente…no perdía mucho, si no aceptaba ser mi profesor al menos conseguiría hablar con él por un momento.
-¿qué te tuvo ocupado tanto tiempo?- mi jefe era un ogro de vez en cuando pero…la verdad es que luego de semejante cliente….no me molesta para nada
-pues…e-estaba indeciso…e-el cliente estaba indeciso- susurré volteándome ligeramente, sus pupilas chocaron con las mías y de la nada la habitación comenzó a calentarse Calma Misaki…no lo conoces…no importa cuan guapo, varonil, amable simpático que parezca…no lo conoces.
-Shuindou-san le llevará su orden, tu atiende a las mesas de por allá…rápido- asentí levemente y me dirigí a las demás mesas maldiciendo por lo bajo a Shuindou por la suerte de poder hablar con aquel….cliente.
Usami’s Pov
Mi casa es bastante aburrida de vez en cuando, supongo que a pesar de estar acostumbrado a la soledad esta sigue sin ser de mi total agrado. Decidí salir a por un café, quizás eso me relaje y con suerte…conocer a algún chico con quien pasar la noche.
Jamás me he caracterizado por tener relaciones duraderas, la verdad es que nunca he tenido pareja…he dormido con hombres desde los dieciséis, sé que me gustan mucho más que las mujeres, disfruto de beber unos tragos con algún chico guapo e interesante…también disfruto mucho del sexo pero…no lo se, aún no encuentro a ese alguien que me llene por completo, alguien con quien quiera pasar más de una noche.
Llegué a un café poco ostentoso, jamás había entrado en él por lo que no conozco para nada el habiente, aun así decidí sentarme y esperar a que alguien me atendiera….hoy tengo mucho tiempo así que no me molesta esperar.
La gente es tan completamente monótona…no hay nadie que logre llamar mi atención, todos son más de lo mismo, personas vacías que pretenden ser felices en trabajos que no los valoran, con familias de uno, en las que la compañía no es más que una soledad abarrotada…todos conformándose con lo primero que encuentran por miedo a quedar solos…por miedo a no tener nada…me dan pena.
-b-buenas tardes….¿qué puedo ofrecerle?- volteé mis ojos hacia aquella adorable voz, unas orbes verde esmeralda me miraban con curiosidad, su piel era blanca y tersa, sus facciones eran…casi como las de un niño…sus labios…su figura….de la nada un pensamiento irrumpió en mi cabeza por sobre los otros como me gustaría compartir una noche con ese cuerpo esbelto y bien formado….CALMA, es sólo un niño…te ha preguntado algo…responde. Sonreí por un momento viéndole de pies a cabeza…sin duda era un chico lindo
-sólo quiero un cappuccino por ahora…-más tarde podría querer un bocado de ti….AKIHIKO….ya basta, no importa cuanto lo desees es un niño. Volteó su lindo cuerpo dispuesto a irse pero…un impulso más grande que mi sentido común me hizo hablar.
-¡espera!....lamento si esta pregunta te molesta pero ¿no eres muy joven para trabajar aquí?- dime que no y te rapto apenas termine tu turno pude ver como se sonrojó ligeramente…eso me enterneció, una sensación extraña recorrió mi vientre, no se sentía mal
-humm…no lo creo, tengo veinte años- gracias destino.
-oh…es que te confundí con el amigo de uno de mis alumnos- murmuré para justificar mi repentina pregunta, no se por qué pero este chico…me hace sentir algo más que un deseo de llevármelo a la cama…hay algo diferente en
-p-pues dudo conocer a alguno de sus alumnos si es que enseña a chicos menores- ¿le habrá molestado mi confusión? Decidí comentarle sobre mi profesión de forma casual, no tenía motivo alguno para hacerlo sólo lo dije, pero su siguiente pregunta me impactó
-lamento preguntarle esto pero….¿usted podría darme clases?- ¿q-qué?...ah chico…lo que has dicho es…como pedirle permiso al lobo para entrar en su boca…¿qué se supone que responda? Con semejante chico pidiéndome que sea su profesor…dudo resistir mucho tiempo a solas con él sin querer devorar su cuerpo…bueno…supongo que puedo pensar en una respuesta mientras termina su turno…no me hará daño hablarle un poco y bueno…no me atrevería a tener sexo con él en un restaurante abarrotado de gente.
