Kai se levanto de su asiento y se dirigió hacia Ruki y arrodillándose ante el le dijo
-Ruki no te mortifiques, tienes mucho dolor contenido. Ami también me han herido pero la vida continua- mientras rozaba con sus manos el rostro pálido del modelo.
-Kai yo… me siento tan mal, ame a dos personas con toda mi alma. Y arruine sus vidas-dijo Ruki.
-Pero por que dices eso? –
-Uruha casi pierde su trabajo y mi esposa casi se muere… -dejo caer, según Kai, las lagrimas mas delicadas.
-Ruki tu estas muy mal, sacrificaste todo por ellos y ahora estas hundido en esa casa, deprimido y solo –Kai no pudo evitar ponerse mal también, lo entendía mas que a nadie.
Ruki observo el rostro delicado de Kai por unos segundos, en verdad estaba preocupado por el.
-Creo que mejor me voy –dijo tratando de levantarse
-No, no te vayas… no puedo dejar que sigas así –insistió Kai
-Lo siento Kai, pero lo que yo necesito no me lo puedes dar…, gracias por la cena –y sin mas se fue a su casa.
Los días que siguieron fueron mas aturdidores… solo era Kai quien ocupaba sus pensamientos… genial uno mas a la lista de melancolía.
Era extraño no verlo corriendo con sus mascotas por la playa, así que decidió ir a verlo.
Por más que Ruki llamo y llamo a su casa nadie salio, parecía que no había nadie pero hace rato.
Ofuscado volvió a su casa pensando en donde estaba el… se habrá enojado conmigo?...
Con el paso de unos meses ya se sentía mejor, el dolor había cesado pero no del todo.
Había retomado su rutina de ejercicios y recupero su look tan característico…
En una de sus salidas a la ciudad de la costa se encontró con unos amigos por casualidad. Miyavi y Saga, quienes lo pusieron al tanto de las novedades de su ambiente.
Tristemente se entero de cosas que no quería saber, como que su ex esposa había viajado a Europa y que se había comprometido con un empresario muy rico y que Uruha fue vendido a una compañía más famosa de modelos y así viajaba casi por todo el mundo.
Aunque Miyavi y Saga omitieron muchos detalles vieron que a Ruki lo tranquilizo saber que ambas personas estaban bien y seguían con su vida.
-No piensas volver Rukito? –pregunto Saga
-Por el momento no, no estoy listo además la vida en este lugar me esta gustando –dijo tranquilo.
-No será que alguien te gusta? –pregunto Miyavi en un tono seductor.
-Puede ser pero no te incumbe –contesto en un tono de burla.
-Jajaja, me parece bien Ruki, tienes que seguir con tu vida –
Ya en dirección a su casa, después del encuentro oportuno con sus amigos, decidió ir a ver si Kai había vuelto de su viaje. Y se alegro al ver la casa iluminada.
Al llamar sentía que su corazón se le saldría del pecho…el morocho de ojos negros lo tenia loco.
Pero su alegría fue interrumpida al ver que quien abrió la puerta no fue el, sino un hombre rubio, de ojos claros y una extraña banda color blanca que le cruzaba el rostro a la altura de la nariz. Lucia un estilo muy punk británico. Con extraña voz le pregunto…
-Esta Kai? –
-No el no esta –contesto el rubio
-Bueno gracias –extrañamente se sintió muy molesto.
Volvió a su casa lleno de… celos?... si capaz, pero por que? Kai nunca le dio ese poder de sentirse así…pero fue inevitable.
A los pocos minutos llamaron a su puerta… era Kai.
-Ruki –y sonrío felizmente –como estas? Fuiste a buscarme a mi casa no? –
-Si pero me dijeron que no estabas –dijo seriamente
-Si en efecto no estaba, me había ido a Tokio por un trabajo pero hace poquito que volví-
-Y ese hombre quien me atendió quien era? –Ruki trataba de controlar esa sensación de celos pero aun se le notaba.
-Pues es Reita, vino a buscar las ultimas cosas que quedaban de el –y bajo la mirada.
-así? –era extraño pero una alegría y una paz invadió a Ruki, se sintió aliviado y después de tanto tiempo esperanzado.
Como aquella vez…
// Uruha llegaba tarde a la sesión de fotos de la nueva temporada. Ruki estaba en el camarín cuando el rubio entro agitado de correr los pasillos y río al ver que estaba bastante despeinado.
-No te rías, fue una noche larga –dijo con voz agitada el rubio sentándose bruscamente en el sillón de cuero negro del camarín –dios! Como corrí, se me hizo interminable.. –
Ruki lo miraba con mucha dulzura, hasta noto que la cadena de su cuello estaba enredada con un nudo, aunque Uruha lucia normal no perdía su elegancia.
Uruha se saco la campera de cuero negra y dejo lucir su remera de color gris que hacia combinación con su pantalón de cuero y botas negras. Se corrió el mechón de pelo que cubría un poco sus ojos y miro a Ruki a través de sus gruesos anteojos espejados.
-Te queda muy lindo ese maquillaje Ruki –
Ruki abrió grande los ojos y su rostro se puso todo colorado, bajo la mirada y agradeció amablemente.
Siempre se sentía nervioso frente a el… me acelera el pulso, el corazón se me saldrá en cualquier momento…
-Ya vendrán a arreglarte, recién se fue la maquilladora –dijo Ruki
-Si la vi –se levanto acercándose al enorme espejo, se saco los anteojos y miro a Ruki a través del mismo –tengo algo que decirte Ruki –
Ruki levanto la mirada y encontró la del rubio a través del espejo.
-Si dime –
-Creo que siento algo por ti –dijo Uruha sin dejar de mirarlo, era evidente que el rubio era demasiado directo.
El asombro de Ruki fue tal que quito sus ojos del espejo y en un gesto de incomodidad se toco el rostro. Y ahora que digo?... que hago?...
Uruha observo esa dulce incomodidad y se acerco a el, poso sus manos en el respaldar de la silla acercándose lo más que pudo a Ruki.
-Se que estas casado y con una mujer, hermosa por cierto, pero me vas a negar que no te provoco nada? Veo tus reacciones cada vez que me miras, y yo también las siento… me gustas Ruki y mucho –
-Yo… yo –y uno de los delicados dedos de Uruha se posaron en sus labios en señal de que guardara silencio.
-No, no digas nada Ru –acerco su rostro y lo miro fijamente –eres tan lindo cuando te pones nervioso –
Estaba tan cerca que sentía su respiración agitada, estaba a punto de besarlo. Pero en ese momento golpean la puerta… salvado por la campana, o no… maldita sea!
Uruha cerro los ojos en un gesto de enojo y dejo pasar a quien llamaba.
Ruki permaneció inmóvil, trago saliva y fingió que nada paso… ojala se repita… espero que no dejes de sentir eso… ami también me gustas. //
Por un momento a Ruki se le cruzo por la mente en volver a enamorarse, de Kai tal vez… pero el miedo que siempre tuvo no lo dejaba pensar claramente.
Cuando se dio cuenta vio que Kai aun seguía con el en su puerta aunque el morocho miraba hacia su propia casa.
-Cuanto tardara? No quiero volver y encontrármelo, siempre terminamos peleando y ya me canse –dijo con un tono serio.
-No quieres esperar aquí, te invito una cerveza –dijo Ruki amablemente.
-Me encantaría –
Fue la sonrisa mas hermosa que el morocho le había regalado, seguramente no se la olvidaría nunca.
… si me sonríes denuevo me voy a morir… pero en la agonía seré feliz…
Continuara…