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QUEDATE CONMIGO por crystalwall

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Notas del capitulo:

Hola, esta es la continuación de la batalla, y este capítulo es el medular de la historia, todo lo que quisieron saber, aquí lo encontrarán, espero que les guste

Capítulo 14.- Se cae el velo

 

- De dónde sacaste eso niño? – demandó Ares refiriéndose a la daga que tenía Seiya en su mano derecha

- De dónde crees que la saqué? – respondió el recién llegado con una sonrisa

- Hades… susurró el Dios de la Guerra a tiempo que sentía la presencia del cosmo del Inframundo a su espalda

- Precisamente… - el Dios de los muertos estaba de pie tras Ares el cual a voltearse sintió como la fría mano del Dios de los Muertos se cerraba en su cuello

- Hades… no… - el Dios de la Guerra se retorcía ante la fuerza con la que era atrapado, Hades apretaba su cuello inmisericordemente dejándolo sin aire, no lo podía matar de esta manera pero la situación era humillante y debilitante

- Dame una sola buena razón para no encerrarte ahora mismo, tu fuiste el que secuestró a Seiya, tu lo planificaste todo, tu lo ordenaste y por tu culpa casi lo pierdo – Hades hablaba con una frialdad que helaba la sangre, Ares estaba intimidado ante el mayor y eso era en verdad difícil de lograr

- No… Hades… no…

- No lo niegues… tus hijos lo torturaron

- Y… eso… en que… te afecta…?

- No te has dado cuenta?... míralo bien… lo notas ahora? – Ares posó sus ojos en el joven castaño que estaba de pie a una distancia prudencial pero giró su mano (la que sostenía la daga) y ahí Ares lo pudo ver, además de la armadura del Inframundo que ahora portaba estaba el anillo regente en su dedo, en eso no se había fijado antes

- Pero no… Radamantys… - Ares estaba confundido ahora, a él le habían contado que el caballero de Atena era el amante del rubio juez… no de Hades, de haberlo sabido antes nunca lo hubieran atacado, Hades no era necesariamente vengativo pero era muy poderoso y posesivo

- No no no… tu… te atreviste a secuestrar y a torturar al Príncipe del Inframundo, por eso la sangre de tus hijos ha sido derramada y tu… tu serás encerrado – sentenció el mayor

- No lo… sabíamos… yo no lo ordené…

- Si no fuiste tu… quién fue??, a quién le debo el favor?? – si Ares no lo planeó todo entonces quien fue??, había alguien mas, Hades tenía razón desde un inicio…

- Eso… no te lo puedo decir…

- Habla Ares… o hasta aquí llegaste – amenazó Hades una vez mas

- Lo siento pero no puedo

- Bien… como quieras

 

Hades hizo salir de su manga cadenas y ató a Ares pero estas no eran cadenas ordinarias, eran cadenas sumamente especiales, con ellas el Dios de los muertos mantenía atados a los titanes y los demás seres para evitar que se escapen del tártaro, Seiya sin esperar más se volteó, localizó su objetivo que estaba ya fuera de la línea de fuego y lanzó la lanza que no atravesó a la Diosa de la Discordia pero la detuvo en seco al caer en el preciso lugar donde ella iba a poner el pie (esa era la intención de Seiya), Eris estaba tratando de escapar pero a lo que se detuvo Shaka de Virgo y Aioros de Sagitario la rodearon y con la flecha dorada y la espada legendaria de Hefesto, Kanon llegó a toda velocidad y tomó la lanza para unirse a sus camaradas y a punta de amenazas la llevaron ante Atena, el Dios de la Guerra atado vio con profunda ira a Hades acercarse a Seiya y besarlo en los labios con suavidad, Seiya sonrió y alzó el vuelo dirigiéndose al campo de batalla donde se encontraban los espectros, Hades puso su mano en el hombro de Ares y ambos desaparecieron para aparecerse junto a Atena y Poseidón, ahí Ares fue arrojado a los pies de los Dioses al igual que Eris luego de encadenarla y cayeron junto a los cuerpos de Daimos y Fobos que ya estaban allí, Hades desenvainó su espada y la levantó al cielo en donde un rayo cruzó el firmamento, al mismo tiempo los sapuris que él mismo había dado al ejército enemigo se cayeron en mil pedazos dejando a los guerreros que aún estaban en pie totalmente vulnerables lo que aprovecharon los espectros que ahora trabajando conjuntamente con los caballeros de Atena y los Generales Marinos rodearon a los sobrevivientes y los desarmaron, la victoria estaba dada y los gritos de júbilo no se hicieron esperar

