-Hola… -Susurro tan suave y nervioso que su voz no llegaron a los oídos ajenos.
-¡Ríndete! –Dijo entre risas su mejor amigo viendo como el pequeño aun continuaba cabizbajo y sonrojado, cosa que le causaba mucha gracia.
-¡On… Onew! –Soltó apenado de un grito y sus ojos comenzaron a lagrimear.
-¿Jonghyun? –Pregunto impotente el castaño –Era broma… ¡Jonghyun! –Su pequeño amigo había comenzado a correr velozmente.
Corrió lo suficientemente rápido como para no perderlo de vista, si bien llamaban la atención de la gente haciendo esto, al mayor no le importaba en lo absoluto. Continúo corriendo primero notando que terminaron saliendo de la escuela, luego reconociendo el camino deduciendo el lugar a donde se dirigían en la persecución… un pequeño parque abandonado.
-¡Jonghyun! –Grito harto de corretearlo.
El menor sorprendido se detuvo y volteo a verlo, no se había dado cuenta que lo seguía, intento voltearse a seguir caminando pero Jinki lo tomo de la muñeca y lo jalo de la misma prácticamente a rastras hasta una pequeña banca en el margen del parque.
-¡¿Qué fue lo que te paso?! –Exigió saber mientras lo sentaba.
-…
-¿No piensas contarme? –Le pregunto ahora con su voz algo serena, al no obtener respuesta de su amigo tomo lo tomo de su rostro para que lo mirara a la cara –Jong… -Le suplico.
-Y... yo… -El pequeño dejo de lagrimear y empezó a sollozar gordas gotas salinas, libero el agarre y apoyo la cabeza en el pecho del mayor, el mismo se arrodillo y abrazo al menor, Jonghyun reubico su cabeza hacia el hombro del mayor y se mantuvieron de esa forma por bastante tiempo.
-Todo va a estar bien… -Le susurro Jinki al oído.
-¡No es cierto!
-Si lo estará, ya verás… yo te ayudare… -Dijo suavemente mientras estas palabras lo torturaban así mismo.
-Gr…gracias Onew… -Dijo calmando su voz y sus sollozos.
-Para eso estamos los amigos ¿no? –Lo separo de su cuerpo y lo miro a los ojos, le deposito un pequeño beso en la frente.
Se paro y se sentó a un lado de su amigo, Jonghyun se recostó intentando calmarse y se quedo dormido sobre las piernas de Jinki no después de mucho tiempo. El castaño lo veía embelesado, pues su pequeño amigo era realmente encantador cuando dormía, estuvieron un bastante prolongado tiempo, y Jinki lejos de cansarse o aburrirse disfrutaba de los mejores y peores momentos de su vida hasta ese momento.
Al cabo de unos tres o cuatro horas el pelinegro despertó encontrándose con un distraído chico mirando fijamente sus labios, de tal forma que lo hacía sentirse un poco incomodo, el mayor no se había percatado todavía de que el menor había despertado y con una mano acaricio suavemente la mejilla de su amigo, para luego ver que el pequeño había abierto a más no poder sus ojos.
-Me tengo que ir –Dijo nerviosamente Jinki.
-¿Onew?
-Tu mamá debe estar preocupada por ti – Grave error, el mayor no recordaba que Jonghyun iría a dormir a su casa pues los padres de ambos estaban de viajes y al hacer aquellas parejas amigos íntimos confiaron que ambos podrían dormir en casa de él mayor.
-Lee Jinki –Le llamo por su nombre completo bastante serio, se puso de pie y coloco sus puños en la cintura -¿No prestaste atención a lo que te dije esta mañana?
-… -No podría ni mentirle pues no sabría el porque el cambio tan repentino de actitud, mas no podría decirle que no escuchaba pues todo el recreo se había dedicado a pensar en sus labios, bastante había batallado para que no se enterara de su sexualidad, pues el menor era homofóbico, como para arruinarlo en un segundo.
-Espero tu respuesta.
-¿Sabes? Así te pareces bastante a tu primo –Cambio drásticamente la conversación para que mientras se quejara recordar el movimiento de aquellos rosados labios y así averiguar la conversación que habían tenido.
-¡¿Qué me parezco a quien?! –Pregunto exaltado pues su único primo era alguien con quien no le deberían comparar por varias razones.