-¿No es hermoso, cariño?- decía una emocionada pelinegra.
-P-pero… ¿estás segura?- preguntó Thor muy impresionado, y asustado. Pensando posibilidades de CÓMO.
-Sí, al principio creí que era dolor de estomago- rió un poco avergonzada. Pero el rubio no estaba de bromas.- ¿no te agrada la idea?- su expresión era de preocupación.
-Me parece bien… -dijo no muy convencido. Sif era el terrorista árabe, y sus planes un edificio enorme.- ¿No estás enojada porque no llegué a comer los otros días?- Al parecer la pregunta cayó también de sorpresa para Sif.
-No, claro que no, entiendo perfectamente que sea parte de tu trabajo- Bueno, en parte sonaba comprensiva pero se notaba enojo. Ya no quiso darle vueltas al asunto- ¿y sí nos vamos a dormir y mañana le damos la noticia a tu padre?-
-¡NO!... quiero decir… esperemos un poco- rió nervioso con una mano detrás de la nuca- por ahora, tengo sueño- fingió un bostezo mientras se acercaba a su cama- hasta mañana-
---------Nuevo día en Colegio Stark (todo ahí.__.)--------
-No… cuelga tú- Kenan sonreía mientras jugaba con un mechón de su cabello- Ay, tú primero- soltó una leve risa. Pero su coqueteo terminó cuando un muy alterado rubio entró a la oficina que compartían.- Bocazas, nos vemos en la tarde- terminando su llamada- WOW, WOW… ¿¡Qué pasa, princesa!?
Thor comenzó a balbucear unas cosas que tal vez ni él entendía, deben ser de su lugar natal. Kenan lo más sensato que pudo hacer, fue levantarse de su silla, acercarse al rubio mientras lo sostenía de los hombros y darle una bofetada que sonó por todo el lugar.
El mayor miraba con miedo a su compañera, pero después dejó caer sus hombros indicando que se calmó. Eso y que también no lo volviera a hacer.
-Lo siento, era necesario- El otro asintió, y suspiró.
-Sif no está molesta por no haber llegado a comer… Pero, uh, ¡AAHH! – no terminó, se tomó sus cabellos y comenzó a jalárselos. La castaña sorprendida lo tomó fuerte de las manos y así calmó un poco a su compañero.
-Tranquilo, vamos por partes- Lo sentó en su silla, y con sus manos lo peinaba intentando tranquilizarlo- tranquilo... Desde el comienzo. Sif no está molesta- Thor movía de arriba abajo su cabeza.
-Bueno… me dijo que, ella… ella está embarazada. ¿Sabes lo que significa eso?- Kenan abrió los ojos, es mujer está loca, justo ella misma aseguró que no tenía encuentros íntimos con Thor hacía mucho.
-Ah… Será más difícil cortar con ella… Tu padre Odín te obligará a casarte con ella ¿cierto?-
-Sí, lamentablemente sí. Soy un idiota, ¡debí haber terminado mi relación hace mucho!- El rubio estaba que explotaba en rabia. –Aún no entiendo cómo.
-Tal vez, por ahora actúa cómo si estuvieras emocionado. Es lindo, un ser nacerá, al menos hazlo por la o el niño que nazca- Le dedicó una sonrisa.
-De acuerdo. Lo haré.-
-----En horas de Clase------
-Y esos son prototipos textuales…-Kenan cerró su libro- Antes de que los deje ir cobardemente, ¿algún valiente en contarme un chiste? Si no me hacen reír los dejaré salir hasta que suene.
-¡Yo!- Un muchacho rubio levantaba la mano. Qué valiente.
-¿Sí, Sr. Thompson?- La maestra Kindemann estaba un poco harta que sea el que siempre se quiere hacer el gracioso, pero no tuvo de otra.
-Era una pata que tenia 5 patos y no sabía cómo llamarlas y las empieza a nombrar:
Pata, Peta, Pita, Pota y la última patita le dice "¡Yo María Clara, mamá, María Clara!"- El típico abucheo de Buuuuh-
-Pft… cof, ya… ya pueden salir- Decía incrédula la castaña.
Los alumnos salían tranquilamente, aún faltaban 15 minutos para el timbre. Soy buena persona, pensaba Kenan. Pero una discusión entre susurros y gritos le llamó la atención, provenía de Loki y su amiguita… no, su novia, Morticia… no. Barbie, no. ¡Amora!
-¡Loki, no me puedes hacer esto!- exclamaba la mujer.
-Amora… lo siento, en verdad. Pero esto no está funcionando- El pelinegro intentaba controlar a su compañera.
-Ah… ¿y quién es? ¿Ella es más linda, no?- Kenan se daba una idea. Pues claro, Loki hace su parte terminando con su novia. Tiene sentido, pero sí supiera que no es linda, sino, lindo. Desfallecería.
-No, no es por alguien más. Sólo que me di cuenta que ahora no quiero estar en alguna relación- Amora muy molesta salió de ahí, dejando al pelinegro un poco confundido, pero aliviado de que al fin estaría libre.
-¿Todo bien?- La maestra lo sacó de sus pensamientos.
-S-sí… ¿y ese anillo?- preguntó curioso y un poco divertido.
-¿Qué…? ¡OH! Bueno, me lo regalaron…- Rió un poco apenada- Hey, no le diré a nadie sobre lo de ti y el profesor Odínson- le guiñó un ojo a Loki.
-Eheheh. Gracias, hasta mañana- se despidió para salir de ahí.
