¡Harry Baka!
“Maldito pelirrojo” pensé mientras veía como abrazaba a Harry festejando una anotación de quidich, “no lo toque es mío”. Sin pensar lo que hacía saque mi varita y provoque que una gran jarrón callera sobre Ron.
-ah!- se escucho su grito por todo el lugar mientras se caía al suelo agarrándose el brazo derecho. Harry miro para todos lados, frenético hasta que nuestros ojos se cruzaron.
-Harry llevémoslo a la enfermería- dijo Hermaioni, mientras el tomaba a su amigo y lo ayudaba a salir del lugar no sin antes lanzarme una mirada de desdén. “Tendré problemas por esto más tarde, seguro me castigan”.
La tarde transcurrió tranquila, en el comedor comunitario a la hora de la cena ya corrían rumores de que algún fantasma había querido matar a Ron y otras estúpidas historias… pero ninguna estaba relacionada conmigo, y cada vez que lo miraba el solo se hacia el que no me veía. Ninguno de los profesores me había venido a castigar ni nada por el estilo, que rayo estaría tramando Harry.
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-A sus dormitorios. ¡A sus dormitorios!- ordenaba Snape
-si... Si ya vamos…-respondí tranquilo desde el sillón de la sala. Con pereza me arrastre hacia mi cuarto, pero cuando quise encender las luces no pude- que raro- dije sin extrañarme, me acerque al borde de la cama y comencé a sacarme el incomodo uniforme, la capa y luego comencé as desabrocharme uno por uno los botones de la camisa blanca…
-Malfoy- escuche desde una esquina, pero la obscuridad no me permitía ver. El intruso dio un paso adelante revelando su cara.
-Harry- susurre mientras buscaba con la vista mi varita.
-Malfoy- repitió apuntando hacia mi- soporto tus bromas, pero no voy a permitir que te metas con mis amigos-
-di lo que quieras yo no me voy a arrepentir- dije terminando de sacarme la camisa y dándome vuelta para seguir cambiándome
-¿porque lo hiciste?- dijo iracundo- Ron no te hiso nada, ¡¡si me odias lastímame a mí, ahora el está con el brazo fisurado!!- grito
-yo no te odio- él me miro confundido- lo odio a él, por tocarte….- dije decidiendo tirar todo por la borda y que fuera lo que fuera- nadie te puede tocar…-hice una pausa - si vas a hacer algo hazlo ya no tengo toda la noche- concluí receloso mientras seguía sacándome el resto de la ropa y buscaba la parte de abajo del pijama.
-¿eh? – Dijo luego de varios minutos – no entiendo… ¿porque nadie me podría tocar?-
-Harry baka…- dije tranquilamente llamándolo por su primer nombre- nadie te puede tocar porque aunque no lo sepas eres mío- me acerque lentamente y a cada paso que daba el se alejaba hacia la esquina, hasta que quedo arrinconado.
-¿eh? Pero tú siempre me molestas y me haces la vida imposible…- dijo confuso
-no… yo no te hago la vida imposible… solo a los de tu alrededor… a esos que te tocan- dije con odio mirando directo a sus ojos claros
-no entiendo….- dijo mas confundido desviando su vista
- yo…. Te amo Harry… y lamentablemente soy un poquito posesivo…- sonreí como si me disculpara solo con la explicación…- y tiendo a monopoliz…- repentinamente se tiro sobre mi enlazando sus brazos por detrás de mi nuca, besándome, haciendo que me desequilibre y caiga al suelo de piedra- Harry!- exclame sorprendido
- el baka eres tu…-dijo ruborizado sobre mí, se agacho y susurro en mi oído –sabía que no me podía a ver enamorado de alguien así… tenias que ser diferente…- sonrió
-¿qué?- pregunte siendo ahora el sorprendido- ¿desde cuándo?-
-desde que nos cruzamos el primer día…- busco mis ojos-…yo también te amo Draco…- dijo llamándome por mi nombre. Gire sobre él en el suelo haciendo que quede abajo mío, junte nuestros labios con pasión… la pasión acumulada de los 6 años en que lo había visto a la distancia –ah…- dejo escapar una vez que nos separamos – aaah!- gimió nuevamente cuando nuestros bultos se rozaron.
-que cara más lasciva estás haciendo…- dije admirando su rostro con la poca luz del lugar, el no retiro la mirada, como desafiándome- ¿puedo Harry?- pregunte
-baka... Y todavía preguntas…- dijo enlazando nuevamente sus brazos por detrás de mi cabeza uniéndonos en un fogoso beso. Desabroche su camisa para lamer sus pezones - Aah…. Aah…- gemía descontrolado
-sh… todo Slytherin puede oírte…- dije haciendo una pausa para continuar mi recorrido hacia su miembro, ágil saque sus pantalones y mire lo que había frente a mí.
