-¿Saliendo?, Minho no podía creerlo, esa era la razón del rechazo de Taemin, se quedó en silencio viendo a Kai fijamente.
Kai soltó el vaso que tenía en la mano miró burlonamente a Minho y se fue, su turno ya terminaba… Minho vio venir al otro barman y seguía estando confuso.
-Déme un whisky por favor, dijo el morocho nervioso. Sentía como su corazón se rompía en pedazos. Bebió hasta altas horas de la noche, Taemin lo había buscado desesperado. Entró al bar y lo vio en la barra casi ebrio y a punto de llorar.
-Hyeong, ¿que haces aquí? Dijo el maknae.
-Nada Taemin, déjame solo.
-No, hyeong, no lo haré, ¡estás ebrio! Gritó. Ven, vamos a casa…
Lo agarró como pudo y lo arrastró hacia el departamento. Por suerte no quedaba lejos. Lo recostó en el sillón, le quitó la camisa, lo tapó con una manta, y lo besó en los labios. Minho ya se había quedado dormido y no sintió el beso de Taemin.
A la mañana siguiente…
Minho se levantó con un dolor de cabeza impresionante, no podía sus piernas ni sus brazos, su aliento apestaba, así que entró a darse una ducha, y claro, a lavarse los dientes. Sintió unos pasos en la escalera, -pensó- seguro es Taemin, ya que los chicos regresaban mañana.
-¡Hyeong! ¿Estás despierto? Gritaba el maknae aún bajando por la escalera.
-Estoy dándome una ducha, respondió Minho. Ya salgo…
Taemin se sentó en la mesa del comedor a esperar a Minho. De repente sintió vibrar su celular.
-¿Dónde lo he puesto? Odio perder todo, se auto reprochó. Era Kai…
-¡Qué imbécil! Balbuceó.
-No le contestaré, es más borraré su número.
Taemin ignoró el mensaje y lo borró. Tenía algo más importante en lo que pensar ahora. No sabía el por qué del beso que le dio anoche a Minho, pero deseaba besarlo de nuevo.
-Empecé a verlo con otros ojos, muero de ganas de descubrir el por qué. Susurró para que Minho no escuchara…
Minho salió de la ducha solo con la toalla puesta, secó su cabello con otra toalla más pequeña. Trataba de provocar a Taemin. Este lo miró y se ruborizó al verlo. Se mordía los labios inconscientemente…
-Hyeong… te ves lindo… dijo.
Minho pensó que estaba soñando, ¿Taemin había dicho eso? Apenas pudo formular un Gracias… Taemin se acercó a él, y le secó la espalda con la toalla pequeña. Olió su cuello y posó sus labios en el… Minho temblaba. El maknae miró directo a los ojos del alto, se lamió los labios y lo besó. Minho estaba duro, no reaccionaba. Taemin lo besaba despacio, saboreando cada rincón de sus carnosos labios.
Minho flotaba en una nube, el amor de su vida estaba besándolo, no podía creerlo…. Taemin lo abrazó y la toalla lentamente se deslizó por la cadera de Minho… ni siquiera prestó atención a como crecía la entrepierna del alto. Simplemente quería comérselo a besos. Entre beso y beso resonaban en la cabeza de Minho las palabras de Kai…
¿No te lo ha contado?, estamos saliendo
-Ta... Taemin, balbuceó el alto como pudo entre los mordiscos del maknae.
-Anoche me habló Kai…
-¿Y qué te dijo? Replicó.
-Que estaba saliendo contigo… dijo Minho cabizbajo.
-¡Está loco! Yo jamás saldría con él… no sé por… Minho lo interrumpió.
-¿No es él quién te gusta entonces?
-No, me gustas tú hyeong… dijo el maknae mirándolo fijamente.
-¡No me dijiste eso ayer! ¿Por qué me mientes? Tú sabes lo que siento yo por ti… dijo comenzando a sollozar el alto…
Taemin se sentía horrible… jamás había visto a Minho tan frágil…
-No te mentí hyeong… tú me encantas, me gustas muchísimo… trató de calmarlo.
-Basta Taemin, no digas más… subió de un flash por las escaleras y Taemin solo sintió la puerta cerrarse abruptamente.
No bajó en toda la tarde, Taemin comenzaba a preocuparse de él, así que decidió subir a verlo. Escuchaba un débil sonido proveniente de su habitación ¿Acaso Minho lloraba?, pudo escuchar al alto decir Soy un estúpido, se sentía terrible, no podía ver a Minho así… lo amaba… así que decidió golpear la puerta… Minho la tenía con llave… y no respondía, así que se sentó a esperar a que el alto quisiera verlo…