Había recibido una llama de quien me había entrevistado en mi trabajo de medio tiempo. Por algunos problemas internos de la empresa, las oficinas estarían cerradas el próximo mes; el me dijo que me llamaría de nuevo para decirme cuando presentarme.
La verdad eso no lo vi más que una perdida de tiempo. Y de una buena oportunidad.
Para mi desgracia, ese no era el único problema que traía en la cabeza.
Ya hacia dos días que le había dado a Madara la nota del prefecto, pero no lograba que la firmara nuestro tutor. Sin dejar de lado que El cumplí lo que me dijo. Desde nuestro encuentro sexual, me visitaba en mi habitación, pasadas las 3am, después de que el llegaba de su trabajo. Con su llave habría la puerta de mi cuarto, caminaba lentamente a mi cama donde fingía dormir, escuchaba su respiración tan tranquila, y sus pazos firmes…mantenían mis ojos cerrados, pero sentía su mirada fija en mí.
Tenia la costumbre de dormir con mi ropa interior y una camisa sin mangas. Escabullía su mano debajo de la sabana, acariciando mi pierna. Era una sensación extraña, su mano tenia callos, pero su caricia hacia estremecerme, trataba de mantener mi respiración lo mas tranquila sensible, esa mano subía con una lentitud que odiaba.
-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o
Era algo tortuoso, el verlo en casa por las mañanas, en el colegio y por las noches en las cuales le arrancaba exquisitos jadeos y gemidos.
Entrar a escondidas a su habitación, acariciar sus piernas y sentir bajo mi mano como se erizaba su suave piel al paso de esta. Pasar por sus muslos, llegar a su ingle y después a su entrepierna. Palpando su joven miembro que rápidamente despertaba.
-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o
Odiaba que mi cuerpo fuera tan sensible, unas cuantas caricias y ya estaba excitado. Y El seguía torturándome con sus toques tan leves y lentos.
La ropa interior ya me estaba molestando, Madara al notar que mi bóxer ya estaba húmedo por mi lubricante decidió sacar mi pene de su prisión y tocarlo con mas libertad. ¿Cómo sabia tan bien donde tocarme? Me empezó a costar fingir estar dormido y mantener mi respiración.
Mi pecho subía y bajaba cada vez mas rápido, mis labios sestaban entreabiertos...y Madara…disfrutaba verme así.
-Aah! –gemí sin poderlo evitar, alce la cabeza y el ya me la estaba chupando como si de un dulce se tratara. Subía y bajaba dejándome ver como mi mimbro de bañaba de su cálida saliva. – aah…-volví a gemir un poco mas alto a lo que inmediatamente lleve mi mano a mi boca, una succión bastante fuerte me lo había sacado. –
-¿Qué pasa, primo? -dijo con su voz tan grabe y mostrándome sus dientes con una sonrisa bastante sensual. Estaba a la altura de mi pene masturbándome con rapidez-
-N-No hagas eso…aah… -deje caer la cabeza en la cama de nuevo- Madara… -sentía un calor enorme y era mas que obvio que mi cara estaba roja, gire la cabeza a la ventana y el reflejo me dejo ver a Madara ente mis piernas que estaba flexionadas…- aah..Aah… me...me correré… aah –ignoro lo que le decía el estaba concentrado en comer mi sexo, las lamidas se intensificaron y la presión que hacia con su paladar y lengua me volvía loco- AAH!! –me vine en su boca manchándolo un poco…me constaba respirar-
-Mmm… que rápido… -se burlo de mi, limpiándose un poco el semen que se logro escapar. Acostándose a mi lado, me tomo del rostro besándome.
-mmg…le correspondí torpemente el beso. Tuve algunas novias, pero no era lo mismo, ahí yo mandaba y las besaba como yo sabia, pero Madara estaba más experimentado y no podía seguirle el ritmo-
-Sera mejor que me valla, a un no termino mi tarea. –Se sentó en la orilla de la cama-
-Am... Espera… duerme aquí… -le sujete la ropa se giro y me sonrió dándome un beso en la frente–
- sabes que no puedo, un día de estos lo are… ya veras…
-Madara….la…nota…-dije algo nervioso-
-Cierto… te la daré mañana por la tarde en el colegio, ¿de acuerdo…? –me dijo sonriendo y se fue-
Me tumbe e la cama algo cansado por el reciente orgasmo, cubriéndome con una sabana y tapando mi cabeza con mis brazos…empecé a pensar en lo que me hacia sentir Madara cada que lo miraba.
-¿Acaso…me estaré enamorando? –Sentí una punzada en el pecho- No…. Yo no siento eso…
Al día siguiente, Todo normal, Izuna y yo preparamos el desayuno. Madara bajo al ultimo como siempre…pero hubo algo que me incomodo mientras almorzábamos los 4…
Madara no dejaba de ver a Izuna, y no solo eso, le limpiaba la cara cuando se manchaba al comer y le acariciaba constantemente; eso…era realmente molesto, que tenían que hacer eso todo el tiempo, es como si Izuna dependiera de Madara.