-te esperaré hasta que estés libre, ¿cuándo termina tu turno?-
-d-dentro de dos horas- tengo tiempo. Escuché como lo llamaban…Takahashi…me gusta
-¿qué dices Takahashi-kun…te parece bien?- me gustó como sonó su nombre en mis labios…me hizo sentir aquella sensación en al vientre una vez más, el chico parecía preocupado por los llamados de su jefe y entre sus nerviosos movimientos susurró un tímido Hai….mi corazón se aceleró….Takahashi…no eres como los demás…
Misaki’s Pov
Dejé el mandil de mesero en el lugar de siempre, mis manos temblaban y es que estaba a punto de ir a encontrarme con el hombre que sin duda es el más guapo que he visto. Me asomé tímidamente y pude ver la parte trasera de su cabeza sobresaliendo por encima de la silla en la que estaba sentado bien Misaki…esta es tu oportunidad…no lo arruines.
Comencé a caminar con lentitud, no quería parecer desesperado, mis piernas me fallaron un poco y di un par de tumbos antes de llegar a su lado
-uh…humm y-ya estoy aquí- susurré intentando no parecer un idiota pero es que sus ojos…su cuerpo…su presencia me hacen temblar
-toma asiento Takahashi-kun…quisiera conversar contigo- él era enormemente amable y una vez más me pregunté ¿le sonreirá a todos de esa forma?
-bueno, supongo que lo primero que debo hacer es presentarme ¿no?...mi nombre es Usami Akihiko…es un gusto conocerte- esa voz…esa sonrisa, esos ojos fijos en mí…esperen ha dicho ¿Usami?... ¿Usami? ¿El heredero de la corporación familiar Usami? ¿ESE Usami?
-uh…y-yo…m-mi nom-nombre es…u-humm…T-Takahashi M-Misaki…el gusto es mío Usami-sama- no puedo creerlo, estoy hablando con Usami Akihiko, el apuesto y joven hijo de Usami Fuyuhiko-sama…el chico que no quiso ser heredero de la corporación de su abuelo…el que ahora está comenzando una prometedora carrera como escritor
-y dime Misaki…¿de verdad deseas que yo sea tu profesor?-
-s-si- susurré…me sentía un imbécil tartamudeando cada vez que debía dirigirle la palabra pero es que…él…me fascina
-humm…pues, si tienes tiempo sólo dímelo, ahorita sólo tengo dos alumnos a quienes enseño durante la tarde y supongo que tu a esas horas estas en la universidad por lo que…bueno…tengo el resto del día libre y no tendría problemas en gastarlo contigo- un calosfrío recorrió mi espalda esa forma de decirlo…la forma en que me dijo que puede ser mi profesor…la forma en que pronuncia mi nombre…él es tan…seductor.
-h-hay tres días de la semana en los que no trabajo…humm ¿s-sería una molestia…?-
-para nada…tres clases a la semana no serán problema- me tendió un papelito con una dirección en él –ahí es donde vivo, por favor ve allí cuando no tengas que trabajar…siempre estoy en casa por lo que no hay problema en absoluto- acerqué mi mano para tender el papel y sus dedos rozaron los míos…
Narrador Omnisciente
Los dedos de ambos se rozaron por un par de segundos pero por sus brazos revoloteó una corriente eléctrica que los sorprendió de sobremanera, sus ojos se encontraron con rapidez y sus respiraciones se agitaron levemente
¿Qué es esto que siento?...nadie me había provocado este tipo de reacciones…Misaki es…es diferente…Misaki es…es único….Misaki es…es con quien quiero estar. Pensó Akihiko sin apartar sus violáceas pupilas de las esmeraldas del chico…sus corazones latían con extremada rapidez y les costaba entender qué era lo que sucedía
El…es…diferente, sin contar lo guapísimo que es…jamás había tenido este tipo de sensaciones…él no es como los demás hombres…el me provoca algo especial…algo que no quiero dejar de sentir. Pensó el menor alejando lentamente su mano, aun cuando no quería romper aquel ínfimo contacto no quería incomodar al peliplata frente a él….¿y si él no sintió lo mismo?.
-m-mañana no tengo trabajo… ¿le parece bien si….?- ¿si te beso sólo una vez?
-por supuesto…te esperaré en mi apartamento - impaciente por tomarte en mis brazos
Ambos sonrieron levemente, sin notarlo un ligero sonrojo coloreó las mejillas de ambos, Akihiko se levantó de la mesa muy lentamente
-nos vemos Misaki-kun-susurró paseando sus manos por el Cataño cabello de aquel lindo muchacho, sus dedos bajaron deliberadamente hacia una de sus mejillas y la acariciaron levemente antes de salir del lugar
No sé qué será…pero por alguna extraña razón quiero volver a sentirlo…quiero volver a sentir esta corriente en mi cuerpo. Pensaron al mismo tiempo, uno dentro de su coche y el otro aún deslumbrado en aquella mesa de restaurante…
CONTINUARÁ…………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………