POR TI
-¿Qué pasa Tat-chan? ¿Por qué me citaste a esta hora de la noche? –Eran la una de la madrugada y Ryuichi Sakuma se encontraba junto a Tatsuha Uesugi en la plaza que estaba frente al edificio del primero.
-Porque hay algo que necesito decirte hoy, ahora, no aguantaré más
Creo que debes saber,
Algo que debí decirte alguna vez.
Ya no lo puedo esconder,
Tan solo espero que trates de entender.
-Tat-chan me estás asustando – Le dijo Ryuichi tomando ambas de sus manos - ¡No me hables tan seriamente! – Su rostro formaba una infantil mueca
-No es nada malo – El moreno tenía una afligida sonrisa – Depende desde que punto lo tomes
-Entonces… ¡Habla de una vez!
-¡Bien! – Gritó ya también más que nervioso el menor – Escucha atentamente – El peli verde asintió enérgicamente – Desde que nos conocimos hace cinco años, que hemos sido amigos
-¡Y los mejores! – Sonrió con entusiasmo
-Solo tú lo piensas de esa forma – Resopló Tatsuha – La verdad es que no puedo seguir fingiendo que soy tu amigo, no lo siento de esa forma… No… lo quiero de esa forma, me pasan más cosas cuando te veo, yo… Me dan ganas de besarte – Sus mejillas se ruborizaron al decir lo último
Creo que no aguanto más,
Estar contigo fingiendo ser tu amigo.
Es mi peor castigo,
Es que cuando te miro solo te quiero besar.
-¡Tatsuha! ¡¿Q-Qué… Qué estás diciendo?! ¡N-Nosotros somos amigos! – Ryuichi se puso de pie de la banca en donde se encontraban sentados, el menor con un suspiro algo ahogado trató de seguir el hilo de sus palabras
-¡Es que no me puedo seguir mintiendo! ¡Jamás te he visto como un amigo! ¿Quieres que lo siga pretendiendo cuando en verdad no lo deseo? – Ryuichi no le respondió - ¡Es amor Ryuichi! ¡No puedo seguir siendo tu amigo cuando en verdad estoy enamorado de ti!
-¡No, no, no! ¡No puedes decir algo como eso!
-¿No te gusto? – Soltó tan de repente que Ryuichi no supo que decirle realmente, lo miró fijamente a los ojos un par de segundos para luego agachar su mirada hacia el piso – Pues no me rendiré, aunque me rechaces
Ya no me puedo mentir
Haría todo por ti
Robaste mi corazón,
Sé que lo mío es amor.
Porque no puedo vivir,
Si no estás cerca de mí
Y aunque me digas que no,
Juro que voy a seguir.
-Siento que… Esto cambia mucho las cosas – Al escuchar esto, Tatsuha le tomó de una mano y le invitó a sentarse de nueva cuenta su lado, ésta vez levantó su vista con uno de sus dedos haciendo que lo mirara fijamente a los ojos - ¡Por Dios, Tat-chan! – Y aunque Ryuichi luchara por sacar su personalidad infantil a flote, el momento no lo requería y sus intentos eran más bien en vano
-Yo sé que tal vez ahora no tengas la misma confianza hacia mi – Los ojos del menor se tornaron vidriosos – Porque esto cambia las cosas, ya no querrás contarme tus secretos – Rió amargamente – Lo siento si te lo dije de la nada, sé que jamás te lo esperaste pero… Así es el amor, cuando llega… No puedes detenerlo
-¿Hace cuánto? – Ryuichi respiraba entrecortadamente - ¿Hace cuánto… Qué te gusto?
-Desde que nos conocimos
Yo se que ya no vendrás,
A hablar conmigo cuando te sientas mal.
Ya no me vas a confesar,
Esos secretos que tuve que guardar.
Yo sé que no te lo esperabas,
Pero así es el amor... (Nunca te avisa nada)
-Eso… Es bastante tiempo
-Lo sé – Rió Tatsuha – Pero siempre fuiste mi ídolo – Puso una de sus manos delicadamente sobre el rostro de Ryuichi, y acercó sus rostros hasta quedar a escasa distancia – Solo… ¿Me dejarías… Besarte? – Aunque algo espantado por la proposición, Ryuichi cerró los ojos y asintió lentamente con la cabeza.
Tatsuha acercó sus labios hasta los de Ryuichi hasta que los unió superficialmente, era el mejor sentimiento que haya captado quizás en su vida, el estómago de ambos liberaba mariposas que revoloteaban sin parar una y otra vez, para ambos era la mejor experiencia que hubiera vivido.
-Tat… chan…
-Lo sé Ryuichi… No volverá a ocurrir otra vez – Tatsuha le sonrió débilmente – Aunque te ame, aunque me hayas robado el corazón, aunque tenga claro que esto que siento no es más que amor… Y aunque te alejes de mí y sienta que me muera… No me voy a rendir, lucharé por ti, aunque me rechaces
Daria todo por ti,
Robaste mi corazón,
Sé que lo mío es amor.
Porque no puedo vivir,
Si no estás cerca de mí,
Y aunque me digas que no,
Juro que voy a seguir.
Tatsuha se puso de pie dispuesto a irse, a Ryuichi le tomaron unos cuanto pasos de su acompañante para reaccionar, se puso de pie con su dedo índice sobre sus labios y tomó todo el aire que sus pulmones le permitieron.
-¡¿Puedes dejar de decir que te rechazaré?! ¡¿Qué me alejaré de ti?! – Una estúpida lágrima le recorrió la mejilla
-Ryuichi… Yo… que ocurre… - lo sujetó por los hombros suavemente – Perdón… No quería hacerte llorar…
-¡Cállate! Y… Déjame decirte que… Fueron muchos años esperando que me dijeras esto – Lo miró a los ojos – También me enamoré de ti desde la primera vez que te vi… Y… Si insistía con lo de ser amigos era porque pensé que tú me rechazarías… - Rió nervioso – Es algo ilógico… que hayamos pensado lo mismo por cinco años y… - Fue interrumpido por un beso bastante apasionado y romántico de Tatsuha, le tenía el rostro inmóvil entre sus dos manos y Ryuichi sin saber qué hacer con las suyas sujetó con fuerza el abrigo que llevaba puesto.
-Te amo Ryu… No sabes cuánto…
-Tengo una idea… De cuanto te amo yo y con eso me basta – Se sonrieron, y tomados de la mano caminaron hacia el departamento.
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