Lleno al colegio no fue la excepción. Caminaban uno al lado del otro, Reían todo el tiempo, sus rostros siempre estaña a escasos centímetro….AAG! ¿Por que me molestaba tanto? Trataba de no verlos, pero era inevitable. Sasuke, caminaba al lado de su novia May… y ni al caso al mundo le hacia, estaba solo, viendo eso.
-¡Con permiso! -¿Qué había hecho? Me atravesé por en medio de los dos y los empuje, Que me pasa, no soy así. -
Al pasar las clases trate de ignorar lo más que pude lo sucedido en la mañana. Clases normales, Socializar con Izuna, que no se por que me dan ganas de darle un golpe. Sonó el timbre de el almuerzo, le dije a Izuna que necesitaba ir al baño, pero en realidad lo que no quería era caminar a un lado de el. Para mi mala suerte antes de llegar me encontré con el Prefecto…
-Hola Itachi-chan….-me dijo sonriendo de lado y parándose frente mío.-
-“Chan…“-pensé en la forma tan linda de llamarme. Tenía poco menos de un día que me había empezado a llamar a si- Buenos Días… -conteste y trate de avanzar a mi destino-
-Oh… espera –puso su brazo- Que hay de la nota, te la di hace casi una semana….
-¿Así? Bueno, como no me dijo para cuando la quería...
Me empujo contra la pared. Todos los estudiantes estaban saliendo de sus aulas, así que era normal ser empujado, sin embargo no por un Prefecto.
- Mira niño…-se acomodo los lentes- Tienes asta mañana para entregarme esa nota. O la siguiente será enviada a tu casa a nombre de tu Tutor…. Entiendes….?
- Si señor… -le dije mirando en otra dirección-
Se fue y ahora si me fui al baño, ese tipo se la pasaba molestándome y ya me estaba hartando.
- Te ves cansado.
Escuche una voz detrás de mi y al dar la vuelta Madara estaba poniendo seguro a la puerta de los baños.
- Madara… -Lo mire y el camino a mi-
- ¿No será por las desveladas de estos días?
- No… es solo que….el Prefecto ya me esta pidiendo la nota…
- Mmm ya veo…-paso su mano por mi cintura a cercándome a el-
- Madara, estamos en la escuela….-desvié la mirada, ,como es que me abrazaba con facilidad…a mi aun me costaba hablarle a diario-
- ¿Y? la puerta tiene llave, ya salieron todos al almuerzo, y le dije a Sasuke e Izuna que iríamos por refrescos…. –sonrió, maldita sonrisa sensual-
- Izuna… -sin verlo-
- ¿Qué pasa? …
- Nada…
- Oh, bueno, tendré que sacarte la verdad. –Camino aun conmigo en brazos arrinconándome en un cubículo –
- Madara ¡te estas pasando! –lo empuje pero era inútil, era mas alto que yo-
- Ya te dije que nadie vendrá, solo déjate querer y punto
Después de decirme eso, me beso a la fuerza, apretando con fuerza contra mis labios que fueron forzados por su lengua a abrirse. De ahí metió su mano por debajo de mi pantalón acariciando mis nalgas
- O-¡Olle! –me separe un poco-
- Tranquilo, ya es momento de que uses esta cosita…-dijo sonriendo y comenzó a rozar su dedo en mi ano-
- ¿Que? …pero…yo creí…
- ¿Creíste que solo tú te divertirías, primito…? En estos días en los que te eh visitado en tu habitación, eres el único que se corre…
- …Lo se, pero...no pensé… -lo mantenía alejado de mi con mis manos, sentía mi cara roja por lo que me estaba diciendo, así que ni lo miraba a la cara- …pensé, que algún día me pedirías que te regresara el mismo trato…..
- Bien, ahora que lo entiendes, te dolerá menos…-dijo susurrando cerca de mi oído-
Así, me beso de nuevo, cada ves subiendo de todo teníamos poco tiempo así que el bajo mis pantalones y comenzó a acariciar mi entrada…mi virginal entrada, a la ves que mi pena era estrujado por su mano, lo cual provoco mi orgasmo muy rápido.
- Date la vuelta… -me dijo mientras el también se masturbaba, su pene erguido salía por el zíper del pantalón, ni siquiera se los había bajado-
- N-no quiero que sea a si… -baje la cabeza-
- Es tu primera vez, ¿no? Me alaga quitarte tu virginidad… -se sentó en el retrete y me sentó, su miembro estaba entre mis piernas, al verlo me sonroje y lo acaricie timidamente-
- Venga haslo mejor….-mordió mi cuello, y comencé a usar mis dos manos –
Jadeaba en mi oído, y gemía de ves en cuando, poniendo todo mi cuerpo a temblar nada mas de oírlo. Yo me dedique a tratar de darle el mismo placer que el a mi, en esas noches que e visitaba, pero era mas que obvio que lo hacia muy torpemente. Después de unos minutos, empecé a tomar ritmo, y su pene se empezó a endurecer y ensanchar más. Me levito de la cadera y sentí como la punta de su pene ya húmeda y lubricada tocaba mi ano.
