En los primeros días que estuve en el internado, no tenía muchos amigos, nunca he sido una persona especialmente sociable. Soy educado, devuelvo los saludos, pero poco más... Así que al principio prácticamente me pasaba el día colgando del brazo de Gackt porque era al único al que conocía, aunque eso no me molestaba del todo. Él me presentó a su banda y la verdad es que todos fueron muy agradables conmigo; You, Chacha...en un futuro me gustaría trabajar en algún proyecto junto a todos ellos.
Por las tardes, después de las clases, solía ir a ensayar con mi guitarra a una de las tantas salas libres que había. La número cuatro...en la segunda planta, la recuerdo perfectamente, era mi pequeño nidito. Un día me encontraba tan concentrado en la canción que estaba tocando, que me puse a cantar, sin siquiera notarlo, sin siquiera entonar. Nunca he pensado ser vocalista, ya que creo que es la parte más aburrida de una banda...
Aunque pensándolo bien yo ni siquiera tenía una banda.
La puerta se abrió de repente, y ese fue el comienzo de todo.
-Oh, perdón...-
El que se disculpaba era un chico de pelo castaño, poco más alto que yo, con una sonrisa muy dulce. Me pareció curioso así que decidí prestarle un poco de atención.
-Mm...no importa-dejé la guitarra a un lado y lo miré directamente
-Soy Tetsu-
Me hizo una ligera reverencia y sonrió, me sentí bien, parecía un chico encantador.
-Yo soy Hyde-
-Siento haberte interrumpido, ¿estabas ensayando?-
-Algo así-
-¿Eres solista?-
-No...pero hace poco que vine y...aún no tengo banda-
-¡Ven a la mía!-se le iluminó la mirada
Parpadeé un par de veces. ¿Me lo estaba diciendo en serio? Bueno, la verdad es que no tenía precisamente una opción mejor. Pero he de admitir que me pilló totalmente desprevenido.
-¿Por qué?-
-¡Necesitamos un vocalista de manera urgente!-
¿En serio se había fijado en mi maldita voz? Lo mataba...
-Yo no soy vocalista-
-Pues se te da bien, vamos, ven a mi banda-hizo algo similar a un puchero
-Que no quiero-me levanté, tomé mi guitarra y salí de la sala
Que chico más maleducado, fue lo que pensé. Y qué plasta... ¡Pero era mono! En el fondo quería volver a verlo. Al día siguiente, a la misma hora, volvió a aparecer en la sala.
-¿Qué quieres ahora?-reconozco que fui un poco borde con él
-Oh, ensaya tranquilo, yo me quedaré por aquí-se sentó en el sillón de la esquina-Ya hablaremos cuando termines-
Decidí ignorarlo y seguir con mis cosas, pero no podía concentrarme, sentía su mirada sobre mí. Dejé la guitarra a un lado y me giré a encararlo.
-¿Podrías dejar de mirarme de esa manera?-fruncí el ceño
-Lo siento-desvió la mirada-¿Has pensado en mi propuesta?-
-No tengo nada que pensar-
-Pero por favor, te lo agradecería muy muy muy mucho-junto sus manos frente a él en señal de ruego-Porfaaaaaa-
-¿No comprendes que no quiero ser vocalista?-
-Vamos...tienes talento...y los chicos de la banda son muy majos, te encantarían-
Suspiré hondamente:
-Lo siento, Tetsu, pero no-
-Pues seguiré volviendo hasta que aceptes-
Este proceso se repitió durante mucho, pero que mucho tiempo. Al final acabé cediendo ante la dulce sonrisa de Tetsu y me apunté a su banda. ''L'arc en ciel'', ese era el nombre, no tenía mala pinta, la música que tocaban era buena y los miembros irradiaban un buen aura. Me gustaba, me gustaba mucho. Además de Tetsu-al bajo-estaban Ken en la guitarra y Yukihiro en la batería. Eran definitivamente unos chicos muy agradables, y me sentía a gusto con ellos. Nos hicimos cercanos en muy poco tiempo y L'arc en ciel pasó a representar un papel importante en mi vida.
Creo que...en el fondo yo desde el principio sabía que a Tetsu le gustaba. Quiero decir... Él siempre se comportaba de un modo distinto cuando estaba conmigo que...cuando estaba en clase, o cuando hablaba con Yukihiro y Ken. Me trataba de forma especial, y he de admitir que me subía la moral, porque me sentía atractivo, y poderoso...
Que malo es el ego...
Nos hicimos muy amigos, éramos inseparables, juntos reíamos y llorábamos, compartimos momentos inolvidables y...todo iba sobre ruedas...hasta que, un fatídico día en el que nos encontrábamos en su habitación -por suerte para nosotros su compañero no estaba- se me declaró:
-Oye...Doiha...-había adquirido ese apodo hacía un tiempo-Tengo que decirte algo-
-¿De qué se trata?-la verdad, nunca le vi el tipo de chico que se declara, pensé que nunca lo diría, que...''se conformaría con ser mi amigo'' o algo así
Definitivamente, soy imbécil.
-Verás...yo...he estado pensando mucho tiempo en esto, le he dado muchas vueltas y...y... Creo que me gustas...mucho-
-Oh...-pensé unos segundos, debía declinar sus sentimientos de manera educada, era mi amigo y definitivamente no quería dañarlo
-Hyde...-pero él fue más rápido que yo en buscar una respuesta y tomándome del mentón plantó sus labios sobre los míos
A mis tiernos quince años, Tetsu me robó mi primer beso. ¿Soy patético? Quizá, pero no me arrepiento de habérselo entregado a él, creo que...se lo merecía. No le di mi primer beso a alguien del que estaba enamorado, pero se lo di a alguien al que realmente quería. Cuando nos separamos tomé aire repetidas veces, me había dejado totalmente fuera de juego.