 

Ares y Eris fueron llevados al salón del Patriarca en el templo de Atena, Hades había confirmado que alguien mas estaba detrás de todo esto y necesitaba averiguar quién, por lo que llevó a los prisioneros allá mientras los caballeros de Plata y Oro atendían a los heridos de los dos bandos en las casas del Santuario de Atena el grupo de primero auxilios estaba organizado por Mu, Saga, Kanon y Sorrento con la ayuda de Asclepio lo que resultó excelente, Mu estaba todo emocionado hablando de remedios milenarios y el efecto de tal o cual planta en determinada lesión, Saga solo lo miraba y sonreía, esa era una de las cosas que le hicieron enamorar del dorado carnero

 

Afrodita estaba ayudando a los habitantes de Rodorio a volver a sus hogares con la ayuda de Misty, Kiki y Dócrates, el pueblo en si no había sufrido mayores daños y sus habitantes se habían refugiado en las cuevas cercanas al cuidado de Kiki a la espera de que pasara el peligro, Dócrates había creado un remolino bastante fuerte y útil para llevarse a los pétalos de rosas que estaban por todo el pueblo, Afrodita se aseguró de que todo fuera seguro antes de permitir a los humanos volver

 

Seiya estaba de pie al borde del campo de batalla, los tres jueces del Inframundo estaban a su lado, el castaño había dado la orden a todos los espectros de ayudar a los caballeros de bronce que estaban organizando el transporte de los heridos al Santuario y de la limpieza del campo de batalla, y por limpieza se refería a llevar a los muertos a las fosas que se iban a cavar, los caballeros de bronce Shun, Hyoga, Shyru e Ikky estaban ya ayudando a los caballeros dorados a limpiar el campo de batalla cuando los espectros se les unieron a la tarea, habían muchos cadáveres por todas partes, los espectros habían cavado un foso profundo colina abajo y con la ayuda de cancerbero los estaban transportando para allá, todos estaban muy sorprendidos al ver a Seiya portar una armadura del Inframundo pero asumieron que era cuestión de Radamantys, aún no sabían a ciencia cierta lo que había pasado con Seiya, en Rodorio no habían tenido mucha oportunidad para hablar y él solo les había dicho que Deimos y Fobos lo habían secuestrado pero que Hécate había dado con él y lo habían llevado al Inframundo a tiempo, ahora Seiya estaba de pie junto a sus ex compañeros de batalla hablando de nada en específico cuando al castaño le vino un mareo, todo se le nubló y casi se cae

 

El caballero Hyoga de Cisne que era el que estaba junto a Seiya lo atrapó para que no se caiga, en menos de un segundo Radamantys estaba junto a Seiya y posesivamente lo tomó de brazos del Cisne, Minos y Aiacos se materializaron enseguida, el primer Juez solo hizo una seña a Aiacos que desapareció sin decir nada para reaparecer a los pocos minutos con Asclepio a su lado, Radamantys asentó con sumo cuidado al joven caballero en el suelo, el anciano médico le puso la mano en el cuello para sentir su pulso, buscó y de entre sus ropas sacó un frasquito que lo destapó y lo acercó a la nariz del joven que despertó de un salto pero se veía algo desubicado, Seiya pestañeó un par de veces antes de cerrar los ojos un minuto para volverlos a abrir e intentar moverse pero se detuvo ante la preocupada mirada del rubio juez del Inframundo que meneó la cabeza y puso su mano en su pecho para mantenerlo acostado en el suelo, luego de unos minutos recostado en el suelo sus ojos lograron enfocarse de mejor manera y en contra de las protestas de todos se intentó mover nuevamente