-La juventud… - Kenan comenzó a divagar en su mente, hasta que un golpe en la ventana le llamó la atención –PERO QUE MIER…- se sobresaltó en su asiento.- ¿Wade?- El mercenario la saludaba desde afuera intentando sostenerse de la ventana. Casi por instinto corrió directo a abrirla- ¿Puedes explicar que carajos haces aquí? Creo que deberías estar trabajando…
-¡Quise darle una visita a Kenan! Terminé mi encargo temprano y este lugar educativo quedaba cerca- Le cayó encima a la menor, en una abrazo.
-¡Quítate! Casi me rompes la espalda, idiota- Kenan dejó de forcejear. Y suspiró resignada. Wade miraba a la de ojos verdes.- ¿Qué me ves? – preguntó un poco amargada.
-Kenan tuvo razón en dejarme… - Dijo sin apartar la vista.
-¿Ahora qué estás diciendo?…- El mercenario no respondió, y sólo soltó a Kenan. Subió en la ventana y moviendo la mano se despidió. La castaña estaba demasiado confundida. Loco.
-------Con Thor y Loki después de Clases-----
-Entonces su plan es… ¿casarse con su pareja Sif?- el pelinegro intentaba entender lo que planeaba Thor- Y cuando su hijo nazca se separará de ella…
-Muy bien Loki, es exactamente lo que pensé- dijo dándole palmadas al menor- Aunque hay algo que aún no me cuadra del todo, y es cómo… Ah, no importa… ¿Tienes tarea? ¿Algo en lo que pueda ayudar?- el otro negó con la cabeza. Miró su celular- Yo… ya debo irme. Parece que Sif está preocupada. Nos vemos mañana- Le dio un beso cerca de los labios al pelinegro.
-Nos vemos-
Thor ya casi llegaba a su casa, pero antes como buen gesto fue a un lugar de comida rápida a comprar unas hamburguesas. Tres por si acaso. Cuatro de ser necesarias.
La pelinegra no paraba de mirar el reloj, faltando un par de minutos, salió corriendo al baño, metiéndose un dedo a la garganta, provocándose vómito instantáneo. El rubio entró gritándolo, pero viendo que nadie respondió, se preocupó un poco, pero escuchó a alguien en el baño debe ser ella. En efecto, y estaba vomitando…
-¡Sif! ¿Estás bien?- Dijo agachándose para recoger unos cabellos que se le pegaban en la boca a la mujer.
-Sí, Thor. Leí que esto es normal… - El rubio miraba horrorizado la escena, agradeciendo de no haber sido mujer.
---------2 Semanas después--------
-Bien muchachote, what happens in this fucking day!? – Una mujer castaña de ojos verdes arreglaba el cabello de su amigo.
-Propondré matrimonio…- decía un rubio no muy convencido.
-No te escuché… ¿qué demonios dijiste?- preguntaba cómo si estuvieran en medio de una guerra-
-¿qué fumaste?- Thor estaba un poco nervioso-
-Uh, sólo un cigarrillo, además veía The Hurt Locker, he-he. Bueno, ve por ella tigre.- Dándole una palmada en la espalda intentaba animarlo.
-Um… Bien- salió de la casa de Kenan para subir en el automóvil y dirigirse a recoger a Sif. Llegando a su destino, bajó y se acercó a la puerta, tocó tranquilamente con su nudillo. Salió la pelinegra con un vestido rojo entallado y con escote de corazón.-… ¿Lista? -
-Siempre- le sonrió pícaramente y juntos se fueron.
En el restaurante Sif tocaba en veces su estomago, dónde no había nada.
-Tengo un mal presentimiento…- Decía una mujer rubia.
-¿Sobre qué, Kenan?- preguntó un hombre pelirrojo y con lentes oscuros.
-¡Shh! Matt, llámame Kenya, es mi nombre secreto- Mientras decía eso, veía el menú- Muy caro… no, ¿enserio comen eso?, no. -
-¿Era también necesaria la peluca?- Kenan… digo, Kenya se sorprendía mucho sobre lo que su amigo podría saber sin ver.
-Valla, sí, lo es.-
-
-Me alegra que estemos aquí, cumpliendo un año más, quién lo diría ¿no?- Sif decía emocionada y sin poder creerlo, mientras sostenía una copa con champaña en su mano.
-Sí, he-he. ¿Cómo te sientes? – Quería saber, ser parte del proceso.
-Me siento bien, aunque hay veces en que me siento un poco mareada.-
Después de intercambiar unas palabras más siguieron comiendo. Hasta que Sif tuvo que ir a empolvarse la nariz. Fue cuando Kenya entró en acción.
-Matt, ya vuelvo, esta misión es de vida o muerte. Tin, tin, tiin… tururuuu….-
-Vio Misión Imposible- suspiró, y aprovechó que su amiga no estaba para robarle un brócoli.
Dentro del Tocador Kenya fingió que entraba a un baño a hacer sus necesidades. Mientras veía por un espacio (bastante amplio, están muy bien hechos, ppft) a la mujer de cabello negro viéndose por el espejo. Susurraba un par de cosas, pero lo que más le sorprendió fue que se desabrochó el vestido y traía papel higiénico en la zona de la barriga. Pero qué demonios.
La mujer del vestido rojo dio un gran respiro, para después tomar papel nuevo y ponerlo otra vez en el mismo lugar. Se aseguró que nadie la estuviera observando, y salió de ahí.