-Te...Tetsu...yo...yo te quiero mucho pe...pero-
-¿No quieres estar conmigo?-
-Sí, pero...como amigos-sonreí y tomé su mano
Amigos, eso es lo que hemos sido hasta ahora. Nunca ha pasado nada entre nosotros, y tengo la sensación de que nunca pasará, aunque sé muy bien que Tetsu es una de las piezas más importantes de mi vida. Nunca me reprochó haberlo rechazado, nunca hablamos de ese beso, nunca le dije que fue el primero, nunca nada...
¿Es estúpido, verdad? Que le de tal importancia a...un pequeño hecho que...quizá no tuviera relevancia pero...para mí fue un momento que...simplemente marcó una diferencia.
Capítulo 2: Gackt
Aquí viene la controversia, ¡al contrario de lo que todo el mundo piensa nunca he tenido ni tendré nada con Gackt!
Nunca, nunca, jamás.
No lo niego tan rotundamente porque él no me agrade, lo niego porque se ha generalizado un pensamiento incorrecto a lo largo de estos años.
Gackt es definitivamente un gran chico, vale, eso sí, pero lo veo tan lejano a mí física y psicológicamente que no soy capaz de incluirlo ni en mis fantasías más húmedas... Patético, ¿no? Quiero decir... ¡Son mis malditas fantasías! ¡Debería poder incluír en ellas a cualquier icono sexual que quisiera!
Tenemos mucha confianza, soy el único que lo llama Gacchan, es un apodo divertido. Desde el primer día nos llevamos genial, pero... No sé cómo explicarlo, así que mejor vayamos por partes... Me gusta cómo me trata, como me habla, su voz me embelesa, me deja en otro mundo. ¡Es un maldito seductor nato! ¡Y me hace confundir lo que siento!
Analicémoslo de arriba abajo. O mejor de abajo arriba, soy un tío raro.
Sus pies...mmmm...tiene buen gusto para los zapatos, y los lleva siempre pulcros, impecables, como si les acabara de sacar brillo. Subimos un poco...hasta sus piernas...son bonitas, y se las depila una vez al mes-alguna vez lo acompañé y se le nota que hace unos esfuerzos sobrehumanos por no gritar como una nena, es divertidísimo-. Si alzamos la vista un poco más...ejem...ahí está: ¡No voy a negar que me he fijado en su magnum! ¡Por el amor de dios! ¡¿Se pasa empalmado todo el día o yo pienso mal?! ¿Quién no la ha mirado al menos una vez? Creo que hasta los heteros de clase lo hacen. En el vestuario cambia sexualidades a su paso...
Creo que ahí me he pasado. En fin...sigamos un poco más arriba. Abdominales, pectorales...
Vale, está muy bueno, pero es porque se lo curra, gimnasio, entrenamientos agotadores, todo tipo de deportes, artes marciales, snowboard, karate... ¡Nunca entenderé cómo demontre puede hacer todo eso y no morir en el intento! ¡Y seguir teniendo tiempo para todo el mundo, yo incluído! Y para atender sus obligaciones como presiente del consejo estudiantil-a veces pienso que el cargo se le sube un poco a la cabeza-.
Me siento vago a su lado.
En general, me siento inferior a su lado... Le quiero muchísimo...pero no es para mí, ahora hablaré más calmadamente de eso...
Terminamos de subir... Tiene un cuello muy fuerte, me he colgado de él más de una vez. Me siento como una mujer diciendo eso, es irónico. En fin... Su sonrisa es realmente lo que más me gusta de él, incluso más que su mirada... Y eso que esta me enamora... tan penetrante.... Pero cada vez que sonríe es como si todo fuera a ir bien, pase lo que pase...a pesar de todo... Me siento bien cuando me sonríe...Pero cuando sonríe de verdad, no cuando pone una de esas sonrisas forzadas de: ''Realmente no estoy bien, pero no quiero que os preocupéis por mí'' Yo hablo de una sonrisa auténtica... Esos momentos en los que se ríe con ganas...e incluso parece algo mayor. Me gusta que lo parezca, se le ve más humano así.
Más allá de esa apariencia de muñeco de porcelana perfecto en todos los aspectos de la vida. Es solo una fachada, yo conozco al Gackt de verdad. Es auténtico, tiene defectos, hay cosas que no hace bien, tiene marcas de acné, poros, como todo el mundo, realmente es alguien normal. Aunque a veces ni yo mismo esté seguro de eso.
Dejo para el final su pelo, porque me divierte mucho, lo ha tenido de todos los colores y formas. Al contrario que el mío, el suyo es grueso, y suave... me gusta acariciarlo, nunca es áspero, por mucha laca que lleve. ¡Aún no sé cómo lo hace!
En fin... Vamos a decir que... Gackt... Es una persona realmente especial para mí. Le quiero muchísimo pero...somos dos personas muy diferentes. Y creo es por eso que nos llevamos tan bien... Aunque también es por eso por lo que nunca podremos tener una relación de tipo amorosa.
Aunque él muchas veces diga lo contrario. Siempre es algo como: ''Eres realmente considerado, si fueras una chica, me enamoraría de ti'' ¿Qué demonios quiere decir eso? ¿Me quiere convertir en mujer? Pues lo lleva claro... No, definitivamente no haríamos buena pareja.
Pero después de todo, digamos que... No estoy enamorado de él pero...dadme un fin de semana...los dos solos...y podría llegar a estarlo.