- No en conveniente que se mueva alteza – dijo Radamantys que no se había movido de su lado para disgusto del Fénix, Minos había llevado de vuelta al médico al Santuario para que siga cumpliendo su labor y ayudando a los caballeros dorados con los heridos

- Ya estoy bien, solo me mareé un poco, no seas dramático Radamantys – contestó Seiya con una débil sonrisa lo que tranquilizó a todos

- Su alteza? – Shun arqueó una ceja

- Envidioso? – dijo Seiya en tono de broma

- La verdad no… te sientes mejor Seiya? – continuó Shun tomando del brazo a su amigo para darle una mejor estabilidad mientras se levantaba

- Si si si, a veces me pasa – dijo el castaño meneando la cabeza restándole importancia al asunto

- No quieres ir a tu templo y descansar un rato mejor, si quieres llamamos a Aioros – dijo Hyoga poniéndose a su otro lado alistándose para cargarlo de ser necesario, su amigo no se veía bien

- Yo puedo llevarte – Ikky dio un paso al frente pero Radamantys se paró delante de él bloqueando a Seiya de su vista

- No Fénix, tu no te le puedes acercar – dijo el rubio Juez cortantemente parándose delante de Ikky para bloquearle el camino, esto fue indignante para el poderoso Fénix

- Y quien te crees que eres para impedírmelo? – Ikky se estaba alistando para lanzarle un golpe ahí mismo al sirviente de Hades pero Seiya se puso en medio de ellos y dijo:

- Basta… yo puedo caminar solo, ahora con esta cosa puedo volar – el castaño señaló las alas de su armadura y sonrió como niño chiquito con juguete nuevo

- Mejor yo voy contigo, estás un poco pálido  - dijo Shun y volvió a tomar el brazo de su amigo y ambos se empezaron a mover lentamente por el campo

- Ok., y por dónde anda mi maestro? – peguntó Seiya mirando por el campo de batalla

- No lo se – dijo Shun imitándolo, la última vez que lo vio escoltaban a Eris ante Atena

- Oye, y quién te dijo a ti que tu también ibas? – Ikky se adelantó al ver que Radamantys los seguía

- Ikky… - Shun advirtió a su hermano, Seiya no estaba como para escenas pero eso a Ikky parecía no importarle

- Ikky nada, a qué va este idiota con ustedes?  - reclamó muy molesto el poderoso Fénix señalando a Radamantys que solo sonrió muy divertido y se cruzó de brazos

- Yo voy adonde su alteza vaya – respondió el rubio serenamente

- Su alteza?, qué demonios es eso?, algún juego erótico que ustedes juegan o qué? – Ikky estaba cansado de todo esto, no entendía lo que estaba pasando y estaba muy molesto

- Ikky… cállate – dijo Seiya, se le notaba el cansancio por la situación en la que estaban y miró a su ex y suspiró

- Y por eso me cambiaste? – insistió el Fénix

- Yo no te cambié por nadie y sabes qué??, ya me cansé de discutir contigo por el mismo tema, eso ahora es punto muerto

- Te vas a casar con ese esperpento o algo así? – Radamantys solo sonrió mas pronunciadamente sin perder su postura, él quería ver y de primera mano la cara del Fénix cuando se entere que Seiya era el prometido de su señor Hades

- No…, bueno… con él no es con quien me voy a casar – explicó Seiya, Ikky abrió mucho los ojos al escuchar esto

- Y con quién rayos te vas a casar entonces?

- A ti que te importa con quien me case o no? – Ikky tenía una facilidad única de hacer enojar a Seiya y ahora ambos ya se iban de palabras y los ánimos se empezaban a caldear

- Disculpe su alteza… mi señor me mandó a buscarlo, le pide que lo acompañe en el salón del Patriarca del Templo de la Diosa Atena – Minos había llegado de improviso e interrumpió la escena, aunque arqueó una ceja y miró a Radamantys que solo meneó la cabeza divertido

- Gracias Minos – dijo Seiya

- Y para qué rayos???, qué mierda está pasando?? – Ikky miraba de un espectro a otro y luego a Seiya que solo suspiró y meneó la cabeza una vez mas

