Inconscientemente Amandote.
La noticia.
Me gusta su cara, siempre ha sido así. Desde que tengo memoria.
Sabaku no Gaara es mi amigo de la infancia, nuestros padres son amigos y era lógico que nosotros también, más, contando con el hecho de que tenemos la misma edad. Hemos sido cómplices toda la vida, juegos y travesuras, aventuras que realizamos tomados de las manos.
Cada momento a su lado lo he pasado genial, su forma de ser y la mía son compatibles y siempre tenemos opiniones similares, las discusiones que hemos tenido incluso eso lo he disfrutado, mi vida sin su presencia sería muy aburrida. Pero lo que más me gusta es su cara.
Su piel blanca, sus ojos aguamarina, su nariz y sus labios, aquel ceño que frunce cuando está molesto, su cálida sonrisa apenas visible, y aquel tatuaje que se hizo en la frente cuando estábamos en la preparatoria, todo eso me gusta, y me gusta más por estar enmarcado por ese cabello color de fuego, rojo, como la sangre.
Me gusta su cara, nada más, es un rostro sexy no voy a negarlo, pero es mi amigo…y sin embargo después de esa noticia, he actuado de forma muy rara y no sé porqué.
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-¡casarte!-grité, Gaara asintió jugando video juegos-pero… ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Con quién?
-Haruno Sakura, ¿la recuerdas? iba con nosotros en la secundaria.
-¿Sakura?-hice memoria-¿la frentona?
-esa misma, tsk, maldición- dijo muriendo sin poder acabar el nivel, así que lo reinicio.
-pero, pero… ¿en qué momento saliste con ella?
-no he salido con ella.
-¿entonces?
-es arreglado, idiota- dijo poniéndole pausa al juego y levantándose del piso- es la hija de la mejor amiga de mi madre, me acabo de enterar que estamos comprometidos desde que nacimos.
-¿ah? ¿Qué basura es eso? ¿En qué siglo creen que estamos?
Gaara tomó un vaso con refresco y bebió con calma.
-no vas a casarte ¿o sí?
El se encogió de hombros y dejó el vaso.
-pues…
-¿pues…?-dije yo tomando el control de la consola para continuar con su juego, Gaara se acercó, se sentó a mi lado y posó su mano en mi hombro.
-¿tú qué opinas?-dijo-¿me caso, Sasuke?
Lo miré y le sonreí.
-pues será frentona, pero no es fea, si te gusta, adelante.
Mi amigo quitó su mano y suspiró recostándose en el piso.
-sí, eso pensé.
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Naruto golpeó la mesa y se puso a llorar como un bebe, siempre hacia esos dramas, igual, nos hacía reír y lo apreciábamos.
-Sakura chan siempre me ha gustado-sollozó.
-vamos, no seas nena-le dije- estas saliendo con Hinata, ¿o no?
-pues si pero… yo esperaba terminar con ella cuando Sakura chan se me declarara…
-que dobe eres, dobe.
-¡cállate temeee!
-Pues a mí me parece que está bien-dijo Neji dejando caer la ceniza de su cigarro en el cenicero- pronto terminaremos la universidad, es hora de pensar en sentar cabeza, no siempre podemos andar jugando.
-yo pienso igual- dijo Shino.
-¡va! Ser soltero es lo mejor-dijo Kiba balanceándose en la silla.
-lo que importa es lo que tú quieras, Gaara chan- dijo Lee- ¿quieres casarte?
Gaara frunció el ceño, ese que tanto me gusta, me miró y le sonreí dándole mi apoyo.
-tal vez- dijo.
-En ese caso- dijo Naruto reponiéndose de su tragedia- vamos a festejar la noticia, ea, ¡vamos a beber!!
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Bebimos, todos, una copa tras otra, fuimos de un bar a otro y terminamos en casa de Neji, como vivía solo y era adinerado teníamos licor y espacio de sobra.
Al final Naruto se quedó dormido en el piso boca abajo y roncaba, Lee se durmió en un sillón con los pies colgando, Shino en el piso también, con Kiba usando su estomago de almohada, Neji se fue a su cuarto. Pero Gaara y yo teníamos mucha tolerancia al alcohol y aunque estábamos algo mareados, no estábamos ebrios, abrí un par de cervezas más y se la tendí, él la tomó y apoyó la cabeza contra la pared, me senté frente a él.
-quien diría que serás el primero en casarte- le dije-no lo esperaba, la verdad.
-sí-dijo él y tomo algo de cerveza- yo tampoco.
-seré tu padrino ¿verdad?
-claro, no podía pensar en nadie más.
-jaja te organizare una despedida…que dudaras casarte jajaja
Gaara bebió un poco de cerveza.
-¿dudar? Solo si duermes conmigo
-jajaja-me reí pero al ver que no me seguía me callé- no hablas en serio ¿o sí?
Él me miró.
-idiota- dijo sonriéndome- ¡Hasta crees!
-jeje, ya me iba a quitar el pantalón-bromeé-y a hacerte el amor.
Gaara se sonrojó y tomó otro trago de cerveza.
-Uchiha soberbio, ¿quién querría acostarse contigo?
Deje mi cerveza y gatee hasta quedar frente a él.
-¿no quieres, Gaara?-dije él me miró.
-aléjate, Sasuke, no juegues con eso.
-hey si quieres te lo hago, mientras seas tú no importa- me acerque un poco más y roce con mis labios los suyos, riendo me aleje, pero al mirarlo sus mejillas estaban sonrojadas y su mirada aguamarina era acuosa y sorprendida.
No sé porque, no tengo idea de que pasó por mi mente, pero me acerque y posé mis labios en los suyos de nuevo, mi lengua delineó sus labios y su boca se abrió para mi, sabia a alcohol como la mía, pero era más embriagante que el alcohol, mis manos tomaron su cabello evitando romper el beso, nuestras lenguas se entrelazaron, un hilo de saliva escurrió de la comisura de nuestros labios unidos; y sus manos tomaron mis muñecas aferrándose a ellas.
Sintiendo mi respiración extinguirse, mordí su labio inferior jalándolo hacia mí, para terminar el contacto. Nos miramos de cerca, su cerveza había caído al piso y se derramaba sin que nadie hiciera algo por evitarlo.
-Sasuke yo…
-lo siento-dije regresando en mí, me separé y levante la cerveza- estoy ebrio no me hagas caso.
-Ya- dijo él y se puso de pie, tambaleándose un poco- voy al baño.
Cuando se fue, me llevé la mano al pecho, mi corazón latía como un maldito loco, algo en su rostro me obligo a besarlo, estoy ebrio, pensé, estoy ebrio. Pero no era verdad, lo bese por que quise hacerlo.
Pero, ¿por qué? Gaara…me gusta su rostro, solo eso, es mi amigo, ¡mi amigo! Estoy ebrio y por eso lo vi más hermoso que de costumbre…estoy ebrio.