- E-¡espera! - me asuste-
- Sshh… -me tapo la boca- ¿Quieres que nos descubran?
- No, pero ya te dije que no lo quiero así…-mire a otro lado-
Me miro y alzo una ceja…
- Y como s supone lo aremos si en la casa están todos… -me tomo con fuerza del brazo- Así como yo te complací, así lo aras tu…
- Madara...
Lo siguiente no me lo imagine, de un jalón que me dio del brazo me volvió a sentar, estas ves sobre su pene, logrando que solo la cabeza entrara.
Abrí los ojos lo más que pude, ni siquiera grite, del dolor tan fuerte que había sentido por tan tosca penetración, solo escuche como mi grito se ahogaba.
- Tsk…-aun sujetándome con fuerza de las caderas, fue bajándome lentamente-
- A-¡¡Aah…!! –Casi al instante tapo mi boca- mmg!!! –no pude evitar que algunas lagrimas cayeran, mientras ese enorme pene entraba dentro mío. La sensación no de lo mas
Dolorosa… -
-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o
Tal como había pensado, Itachi era virgen, no le creía ya que lo mencionaba mucho, pero por dios esa sensación de sentir sus paredes internas abrirse a mi paso…Dios, casi me corro con solo la penetración. A los pocos segundos pequeños y delegados hilos de sangre mancharon mi pene, lo cual me éxito mas. Bajándolo asta que quede completamente dentro de el.
Solo contemplaba su cuerpo temblar de dolor, mientras yo le tapaba la boca. Era una posición realmente placentera, pero no miraba su cara.
- Ya se… -me puse de pie –
- Q-¿Que haces? – trato de no moverse por el dolor- Madara me duele, no te muevas… -no me miraba, pero puede notar como algunas lagrimas caían-
Sin hacerle caso camine asta los lavabos del baño
- Ahora si puedo ver tu cara. –Le dije empezando a envestirlo-
- Ah! Madara! … -Gemía tan lindo mi nombre, su cuerpo estaba tenso, pero poco a poco empezó a relajarse, dejándome entrar mas en el- Me…Duele…-bajo la cabeza y se sujeto del lavamanos-
- Pasara pronto… -Le sujete del cabello y le alza la cara, quería ver cada una de sus expresiones, sin perderme nada. -
- Aah…aah…aah…-se sostenía como podía del lavamanos, sus ojos estaban cerrados y algunas lágrimas aun salían, Sus mejillas completamente rojas. Hacia todo lo posible por no gemir alto- Aah…aah…M-Madara…aah…ya…ya no…puedo…
- Descuida, tenemos poco tiempo, así que seré rápido…-le dije sujetándolo de ambos brazos para jalarme mas hacia el. Seguí envistiendo sintiendo como golpeaba su próstata- aah...genial…
- Aah! –grito un poco, y después creo que mordió su labio- m-me corro…
Al oírlo, Salí de su interior y lo gire de frente, subiéndolo en el lavamanos y volviéndolo a penetrar.
- Ah! -cubrió su boca con ambas manos-
- Entonces aslo...-Lamí sus dedos, sujetando sus muslos –
- Aah…-descubrió su linda boca y me sigue el juego. Empecé a sentir como su entrada se contraía, mientras sus piernas temblaban corriéndose en mi mano-
- Mmg! –no aguante mucho, era una sensación única y también termine por venirme-
-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o
Lo abrace…tímidamente pase mis brazos por su cuello, acercándolo a mí. Como siempre su cuerpo era frio, pero no me importo par tratar de demostrarle un poco lo que sentía en ese momento.
Estaba agitado, me dolía mi espalda baja, pero había sido asombroso tenerlo dentro de mí. Nunca había pensado perder la virginidad con el. No es que me comportara como una chica, pero al menos tenia en mente algo especial.
A los pocos minutos, me correspondió el abrazo, sujetándome con fuerza de la cintura, pero con ternura.
- Madara…
- Vámonos, que después nos buscaran…
- …-no dije nada, solo asentí, sin soltarlo-
Acomodo mi ropa, se arreglo el y me ayudo a caminar al jardín donde estaban Izuna y mi hermano.
Lo que había pasado en e baño…me había hecho sentir mas tranquilo. Admito que sentí celos de la forma en la que Madara trata a Izuna…pero… eso seria incesto…Pfff, que idiota, si era lo mismo que yo estaba cometiendo.