-ah... no mires…- se quejo, haciendo caso omiso lamí tres de mis dedos en introduje uno observando atentamente cada una de sus reacciones.- no mires!- gimió, pero nuevamente no lo escuche y comencé a hacer pequeñas succiones en su erección al mismo tiempo que metía uno más de mis dedos provocando que clavará sus uñas en mi espalda y acabara en mi cara.
-perdón…-dijo sonriendo. Termino de sacarse su camisa y limpio mi cara.
-¿de qué te ríes?- pregunte fingiendo estar enojado
- de que correspondes mis sentimientos... no me rio… estoy feliz- comentario que me pareció que no debía ser hecho con dos de mis dedos dentro de él y mi cara en su entrepierna. Los moví en su interior haciendo que tirara su cabeza hacia atrás de placer. Volvió a mirar directo a mis ojos.
- No me desafíes Potter- dije juguetón mientras me acomodaba entre sus caderas
-¿o qué Malfoy?- respondió con la misma actitud que yo. Comencé a hacer presión penetrándolo lentamente
- o… mañana no… podrás caminar Harry- dije respirando agitadamente en su oído por la sensación recién descubierta. Suavemente comencé a moverme en su interior, pero conforme fue pasando el tiempo, mis embestidas se fueron volviendo más rápidas y salvajes haciéndonos gemir a los dos.
-aah!- exclamaba sin control alguno, nos acercamos, y nuestra lenguas se enlazaron, recorriendo cada uno la boca del otro, saboreando todo. El comenzó a moverse debajo de mi con ansia pidiendo más de ese dulce placer provocando que su erección rozara con nuestros cuerpos–aah!... más….aah!...- dejaba salir de sus labios muy excitado Harry. Nuestros cuerpos se fueron perlando sudor mientras yo llegaba cada vez más profundo tocando un punto que hacía que Harry arqueara su espalda de satisfacción. –aah!... Draco… me ven…go!...- dijo, mientras su interior apretaba mi miembro cada vez con más fuerza, haciendo que yo acabara en su interior y el en nuestros vientres.
Me deje caer sobre él, hasta que mi respiración lentamente se normalizó. Con cuidado Salí de su frágil cuerpo. Con suavid lo tome en brazos y lo lleve a mi cama, donde se acomodo sobre mi pecho mientras yo nos arropaba.
-¿no pensarás dormirte o sí?- pregunto una vez que me había recostado
-si…¿por?- conteste intrigado mirando directo a sus ojos claros
-no se vos…-dijo subiendo sobre mi felinamente -pero yo llevo más de cinco años deseándote- paso su lengua insinuante por su labio superior, al mismo tiempo movía sus caderas haciendo que mi miembro se pusiera duro nuevamente-ah!…- gimió ante el roce de mi erección contra su entrada. Sin darme tiempo a reaccionar comenzó a penetrarse solo, siendo muy intenso para ambos porque acabábamos de venirnos hace no mucho
-aah!...- gemí al sentir las paredes de su cavidad aprisionándome nuevamente- Haarry!…- dije costosamente –¿que ha…ces?
-ya te… dije Draco… ah… llevo esperando mucho tiempo como para conformarme con solo una vez- dijo sellando mi boca con la suya sin darme ni un respiro para reprochar… aunque verdaderamente no quería…. Me gustaba este nuevo Harry…
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Esa noche lo hicimos mucha veces, desahogando la pasión la lujuria que llevaba seis años acumulada… o simplemente eran las ganas de sentir un cuerpo cálido junto al propio en una fría noche de otoño que pareció eterna…
-¿Malfoy?-pregunto el ojiclaro
-Mmm…?- suspire sin abrir mis ojos disfrutando solo del aroma de su cabello
-¿que pasara a partir de ahora?- abrí los ojos, en su rostro se reflejaba la autentica preocupación
-no lo sé…- respondí sincero su visa se clavo en mi.- pero eso dispuesto a ir en contra de todo el mundo…-deposité un tierno beso en sus labios-… con al de estar junto a ti-dije besándolo esa vez con más pasión que otra cosa.
-¿contra todo el mundo?- dijo tratando de disimular una risita que se la había escapado.
-si contra mis amigos… mi padre… incluso contra Dumbludore…- dije causando que ahora su risa no fuera disimulada.- no te rías es cerio… haría todo eso y más.
-¿cómo qué?- pregunto siguiendo el juego
-como hacer que sonrías todos los días a partir de ahora o que no e falte absolutamente nada…-
-eres mucho más tierno de lo que pude imaginar- dijo interrumpiéndome para unir nuestras bocas no solo en un beso, sino sellando la promesa que yo acababa de pronunciar.
Firefly
26/05/2012