- Ikky… es Hades… no lo vez?, Hades es el novio de Seiya o me equivoco? – Shun explicó al darse cuenta de la situación, el castaño solo asintió pero a Ikky casi le da un infarto ahí mismo, se adelantó para tratar de tomar del Brazo a Seiya pero Radamantys le salió al paso y se paró frente a Seiya una vez mas, Ikky al ver la posición defensiva del primer juez y al darse cuenta que tenía la batalla perdida respiró profundamente tratando de tranquilizarce

- Cómo puedes estar con ese imbécil? – al Fénix le faltaba poco para reventar, cómo diablos fue su castaño a parar con Hades??, pero su tono era bajo, Seiya rodeó a Radamantys para enfrentar a Ikky, esto pasaría tarde o temprano

- Preferías a Rada entonces? – dijo Seiya señalando al primer Juez que sonrió con mas ganas

- Claro que no…

- Mira Ikky ya déjalo así, yo ahora estoy con Hades y me voy a casar con él, ya me lo propuso y yo ya acepté, por eso ya llevo esta armadura que es una réplica de la suya, ya renuncié a la de bronce de Pegaso, ya renuncié al servicio de Atena, yo… pertenezco al Inframundo ahora

- Cómo que perteneces al Inframundo??, estás loco o qué??

- No… no estoy loco, hay cosas que no sabes y no entiendes, yo tengo lazos muy fuertes que me unen a Hades, el Inframundo es mi nuevo hogar ahora – Seiya hablaba con mucha seriedad y convicción, Radamantys solo sonreía complacido, su señor se alegraría mucho cuando se lo contara, el ex – caballero de Atena al parecer ya se había hecho a la idea del trono en el Averno, Perséfone nunca lo hizo

- Tu no puedes hacer eso – Ikky reclamó con rabia apretando sus puños

- Yo puedo hacer con mi vida lo que yo quiera, amo a Hades y me voy a ir a vivir con él, si no te gusta pues es muy tu problema, igual te voy a invitar a mi boda y mas te vale no armar escándalos

- Wow… Seiya… - dijo Shun, aún no podía creer lo que estaba pasando, Seiya y Hades???, bueno… eso tenía mas sentido que Radamantys, o no?

- Luego hablamos, voy a ver para que me mandó a llamar Hades – Seiya tomó el brazo de Minos y ambos desaparecieron rumbo al Templo Principal

 

***

En la sala del Patriarca Ares ya no estaba encadenado, Eris tampoco, todas las partes habían cedido en algo y habían llegado al acuerdo de que ahora lo que necesitaban era conversar calmadamente aunque eso sería muy difícil porque Ares estaba al borde de explotar de la furia que sentía, Hades había jugado con él, todo era un truco, los sapuris que se despedazaron… la formación de batalla en donde los mas protegidos eran los espectros y por eso el Inframundo no tenía bajas que lamentar y cuando las cosas se voltearon los ejércitos de Hades estaban en la mejor posición para acabar de acorralar a los sobrevivientes de su ejército… la lanza de Hefesto en manos de ese niño… la daga con la que mató a sus hijos… y el engaño, el caballero de Atena era el consorte de Hades, eso no se lo vio venir… nadie lo vio venir…

 

- Muy bien… Ares… estamos esperando, habla de una buena vez o una vasija que tiene tu nombre grabado te estará esperando en el tártaro – amenazó Hades, él quería llegar al fondo de todo esto, quería saber por qué lastimaron a su niño y quería saber el súbito interés de Ares en la tierra

- Qué quieres que te diga? – dijo el Dios de la Guerra evadiendo el tema por enésima vez

- Quién te ayudó? – insistió el Dios de los muertos, la paciencia no era una de sus virtudes

- Apolo – el Dios de la Guerra se encogió de hombros y sonrió

- Aparte de Apolo, quién ayudó a burlar mis defensas en el tártaro para liberar a Eris?, a Deimos y Fobos los liberaste tu mismo y con anterioridad verdad?

