Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

De finales que debieron ser felices por Angels_Clouds

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Un poco de inspiración dramática que me ha llegado esta mañana en clase de Francés... mientras no hacíamos nada (por suerte).

Espero que os guste y me digáis vuentra opinión. ^^

Estás sentado a su lado, mirando cómo sonríe a otro, viendo sus ojos iluminados y a ti se te remueve algo por dentro; celos, te carcomen por dentro y luchan por salir mientras tú aprietas los puños y los dientes, impidiendo que un grito de rabia escape y resuene en el silencio.

Te mira de soslayo, riéndose de ti. Sabe lo que sientes y piensas en ese momento y lo utiliza para burlarse de ti, vulnerable ante él.

Te levantas de la mesa, de golpe, con rapidez y catorce pares de ojos te miran sorprendidos. Te disculpas con torpeza y vas hacia el baño, huyendo de él y sus burlas silenciosas.

Duele, duele en lo más profundo de ti. Tus ojos se bañan en lágrimas retenidas durante meses. Lloras encerrado en el cubículo, liberando tu dolor, aquel que te tiene prisionero y te consume como una vela.

Sales cuando tus lágrimas frenan su caída, te sientes mejor —o peor— tus ojos enrojecidos se abren con sorpresa, él está ahí, apoyado en el lavamanos, con una sonrisa sarcástica en la cara; te mira con superioridad.

—Eres débil, hyung—te dice, usando su tono más frío y burlón en la última palabra, se acerca a ti y tu intentas ignorarle, pero no puedes. Algo en tu interior se ha roto aún más —si es eso posible— y sientes una opresión en el pecho, más fuerte y profundo.  —Sigue llorando—continúa. Tu corazón acelera mientras él se acerca a ti, hasta casi estar pegados.

Te acaricia la mejilla con su mano derecha, y escuece y quema el contacto de su piel contra la tuya, pero necesitas ese mínimo contacto y cierras los ojos y te dejas llevar, restregando tu cara en su mano.

Una risa te saca de tu ensimismamiento. Con un movimiento brusco te empuja, apartándote de él, riéndose de ti, mientras tú, estático, te quedas ahí, pegado a la puerta del baño, clavándote la manilla en la espalda.

Su risa te duele en lo más profundo y tus ojos lagrimean de nuevo, queriendo liberar  tu sufrimiento. Fijas tu mirada en él y no puedes evitar pensar que siempre se ve atractivo.

—Eres realmente patético—te dice, y su voz suena como si te odiara —No te diste cuenta, ¿no?— burla, de nuevo burla en sus palabras para ti, cómo echas de menos aquellos felices días a su lado, aquellos que ya no volverán. —Te utilicé—habla, clavando su mirada en ti. Esa declaración te duele más y destroza tu ya deshecho corazón del todo. —Me aproveché de ti y ni te enteraste. — y vuelve a reírse de ti, de tu cara desencajada por el dolor que sus palabras te causan.

Tratas de decir algo, pero tu garganta se cierra y sólo un lamento ahogado logra escapar. Las lágrimas regresan, con más fuerza y lo único que puedes hacer es salir corriendo, sin importarte los gritos del líder tras de ti, que te llama preocupado.

Corres tan rápido como puedes y no logras entender qué has hecho para merecer esto. Y no oyes, ni oirás, las lágrimas y gritos de impotencia de Kyuhyun, detrás de ti, que llora sobre el hombro de Leeteuk, mientras este se calla sus palabras y reproches por haberte tratado así.

Porque sí, el líder lo sabe, que amas a Kyuhyun y que él te ama a ti, Jongwoon, pero no podéis estar juntos y el maknae no sabe, y no puede, decirte las cosas de otra forma. Porque él no es así. Y ahora, ambos lloráis desconsolados y con el corazón roto.

Y tal vez nunca llegues a saber que Kyuhyun te ama más que a su propia vida y que se siente la peor persona del mundo, y arrepentido llora y grita mientras destroza todo a su alrededor, con algunos miembros llorando al ver la escena.

Y tú, encerrado en tu cuarto, liberas todas las lágrimas mientras te desplomas en el suelo y aprietas tus manos contra el pecho, como si con esa acción pudieras recomponer los pedazos que se ha llevado Kyuhyun.

Y no oyes nada a tu alrededor más allá del sonido de los poco fragmentos  esparcidos de tu corazón que aún había y, que esta tarde, han muerto, junto a aquella pequeña vela llamada esperanza.

Porque la esperanza, dicen, es lo último que se pierde y, tú, Yesung, acabas de verla partir para no regresar jamás.

Notas finales:

Y eso es todo, muy corto, lo sé, pero ha salido así y he preferido no añadir nada, (podría haber quedado peor si lo hacía) 

Y vuestra opinión es...?


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).