A mi alrededor habían cientos de flashes tratando de sacar la mejor foto mientras salía por las puertas de “Sharingan”, lo único en lo que pensaba era en el, nada más, era lo único que me alejaba de todo este horror por el que pasaba, solo por el, Gaara…
Titulares: “Sasuke Uchiha, acusado de trafico de drogas”, “Joven empresario es atrapado con paquetes de droga”, “Jefe de “Sharingan” se declara culpable”,……
Si, esos eran los títulos en casi todos los periódicos, no podía hacer nada, solo enfrentar lo que me esperaba...
Mi nombre es Sasuke Uchiha, heredero de parte de las empresas “Sharingan”, el otro heredero es mi hermano mayor Itachi Uchiha. Nuestros padres murieron en un accidente automovilístico cuando yo aun era muy pequeño, así que no recuerdo casi nada de ellos, lo poco que se es gracias a Itachi, que me hablaba bastante de mis padres. El me cuido desde ese momento y se hizo cargo de las empresas hasta que yo tuviera la edad suficiente como para hacerme cargo también. Luego de un tiempo, tome mi lugar como presidente de la empresa. Mis empleados me tenían un poco de miedo porque era bastante serio y los sobrenombres no se hicieron esperar, me empezaron a llamar “tempano de hielo Uchiha”, claro que a mis espaldas, pero fue Itachi quien me conto, cualquier cosa por tratar de sacarme de mis casillas.
- Sasuke vine a visitarte!! :D
- ¿Podrías al menos tocar la puerta? ¬¬
- ¿No se supone que deberías tener una secretaria que anuncie a tus invitados? ¬w¬
- La despedí -.-
- n.n Ahh, la desp… ¿que? Ŏ.O ¿por que?
- Porque era torpe, lenta, cometía muchas faltas ortográficas y además se me insinuaba mucho u.uU
- Es que mi Sasukito es un galán ^w^
- Itachi cállate −Δ−*
- Pero al menos deberías buscar otra secretaria, ¿no?
- Secretario
- ¿que?
- Es un secretario. Su curriculum era muy bueno y tenía bastantes referencias, empezará trabajando la próxima semana.
- pero… ¿la falda no le quedara rara? −Δ− ¿?
- Cállate ¬¬*
Quien diría que así comenzaría todo…
- Buenos días señor Uchiha, mi nombre es Gaara Sabaku No y seré su secretario.
- Buenos días, es un gusto conocerlo, espero bastante eficiencia de su parte señor Sabaku No. Empezara archivando los siguientes documentos y organizando mi agenda para hoy, para cualquier consulta estaré en mi oficina.
- De acuerdo
Desde ese día, me empecé a enamorar de a pocos de cada sonrisa, cada gesto, cada movimiento que hacia, todo era nuevo para mi y lo mejor de todo era que me correspondía…
- Sasuke, te amo…. – Se acercó lentamente y algo inseguro por la falta de una respuesta, me había dejado sorprendido, de pronto pude sentir sus labios rozando con los míos, transmitiendo mucho sentimiento, de a pocos se volvió mas exigente y la necesidad de contacto se hizo grande….
Pasó el tiempo y sentía una felicidad completa, tanto así que hasta mis empleados se dieron cuenta. Hubo un tiempo en el que Itachi me insistía para ir al psiquiatra. ¡Quien lo entiende!, primero me dice que debería sonreír más y cuando lo hago me toma por loco u.Uu.
Pero como dicen, luego de la felicidad viene la desgracia, así de injusta es la vida…
- ¡Quienes son ustedes y que hacen en mi oficina! – grite a un par de tipos, un hombre y una mujer, que habían ingresado a mi oficina sin aviso, eran las 11pm y los empleados ya se habían retirado.
- Uy, ¡como tratas a tus cuñados Uchiha! – dijo el hombre frente a mi. Me quede completamente shokeado… ¿cuñados?.... podrían ser….
- Parece que lo estas entendiendo – decía la mujer con sorna – para ser mas claros yo soy Temari Sabaku No y el es mi hermano Kankuro Sabaku No, Gaara es nuestro hermano menor.
- ¿Y eso que tiene que ver? ¿Qué quieren?
- Ju, es que parece que nuestro infiltrado ya no nos hace caso, entonces nosotros tenemos que intervenir. – no entendía a lo que se refería este hombre… ¿infiltrado?
- Nosotros somos parte de una organización que vende información que otros están interesados en comprar – decía Temari, como si fuera lo mas normal del mundo.
- Como la información personal de empresas – ya lo iba entendiendo
- Exactamente, ya lo esperaba del genio Uchiha- Kankuro cambio su gesto burlón por uno serio- Pero al parecer nuestro lindo Gaara ya no nos quiere obedecer y eso es malo.
- ¿Gaara? El es… - no es cierto…
- Si, el es nuestro infiltrado, muy lindo ¿no?
De pronto las puertas se abrieron de golpe y aprecio Gaara, estaba agitado y un poco maltrecho.
- ¡¡Sasukee!! ¡¡Escúchame!!