- Si… yo liberé a mis hijos, y de saber lo que pasaría no lo hubiera hecho – dijo Ares y miró con rabia al Dios de los muertos que al recordar a Seiya y su manejo de la daga sonrió

- Toda consecuencia tiene una causa, pero eso no es lo importante ahora, ya dime… quién fue?, quién te ayudó?

- Lo siento Hades, esto es mas fuerte que tu o que yo

- A qué te refieres??

- Se refiere a mi… por supuesto – la puerta del sagrado recinto se abrió y dio paso a una voz femenina y autoritaria que llenó el salón y se ganó las miradas de todos al caminar con gracia hacia donde estaban los Dioses reunidos

- Hera… - Hades se puso y de pie y entrecerró los ojos, qué tenía que ver la esposa de Zeus en todo esto?

- A quién esperabas, a Zeus?? – dijo la Diosa con una sonrisa torcida y tomó asiento en el lugar que le cedió el Patriarca Shion

- No sabía a quien esperar – dijo Hades sentándose también para continuar con la conversación que estaban teniendo

- Bueno… ya estamos aquí, Apolo me dijo que mi presencia era requerida

- Hera… pero por qué?, por qué atacar la Tierra? – Atena preguntó algo confundida

- Y me lo preguntas querida?, tu sabes al igual que yo de la existencia de esa profecía, es mas tu me has ayudado a tomar medidas para evitar que se cumpla – dijo la Diosa del matrimonio con tono sereno

- De qué profecía están hablando? – Hades intervino, no le gustaba el rumbo de la conversación, cuando profecías estaban involucradas en las decisiones de los Dioses era usualmente una receta inequívoca para el desastre

- No Hera… - Saori miró a la Diosa con los ojos muy abiertos, pero Hera sonrió

- Ohhh… ya veo, tu no quieres que ellos se enteren de lo que has estado haciendo niña, lo siento, pero si todos querían hablar pues vamos a hablar

- Muy bien… de qué estamos hablando, con claridad Hera, déjate de rodeos – exigió Hades en tono sereno pero autoritario

- Hades… directo y al punto como siempre, bueno… todo esto empezó hace mas de tres años, exactamente fue una semana luego de la última guerra santa en la que el Caballero de Pegaso logró herirte, lo recuerdas?

- Claro que lo recuerdo… qué tiene eso que ver con esto?

- Todo querido, tiene todo que ver, una semana del ataque pasó y el oráculo de los Dioses hizo una profecía, se la hizo a la Diosa Atena que estaba en el Olympo rogando piedad para sus guerreros heridos y la restitución de las vidas perdidas, lo curioso fue que la profecía se dijo cuando ambas estábamos en el jardín de mi templo y solo nosotras fuimos testigos de ello

- Ah si? – esto Hades no lo había escuchado antes y era muy extraño, las profecías tienen la facilidad de colarse en las conversaciones y siempre eran voz pópuli en tiempo record

- Este fue uno de esos casos en los que preferimos mantener la prudencia y no dijimos nada al respecto, mantuvimos la profecía en secreto por todo lo que implicaba – explicó la Diosa al ver la cara de confusión de Hades

- A qué te refieres?

- Me refiero al futuro de todos nosotros, cuántas veces lo hemos hablado?..., la era de los Dioses… la era dorada de nuestra existencia casi se ha extinto, la humanidad ya no nos recuerda y la mayoría cree que somos simples mitos… leyendas, meras historias en las que nadie cree ya o se las toma en serio siquiera, nuestra influencia en la humanidad es cada vez menor, todo lo que era importante para nosotros poco a poco ha ido desapareciendo en las arenas del tiempo

- Y eso que tiene que ver con todo esto? – Hades estaba impaciente en este punto

- Bueno, yo creo que para que entiendas la seriedad del asunto deberías oír la profecía entera

- Hera… no… - Saori miraba con temor a todos los de la sala, ella no estaba orgullosa de lo que había hecho pero tenía que hacerse, la decisión le había costado mucho pero lo hecho… hecho está

- Lo quieres seguir ocultando querida?, a mi ya no me importa, las infidelidades de mi esposo son legendarias al igual que todos sus bastardos, pero no iba a dejar que uno de esos niños destruyera lo que queda de nuestro modo de vida

- Hay un niño involucrado en todo esto?

