Otra vez… está sentado sobre sus rodillas ya rojas por tanto aguante, bajo la luz tenue una brillante gota baja suavemente por su rostro. ¿Porque llora? ¿Qué es esto, que pasa?
-Estoy aquí, no tengas miedo, no te dejare, lo prome…- dije en un tono muy bajo.
De repente no podía escuchar mi voz y los gemidos de llanto desaparecían, se hacían eco, fije la vista en su rostro y luego de la fuerte oscuridad salieron unas monstruosas manos como garras que lo sujetaban y lo alejaban de mi, gritaba desesperado por alcanzarme alzando sus pequeñas manos, mi cuerpo no se movía, veía tristemente como las gotas salían de sus hermosos ojos como la noche iluminados por la luna.
-Sasu…ke..- esas palabras salieron de mi boca con dificultad luego tome aliento llenando por completo mis pulmones.
–¡¡¡Sasuke!!!-
Desperté con un pequeño salto que hiso que me callera de la cama, mi respiración estaba agitada y puse una mano en mi corazón para tratar de calmarme al separarla de mi pecho la sentía húmeda también sudaba como un animal. Tome un baño con tranquilidad pensando en ese sueño que ya se había vuelto habitual quizá mi corazón lo seguía recordando y me hacia sufrir por las noches quería olvidarlo todo de una buena vez.
-Naruto! Espérame!- grito sakura, mi compañera, mientras caminaba por el mismo lugar de todos los días hacia la escuela.
-Hey naruto ¿ya comiste?- pregunto sakura mirando hacia mí con insistencia.
-Si, comí un poco de ramen cuando pase por ichikaru…- respondí ignorándola un poco.
El resto del camino no escuche ni una palabra de sakura de seguro se había dado cuenta de que estaba cansado y pensativo como siempre y no quería causarme molestias.
-Aah! qué bien! Parece que va a llover- decían todos, fulmine a sakura con la mirada, no quería compañía y menos ahora cuando todavía no había aceptado la idea de que él había desaparecido de mi vida que ya no sería el mismo, necesitaba espacio.
-Hey chicos aprecio que quieran estar conmigo pero yo de verdad estoy cansado y creo que mejor voy a dormir un rato, discúlpenme-
Vi un puente al frente de mí lleno de neblina, escuchaba el sonido de las olas que chocaban contra su base, me fui de la realidad cuando una gota del cielo cayo como rayo sobre mi nuca.
Recuerdos olvidados surgieron, veía a mi querido sasuke lleno de inmensas agujas por todo su cuerpo y sakura sentada a su lado llorando, llantos que se igualaban al sonido de las olas luego mi persona gritándole desesperadamente y sacudiéndolo esperando a que volviera y por fin abría sus ojos tiernos como una rosa abriéndose en primavera, yo lloraba de felicidad, todo aquello sucedió en ese mismo puente una pesadilla que me perseguía todavía.
Pasaba todos los días por el puente torturándome a mí mismo con los recuerdos que me mataban poco a poco. El sufrimiento seguía brotando de mi como el humo del fuego, mi deber era protegerlo solo eso, pero me descuide y lo llevaron lejos de mi que debería hacer ahora, no podía estar tranquilo.
Reinaba la quietud y todo estaba oscuro, algo estaba pasando, no había casi nadie en las calles supongo que solo me sentía inseguro, me dirigí al puente a pasar el rato pero entonces sentí un chakra muy familiar camine muy lento hacia el centro del puente…
-Orochimaru- dije con rabia y rencor.
-Naruto que tal ¿cuánto tiempo no?- dijo secamente mirando a otro lado.
-Solamente me preguntaba cómo has estado, ya sabes, yo no muy bien aun quiero romperte la cara por lo que le hiciste a mi mano-
-Adelante- dije desafiante preparándome para la pelea.
-jajajajaja! Que gracia! Tan confiado no crees sasuke?-
Abrí los ojos de golpe y de la densa niebla lo vi salir con otros dos que lo tomaban de los brazos, su cuerpo lucia golpeado y sus ropas todas rasgadas al ver que se trataba de mi alzo los ojos y comenzó a llorar.
-Na..ruto..- su tristeza me llego a la punta del estomago y mi corazón se encogió. Fue ahí cuando perdí el control y sin darme cuenta los dos hombres que sostenían a sasuke estaban en el suelo y orochimaru desaparecía en la oscuridad riéndose con furia. Sasuke yacía acostado cerca de caerse del puente, el lloraba con todas sus fuerzas.
-Naruto… lo siento mucho…na..ruto- repetía sin cesar.
Lo tome en mis manos preocupado de poder lastimarlo y lo lleve a casa. La tranquilidad se me fue escapando de las manos cuando vi dos moretones a los lados de su cadera.
-Mm..- sasuke se quejo cuando le toque los enormes morados en su cuerpo.
-Lo siento.. sasuke- eso me calmo y me acosté a su lado abrazándolo con ternura, estaba feliz después de tanto tiempo lo tenía en mis manos de nuevo.
El mal sueño me embargo de nuevo y las punzadas de dolor en mi corazón no cesaban junto con su llanto. En medio de la noche desperté y lo mire, lloraba, tenía sus manos en la cara y se abrazaba a sus rodilla, cuando se dio cuenta que estaba despierto abrió los ojos y me acerque a él.
-Naruto…- musito y puso una cara tan angelical que fue despertando en mi los deseos de tenerlo. Tome sus perfectos labios y los junte con los míos, tan suave y dulce quería sentir más, me abrí paso hasta su lengua.
-Mph! Naru..- reclamaba pero lo silencie y lo bese con pasión recorriendo con mi lengua una y otra vez su labio inferior y su lengua inquieta hasta que se quedo sin aliento y me empujo.
-Sasuke… te amo-
Saboree con mi lengua su delgado miembro y lo hundía más hacia mi boca.
-Naruto! Para!... aah- gemía dulcemente al meter uno, dos dedos en su interior.
-Sasuke voy a entrar..puedo?- mi erección dolía asi que le tome los muslos y los alce, moví mis caderas hacia delante suavemente y me di cuenta que mi entrada se cerraba asi que empuje con fuerza hacia el.
-Aah! no!.. due..duele..sácalo ah ah- pedía con dolor, lo abrace y le hable al oído.
-Te amo sasuke, amo tu interior.. tan caliente y suave..sasu..ke- y fui moviéndome poco a poco.
-Ah..ah! Naru..ah.. to..-
-Naru... de- déjame- pedía
-Sasuke me vengo- y empuje con fuerza hacia su interior.
-Aaaah!-
Dormimos juntos el resto de la noche, abrazados. El amanecer del día siguiente sasuke no se había levantado, me preocupo y fui a verlo.
-Sasuke... ¿te sientes mal?- en eso despertó y bostezó abriendo los ojos, ah que hermosos ojos.
-Jeje tan tierno- dije cuando volvía a bostezar.
-N-no puedo levantarme- hablo tan bajo que no lo podía entender.
-Eh? ¿Cómo?- pregunte confundido.
-Q-que no..No puedo levantarme! Dobe! Mis caderas duelen!-
Me quede petrificado cuando grito, pero me puso muy feliz al verlo acercarse y darme un beso muy tierno.
-Pe-pero igual… y-yo te amo dobe-
Abrí los ojos de golpe cuando lo dijo y me lance hacia él.
-Sasuke tan lindo y tierno : 3-
_Callate! Na….naruto? ¡¿Qué haces?!... ¡Déjame! Ya tuve suficiente! Dobee!-
Ahora las pesadillas ya no me perturban y los buenos sueños me llenan el corazón de alegría todos los días.
Fin