- ¡¡Hola Gaara!! ¡Justo hablábamos de ti! – Kankuro se acerco a el y lo jalo del brazo para llevarlo hasta donde estaban conversando- mira nada mas, se ha portado tan mal que le hemos tenido que castigar pero aun así nada –dijo esto mientras le abría la camisa mostrando una serie de moretones y cicatrices- ¿que mas tenemos que hacerte para que obedezcas?- arroja a Gaara hacia mi y lo único que hago es sostenerlo y abrazarlo fuertemente, no me miraba a la cara, pero sentía mi manga mojarse y su cuerpo temblando.
- ¡Son unos desgraciados!- solté a Gaara para poder clavarle un puñete a Kankuro, pero…
- Mucho cuidado con lo que haces – saco un arma - no somos tan idiotas como para venir desarmados – impotencia, eso es lo que sentía…
- ¿Qué es lo que quieren?
- Iremos al punto, danos la información que queremos y mantén la discreción – dijo eso ultimo señalando la cámara que estaba en la esquina de mi oficina – así todo esta bien y Gaara quedara intacto, tal vez. Además, ya sabes, si nosotros caemos, Gaara cae con nosotros – entre la espada y la pared…
- ¡Sasuke no lo hagas! ¡Por favor!- al fin vi su cara, me suplicaba con gruesas lagrimas rodando por sus mejillas ahora pálidas. Perdón Gaara, pero no me pidas que te abandone así…
- Cumpliré con todo, pero no le hagan nada
- Muy bien, ahora nos vamos, estaremos en contacto- Tomo a Gaara del brazo y se lo llevaba – vámonos nuestra pequeña garantía jajajajja.
- ¡Sasuke nooo! – se aferraba a mi brazo fuertemente
- Todo estará bien, te lo prometo, acuérdate que te amo, siempre lo hare- y así nos separamos.
Pasaron semanas y no había visto a Gaara, cada día era una tortura no tenerlo a mi lado, tuve que buscar otra secretaria para cubrir su puesto. También tenia que mantener las apariencias, como si nada hubiese pasado, esto engaño a casi todos, menos a Itachi, el me ha podido leer completamente desde que era pequeño, y constantemente me decía cosas como “sabes que puedes contar conmigo” o “¿seguro que estas bien?” a lo que yo solo respondía “no pasa nada, en serio”. Además de la presión de Itachi, también tenia que lidiar con los tipos que me custodiaban a casi todas las horas, cortesía de Kankuro y Temari, para que no vaya donde la policía. Claro que no me quede de brazos cruzados, tenia trazado un plan para hacer la denuncia y salvar a Gaara, pero un error me costo todo…
- Te dije que no hicieras algo tonto Uchiha, ahora te toca castigo – era Kankuro hablándome por teléfono- ve al estacionamiento y busca el auto rojo, ah y mándale mis saludos a Gaara – colgó… ¿pero dijo Gaara?
Salí lo más rápido que pude y luego de encontrar el auto abrí la puerta, estaba sin seguro, para ver lo que las lunas polarizadas no me dejaban. Era Gaara amarrado y amordazado, sus ojos se abrieron de la impresión, lo desamarre lo más rápido que pude para luego abrazarnos y compartir un beso que hace mucho que no compartíamos. Al separarnos me dijo…
- Sasuke, ¡te extrañe demasiado!, pero escúchame, ¡el auto tiene muchos paquetes con droga, Kankuro llamo a la policía para hacer la denuncia!
- ¡Nos inculparan de narcotraficantes!
Lo que hicimos fue tomar todos los paquetes de droga y llevarlas a mi oficina. A Gaara le parecía rara la idea pero de todos modos me siguió la escondimos en uno de los muebles y luego lo abrasé y lo volví a besar probando su cavidad y sintiendo la textura de sus labios, esa que tanto había extrañado. Una vez que terminamos el beso, lo seguí abrazando y le susurre al oído…
- Gaara, te amo mucho, yo te protegeré
- Sas….- Gaara se desplomo en mis brazos luego del golpe en su nuca. Lo cargue y lo metí en el lugar que solo el y yo conocíamos, ahora solo faltaba esperar
Al poco tiempo…
La puerta de mi oficina se derrumba y entra un grupo de policías apuntándome con sus armas –Sasuke Uchiha queda usted arrestado por manejo de drogas ilícitas- decidí seguir el juego- ¡No tienen pruebas de nada!- ¿Ah, si? ¿Y que es esto? – dijo uno de los policías abriendo el pequeño armario donde habíamos ocultado todos los paquetes.
Después de eso me llevaron a interrogatorio, solo dije que recibí la droga de un comerciante anónimo y que quería ganar mas ingresos para la empresa vendiendo droga, todo a espaldas de Itachi. Como no había mas implicados y ya había confesado, el juicio fue rápido, pero la condena larga: 17 años de prisión.
Itachi me fue a ver antes del juicio, solo recibí un puñetazo en la mejilla, pero lo que me destruyo fue la cara de decepción y tristeza con la que me veía.
- Sasuke, ¿hice algo mal? Yo…
- Itachi, tu eres la persona que mas quiero, te ocupaste de mi, este camino lo tome yo, lo lamento mucho – me abrazó, hace mucho que no lo hacia, ya saben, el orgullo Uchiha ante todo, pero en estos momentos lo necesitaba.
- Sasuke, eres mi ototo pase lo que pase, mi ototo baka.
El traslado a mi infierno se me hizo tan largo… Gaara ¿estas bien? Era lo único que pensaba, quien diría que en estos tres primeros años de sentencia no lo he vuelto a ver….