- Hades… siempre hay un niño involucrado en las profecías, sin duda hijo de mi esposo, por lo menos es lo que Atena y yo pensamos, la profecía involucra el futuro de la tierra por eso no lo podíamos dejar al destino y teníamos que hacer lo posible para evitar el nacimiento de la criatura, esta vez por lo menos tuvimos algo de ayuda y pudimos identificar a la futura madre y la escondimos para que mi esposo no pueda poner sus manos encima, es una chica hermosa para ser mortal

- La escondieron?... Seika… - Hades al entender por donde iba el asunto regresó a ver a Saori que bajó la cabeza

- La conoces Hades?

- Es la hermana de Seiya de Pegaso, así que ustedes la escondieron hace mas de tres años, por eso su hermano no ha podido hallarla

- Ni la hallará nunca, ella está segura en donde nadie la puede tocar, pero el problema se dio porque no reparamos en ese jovencito, en su hermano, no me di cuenta del riesgo hasta que lo encontré en brazos de mi esposo en los jardines del Olympo en medio de las reuniones, llegué a tiempo para impedir que las cosas se salieran de control – se podía notar la molestia de la Diosa al recordar aquel encuentro del que el mismo Zeus le había contado a Hades en el Olympo, los celos y la furia de Hera también eran legendarias

- Y por eso declaraste la guerra?, por qué hacer todo esto??, por qué involucrar a tantas personas??, por qué dejar que tantas vidas inocentes se perdieran? – Hades estaba indignado

- No podía dejar que el ataque al caballero aquel se rastree de vuelta a mi, no quería dejar ver mi mano en este asunto aunque eso querido, tu… lo hiciste imposible, pero en este punto ya no importa – dijo la Diosa restándole importancia a todo el asunto

- No lo puedo creer – suspiró Saori, ella si pensaba que algo así podría haber pasado pero no se había atrevido a decir sus sospechas porque hubiera tenido que hablar de la profecía en primer lugar y eso era algo que no estaba dispuesta a hacer, ahora ya todo se había descubierto…

- Yo solo quería muerto al caballero de Pegaso, tu sabes… desaparecer la tentación, pero nunca pensé que estaría tan bien protegido, Atena cuida y muy bien a todos sus caballeros y luego el muchacho también contaba con la protección del Inframundo, esto era extraño pero no inusual cuando a mis oídos llegó la noticia de que el muchachito en cuestión era el amante de uno de tus jueces, del mas poderoso de los tres

- Si ya sabías que Seiya era el amante de uno de mis jueces y que por lo tanto ya no le sería tan apetecible a tu esposo por qué liberaste a Eris?, por qué continuar con todo esto?

- Atena… por qué no lo explicas querida?... no? – la Diosa del matrimonio aparentemente disfrutaba el poner en evidencia a Saori que en este punto no sabía que hacer

- Hera… por favor… - suplicó la joven

- Está bien… lo explicaré yo, mi esposo llegó al punto de obsesionarse con el caballero de Pegaso, él decía que yo se lo quité de las manos esa noche por lo que bajaba a la tierra frecuentemente cada que tenía oportunidad para tratar de raptarlo y hacerlo suyo, no tengo que decirles cuanto le gusta hacer eso pero yo nunca me descuidé y lo tenía muy bien vigilado, afortunadamente Zeus nunca pudo acercarse lo suficiente, yo no iba a permitir que en este punto mi esposo siga revolcándose con cuanto humano se le apetezca además el muchachito nunca estaba solo, su amante o hasta la Diosa Hécate siempre lo acompañaron cuando no estaba dentro del Santuario de Atena o en Guidecca y mi esposo nunca pudo cumplir su cometido, además dejó de intentarlo cuando se dio cuenta que yo lo quería matar, pero yo no iba a desistir así que me pareció una mejor idea ya que Atena no me quería enviar la cabeza de su guerrero como yo se lo había pedido, buscar a alguien que si lo hiciera

- Eris… - ahora Hades entendía las razones de la liberación de la Diosa de la discordia, Hera solamente miró a Hades y asintió

- Con ella el ataque tomó forma, ella convenció a Ares que no estaba seguro de participar, él había liberado a sus hijos pero eso no fue planeado para esto, eso fue una coincidencia, su liberación no tenía un propósito en específico, pero siempre son útiles para una batalla, Eris me dio la idea y solo ella conocía mi real intención de acabar con ese jovencito, ella ayudó con todo la verdad…

- Por eso lo secuestraste, por eso lo torturaron Deimos y Fobos – Hades no podía creer lo mezquinos que podían llegar a ser los Dioses, Zeus encaprichado con Seiya y Hera por sus celos casi le cuesta la vida de su futuro esposo y de su hijo

- No… eso fue un pequeño juego hasta que yo llegara, al muchacho no lo pudimos matar por mas que quisimos, tenía una especie de aura que lo protegía, no nos lo explicamos hasta ahora, y luego escapó, aún no sabemos cómo – dijo Hera recordando el incidente, Deimos y Fobos no sabían la participación de Hera en todo, solo Eris había estado presente cuando la Diosa intentó asesinar a Seiya, pero todos sus intentos fueron fallidos, Seiya en ese tiempo ya estaba bloqueado por eso no lo recordaba, su bebé lo había protegido de todo

- Hoy estaba en el campo de batalla y mató a mis dos hijos, pregúntale a Hades la razón, que él mismo te lo diga, si te lo digo yo no me lo creerías – intervino Ares con furia

- Cómo llegó el caballero de Pegaso al campo de batalla Hades? – esto Hera no se lo vio venir, ella no sabía que había pasado con él, si estaba intrigada pero no era su principal preocupación ni mucho menos

- Bueno… en primer lugar Seiya ya no es el caballero de bronce Pegaso que sirve a Atena, ha renunciado a su alianza al Santuario y ahora pertenece al Inframundo, Seiya es el nuevo príncipe del Averno, mi consorte…

- No es tu consorte aún – dijo Ares con furia

- Pronto lo será, que de eso no te quepa la menor duda – Hades miró con furia a Ares, el Dios de la Guerra estaba dolido por todo y necesitaba desquitarse con alguien pero Hades no se iba a dejar intimidar y menos por él

- Qué??? – Saori no lo podía creer, miraba a Hades con los ojos muy abiertos, su labio inferior temblaba y se llevó una mano al pecho, la sorpresa fue devastadora, Hades la miró y sonrió

- Como lo oyes Atena, hubo un pequeño mal entendido con respecto a mi primer Juez, Radamantys es simplemente el guardián de mi príncipe, por eso siempre estaban juntos – dijo Hades sonriendo mas pronunciadamente, él quería ver la cara de Atena cuando se descubriera todo y la espera valió la pena a su criterio

- No puede ser – susurró la muchacha que aún no podía aceptar lo que estaba pasando, a qué hora Seiya se había relacionado con Hades??, cómo fue que paso??

- Vaya… eso explica el cambio de eventos de esta mañana en el campo de batalla, pero si es tu consorte no debería estar aquí? – dijo Hera con calma

- Lo mandaré llamar, estoy seguro que querrá escuchar con sus propios oídos sobre la desaparición de su hermana

 

Saori lucía pálida, en los momentos que siguieron un silencio invadió la sala, la joven Diosa de la Tierra no podía creer que Seiya la hubiera engañado de esa manera al igual que Hades, si esa mañana en Guidecca, cuando ella bajó al Averno y rápidamente se puso de acuerdo con el Dios de los muertos en fingir un rompimiento entre el Santuario y el Inframundo para infiltrarse en las filas enemigas, Hades nunca le dijo nada, es mas… le dijo que él hacía todo eso por su guerrero… que Radamantys era una pieza escencial en el Inframundo y si Seiya era alguien importante para su primer juez pues era persona de interés para el Inframundo entero, cómo la engañaron así??, cómo??

 

Hades había llamado a Minos y mandó a traer a Seiya, cuando el Juez del Inframundo entró con el joven castaño hubo un murmullo entre los presentes, Hades se puso de pie y materializó una silla junto a él la que señaló a Seiya y el joven castaño se sentó mirando a los presentes que le devolvían la mirada con curiosidad, el silencio que cayó en el salón era tenso y fue roto por Hades

 

- Muy bien, ahora que ya estamos todos me podrían explicar de una buena vez en dónde está la hermana de mi consorte – ante las palabras de Hades, Seiya se tensó y apretó la mano del Dios de los muertos que la apretó de vuelta

- Ella está en el Olympo por supuesto, esos fueron los deseos de Atena – dijo Hera maliciosamente

- Saori… tu… - Seiya abrió mucho los ojos y miró a su Diosa con dolor

- Lo siento Seiya… tenía que hacerse – dijo Saori con la frente en alto, ella defendería su posición, no podía sacrificar al planeta entero por la hermana de su caballero, por mas fiel que este le haya sido

- Pero por qué? – a Seiya se le comprimió el corazón, todos estos años su Diosa, su amiga lo había visto sufrir buscando a su hermana, cuando ella tenía la respuesta al alcance de su mano

- La profecía es muy clara, ella representa un riesgo que no podemos tomar – continuó Saori muy seria

- Qué profecía?

- Bueno… yo creo que es el momento que todos la escuchen – dijo Hera y todos asintieron

 

Hera se puso de pie y agitó su mano, creó una imagen que salió de una humareda blanca, esto Seiya había visto hacer a Hades, Deios y Fobos, ahí se fue formando la imagen de un templo, en el medio estaba una muchacha que vestía una túnica blanca, parecía que estaba en trance, a su alrededor en un jardín muy hermoso estaban sentadas en la hierba hablando la propia Hera y Saori, de repente la muchacha se puso rígida, echó su cabeza para atrás y empezó a hablar con una voz profunda que no parecía ser la propia y dijo:

 

Aquel con el poder de unir y dominar a todos los reinos se acerca

Nacerá de sangre guerrera, valiente y leal signada por las estrellas

El caballo extenderá sus alas en el firmamento y brillará con fuerza

Cuando se marque el destino del alma elegida por su pureza

Que se entregará voluntaria y completamente a la divinidad mientras busca su camino

Y así asegurará que su fruto posea los talentos y poderes con los que una nueva era dará inicio

El cielo y el infierno temblarán y se postrarán ante el poder del heredero

Que con mano de hierro y sabiduría dirigirá la nueva era del hombre en los años venideros

Aquel con el poder de unir y dominar a todos los reinos… llegará sin remedio

Cuando el cielo se ilumine con un arcoíris de fuego 

 

- Y el resto ya lo saben, al analizar detenidamente la profecía llegamos a la conclusión de que la madre de la criatura debía tener relación con la constelación del Pegaso, quién mejor que la hermana del caballero de bronce en cuestión, así que la tomamos del hospital en donde estaba, ella te estaba cuidando mientras estabas inconsciente por eso cuando despertaste ella ya no estaba contigo, decidimos que era lo mejor para la humanidad, no podíamos permitir que la profecía se cumpliera, ese fue el deseo mío y de Atena – dijo Hera con una seguridad única, eso solo causó dolor en el joven caballero del cual la imagen de su Diosa se acaba de hacer añicos, hubo silencio en el salón por unos cuantos minutos en los que todos los presentes pudieron apreciar el peso de las palabras, cómo todo se relacionaba con Seiya o su familia y como el futuro cambiaría, inconscientemente Seiya llevó una mano a su vientre, se mareó y Hades tuvo que sostenerlo para que no se desplomara en el sillón, el joven estaba pálido de la indignación, toda su vida se había complicado por capricho de los Dioses, no… no de los Dioses, de su Diosa… de su amiga… cómo pudo hacerle esto???

 

Notas finales:

En el resumen yo puso escondidito por ahí que había una profecía que cambiará el destino de todos, bueno... pues ahí está, el encuentro mas esperado ya viene, será que Saori ya les dice a todos donde está Seika??, qué cara van a poner cuando sepan que el heredero ya viene en camino y pertenece al inframundo??, eso es el lunes

Muchas gracias por leer y comentar, saludos, bye


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